AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
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Tejiendo un futuro
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Tejiendo un futuro
por Tiamat Malsvir Sáb Dic 14, 2013 10:49 pm
Recuerdo del primer mensaje :
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Como cada noche desde hacia más de setecientos años, la fémina de cabellos de fuego, extrañamente suelto, llegando hasta sus caderas, se dedicaba a dar uno de sus habituales paseos habituales, llevaba la correspondencia que le había llegado un par de días atrás, en la cual un anónimo le citaba a los jardines del Ducado en el cual recidía, no había firma, ni marcas que pudiesen ayudarle a identificar de quien podría tratarse. De todas maneras, fue. Aquellas cosas misteriosas y medias extrañas siempre terminaban en cosas entretenidas y algo caóticas. Vestía un corset de color burdeo, con encajes de flores por encima, estos de color negro, además de llevar el detalle que dejaba sus hombros al descubierto. En la parte inferior le acompañaba un abultado pero ligero faldón, este también de color negro, con detalles también en encajes.
Se paró a orillas dela fuente a esperar la llegada de aquel misterioso remitente, a medida que el tiempo transcurría, ella solo se dedicaba a observar a aquella Diosa de plata que iluminaba el cielo cada noche, que la llenaba día a día. Jamás había logrado sentir demasiado algo por alguien, y de ser así, cosas terribles sucedían. Pero eso no importaba, quería creer que aún existía alguna posibilidad de ser feliz, por algo se le había entregado una vida sin fin, debía haber algún propósito, que no fuese precisamente el amor, la amistad, etc. Mientras sus pensamientos fluían libres por su mente, ella posaba sus manos entre los pliegues de su vestido, en donde existían unas especies de bolsillos que le conectaban a sus piernas, en donde mantenía dos dagas de treinta centímetros cada una de ellas, afirmaba la empuñadura de ellas con firmeza.
Nunca se sabía lo que podría ocurrir cuando la noche caía y un extraño te citaba tan misteriosamente, donde vagaba una que otra alma incapaz de encontrar la dicha. Era una noche silenciosa, más que otras, el viento ululaba, produciendo leves gemidos entre las hojas de los árboles que adornaban el lúgubre lugar.
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[Parte de la historia de Tiamat y Alejandro, tres meses atrás.]
Como cada noche desde hacia más de setecientos años, la fémina de cabellos de fuego, extrañamente suelto, llegando hasta sus caderas, se dedicaba a dar uno de sus habituales paseos habituales, llevaba la correspondencia que le había llegado un par de días atrás, en la cual un anónimo le citaba a los jardines del Ducado en el cual recidía, no había firma, ni marcas que pudiesen ayudarle a identificar de quien podría tratarse. De todas maneras, fue. Aquellas cosas misteriosas y medias extrañas siempre terminaban en cosas entretenidas y algo caóticas. Vestía un corset de color burdeo, con encajes de flores por encima, estos de color negro, además de llevar el detalle que dejaba sus hombros al descubierto. En la parte inferior le acompañaba un abultado pero ligero faldón, este también de color negro, con detalles también en encajes.
Se paró a orillas dela fuente a esperar la llegada de aquel misterioso remitente, a medida que el tiempo transcurría, ella solo se dedicaba a observar a aquella Diosa de plata que iluminaba el cielo cada noche, que la llenaba día a día. Jamás había logrado sentir demasiado algo por alguien, y de ser así, cosas terribles sucedían. Pero eso no importaba, quería creer que aún existía alguna posibilidad de ser feliz, por algo se le había entregado una vida sin fin, debía haber algún propósito, que no fuese precisamente el amor, la amistad, etc. Mientras sus pensamientos fluían libres por su mente, ella posaba sus manos entre los pliegues de su vestido, en donde existían unas especies de bolsillos que le conectaban a sus piernas, en donde mantenía dos dagas de treinta centímetros cada una de ellas, afirmaba la empuñadura de ellas con firmeza.
Nunca se sabía lo que podría ocurrir cuando la noche caía y un extraño te citaba tan misteriosamente, donde vagaba una que otra alma incapaz de encontrar la dicha. Era una noche silenciosa, más que otras, el viento ululaba, produciendo leves gemidos entre las hojas de los árboles que adornaban el lúgubre lugar.
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Re: Tejiendo un futuro
por Alejandro Máximo Lun Dic 23, 2013 10:45 pm
Por un momento estuve a punto de decirle ‘’Deja de decirme cariño, joder’’ pero me aguanté. Debía ser cordial con aquella mujer, por más que cada cierto rato me dieran ganas de decirle que dejara de ser tan ‘’cariñosa’’ conmigo. Asentí con la cabeza ante sus palabras, entendía de qué hablaba, después de todo, yo había trabajado de la misma manera con anterioridad, hasta alcanzar la riqueza casi infinita que ahora poseía. Era sabio poseer un arma larga contra las bestias que enfrentaríamos, y esto, solo sería un comienzo.
