Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

por **Payne Manie Folie** Miér Sep 01, 2010 4:49 pm

Siento la lluvia en mi cara. Eso no es lluvia, es un río. Siento el río bajo mis pies. Eso no es un río, es el mar. Siento el mar golpeándome. Eso no es el mar, es tu conciencia. Tic, tic, tic, como un pájaro carpintero taladrando y taladrando, abriendo un orificio que puede ser luego cerrado, pero que nunca quedará igual, porque dejará una huella, y aunque sea para tu ojo imperceptible, está allí. Recordándote cuando el ave cumplía su función. Tenemos conciencia, pero tú eres más inconsciente, yo te manejo y tú me obedeces, como siempre, sin que se note, todo en silencio.

Camino descalza sintiendo el suelo conocido bajo mis pies, dos piedras más adelante tenemos la que nos hizo la herida en el dedo, tres a la izquierda esa que tiene una forma más aplanada que el resto. Sólo podemos llegar hasta ahí, ya te lo advirtieron, no puedes salir todavía, te dijeron que si no seguías escuchándome podrías ir a dar unas vueltas a la ciudad. ¿Podríamos mentir no? Podríamos decir que yo desaparecí y que sólo tú sigues.

Esperemos que no se den cuenta, dicen ser expertos, pero ya sabes que muchas veces los hemos engañado. Fue así como te fuiste la última vez. Nos encerraron como si eso sirviera de algo, espera, deja de gritarme, deja de hablarme, no soy yo, ¿entonces quien? – ¿Alguien anda por ahí? ¿Alo? ¿Hola? ¿Alguien? – nadie al parecer, te lo dije, pero yo estoy segura de haber escuchado algo, claro que puede ser un animal o el viento, podría ser también otro de nosotros.

Menos piedras, más tierra, más pasto, nos estamos alejando, pero el sonido se oye más cerca. – En serio, no muerdo, ¡quiero saber si alguien anda por ahí! – me miré pero no tengo nada extraño a lo de siempre, mi pantalón está en su lugar y la camiseta casi transparente también, mi pelo sin peinar como de costumbre llega debajo de mi cintura. – Bueno si alguien está y no quiere hacer que está no tengo problema, pero si alguien no está y quiere hacer que está, entonces si puedo tener problemas – dos pasos más y el cerco, lo que divide afuera de adentro.

Pude contar cincuenta y dos respiraciones, no se cuanto será eso en tiempo, no tengo idea de las horas, apenas distingo el día de la noche, miré adelante y miré atrás, busqué encontrar un elemento real que me dijera que no estábamos locas. Si lo estamos, si lo sé, pero déjame soñar. – Me voy a sentar aquí, entre estas dos piedras, lo digo por si alguna cosa quiere acercarse, estaré esperando, me quedan más días que el sol en este lugar. - ¿quieres tenderle una trampa? O eres tu el anzuelo, mañana llegarán a buscarte, siempre caminamos por el sendero en el límite del terreno, van a comenzar a sospechar.

por **Epoch** Jue Sep 02, 2010 6:33 pm

- Que haces ahi?

Pregunté a la chica cuando finalmente se tranquilizó y se sentó. No obtuve respuesta. Lo que impedía su libertad era una reja metálica bastante enclenque para mis garras, me había mantenido oculto por las sombras por que ¡CARAJO! que bien se siente convertirse en Oso. Andar asi, sin tanta tela cubriéndome del calor y como aquella mujer no voltease creo que no habría problema.

Hice presión abriendo un buen hueco por los barrotes. El metal produjo un ligero chirrido, mas la chica no volteó, al contrario; pareció hundir su cabeza entre los hombros. ¿Quien la habría encerrado en tan espantoso lugar?

Apenas habierto el hueco volví a mi forma humana y mientras me volvía a poner la ropa que había dejado cuidadosamente doblada a un lado le pregunté:

- ¿Crees que puedas pasar por ahi? ¡Vamos, sal ahora! ¿Dime quien te encerró en ese lugar?

La chica de un salto estaba afuera, tan solo me miró un instante a la cara pero bastó para reafirmar lo que ya había visto desde la distancia. Tenía un rostro hermoso, como el de una pequeña niña, su pelo era hermoso; traía a mi mente recuerdos de alguien... alguien a quien creía conocer. Luego dió la vuelta y hechó a correr.

