A ton etoile - Priv.

por **Alexander Escamilla** Vie Feb 22, 2013 11:21 am

Recuerdo del primer mensaje :

Una luna llena veraniega me recibió esta noche. Mis pasos son silenciosos, sutiles, como los de un depredador que caza una presa. Sin embargo, yo no estoy cazando, sólo camino recorriendo viejos senderos, los mismos que hace ya un par de años seguí para llegar a esta ciudad. Puedo ver muy a lo lejos las luces de París, recibiéndome. Puedo oír las pisadas lejanas de un enorme felino que caza a un conejo.

Camino con ambas manos en mis bolsillos, sin prisa. De vez en cuando miro el cielo y le sonrío a la luna, agradeciendo la escasez de nubes que podrían impedir aquella vista. Me siento extraño de estar otra vez en París. Me siento demasiado ajeno a la ciudad y a todos sus habitantes. En ocasiones sonrío a la nada, pero mi sonrisa siempre termina oculta por el ligero ensombrecimiento de mis facciones. He cambiado, en todos los sentidos. ¿Podría alguien reconocerme ahora?

Continúo mi tranquilo caminar, ésta vez mirando despreocupadamente al frente. Veo alguna que otra sombra de algún conejo o un ave nocturna, y puedo oír el calmo ulular de una lechuza posada sobre una rama frente a mí. Pensar que recorrí cientos de bosques en mi largo viaje, pero nunca un sentimiento como éste me invadió. Debe ser que finalmente me encuentro en casa. Debe ser que dejé muchos temas pendientes antes de desaparecer.

por **Alexander Escamilla** Jue Mayo 02, 2013 10:42 pm

-Sabes tan bien como yo que tu destino puede cambiar, así como hizo el mío. Yo debería de estar muerto hace muchos años, pero sigo aquí -comenté, llegando hasta los límites urbanos de la ciudad, los barrios más pobres y desolados, también los más peligrosos para los humanos. Continué mi camino a paso lento, entre enredados callejones y bordeando callejuelas poco recomendables para caminar.

-Y si mueres... te dejaré ir, no cometeré dos veces el mismo error, aunque me pese -dije en voz baja, sólo para él.

por **Adrian Bennett** Jue Mayo 02, 2013 10:57 pm

-Mi destino dista de ser similar al tuyo - murmure - Te amo Alexandre, te amo tanto o mas que a mi propia existencia, pero no soportaria vivir la eternidad y perderme en un mundo que desconosco, sin nada que sea real para mi, tu serias lo unico real... y lo demas?

Pregunte, removiendome entre sus brazos, cambiando ligeramente de posicion para estirar mis entumidas patas.

por **Alexander Escamilla** Jue Mayo 02, 2013 11:05 pm

. ¿Me amas aún, Anssi? ¿Es eso posible? -Pregunté sorprendido, deteniéndome para verle, aquellos felinos ojos, claros y trasparentes que me dejaban ver en su interior-. Puedo volver lo demás real para ti, puedo enseñarte a vivir en mi mundo, y si luego me odias... o si decides marcharte por tu cuenta, serás capaz de sobrevivir en la eternidad.

Me detuve finalmente frente a una vieja y enorme casa, mi mansión abandonada. Me había movido a enorme velocidad procurando que él apenas lo notara, usando mis nuevas habilidades, mi sigilo sobrenatural. Abrí la gran verja despacio y caminé hacia la casa, entrando en la mansión llena de polvo y oscuridad.

-Hemos vuelto a casa... por favor, quédate conmigo.

por **Adrian Bennett** Vie Mayo 10, 2013 11:26 pm

Baje de sus brazos cuando llegamos a la vieja mansion, que conservaba ese dulce aroma a madera que tanto me gustaba.

-Esta frio - comente acercandome a la chimenea, aguardando a que el la encendiera y me hice atras, como por instinto felino, al sentir tan de cerca la luz que despedia el fuego, aun que el calor fue reconfortante.

Me quede cerca, mientras tomaba mi forma humana, quedando desnudo frente a el.