Luego, cuando ella me comentó sus palabras solo me encogí de hombros, estuve a punto de decirle ‘’Pero los hombres a los que amabas no murieron, si no que te traicionaron, por lo que jamás fueron las personas de tu vida, solo fueron un engaño’’ pero me aguanté, pues probablemente eso le rompería el corazón, aunque era toda la verdad. Yo nunca podría olvidar el dolor, y sabía que le sería fiel por la eternidad a Leothir, pues ella era mi vida, y ella estaría junto a mí antes, durante, y después de mi muerte, ella siempre estaría conmigo, y yo con ella. La miré con una sonrisa y le dije;
-Las personas que de verdad nos aman siempre están con nosotros, y las que no, nunca lo están. Uno jamás debe depender de su felicidad de otra persona, porque esa persona puede desaparecer, puede traicionarte, o finalmente, morir. Lo único que debemos mantener es nuestros recuerdos y nuestra conciencia, porque esa es la que nos dará vida. –Dije, con una sonrisa.
Tantos recuerdos y cosas…solo los recuerdos eran los que me mantenían fuerte, y mi sed de justicia era la que me hacía luchar. Quizás nunca volvería a ver a Leothir, pero mientras pudiera, mataría y destruiría a mis enemigos en su nombre, en honor a la justicia, y en honor a lo que era lo correcto. Miré al frente mientras cabalgaba, pensando en todo lo que debíamos hacer, mientras la otra parte de mi memoria se sumía en recuerdos.
Luego, cuando ella me comentó sus palabras solo me encogí de hombros, estuve a punto de decirle ‘’Pero los hombres a los que amabas no murieron, si no que te traicionaron, por lo que jamás fueron las personas de tu vida, solo fueron un engaño’’ pero me aguanté, pues probablemente eso le rompería el corazón, aunque era toda la verdad. Yo nunca podría olvidar el dolor, y sabía que le sería fiel por la eternidad a Leothir, pues ella era mi vida, y ella estaría junto a mí antes, durante, y después de mi muerte, ella siempre estaría conmigo, y yo con ella. La miré con una sonrisa y le dije;
-Las personas que de verdad nos aman siempre están con nosotros, y las que no, nunca lo están. Uno jamás debe depender de su felicidad de otra persona, porque esa persona puede desaparecer, puede traicionarte, o finalmente, morir. Lo único que debemos mantener es nuestros recuerdos y nuestra conciencia, porque esa es la que nos dará vida. –Dije, con una sonrisa.
Tantos recuerdos y cosas…solo los recuerdos eran los que me mantenían fuerte, y mi sed de justicia era la que me hacía luchar. Quizás nunca volvería a ver a Leothir, pero mientras pudiera, mataría y destruiría a mis enemigos en su nombre, en honor a la justicia, y en honor a lo que era lo correcto. Miré al frente mientras cabalgaba, pensando en todo lo que debíamos hacer, mientras la otra parte de mi memoria se sumía en recuerdos.
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Re: Tejiendo un futuro
por Tiamat Malsvir Lun Dic 23, 2013 11:32 pm
Oí sus palabras con amargura, yo tenía muy claro que solo yo había amado en mis anteriores relaciones, y que lo que nos había pasado era completamente distinto, pero aún así entendía su dolor, y sabía que era algo que jamás podría irse, algo que nunca podría olvidar. Le miré y sonreí con esa amargura que dominaba la noche, como diciéndole "Estoy aquí, puedes contar conmigo" Pero sabía que aunque lo dijera, él no lo haría, conocía a las personas como él, completamente encerrados en su dolor.
— Así es, por eso asumo que nunca he sido amada como he amado. Me gustaría mucho poder ayudarte, Alejandro, pero me temo que no sé como... No soy muy buena en temas de relaciones... Pero si estuviese en tu lugar, solo me quedaría aceptar que aquella persona es mi pasado, que pase lo que pase, jamás volverá, que siempre será lo que más amé en la vida entera. Me encantaría alguna vez tener una historia de amor como la tuya... Tan llena de incondicionalidad... ¿Crees que alguna vez la tenga? —
Dije con un dejo de amargura, como sabiendo que dijera lo que dijera, eso jamás pasaría, sabía que estaba maldita, que el amor jamás volvería a tocar mi puerta.
