A escondidas {Alfonso de Montalvo}

por **Nefertari L. Jareau** Lun Sep 02, 2013 5:54 pm

Todo el día había estado esperando el momento de poder salir por la tarde para ver a Alfonso. Era raro cómo me sentía en esos momentos, la verdad, quería estar cerca de él pero por otra parte tenía miedo de lo que yo misma sentía. Lo quería mucho, mucho más de lo que había llegado a querer a otra persona que no fuera de mi familia. No entendía por qué, pero estando con él era como que el tiempo pasaba un poco más rápido y yo me sentía un poco más torpe. En fin, eran cosas raras de la vida.

Por primera vez en toda mi vida, pensé bien en qué debería ponerme para ver a alguien. Me había puesto bastante nerviosa desde que Alfonso me había dado la carta. Mis padres creían que aquella tarde iría a ver a una amiga. Me pasé media hora mirando mis vestidos. ¿Le gustará este? ¿Creerá que es demasiado arreglado si me pongo este? No creo que este vestido sea adecuado… Era lo que pensaba mientras veía mis vestidos. Finalmente me decidí por uno de color azul, quedaba bien con mis ojos… O eso era lo que me parecía. Me puse enfrente de un espejo de cuerpo entero, una doncella me preguntó si quería que me ayudara con algo y yo simplemente le respondí que podía hacerlo todo sola. Pero creo que me equivocaba, hacer un peinado “elaborado” sola es muy difícil, pero finalmente opté por una simple trenza; no me gustaban los peinados esos “raros” que todas se hacían. ¡Yo prefería ir con el pelo suelto!

Suspiré mirándome en el espejo, creyendo que no estaba lo suficientemente bien. Bajé al salón, donde estaban mis padres y simplemente les dije que yo ya me iba, que corría el riesgo de llegar tarde a la visita que le había prometido a mi amiga. Rápidamente salí para que me llevaran hacia el bosque. Al llegar ahí, le dije al “chófer” que se podía ir, pues seguramente podría ir sola a casa o ya me llevarían.

Me adentré un poco en el bosque, aunque no demasiado pues todavía podría ver si alguien llegaba, salía o entraba en el bosque y me quedé apoyada en el tronco de un árbol, esperando a que llegara mi prometido –todavía no estaba acostumbrada a utilizar esa palabra.

por **Alfonso de Montalvo** Mar Sep 10, 2013 2:23 pm

Parecia que ella misma habia dado prisa en querer estar cerca de mí nuevamente, pensandolo bien, era una belleza y sin poder evitarlo, me adormecia mis sentidos mas animales, queriendo acapararla continuamente, hablandola, conociendola un poco mas de lo que la pude conocer hace unos dias cuando fui a su hogar y después anoche mismo, cuando le entregue la nota. Me preguntaba que tipo de muchacha seria ya pese a lo que la conocia de hace unos dias y de ayer. Supuestamente ella estaba oculta, protegida a toda la tradicion o digamos toda la historia que se oculta tras sus padres y de que ella no sabe nada en absoluto.

Hay gente que piensa que soy un gallan, alguien que adula a las mujeres pero que pocas me han agradado ya que solamente se acercaron a mi por mi titulo reciente en el clan licano. Me quede un rato en mi alcoba preguntándome si la muchacha iria, si Nefertari iria y ya que es mi prometida pensé en hacer un trueque o algo para llevarla una semana a mi mansión y poder explicarle con tranquilidad. Seguramente nada sabia, pero se llevaría una sorpresa. Nunca la había tocado ni si quiera pude hacerlo ya que sus padres no parecían dejarnos solos, asi que simplemente esta escapada seria algo mas liberal para mi y poder explanarme sin necesidad de ojos vigías a mi espalda.

Habia sido una mañana y tarde bastantes largas a mi parecer. Habia estado esperando algo que jamas habia llegado y pense que tendria que ser una broma. Esperaba un paquete de una persona en concreto, mas que nada en su dicha lo esperaba de mi amigo y cooperador en el clan en el que despues de la muerte de mi padre, la ayuda frente a todos me venia un poco grande pero conforme pase al lado de la sabiduria de mi amigo todo habia cambiado para bien.

La mañana entonces paso a la tarde y la tarde a la noche. Pensando aun en si debia de hacer o no la visita, seguramente ella me tendria que estar esperando, asi que decidi coger un caballo en el que pudiera acercarme con rapidez y en efecto, de lejos vi como se bajaba de una calesa, pero, ¿Por que diablos mandaba a paseo la calesa? Enseguida me acerque hasta ella, primero andando pero despues me di toda la prisa que pude, acercandome a un desalmado que tenia intenciones villanas hacia Nefertari- ¡ATRAS VILLANO!-Inmediatamente como un pajaro veloz alcanzao al hombre que inmediatamente se alejo de Nefertari, lo vi correr, metiendose entre las sombras.

Volvi hacia Nefertari y me baje del caballo. Me acerque hasta que la tuve cerca de mi-...¿Estas bien?

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