-Aun te amo, pero no quiero convertirme en un vampiro, si es que eso insinuas - indique - suficiente tengo con ser esto - me señale - Conveniente en ciertas situaciones, pero a final de cuentas, una maldicion en todo sentido.

por **Alexander Escamilla** Vie Mayo 10, 2013 11:42 pm

Encendí con mi mente la chimenea en cuanto mencionó el frío y luego, cuando se transformó, recorrí su cuerpo con la vista. Cerré la puerta y lentamente me acerqué a él, me quité el abrigo y lo coloqué sobre sus hombros, cubriendo su desnudez con la que tanto me deleitaba. No sabía qué tan capaz era de saltar sobre él y hacerlo mío, y prefería no arriesgarme, ni a mí ni a él.

-Cambiarías una maldición por otra. Sé de seres como tú que han optado por una vida como la mía: son vampiros, ya no pueden convertirse en animales -dije, acariciando sus hombros y su cuello, para luego abrazarle con cariño-. Te extrañé, cada día te soñaba y cada noche te alucinaba. Has crecido tanto...

por **Adrian Bennett** Sáb Mayo 11, 2013 12:29 pm

-Y de que serviria -murmure- Cambiar las maldiciones no mejoraran nada - indique, sintiendo sus brazos rodearme,su respiracion fria contra mi cuello - Prefiero esta maldicion,al menos me permite disfrutar delos rayos del sol -dije - No podria vivir en un mundo de tinieblas,alejado delos demas seres que amo,solo por estar a u lado, es egoista el siquiera sugerirlo.

Dije y me separe de el, cerrando bien el abrigo para ir a sentarme al sofa, subiendo las piernas para cubrirme por completo.

-Te amo, pero esa no es razon suficiente para que me convierta en vampiro.

por **Alexander Escamilla** Dom Mayo 12, 2013 7:29 pm

-Tú sabes mejor que nadie que soy el ser más egoísta que existe -comenté, viendo cómo se alejaba hacia el viejo sofá.

En vez de seguirle, me acerqué un poco más a la chimenea y observé fijamente el fuego, el cual crepitaba tranquilo-. Al menos te he dado la posibilidad de elegir, respeto tu decisión -respondí tras un breve silencio, girándome a verle.

-Me da la impresión de que en verdad has madurado. Ya no eres el delicado muchacho tímido que conocí -dije, acercándome a él y sentándome a su lado, acariciando sus cabellos-. Ahora eres un joven maduro con mirada triste... Me gustaría cambiar eso, ver brillo en tus ojos otra vez.

por **Adrian Bennett** Dom Mayo 12, 2013 8:02 pm

Suspire largamente, mirando el fuego y su larga sombra que se extendia por la alfombra, edio sonriendo, tratando de tener solo en mente los bellos recuerdos de nuestros pocos dias juntos.

-Estaba confundido en eso etonces - murmure - Demaciado joven y demaciado asustado, no tenia la capacidad de saber que era bueno o malo.

Me hice a un lado cuando el vino a sentarse a mi lado, estire ligeramente las piernas dejandolas sobre la sueve alfombra.

por **Alexander Escamilla** Dom Mayo 12, 2013 8:10 pm

-Y ahora, ¿cómo catalogarías esto? ¿Es bueno o malo que estés aquí, conmigo? -le pregunté mirándole a los ojos fijamente.

Una fría ráfaga de aire proveniente de una ventana rota irrumpió en la habitación haciendo que por poco el fuego se apagara, pero apenas me inmuté. Sin embargo, me preocupé por él y el frío que pudiera sentir.

-Vamos arriba, encenderé la chimenea de mi cuarto. Allí no hay ventanas rotas -comenté, levantándome y extendiendo mi mano hacia él para ayudarle.

por **Adrian Bennett** Dom Mayo 12, 2013 8:28 pm

-No lo se... digamos que es algo neutral - murmure y me estremesi al sentir el frio, me arrebuje mas dentro del abrigo y me puse de pie, sin aceptar su mano.

Camine escaleras arriba, aun cubriendome con el abrigo, sintiendo la madera algo matratada en los pies, hasta llegar a su habitacion, entre con cuidado, sentandome en la orilla de la cama, aguardando hasta que el estuvo dentro.

- Me comprometieron, supongo que el que este aqui es malo, es como... estar engañando a mi prometida - indique medio sonriendo,melancolicamente, aceptando aquella realidad, pronto, en cuanto cumpliera los veinti cingo años y ella tuviera diez y ocho me casaria con esa mujer y comenzaria otra vida, distinta a esta.

por **Alexander Escamilla** Dom Mayo 12, 2013 9:26 pm

Lo seguí en silencio, subiendo las escaleras tras él y entrando al cuarto, cerrando la puerta. Encendí con mi mente la chimenea que estaba frente a la gran y vieja cama matrimonial y me quedé de pie allí, apoyando la espalda en la puerta cerraba mientras le escuchaba.