- ¿A donde irás?

Grité y solo asi se detuvo a mirarme dando media vuelta sobre sus talones. La expresión en su cara era enigmática y extrañamente alegre.

- Mi remolque esta cerca de aqui, si tu quieres... puedo llevarte. ¿Que clase de lugar es este?

por **Payne Manie Folie** Sáb Sep 04, 2010 10:40 pm

Era un humano. Era un hombre. ¡Decídete! Era ambos, pero no a la vez, nos engaña lo se, nos quiere hacer creer que nos habla, pero no, está intentando hacer que salgamos, cuando sabemos que lo tenemos prohibido. ¿Por qué caminamos entonces? No caminamos, corremos. Él nos abrió una vía de escape, él no sabe lo que acaba de hacer, no tiene idea de lo que podemos hacer. No sabe, porque no nos conoce, no nos sabe.

Nos reíamos, ambas. Nuestros pies eran ligeros, creados para este tipo de movimiento, lo hacíamos todos los días varias veces. Nuestro pelo tiene flores, somos arboles con vida, su voz, esa voz, te lo dije, alguien estaba, alguien nos vio. Debe ser otro de nosotros, eso es seguro, nadie puede abrir el cerco que nos separa, sólo otro más, él no existe, puedes hablarle. Ya no corríamos, ahora lo mirábamos ladeando la cabeza, nuestra sonrisa se la dimos libremente.

-¿Vamos? Venimos, no vamos – seguimos corriendo un poco más, pero sus palabras volvían a detenernos – Si no conozco que es un remolque… ¿cómo puedo ser capaz de inventarlo? – siempre me hacía ese tipo de preguntas, otros me decían que no eran producciones hechas por mi, pero yo estoy segura, estamos de acuerdo, puedo aprender y hacerlo, un remolque de seguro era un animal, el hombre tenía uno, yo quería tener dos.

¿Desde cuando los lugares tenían clasificación? – Esto es un bosque, eso era donde vivimos, ¿no lo recuerdas? – mis creaciones nunca habían tenido perdidas de memoria, yo no recuerdo eso, entonces parece que si. – Estamos en ese lugar desde antes que nacieras. – o yo te hiciera nacer, eres el quinto, van a querer que seas el último, especialmente si les digo que pareces más real, estiro mi mano y espero que la tomes, no se donde quieres llevarme, pero quiero ir.

por **Epoch** Dom Sep 05, 2010 8:25 pm

Le estreché la mano a la niña, sus palabras eran extrañas, mas parecía hablar con el aire y no conmigo. Suavemente la llevé por aquella enorme calle, como si trajese una muñeca viva hasta donde había dejado el remolque. Debí sospechar que un lugar tan grande y tan abandonado solo podía ser una prisión. De ahi que fuese tan buen escondite aquellos muros.

Le ayudé a subir y unos cuantos minutos mas tarde los caballos corrían como llevados por el mismo demonio cruzando la ciudad.

- Espero que sepas a donde vas pequeña.

le dije, cuando nos acercabamos ya al concurrido centro, parecía que habían dejado de seguirnos hacia unos metros. Los caballos estaban alegres de poder correr tanto mas tuve que bajar la velocidad para no despertar sospechas. De cualquier forma un carro tan extravagante, jalado por semejantes bestias y con tan sigulares pasajeros se mezclaba de manera sublime entre los finos transportes de la sociedad parisina. Quizá dentro de poco tengamos que volver a correr...

- Ahora me dirás quién y por qué te encerró en ese lugar.

por **Payne Manie Folie** Mar Sep 07, 2010 12:15 am

Ya estamos ahí, pero ese lugar no lo conocíamos, nos dice que es un remolque pero no lo habíamos visto nunca, ¿cómo es posible entonces? No es un animal es un lugar, los lugares si parecen tener clasificación, pero espera, hay animales y son caballos como los llaman, caballos y no cabellos o tu también tendrías animales en la cabeza. Tendríamos muchos, más que todos, más que tú.

Avanzamos porque él lo decidió, nos habla, nos pregunta, mira como mueve sus labios muy rápido, tenemos que decidir si responder. -¿Cómo tendría cómo saber si es usted quién me lleva? – Miramos a sus ojos pero no veíamos el parecido a nosotros, es uno diferente, así lo hicimos y esta creación nos ha quedado mejor que la anterior, ¿la recuerdas? Era como tú pero más como yo, desapareció junto con los días nublados, aquellos en los que las piedras se esconden bajo el lodo, asustadas de que la lluvia quiera llevárselas a otro sitio.