— Si quieres háblame de ella, dicen que recordar nos hace revivir momentos... A mi no me molestaría oírte, sería un deleite. —
Dije mientras intentaba dejar atrás todo lo que me condenaba, intentando ayudar a este pobre y destrozado hombre, si tan solo en mis manos estuviese poder ayudarlo, lo haría sin pensarlo, él era una persona demasiado buena, destrozada por sus vivencias, pero aún dentro de él existía la bondad total, esas personas eran difíciles de encontrar.
— Así es, por eso asumo que nunca he sido amada como he amado. Me gustaría mucho poder ayudarte, Alejandro, pero me temo que no sé como... No soy muy buena en temas de relaciones... Pero si estuviese en tu lugar, solo me quedaría aceptar que aquella persona es mi pasado, que pase lo que pase, jamás volverá, que siempre será lo que más amé en la vida entera. Me encantaría alguna vez tener una historia de amor como la tuya... Tan llena de incondicionalidad... ¿Crees que alguna vez la tenga? —
Dije con un dejo de amargura, como sabiendo que dijera lo que dijera, eso jamás pasaría, sabía que estaba maldita, que el amor jamás volvería a tocar mi puerta.
— Si quieres háblame de ella, dicen que recordar nos hace revivir momentos... A mi no me molestaría oírte, sería un deleite. —
Dije mientras intentaba dejar atrás todo lo que me condenaba, intentando ayudar a este pobre y destrozado hombre, si tan solo en mis manos estuviese poder ayudarlo, lo haría sin pensarlo, él era una persona demasiado buena, destrozada por sus vivencias, pero aún dentro de él existía la bondad total, esas personas eran difíciles de encontrar.
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Re: Tejiendo un futuro
por Alejandro Máximo Lun Dic 23, 2013 11:48 pm
Al escuchar sus palabras exploté en risas en medio de la tormenta. ¿Ayudarme? ¿Ayudarme a qué? La mujer que había significado toda mi vida estaba muerta, y nada ni nadie, ni ningún poder sería capaz de regresármela a mi otra vez. Leothir JAMÁS sería mi pasado, ella era mi vida, ella era mi presente y mi futuro, y más allá de la muerte, ella seguiría siendo mi esposa y mi mujer, siempre, yo jamás la remplazaría por nada ni por nadie, pues mi corazón era de ella, se lo prometí, y nunca cambiaría así, porque yo sabía que si hubiera sido al revés, ella jamás me habría olvidado, los dos habríamos dado la vida el uno por el otro…y jamás nos distanciaríamos. La miré y le espeté;
-¿Ayudarme a qué, si puedo preguntar, Tiamat? Yo me encuentro perfectamente con como vivo mi existencia, porque yo elegí vivirla a sí. Amo con mi corazón a mi Leothir, y ella no es mi pasado, ella es mi presente, y estando muerta aún está conmigo, y siempre le seré fiel y amaré su corazón como ella ama el mío. El amor verdadero va más allá de la muerte, va más allá de la existencia, es algo que solamente se une con el alma y el corazón, y eso jamás nada ni nadie lo podrán romper. Quizás algún día tengas a alguien que te amé de esa manera, pero si realmente piensas que una persona amada puede ser remplazada por otro y simplemente tener el argumento de ‘’es pasado y está muerto, por lo que puedo estar con alguien más’’ pues es porque jamás amaste con el alma a esa persona. –Dije, mirándola a los ojos, para luego mirar al frente.
Me molestaba que aquella mujer pensara que tenía el alma rota. Sí, sufría todos los días por no poder ni tocar ni oír a Leothir, pero aun así, yo sabía que ella estaba allí, conmigo, y su alma y sus cenizas siempre estarían en mi corazón. Luego cuando ella me dijo esas palabras suspiré, y le respondí, más calmado;
-No creo que sea necesario revivir el pasado, Tiamat. Concéntrate en el enemigo. ¿Qué criaturas sobrenaturales has enfrentado, Tiamat? Me han comentado que en la Inquisición hay vampiros, licántropos, y cosas peores de su bando, por lo que nos tendremos que enfrentar a una variedad inmensa de criaturas sobrenaturales. ¿Qué sabes de ellas? –Pregunté, mirándola.
-¿Ayudarme a qué, si puedo preguntar, Tiamat? Yo me encuentro perfectamente con como vivo mi existencia, porque yo elegí vivirla a sí. Amo con mi corazón a mi Leothir, y ella no es mi pasado, ella es mi presente, y estando muerta aún está conmigo, y siempre le seré fiel y amaré su corazón como ella ama el mío. El amor verdadero va más allá de la muerte, va más allá de la existencia, es algo que solamente se une con el alma y el corazón, y eso jamás nada ni nadie lo podrán romper. Quizás algún día tengas a alguien que te amé de esa manera, pero si realmente piensas que una persona amada puede ser remplazada por otro y simplemente tener el argumento de ‘’es pasado y está muerto, por lo que puedo estar con alguien más’’ pues es porque jamás amaste con el alma a esa persona. –Dije, mirándola a los ojos, para luego mirar al frente.