-Cierto, ya estás en edad de casarte -comenté con resignación, aceptando aquella realidad como en su momento, cuando era humano, había aceptado el tener que irme de casa y buscar esposa... a mi esposa.

-¿Y puedo saber quién es la afortunada? Tal vez la conozca -comenté, medio sonriéndole, quitándome mis oscuros pensamientos de la cabeza.

por **Adrian Bennett** Dom Mayo 12, 2013 9:57 pm

-No lo se - sonrei mirandole fijamente - Aun es joven, tan joven como yo cuando te conoci, tiene como diez y seis o quinceaños. - suspire - Nos casaremos en dos años, poco mas, no se,todo depende de como se den las cosas.

Cerre los ojos, dejando que el calor de la chimenea aliviara esa sensacion de entumecimiento, sin ninguna ventana abierta por la de donde se cuele el viento frio.

-He visto un par de retratos de ella, es bella, muy hermosa - sonrei y volvi la vista hacia el.

por **Alexander Escamilla** Dom Mayo 12, 2013 10:09 pm

-Ya veo... no te olvides de presentármela algún día, me gustaría saber que quedas en buenas manos, con una mujer que sepa quererte y que te merezca -comenté, desviando la mirada hacia la ventana cerrada. Podía notar, por el movimiento de los árboles y el constante rugido del viento, que el invierno se acercaba con paso rápido. Su próximo comentario me sacó de mi ensimismamiento y volví a mirarle, con una amable y sincera sonrisa.

-Si es así, entonces los hijos que tengan serán hermosos, como tú y como ella -dije, acercándome a la cama y a él, sentándome sobre la alfombra y apoyando la espalda en los pies de la cama y la cabeza medio en sus piernas-. No sé si te conté alguna vez, que nunca alcancé a tener hijos...

por **Adrian Bennett** Dom Mayo 12, 2013 10:59 pm

-Recuerda que lo unico que supe de ti, fue de tu esposa y tu trauma hacia con ella - murmure moviendome, no queria sentirme incomodo a su lado, y mejor me puse de pie, caminando hasta el viejo y pesado ropero, abriendo, encontrando los vestidos, muy hermosos - Deberiamos quemar estos.

Indique sacando uno, ya maltratado por el tiempo y lo observe con odio antes de acercarme a la chimenea, tirandolo dentro, dejando que el fuego lo consumiera rapidamente.Observe todo el proceso, suspirando y regrese al ropero, sacando un camison largo, algo mas o menos desente que usar dentro de ese lugar, algo que no me hacia sentir tan femenino.

Camine de nuevo a la cama, quitandome el abrigo, dejandolo caer sobre el piso alfombrado y tome el camison, poniendolo sobre mi cuerpo y trepe de nueva cuenta en la cama, sin saber que hacer o pensar.

Lo amaba, sin duda, pero las heridas no eran facil de cerrar, aun que tambien no podia negarlo, el deseo que sentia por el aun era fuerte.

por **Alexander Escamilla** Dom Mayo 12, 2013 11:15 pm

-Cierto... ahora al menos admito que estoy loco, créeme que no es facil ver a quien amas siendo quemado en la hoguera vivo por culpa tuya -comenté, casi con frialdad, sin inmutarme realmente, ya no. Con todo lo que había vivido y lo que había visto, supongo que había desarrollado cierta inmunidad o un gran nivel de locura-. Quémalos todos si te apetece, están viejos y nadie los va a usar jamás.

Observé cómo sacaba uno de los vestidos y lo tiraba a la chimenea, quedándome algo abstraído mirando cómo el fuego lo consumía. Sólo cuando Anssi regresó a la cama, sacudí la cabeza levemente y regresé a la realidad-. ¿No quemarás los otros? -Le pregunté alzando una ceja, poniéndome de pie y caminando hacia el ropero, sacando todos los vestidos y echándolos a la chimenea. Con mi mente evité que el fuego se extinguiera y regresé a la cama, sentándome junto a él, con la vista fija en la tela quemada.

por **Adrian Bennett** Miér Mayo 22, 2013 12:44 pm

-Odio que me vean como una mujer - murmure, mirando el fuego, sintiendo el escosor en la nariz debido al humo que dejaba la tela quemada - Nunca he sido y jamas sere una mujer.