Le dimos un beso en la mejilla, es la única forma que conocemos para agradecer, es raro sentirlo cuando lo tocamos con nuestros labios especialmente si no existe, pero no es primera vez que lo hacemos, es como cuando nos besaron detrás del muro ¿verdad? Sólo que este beso se lo dimos en la cara, pero podríamos darle más, si sigue mostrándonos cosas como este lugar llamado remolque.

-No estábamos encerrados, si lo estuviéramos no podríamos estar aquí ¿verdad? – sonreíamos porque eso hacemos cuando decimos la verdad – No se quienes son los quienes, pero están ahí desde que llegamos, ¿cómo no lo recuerdas? Me quieres hacer mentir, nosotros queremos vivir – miramos a otro lado, sus ojos ya no nos parecen iguales, esperamos, esperamos, hasta que sean los mismos de antes, de otra forma no, sólo si son los originales.

por **Epoch** Mar Sep 07, 2010 1:40 am

Debía ser apenas una niña, su mirada por instantes ausente brincaba divertida sobre los tejados de las casas que pasaban a nuestro lado como una pelicula ante ella. No tenía idea de quien era en realidad, pero me hacía feliz poder brindarle ese rato de aire y libertad, fuera de aquel lugubre patio...

¿Nosotros? o_o Si, era algo extraña, mi nueva amiga, pero su rostro parecía inquietantemente divino; tal vez podía percibir a seres mas allá de los planos dimensionales. Quizás todas esas locuras de las que hablaba el amigo Tez son ciertas y hay mas allá de este mundo otras tierras pobladas por seres que nos observan y a veces vienen a hacer contacto con quien sabe escuchar...

- Disculpe si mi ignorancia le ofende, Mademoiselle... Nosotros... ¿quienes?

por **Payne Manie Folie** Miér Sep 08, 2010 1:57 am

¿Qué pasa si inclinamos la cabeza? No, nada, sigue teniendo el mismo rostro, queríamos tocarlo más pero siempre nos habían dicho que eso no debíamos hacerlo, sólo lo miramos más de cerca, bien, bien, cerca, podíamos sentir su respiración en nuestros labios, más cerca, pero sin rozarlo, sólo mirando, detalles que lo hacían único, ¡que creativas hemos sido esta vez! Nos merecemos casi un premio por esto.

-Usted… - le tocamos la punta de la nariz con el dedo – Yo…- nos miramos, -Todos, eso hace un nosotros… ¿o me equivoco? – nos acercamos a él, su cuerpo tiene calor como el nuestro, queremos tocarlo. No podemos definirte, eres distinto, pero nos agradas, más que nosotros mismos, estamos, somos, éramos, queremos ser. – Ignorante es aquel que no pregunta, no quiero caer en mis propias palabras… ¿puedo llamarlo de alguna forma o prefiere seguir siendo usted?- siempre sería usted, nada más y nada menos.

El movimiento desvía nuestra atención, los paisajes, personas, cosas cambian, nosotros seguimos igual, más rápido, más lento, pero avanzamos, aún así dentro de aquel lugar que este yo bautizó como remolque estamos quietos, expectantes, suspirantes, no queremos interrumpir lo ininterrumpible, él nos mira, nos estudia, nosotros no podemos hacer algo que desconocemos, queremos descubrirlo como sólo sabemos, no se puede, no está permitido, como tampoco lo estaba salir y él nos sacó, nos sacamos mejor dicho, lo logramos.

