La oscuridad es lo que trae consigo sino el frente gelido verano (Luciana)

Sali por los portones de madera de la casa dejando tras de mi lo que era mi residencia para dar un paseo por el centro de Paris, la noche se hacia mas placentera a medida que avanzaba pero a penas acababa de empezar y yo recien despertando, mis sabanas de seda rojiza las habia dejado atras para colocarme mi abrigo y acomodarme las ropas para salir. Ya una vez que habia terminado deje que prepararan mi caballo para salir hacia la alla. Me estuve un tiempo esperando en lo que tomaba algo de mis reservas de sangre que mantenia escondidas en un cofre de cobre que me habia regalo uno de mis padres y era lo mas valioso que tenia en toda la casa hacia mi persona. La conservaba como si fuera oro o la joya mas grande de todo el mundo. En mis manos parecian temblar cuando se mantenia en contacto con ella y algunas imagenes se acoplaban a mi mente. El mismo bien preciado de cada persona radica en los minimos detalles que de alguna forma nos hacia mas grande.

A pesar de estar a lomos de mi caballo el cual galopaba entre los arboles para llegar a lo que era el camino por donde todos pasaban, preferi que fuera un ritmo algo mas lento para llegar disfrutando del paisaje donde los miles de sonidos que estaban a mi alrededor llegaban sin ningun problema a mis oidos y como una dulce melodia interpretada se quedaba reflejada ante mi. No solo era acustico sino tambien visual, muchas de las zonas del bosque eran con ganas de mucho mas. Pocas eran las noches en las que solia distraerme con el paisaje pero alguna que otra era la mejor compañia que la misma humanidad que sabia que se crecia en torno a la ciudad por eso preferia un lugar alejado donde nadie me pudiera molestar. Mas bien era yo quien solia ir a la ciudad o sino mandaba a uno de mis empleados de confianza a por lo que hiciera falta en la casa para terminarlos. Mis negocios tampoco se atendian solos por eso mismo me dedicaba a viajar de un lugar a otro donde me costaba a veces tener un poco de control sobre mi mismo por el hecho de que estabamos algo mas inquietos.

Los momentos de tranquilidad se hacian a veces muy largos o muy cortos, no habia termino medio pero la extension de lo que muchos humanos no se daban cuenta era una pena por el poder que habia mas alla de sus narices. La codicia podia llenar el saco como si fuera un chasquido de los dedos. Incluso hasta la misma realeza que se harta de su brabuneria y eventos donde se desperdicia mas de la mitad de lo que hacen. Otras pobres familias muriendo de hambre e incluso mujeres que vendian su cuerpo solo para poder tener algo que echarse a la boca con algun incentivo claro esta que muchas no les agradaba la idea. Lo peligroso de la noche no solo eran los seres que deambulaban entre humanos e incluso en los bosques, sino los mismos seres humanos que se convertian en bestias cayendo en los mas bajos instintos.

Sin darme cuenta el paseo se me habia hecho algo corto y me encontraba en el centro de la ciudad, baje de mi caballo sujetandolo de las riendas mientras caminaba por las calles visualizando todo lo que se abria a nuestros lados. Me quede observando como la gente iba de un lado a otro algunos puestos cerrando incluso el momento en que llegue a un puesto donde vi un collar hermoso con una lagrima en azul, como las mismas aguas del lago, me dio curiosidad comprarlo pero bien lo deje ahi quedandome admirandolo por mas que insistia el vendedor, negue con la cabeza. Avance hasta ver los puestos de comida como si fuera el mismo dulce sabor de antes pero ahora solo era amargado todo amargura por culpa de ser lo que soy, un suspiro abandono mis labios con extraña añoranza, me di cuenta que mi caballo giro su cabeza tomando una de las manzanas, disculpandome con el caballero le di unas monedas.