Me molestaba que aquella mujer pensara que tenía el alma rota. Sí, sufría todos los días por no poder ni tocar ni oír a Leothir, pero aun así, yo sabía que ella estaba allí, conmigo, y su alma y sus cenizas siempre estarían en mi corazón. Luego cuando ella me dijo esas palabras suspiré, y le respondí, más calmado;
-No creo que sea necesario revivir el pasado, Tiamat. Concéntrate en el enemigo. ¿Qué criaturas sobrenaturales has enfrentado, Tiamat? Me han comentado que en la Inquisición hay vampiros, licántropos, y cosas peores de su bando, por lo que nos tendremos que enfrentar a una variedad inmensa de criaturas sobrenaturales. ¿Qué sabes de ellas? –Pregunté, mirándola.
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Re: Tejiendo un futuro
por Tiamat Malsvir Vie Dic 27, 2013 8:40 pm
Me sentí sumamente ofendida ante sus palabras y reacción, si bien no podía traer de vuelta a su amada, al menos tenía la intención de brindarle mi ayuda en todo lo que me pidiera, mi expresión se endureció claramente, y puse mi vista al frente. Él estaba sumamente enamorado de ella, y era algo que nada ni nadie iba a romper nunca, una especie de anhelo llenó mi pecho, deseoso de recibir tal cariño algún día, de que alguien me quisiera más allá de la muerte... No como ese idiota de Thomas, que me dio por muerta y no demoró nada en estar con la siguiente... Maldito. Aunque su error fue pagado con su sangre... Fue una hermosa noche, llena de carmín.
- Me alegro de que creas llevar una vida feliz dentro de tu tormento. -
Le dije mirándolo de reojo, pues eso pensaba yo, que el creía ser feliz dentro de su propio dolor. Claramente el no quería amigos ni compañeros, solo quería terminar la tarea cuanto antes, y para eso, había que concentrarse en el enemigo, no en amores pasados.
- Sé bastante de criaturas sobrenaturales, he tenido la oportunidad de trabajar con cambiaformas, vampiros, brujos, gitanos y una vez con una lobezna. Todos poseen cualidades únicas, que combinadas bien son destrucción total, por lo que debemos irnos con cuidado. -
Dije pensando en los tipos de combinaciones o grupos que habrían en la inquisición y el motivo por el cual ellos estaban traicionando a su propia naturaleza... Ellos merecían la muerte total y lenta... A lo lejos ya se empezaban a divisar las luces del pueblo.
- Me alegro de que creas llevar una vida feliz dentro de tu tormento. -
Le dije mirándolo de reojo, pues eso pensaba yo, que el creía ser feliz dentro de su propio dolor. Claramente el no quería amigos ni compañeros, solo quería terminar la tarea cuanto antes, y para eso, había que concentrarse en el enemigo, no en amores pasados.
- Sé bastante de criaturas sobrenaturales, he tenido la oportunidad de trabajar con cambiaformas, vampiros, brujos, gitanos y una vez con una lobezna. Todos poseen cualidades únicas, que combinadas bien son destrucción total, por lo que debemos irnos con cuidado. -
Dije pensando en los tipos de combinaciones o grupos que habrían en la inquisición y el motivo por el cual ellos estaban traicionando a su propia naturaleza... Ellos merecían la muerte total y lenta... A lo lejos ya se empezaban a divisar las luces del pueblo.
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Re: Tejiendo un futuro
por Alejandro Máximo Lun Dic 30, 2013 5:25 pm
No le respondí a las palabras de la mujer, pues realmente no me interesaba darle la respuesta. Yo jamás traicionaría la santa memoria de mi amada, pues eso eral o que no iba a hacer, no iba a permitirme amar a otra mujer ¿Cómo iba a ser acaso eso posible con la mujer que más había existido en mi vida? No, eso sería un terrible error, un error que yo jamás cometería, o al menos, si lo hacía, sería porque realmente pensaría que sería lo mejor, aunque sería algo que jamás me perdonaría a mí mismo.