-Tenemos varios nombres, ¿quiere escoger uno o inventar uno nuevo? – la historia nunca había sido clara, la nuestra menos, la que empezábamos a construir. Los colores cambian, se hacen menos brillantes, el suelo cambia, se hace más frío, los sonidos cambian, se hacen susurros, su cara cambia, se hace más nuestra. Nosotros no cambiamos, siempre hemos sido suyas. –El rocío sigue siendo mío aunque le llamemos hastío, el río sigue hecho un lío aunque ya no esté frío.-

por **Epoch** Miér Sep 08, 2010 2:59 am

De nuevo entramos a la zona con calles amplias, donde pasaban pocos carros, de suerte que me sentí mas en confianza y aminoré el paso. Algún instinto vago y extraño se apoderó de mi llevándome a raptar a aquella hermosa niña sin siquiera conocerla. Un sin fin de ideas poblaron mis pensamientos, como escenas de distintas obras representandose en mi mente con distintas tramas en las que esta niña era la protagonista. Aventuras y dramas que podían haberla conducido justo a encontrarse aqui a mi entera disposición. ¿Tendría un hogar? ¿Una familia? Cuanto tiempo podría pasar antes de que alguien preguntase por su paradero... Antes de que mas personas se enteraran que no estaba donde se supone que debía estar. Demasiadas preguntas cuya respuesta aun no quiero escuchar. Todo a su tiempo, cada pieza ha de ajustar.

- AH!! Pero que modales los míos. Me he comportado como un salvaje ante usted. repuse sonriente, tomando su mano con cortesía; la besé para luego presentarme.

- Me llaman Epoch das Höchsten de los Haidouk de Germania. Vitki experimentado a tu entero servicio mi lady...

Tomé entonces suavemente su otra mano, soltando así las riendas por un momento del remolque. Atraje ambas manos, como delgadas avecillas a mi palma izquierda que se cerró sobre ellas, mientras mi brazo derecho rodeaba los hombros delgados de la jovencita acercandola a mi cuerpo.

- ¿Dígame, como prefieren que les llame, mon petit?

por **Payne Manie Folie** Jue Sep 09, 2010 10:18 pm

Luces y sombras, porque el sol está aunque no lo veamos, nos ilumina o alumbra, nos entibia o nos quita su calor, pero está, siempre está, aunque queramos negarlo, nosotros estamos, siempre estamos aunque quieras hacer como que no, porque somos uno y tu eres uno nuestro, eres parte de nosotros antes de saber siquiera que lo eras, no es algo que podamos negar, simplemente es. Arboles que tapan la luz, arboles que dan sombra y que guían el camino, más arboles, menos gente, menos luz, más nosotros.

Secretos, silencio, voces, susurros, su voz, nuestra voz, si tiene nombre, los escuchamos decirnos muchos de sus nombres, si, es como nosotros, pero simplemente nos quedamos con el primero, ese es el que su cara nos dice que es el que le corresponde, nada más, porque los otros no son más que decoraciones, adornos para que el mundo crea que es tan diferente como lo son dos gotas de agua de la misma lluvia, distintos, como dos gemelos nacidos del mismo vientre. Lo repetimos, para él – Epoch…-

El ritmo de nuestro movimiento suena como música en nuestros oídos, sus respiraciones y nuestros latidos también, tenemos un latido, uno, uno y otro, mirar en sus ojos hace que sucedan más rápido, sin que lo pidamos, simplemente que sucedan, sin pedirlo, sin nada. – Algunos nos llaman Payne… como el dolor… - aquel que sentimos cada noche antes de dormir, siempre con la esperanza de no despertar al otro día, - otros nos llaman Manie… como la manía, - esas de seguir intentando despertar aunque no queramos hacerlo, - y otros me llaman Folie… como la locura.-

Y era esta ultima la que más nos identificaba y la que menos éramos, porque lo normal es lo que más se repite y si vivíamos en un mundo de locos entonces estábamos normales, decidido, somos normales, aunque todos aquí piensen lo contrario, le dimos un beso en los labios, queríamos hacerlo y lo haremos de nuevo si elige el nombre correcto, le daremos más espacio para que toque nuestra piel, es ella la que pide el roce de sus dedos, sólo ella, nosotros obedecemos.

por **Epoch** Jue Sep 09, 2010 10:59 pm

Sus labios dejaron un suave beso en mi piel. Se sintió como una descarga de sangre directo a la cabeza para luego recorrer con delicado calor todo el cuerpo. ¿Acaso me habré enamorado? Tan rápido he caído bajo el encanto de esta pequeña. Cierto es que una ansiedad va aumentando desde algun hueco en mi consciencia. ¿En que lío me estaré metiendo?

- Dolor... (*le besa de vuelta) Manía... (*abre mucho los ojos y vuelve a besarle ahora por tiempo mas prolongado) Locura. (*le besa repetidamente, mordiendole los labios)

Vaya que es una locura. (*Estira el pie hasta poner de nuevo al alcance de su mano derecha las riendas.)