Murmure, mas para mi que para el, recojuiendo las rodillas entre mis brazos, recargando en ellas mi rostro.

-Pronto me comvertire en un hombre de verdad y tendre una bella familia... - dije - Aun que siempre estaras en mis mas bellos y oscuros recuerdos.

Sonrei y volvi la vista a el, a sus cabellos oscuros y esos ojos verdes como joyas.

-Siempre vas a ser el amor de mi vida, el mas grande y el unico.

por **Alexander Escamilla** Miér Mayo 29, 2013 9:01 pm

-No olvides que te conocí vistiendo como una mujer... -comenté, con la vista perdida en la tela, recordando aquel momento en que le vi, por primera vez, con aquel vestido blanco y su expresión, inocente, asustada, rota... Me había enamorado irremediablemente de la muñeca rota que fingía ser. Y el verle aquí, ahora procurando ser todo un hombre... me hacía volver a caer a sus pies, enamorado. Con sus siguientes palabras, abrí los ojos, sorprendido, y le miré fijamente a los suyos, correspondiendo su sonrisa con cierta melancolía.

-¿Lo seré, realmente, Anssi? -Pregunté en un murmullo bajo, confidente, dejando una suave caricia en su mejilla. Junté nuestras frentes y cerré los ojos, disfrutando del calor de su piel, de sentir su aliento sobre el mío-. Tu sigues siendo el mío... el amor de mi vida, incluso, más grande que ella... Sólo tú, y más ahora, que eres todo un hombre, me has vuelto a enamorar... -susurré bajo, sólo para él. Nuestro destino era cruel, ¿o tan sólo el mío, que me impedía seguir a su lado?

-Prométeme... que podré seguir visitándote... Déjame ser el oscuro guardián de tu familia, de tus hijos y tus nietos... -le pedí, luego de unos segundos, sujetando una de sus manos con la mía, entrelazando nuestros dedos.

por **Adrian Bennett** Lun Jun 03, 2013 10:25 pm

Me dolia tener que vivir una vida así y me preguntaba si alguna vez podría ser totalmente feliz, sin fingir, sin esconderme y no había respuesta, mas que la obvia y esa era seguir mi vida, hasta que la muerte me encontrara.

Suspire largamente con dolor, apretando mis dedos, con los ojos fuertemente cerrados, sintiendo lagrimas resbalar por mis mejillas. Sin pensarlo, cerré el espacio que nos separaba, tomando su rostro con mis manos y besando sus labios, rindiendome al deseo ardiente que quemaba mi ser y voluntad.

-Siempre seras mi mas grande pecado, Alexandre-murmure sobre sus labios, abrazandolo fuertemente.

por **Alexander Escamilla** Lun Jun 03, 2013 11:02 pm

-Y tú, siempre serás mi más grande amor, Anssi Enkeli... -susurré sobre sus labios, abrazándole, rodeando su fina cintura de muñeca y acurrucándole en mi pecho. Sentía mis propias lágrimas empezar a caer y un dolor agudo en mi pecho como no existe, un dolor que sólo había sentido tras la pérdida de una persona... Y ahora, otra vez, sentía que me destrozaba por dentro. ¿Era aquello una despedida, definitiva? Tuve miedo de sólo pensarlo, la mera idea me aterraba. Sentía como si fueran a arrebatármelo de los brazos y eso me angustiaba.

-Quédate conmigo... al menos esta noche, mi amor -le pedí con voz afligida, siendo apenas, consciente de aquellas lágrimas de sangre que ensuciaban mi rostro. Me separé de él sólo lo suficiente para mirarle a los ojos, sonriéndole con tristeza, para luego, besarle, suave, lentamente.

por **Adrian Bennett** Lun Jun 03, 2013 11:11 pm

Sollozaba casi en silencio, sintiendo dolor en el pecho. Era la despedida, quizas, no sabia, solo queria estar ahi, con el, que el tiempo se detuviera en ese instante, que nada fuera de aquel lugar irrumpiera.

-En que momento se invirtieron los papeles, Alexandre - murmure limpiando sus lagrimas, levantando su rostro para besarlo, profundamente - Quiero estar contigo... quiero sentir que sigo vivo, quiero que me hagas sentirme realmente amado - murmure sobre sus labios, con los ojos cerrados, aferrandome a su camisa con las uñas, como si algo fuera a arrancarlo de mi lado, nuevamente.

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