Cuando escuché sus palabras me rasqué la barbilla, pues la mujer había malentendido que le intentaba preguntar, aunque al menos, ya sabía que ella sabía cómo estos actuaban y una parte de los poderes de la gran mayoría de estos. Negué con la cabeza y le respondí;
-No te pregunté si los conocías, te pregunté si sabías matarlos. No creo que estemos solos en el combate de París, y en su gran mayoría, o eso espero, nos enfrentaremos a humanos, si ya aparecen licántropos u otro tipo de criaturas, ya veremos cómo los enfrentaremos. Por ahora lamentablemente no cuento con armamento de plata, pero asumo que ya nos podremos informar de eso en el futuro. –Dije, mientras a lo lejos veía las luces del primer pueblo, en el cual acamparíamos para al día siguiente proseguir la marcha.
Aún me preguntaba qué dirían los antiguos sobre nuestro plan, ciertamente era algo necesario, y esperaba que no lo vieran como algo riesgoso. Yo sabía que bajo mi comandancia fácilmente podíamos destruir a la Inquisición, y quién sabría, si incluso la lográbamos derrotar para siempre, que era lo que más me importaba.
Cuando escuché sus palabras me rasqué la barbilla, pues la mujer había malentendido que le intentaba preguntar, aunque al menos, ya sabía que ella sabía cómo estos actuaban y una parte de los poderes de la gran mayoría de estos. Negué con la cabeza y le respondí;
-No te pregunté si los conocías, te pregunté si sabías matarlos. No creo que estemos solos en el combate de París, y en su gran mayoría, o eso espero, nos enfrentaremos a humanos, si ya aparecen licántropos u otro tipo de criaturas, ya veremos cómo los enfrentaremos. Por ahora lamentablemente no cuento con armamento de plata, pero asumo que ya nos podremos informar de eso en el futuro. –Dije, mientras a lo lejos veía las luces del primer pueblo, en el cual acamparíamos para al día siguiente proseguir la marcha.
Aún me preguntaba qué dirían los antiguos sobre nuestro plan, ciertamente era algo necesario, y esperaba que no lo vieran como algo riesgoso. Yo sabía que bajo mi comandancia fácilmente podíamos destruir a la Inquisición, y quién sabría, si incluso la lográbamos derrotar para siempre, que era lo que más me importaba.
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Re: Tejiendo un futuro
por Tiamat Malsvir Jue Ene 02, 2014 8:35 pm
Observé su reacción y me di cuenta de que algo iba mal, nuevamente. Estaba más que claro que yo jamás sería el tipo de persona que atraería a nadie, ni como un amigo, ni como nada... era simplemente incapaz de usar bien las palabras. Suspiré levemente, pero el frió me delato congelando mi aliento, luego lo miré, e hice un ademán de disculpa, por no haber entendido, nuevamente.
— Licántropos con plata, vampiros con estacas... —
Dije recordando épocas muy oscuras de mi vida, lugares y seres a los que había enterrado hacia siglos en mi memoria, creía yo, para siempre. Pero la vida es cruel, y siempre saca a flote las cosas mas tristes y dolorosas de nuestro vivir. Me quedé pensativa, si bien llevaba muchos años peleando, sabía muy poco que cosas mataban a otro ser, yo simplemente había matado. No hubo métodos, solo muerte y destrucción.
— Lamento no saber como matar a los otros... Hay cosas que simplemente hice... Y no recuerdo como. —
Dije mirándole a los ojos con una expresión perturbada, llevaba tantos años de vivir mi vida en solitario, que me era sumamente extraño estar con alguien, y más aún, hablar con esa persona tan fluidamente y durante tanto rato, apreté las riendas de mi caballo, como no entendiendo porque me pasaba esto, porque había olvidado como vivir.
— Licántropos con plata, vampiros con estacas... —
Dije recordando épocas muy oscuras de mi vida, lugares y seres a los que había enterrado hacia siglos en mi memoria, creía yo, para siempre. Pero la vida es cruel, y siempre saca a flote las cosas mas tristes y dolorosas de nuestro vivir. Me quedé pensativa, si bien llevaba muchos años peleando, sabía muy poco que cosas mataban a otro ser, yo simplemente había matado. No hubo métodos, solo muerte y destrucción.
— Lamento no saber como matar a los otros... Hay cosas que simplemente hice... Y no recuerdo como. —
Dije mirándole a los ojos con una expresión perturbada, llevaba tantos años de vivir mi vida en solitario, que me era sumamente extraño estar con alguien, y más aún, hablar con esa persona tan fluidamente y durante tanto rato, apreté las riendas de mi caballo, como no entendiendo porque me pasaba esto, porque había olvidado como vivir.