- Sooo...

Detengo a los caballos y me vuelvo a la jovencita, que me sonríe mirando de lado de nuevo. Muñeca que encontré en el callejón y que me robé de nadie. Comienzo a encariñarme con tus ojos, con tus labios dulces. Besos de miel. He mirado a la calle, una y otra, y dos veces mas cerciorandome que nadie viene, ningun rastro de criatura, o animal. Como si la providencia nos hubiera consedido algún tiempo de privacidad.

- ma Folie, permitame mostrarle el interior de mi remolque...

por **Payne Manie Folie** Vie Sep 10, 2010 12:38 am

Han dicho nuestros nombres otros labios, nos han mirado a los ojos otros, otros, que no eres tú, nos han tocado la piel con dedos fríos, dedos suaves, dedos duros y dedos cálidos, otros, otros que no eres tú. Nos han robado besos, pero estos son entregados, no robados, entregados a ti, sólo a ti, más besos, más intensos, nos hurtas los labios mientras dices nuestro nombre, somos tuya, eres nuestro, eso ya lo sabemos, eso lo confirmamos.

Nos detenemos y lo miramos nuevamente a los ojos, nuestro cuerpo grita si a su pregunta, de sus labios elige la locura, es uno, por que sin nosotros no es nada, sin la locura no existiría, sin la locura no nos tendría rápidamente entre sus brazos para conducirnos a otro lugar, otro beso robado al viento, una risa que se escapa de nuestros labios ya muchas veces besados por él, que dice ser otro, que su nombre se escribe con E, de entrega, de energía, de emoción, de esperanza.

-Epoch- otra vez, nos mueve, nos lleva en sus brazos, estamos hecha para ellos, los creamos para que sólo nosotros pudiéramos estar ahí, nuestro pelo nos tapa los ojos, pero nuestra boca es libre, repetimos su nombre mil veces pero sólo se escucha el silencio, nada más, nada menos, no hay susurro, sólo roces, sólo algo nuevo, sólo el, sólo yo. Estamos adentro y estamos en él, nuestra piel sabe que es su cuerpo, siempre lo supo porque es parte nuestra, lo aceptamos, lo necesitábamos.

Solos, si es que el viento no cuenta como acompañante, si es que el cielo no sirve de testigo, pero el cielo no está y ahora es un lugar más pequeño, como nuestros ojos al cerrarlos y disfrutar de explorarlo con otros sentidos, usar las manos para aprender su rostro, oler su aroma masculino y embriagador, oír su voz deseosa de mi, no de nosotros, - Estamos, estoy, estaremos donde quiera Epoch, Epoch, su nombre suena a historia, sus labios saben a memoria…-

por **Epoch** Vie Sep 10, 2010 12:51 am

Una niña, una mujer. Piel de fruta que me deleito en morder, sopesar mientras voy desnudando a la niña, voy encontrando su piel tibia y tersa debajo de las ropas. El hambre acude a mis colmillos, mas no quiero lastimar a la pequeña Folie. Ella que tan dulcemente se ha entregado a mi abrazo, será con suavidad que me vaya yo revelando la piel, con suavidad hasta estar desnudos los dos, protegidos por los muros, iluminados la ténue luz de las ventilas, en medio de la penumbra.

La escucho repetir mi nombre, que curioso que me hable de memoria cuando es precisamente lo que yo perdí. Mi pasado. Mas tenía hoy un presente, una pequeña que se estremece bajo mi cuerpo. Manie.

- Te cuidaré a partir de ahora y tu serás mía. ¿De donde vienes, niña? -"¿Quien te ha dejado aqui en la boca del río como para que la hierba te devore?"-

Le decía mientras acariciaba su joven cuerpo y le besaba alternativamente su rostro y sus pezones como si quisiera desabrochar el paraiso con mis labios. Enfebrecido por el mas primitivo institno animal, lamiendo y besando con adoración, disfrutando del sabor de su piel que me incendia por dentro...

por **Payne Manie Folie** Vie Sep 10, 2010 2:08 am

Es una cuna la que se ha formado entre aquellos brazos, pero no existe tal bebé o aquella niña como insiste en llamarnos, sólo estamos nosotros, el redundante nosotros de la historia. Hemos llegado al mundo desnudos, nos cubrimos cuando es necesario, con él llegamos a otro mundo, debemos hacerlo de la misma forma, nacer en el interior de un lugar cuyo nombre recién conocemos, una pequeña muerte nos espera, la tumba será otro cuerpo, los llantos y lamentos serán reemplazos por gemidos y jadeos, historia repetida, similar.

Es una cama, no somos niños, somos un tú y un yo queriendo convertirse en un uno. No son labios los que nos tocan, son ideas, ideas sobre nuestro cuerpo, ideas en nuestros labios, ideas en la comisura de la boca y en el borde de la nariz, ideas bajando por nuestro cuello y llegando a aquellos montes que lo esperaban, montañas dulces de sol y de nieve, él está listo para alcanzar la cumbre, le damos las herramientas para hacerlo, sin ropa, yo no hay más, la hicimos desaparecer mientras estaba distraído, ahora nos puede pensar por completo.

En una calma, es paz que no proviene de afuera, es luz, es algo que titila detrás de nosotros, posesión, eso no es un nosotros, esto es un sueño, irreal, volátil, cargado de deseo pero un sueño, - No soy mía, soy dolor, no soy mía… - lo repetimos para que lo entienda, una caricia en su rostro y las manos entre aquellos rizos, nuestros ojos de miel se confunden con los suyos del color de la misma tierra bajo nuestros pies. – Soy manía y locura, mía no, mía jamás.-

En una cáscara, vacía por dentro, firme por fuera, su boca me lo dice, su ansiedad lo confirma, él era nuestro incluso antes de que se diera cuenta, él no sabe que no queremos despertar mañana, que queremos irnos en un sueño eterno, - Vengo desde sus brazos, ¿lo recuerda? Estoy en sus brazos, no vengo, estoy, el tiempo es relativo, jamás vivo, apenas un suspiro...- Él nos trajo y él nos pregunta, él es nosotros, inventado por nosotros, creado por nosotros, nada más, sueño, fantasía, jamás realidad, sólo un respiro.

por **Epoch** Vie Sep 10, 2010 12:41 pm

Tal vez tenía ella razón. Tal vez no existía otro lugar que esta suave estera sobre la que yacemos, piel con piel. Tal vez no haya mas inercia en el mundo que este balancearse a ratos salvaje y a ratos tranquilo como el oleaje, movimientos de cadera en espirales que chocan y se encuentran mientras las manos inquietas van y vienen trazando la geografía de los cuerpos con caricias. A veces cuando la pasión hce estallar erupciones en mi pecho, no puedo evitar morder su delicada piel, difícil es retraer las garras al escuchar los gemidos que escapaban de su boca, ahogándose en mis besos.

Y así nos encontró la noche, entró y pasó de largo sobre el remolque varado a un lado del camino. El silencio parecía reinar en esta parte de la ciudad, calles desiertas pobladas apenas por ecos. Me deleito viendo a Folie entre las sombras, redefiniendo sus rasgos. Ella no puede verme a mí, los ojos de los humanos son mucho mas oscuros; tan solo siente mi tacto firme y ardiente sobre su cuerpo sudoroso.

No hacen falta los ojos para ver. Mis oídos tambien miran, perciben que los caballos estan inquietos. No escucho el ulular de aves nocturnas, ni algún otro sonido a muchos kilometros de aquí. En verdad hay demasiada quietud. Miro de nuevo el rostro de Folie acariciandolo desde la sombra y ya tengo ganas de asaltarle de nuevo, irrumpir su belleza con mis labios, pero quiero escuchar su voz una vez mas antes de hacerlo.

- Ya comienza a hacerce vieja la noche y nadie ha venido a reclamarte. ¿No tienes un hogar a donde ir? ¿Nadie te espera petit Manie? ¿Quien habrá de extrañarte aquí en París, cuando te haya llevado conmigo?

por **Payne Manie Folie** Vie Sep 10, 2010 11:33 pm

Sin necesitar palabras nos hemos convertido en uno, somos nosotros, ya no dos de nosotros, somos juntos, caricias y roces son nuestra forma de comunicación, movimientos sincronizados como de un baile innato, donde ambos sabíamos los pasos incluso antes de saber quienes éramos, porque somos y al parecer te creamos para esto, para que nos arropes en tus brazos y nos hagas creer que el mundo a oscuras es el mismo que el lleno de luz, que sólo mirando tus ojos de naturaleza podremos encontrar el camino, aún dudamos de tu existencia, no sabemos, no queremos saber, no estás, no eres.