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Re: Tejiendo un futuro
por Alejandro Máximo Jue Ene 02, 2014 9:42 pm
Hice un gesto para desestimar el asunto con Tiamat, pues realmente no esperaba que me estuviera pidiendo disculpas por cada error que cometía. De todas formas, de nuevo se equivocaba, no me comentaba nada sobre formas exactas de matarlos, más que con los métodos simples conocidos, pero bueno, eso no importaba mucho, y mientras andábamos le comenté;
-Las veces que yo me he enfrentado a vampiros me he asegurado de cortarlos en pedacitos o quemarlos con mucha suerte, otras veces he empleado balas de madera en unos rifles un poco más grande de lo normal, llamados ‘’obuzes’’ con los cuales si lograba atravesar el pecho de un vampiro este moría de una forma espectacular. Los hombres lobos son combates más difíciles, lo principal es llevarlo a lugares pequeños y estrechos para escalar con velocidad para alejarse de sus garras y poder atacar sus puntos débiles, piernas, tendones o cabeza. Para el resto debes actuar más rápido de lo que ellos actúan, pues conocen magias muy poderosas, de hecho, he escuchado casos de brujos que han sido capaces de controlar a vampiros, lo cual realmente es demasiado. –Dije, mientras seguía andando.
Realmente debíamos estar preparados para actuar en sombras. No podíamos permitir actuar de forma lenta cuando el enfrentar a duros enemigos se trataba. Debíamos ser silenciosos como la muerte, y sangrientos como la destrucción, y bueno, yo estaba acostumbrado a serlo. Cuando escuché sus palabras la miré extrañado y le pregunté;
-¿Qué le pasó a tu memoria vampírica? ¿Te rebanaron un pedazo del cerebro? ¿Te pusiste mucho tiempo al sol? –Pregunté con una amplia sonrisa, y luego, al mirar el camino le señalé por si ella no se había dado cuenta- Solo falta una media hora o una hora para que lleguemos, luego podremos descansar dentro del hotel. –Dije, apurando el paso.
Quería descansar, hablar tanto me había puesto un poco nervioso, sobre todo por el tema que tendríamos que tratar con los antiguos, que no me gustaba nada.
-Las veces que yo me he enfrentado a vampiros me he asegurado de cortarlos en pedacitos o quemarlos con mucha suerte, otras veces he empleado balas de madera en unos rifles un poco más grande de lo normal, llamados ‘’obuzes’’ con los cuales si lograba atravesar el pecho de un vampiro este moría de una forma espectacular. Los hombres lobos son combates más difíciles, lo principal es llevarlo a lugares pequeños y estrechos para escalar con velocidad para alejarse de sus garras y poder atacar sus puntos débiles, piernas, tendones o cabeza. Para el resto debes actuar más rápido de lo que ellos actúan, pues conocen magias muy poderosas, de hecho, he escuchado casos de brujos que han sido capaces de controlar a vampiros, lo cual realmente es demasiado. –Dije, mientras seguía andando.
Realmente debíamos estar preparados para actuar en sombras. No podíamos permitir actuar de forma lenta cuando el enfrentar a duros enemigos se trataba. Debíamos ser silenciosos como la muerte, y sangrientos como la destrucción, y bueno, yo estaba acostumbrado a serlo. Cuando escuché sus palabras la miré extrañado y le pregunté;
-¿Qué le pasó a tu memoria vampírica? ¿Te rebanaron un pedazo del cerebro? ¿Te pusiste mucho tiempo al sol? –Pregunté con una amplia sonrisa, y luego, al mirar el camino le señalé por si ella no se había dado cuenta- Solo falta una media hora o una hora para que lleguemos, luego podremos descansar dentro del hotel. –Dije, apurando el paso.
Quería descansar, hablar tanto me había puesto un poco nervioso, sobre todo por el tema que tendríamos que tratar con los antiguos, que no me gustaba nada.
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Re: Tejiendo un futuro
por Tiamat Malsvir Jue Ene 02, 2014 10:34 pm
Le escuché con suma atención, pues me parecía muy interesante la gran cantidad de métodos nuevos que se habían inventado... Esto nos daba una nueva gama de posibilidades, en la cual todo sería más fácil de lo que imaginaba... Podríamos hacer trampas con aceite, o tal vez plata en polvo...
— Son métodos muy modernos... o yo he aprendido muy arcaicamente... Me gustaría que entrenásemos antes de partir... ¿Podría ser? Además... Tienes razón en cuanto a mis armas, necesito algo nuevo... Me gusta tu espada, podríamos conseguir una como esa para mi. —
Dije entusiasmada por la idea de obtener un arma nueva, no por el hecho de tener una espada iba a dejar mis dagas, ya que siempre era bueno tener otra opción, su pregunta me saco de mis pensamientos, lo miré y ladee un poco mi cabeza, como no entendiendo su pregunta, como si de la nada, él estuviese hablando con una niña pequeña. Yo no había entendido que era una broma, y el hecho de no poder recordar me desespero y angustio, por lo que espesas lágrimas comenzaron a humedecer mi pálido rostro, los tonos morados de mis ojos se acentuaron y por algún motivo, detuve al caballo.