Gotas de ti nos invaden, eres como el rocío que disfrutamos cada mañana cuando sin querer estar despiertos nos escapamos para sentir el pasto húmedo bajo nuestros pies. Ahora estamos húmedos, ambos, los dos, humedad de besos, humedad de nosotros. Silencio, susurros de afuera, los interrumpen tus palabras, preguntas, no respondemos, contamos, hablamos, suspiramos frases para ti, entre la lluvia de más besos, completamos la música que trae la noche, vamos a despertar y no estaremos, no estarás, porque nuestras creaciones se van cuando otro día quiere comenzar, intentemos retrasarlo, será inútil, no estás aquí para eso, estás para ser nosotros.

Nuestros gemidos dieron paso a un par de respiraciones descompensadas, cansados, agotados de tanto placer, - Nuestra noche no tiene edad, nace las veces que la necesitamos, - mirar a través de nuestros enredados cabellos intentando encontrar luz, - Estoy en sus brazos, he nacido aquí, mi hogar parecer un lugar nuevo al que alguien llamó remolque, no soy, no estoy, nací luego de una pequeña muerte. – nuestros dedos intentan descubrir el lugar del que proviene su calor, sentir la fuente de lo que nos tiene amarrados aquí.

-Debemos existir para que nos extrañen Epoch, nosotros no lo hacemos, somos sueños, flotamos a la deriva esperando que alguien más nos encuentre como tú lo has hecho… - nuestra mirada ya se pierde, ya no estamos, eso ha sido todo, necesitamos que él nos vuelva a encontrar, que quiera descubrir si es el dolor, la manía o la locura la que domina en nosotros, dudamos de la existencia de aquello que llaman sentir, pese a que estamos rodeados de sensaciones, - Me llevará consigo aunque ya me tiene, me tendrá aunque no me posea, estoy, estamos, no necesitamos ir, ya hemos llegado.-

por **Epoch** Sáb Sep 11, 2010 8:04 pm

Demasiadas preguntas a las cuales no quería encontrarles respuestas ¿y qué si alguien estaba extrañando a la pequeña Folie, allá donde existió y ya no está más? Yo la encontré y ahora ella me reinventa para sus brazos. No hay mas. No somos mas que estos, aqui. Nacimos el uno para el otro. Aqui, ahora.

- Dices bien, sueños somos.

Trémula piel se estremece cuando recorro la sutíl línea que distingue su ser, ajena, desprovista; limpísima claridad que matiza la hora de los abrazos y las sorpresas. -"Y te sucedes ahora interminable, desde tu piel hasta impregnar la noche toda, con tu aroma"-

- Guardaré tu imagen así, como el bosquejo de un rostro que acaba de nacer, sonrosada, tierna, niña en flor, breve suavidad de un sueño, botón de piel, capullo.

-"¿Quien soy para nombrar tu piel? Mejor los colores, mejor las palabras de los poetas, o la música. ¡Si! Mejor que sea ella quien te de la bienvenida. No yo, que en mi silencio no hago otra cosa que sucumbir, casi a punto del llanto, por llevar tu cuerpo una y otra vez hacia mi ser"-

- Recien nacida, seré tu padre y tu hermano, sere tu otro yo.

-"Brota en el silencio el nuevo el mar de tu respiración. Cansada de amar te acomodas entre mis brazos. Mejor esta piel y este olor que te abriga, la voz del arrullo y la noche que despierta..."-
¡Poblada de estrellas!

por **Payne Manie Folie** Sáb Sep 11, 2010 9:17 pm

Aquel mar que no conocemos nos enseña que hay cosas que no se borran nunca, como la marea, regresan aunque intentemos impedirlo, poner manos, puños, piernas y pies para rechazarlo, pero ya es tarde, ya está junto a nosotros, dentro nuestro, bajo la piel, metiéndose, invadiéndonos, apoderándose de algo que ni a nosotros nos pertenecía, simplemente lo hace, no alcanzamos a darnos cuenta, no desaparece, aparece, estamos, sentimos aunque no lo sepamos. Acercar los labios a su boca para no olvidar jamás aquellos besos, nuestra memoria es tan frágil como nuestra vida, se va cuando se recoge el mar, pero ésta no vuelve, no, se queda en las profundidades.