— Lo siento... No... No sé... No puedo recordarlo... —
Dije con voz compungida, mientras llevaba el dorso de mi mano a mis mejillas y secaba las lágrimas que me adornaban la piel como perlas, era una reacción sumamente extraña, algo había sucedido en mi pasado, algo que no podía recordar, cada vez que lo intentaba una sensación de angustia me invadía y me impedía recodar, es como si pudiese llegar a un cierto punto, y luego despertara en otro muy distante.
— Son métodos muy modernos... o yo he aprendido muy arcaicamente... Me gustaría que entrenásemos antes de partir... ¿Podría ser? Además... Tienes razón en cuanto a mis armas, necesito algo nuevo... Me gusta tu espada, podríamos conseguir una como esa para mi. —
Dije entusiasmada por la idea de obtener un arma nueva, no por el hecho de tener una espada iba a dejar mis dagas, ya que siempre era bueno tener otra opción, su pregunta me saco de mis pensamientos, lo miré y ladee un poco mi cabeza, como no entendiendo su pregunta, como si de la nada, él estuviese hablando con una niña pequeña. Yo no había entendido que era una broma, y el hecho de no poder recordar me desespero y angustio, por lo que espesas lágrimas comenzaron a humedecer mi pálido rostro, los tonos morados de mis ojos se acentuaron y por algún motivo, detuve al caballo.
— Lo siento... No... No sé... No puedo recordarlo... —
Dije con voz compungida, mientras llevaba el dorso de mi mano a mis mejillas y secaba las lágrimas que me adornaban la piel como perlas, era una reacción sumamente extraña, algo había sucedido en mi pasado, algo que no podía recordar, cada vez que lo intentaba una sensación de angustia me invadía y me impedía recodar, es como si pudiese llegar a un cierto punto, y luego despertara en otro muy distante.
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Re: Tejiendo un futuro
por Alejandro Máximo Mar Ene 07, 2014 9:29 pm
Escuché sus palabras y enarqué una ceja. ¿Métodos muy modernos? Usaba ya esos métodos desde hace setecientos años, los había aprendido en los numerosos combates que había luchado, pues uno debía aprender en el combate con rapidez, o terminabas muerto. Luego la miré y le pregunté;
-¿Practicar antes de partir? ¿No que partiríamos después? Supongo que antes de mi partida podría hacerlo, no sería ningún problema. Yo he aprendido esto a base de mi propia experiencia en combate, de esos combates en los cuales si no piensas rápido, te mueres. Una de estas espadas se la podrías pedir a Kael, él tiene muchas. –Dije, mostrándole la empuñadura de dragón de mi espada que brillo a la luz de la luna, y que luego volví a esconder la empuñadura, mientras nevaba con fuerzas.
Luego la miré aún más extrañado, ¿Cómo mierda un vampiro no podía recordar que le había pasado? ¿En qué mierda estaba pensando Kael al reclutar una loca que no era capaz de recordar lo que había hecho antes? La miré y le pregunté directamente;
-Y si no puedes recordar, ¿Por qué mierda te recluto Kael? ¿Desde cuándo recuerdas? Cada vez me parece más sorprendente la causa por la que Kael debió haberte reclutado. –Dije, mientras comenzaba a descender la velocidad del cabalgaje de mi caballo, pues ya estábamos por llegar al pueblo.
Esta ‘’vampira’’ realmente me estaba pareciendo muy extraña. ¿Cómo había sido capaz de entrar al clan con unas condiciones como esas? Quizás Kael sabía algo sobre ella que ni ella misma sería…pero bueno, supongo que eso lo vería mientras avanzaba el tiempo. Quizás…podríamos encontrar un brujo que le devolviera la memoria perdida, pero bueno, eso ya lo veríamos con el tiempo, a ver que podía hacer por la pobre Tiamat.
-¿Practicar antes de partir? ¿No que partiríamos después? Supongo que antes de mi partida podría hacerlo, no sería ningún problema. Yo he aprendido esto a base de mi propia experiencia en combate, de esos combates en los cuales si no piensas rápido, te mueres. Una de estas espadas se la podrías pedir a Kael, él tiene muchas. –Dije, mostrándole la empuñadura de dragón de mi espada que brillo a la luz de la luna, y que luego volví a esconder la empuñadura, mientras nevaba con fuerzas.
Luego la miré aún más extrañado, ¿Cómo mierda un vampiro no podía recordar que le había pasado? ¿En qué mierda estaba pensando Kael al reclutar una loca que no era capaz de recordar lo que había hecho antes? La miré y le pregunté directamente;
-Y si no puedes recordar, ¿Por qué mierda te recluto Kael? ¿Desde cuándo recuerdas? Cada vez me parece más sorprendente la causa por la que Kael debió haberte reclutado. –Dije, mientras comenzaba a descender la velocidad del cabalgaje de mi caballo, pues ya estábamos por llegar al pueblo.
Esta ‘’vampira’’ realmente me estaba pareciendo muy extraña. ¿Cómo había sido capaz de entrar al clan con unas condiciones como esas? Quizás Kael sabía algo sobre ella que ni ella misma sería…pero bueno, supongo que eso lo vería mientras avanzaba el tiempo. Quizás…podríamos encontrar un brujo que le devolviera la memoria perdida, pero bueno, eso ya lo veríamos con el tiempo, a ver que podía hacer por la pobre Tiamat.
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Re: Tejiendo un futuro
por Tiamat Malsvir Dom Feb 09, 2014 11:26 pm
Sonreí ante la afirmativa de poder practicar antes de iniciar nuestro viaje a París, y me complació aún más el poder conseguir una nueva arma, era algo que debía hablar con Kael, era uno de los cuantos preparativos que debía hacer antes de partir. Había mucho que hacer, organizar el viaje, los ropajes, el lugar en el cual me quedaría en París, quien quedaría a cargo de mi ducado en mi ausencia y un sin fin de porquerías aburridas, pero necesarias.
En cuanto me preguntó por mis recuerdos, fue como si estuviese metiéndose en un terreno mi oscuro de mi pasado, algo que había decidido cerrar por algún motivo, y que si decidía buscar, acabaría por encontrar, intenté despabilar, no era bonito quedar así ante un aliado, quedar como alguien débil, y por que no decirlo, como alguien malditamente demente, sé que parecía mi caso, sé que a ratos parecía serlo, pero yo sabía muy bien que no lo era, pero el usarlo así era una coraza para mi, total... Él me agregaría debilidades que no tenía, y si en algún momento nos llegábamos a enemistar, el intentaría aprovecharse de algo inexistente, algo que me daría fuerzas a mi... Pero la idea no era ser enemigos, era ser amigos.
— Yo... Lo siento, son cosas que me pasan cuando no quiero hablar de algo. Espero algún día poder confiar en ti para contarte. No es algo de lo que me agrade hablar. —
Digo intentando sonreír, cuando espoleó mi caballo para reemprender la marcha, el amanecer estaba cercano a quemarnos.
— Vamos, hay que darnos prisa, ya habrá tiempo de hablar. —
Le digo, cabalgando con rapidez, como si estuviese escapando de algo, escapando de mi pasado, escapando de mi misma. Tras unos minutos, ya estamos a la entrada del pueblo, por lo que reduzco mi velocidad, me ordeno el cabello y comenzamos a avanzar lentamente por las calles de adoquín que inundan la ciudad, pobremente iluminada con la luz de la luna.
En cuanto me preguntó por mis recuerdos, fue como si estuviese metiéndose en un terreno mi oscuro de mi pasado, algo que había decidido cerrar por algún motivo, y que si decidía buscar, acabaría por encontrar, intenté despabilar, no era bonito quedar así ante un aliado, quedar como alguien débil, y por que no decirlo, como alguien malditamente demente, sé que parecía mi caso, sé que a ratos parecía serlo, pero yo sabía muy bien que no lo era, pero el usarlo así era una coraza para mi, total... Él me agregaría debilidades que no tenía, y si en algún momento nos llegábamos a enemistar, el intentaría aprovecharse de algo inexistente, algo que me daría fuerzas a mi... Pero la idea no era ser enemigos, era ser amigos.
— Yo... Lo siento, son cosas que me pasan cuando no quiero hablar de algo. Espero algún día poder confiar en ti para contarte. No es algo de lo que me agrade hablar. —
Digo intentando sonreír, cuando espoleó mi caballo para reemprender la marcha, el amanecer estaba cercano a quemarnos.
— Vamos, hay que darnos prisa, ya habrá tiempo de hablar. —
Le digo, cabalgando con rapidez, como si estuviese escapando de algo, escapando de mi pasado, escapando de mi misma. Tras unos minutos, ya estamos a la entrada del pueblo, por lo que reduzco mi velocidad, me ordeno el cabello y comenzamos a avanzar lentamente por las calles de adoquín que inundan la ciudad, pobremente iluminada con la luz de la luna.
Tiamat Malsvir- Vampiro/Realeza
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