Nuestro cuerpo es demasiado grande para sentimientos demasiado pequeños, nos quiere atrapar encerrar, acabamos de salir de eso, no podemos, no, somos libre, debes decírselo, debemos hacerlo, otro beso porque ya habíamos olvidado el sabor de su boca. –Guardaré… guardaré… ¿Desea atraparme Epoch? Nos encontró, nos revivió y ahora quiere perdernos y matarnos nuevamente… - él confirma nuestra irrealidad, intentamos tocarlo pero hay algo entre nosotros, parece ser él, sólo él, nos interrumpe y nos restringe, lo mismo hacen sus palabras cuando quieren definirnos, no podemos, no somos un lugar, no estamos.

¿Por qué insiste en encontrar una denominación para nosotros? No padre, no hermano, no hija, no madre, nunca, nunca, sólo nosotros, nada más, algunos más de otros también, enredamos nuestras piernas entre él, lo acercamos más a nosotros como si esto fuera posible, seguimos sin descubrir de donde proviene tanta luz en aquellos ojos de hojas caídas, - Es nosotros, siempre lo ha sido, lo hemos amado desde antes de que supiera nuestros nombres, escuche el murmullo, corazón de hombre. - ¿Amar? ¿Sentir? ¿Odiar? No existe diferencia para nosotros, todos suenan iguales en nuestros oídos, no existe aquella capacidad de querer algo o alguien, simplemente no está.

La noche se hace más intensa y nosotros también, nos hemos unido como tantas veces nos habíamos alejado, estamos en mar abierto, somos el faro. Siempre, no, jamás, absoluto, completo, único, especial, tan enredado como su cabello, tan salvaje como el nuestro, ojos abiertos mirando a nada, porque hemos perdido el centro y es él quien nos tiene que ayudar a encontrarlo, - Vamos a morir, otra vez, sólo para renacer bajo su cuerpo, lo hemos hecho, usted lo quiere, es nosotros, lo somos, mi boca lo repite, es la misma boca que anhela la suya, somos dos y uno a la vez, iguales, no padre ni madre, míreme a los ojos y vea que no somos una. Llévenos, donde queramos.-

por **Epoch** Dom Sep 12, 2010 3:35 am

La memoria de ti no eres tu. Me enseñas que al recordate miento. ¿Que eres Manie? Tu incitas al mordisco y al beso. Me imantas, como hacen los bosques, en silencio. Es fresco el aroma de tu carne joven que entra en mis pulmónes, dulce como los oboes. Rico, triunfante y perverso.

- Tal vez si intento atraparte, aunque sea con la mentira de la memoria. Pero tu eres vasta como la noche. En ti me he fundido en una tenebrosa y profunda unidad. Me has llevado con tu piel y con tus besos, por los senderos del extasis.

Es el centro ardiente que une nuestros cuerpos lo que logra la expansión de todo lo infinito; el oscuro remolque pierde la proporción. Las paredes se difuminan y las fragancias de almizcle e incienso brillan tenues en el ambiente. Mi mano derecha esta líbre y aun recorre y palpa. Introduce sus dedos entre los pliegues de su cuerpo. Me deleito viendo con la piel y con los dientes cuando muerdo. esta embriaguez puede tornarse peligrosa.

por **Payne Manie Folie** Dom Sep 12, 2010 5:05 pm

Somos ciegas y él es nuestro lazarillo, nos guía como un padre enseñándole el mundo a su hijo, nos toma de la mano para atravesar las calles abarrotadas de gente, pero aquí no hay gente, no hay calles, no hay mundo, sólo una boca que descubre lugares desconocidos y sólo unos dedos que exploran formas de placer, él está en nosotros, no necesita descubrir ni explorar, es nosotros desde hace mucho, irresistible, imposible. Tenemos los ojos abiertos pero la oscuridad nos cubre como un velo, nos encierra y nos limita, queremos verlo, no podemos, ¿seguirá ahí? Si sus palabras lo confirman, poesía que sale de labios tan agrestes.

Esperando una señal, no aparece, nunca, pero aún así pudo abrir el cerco para nosotros, somos libres, él nos hizo libres, nos refugiamos en él al amparo de las corrientes, hemos dejado de ser volátiles por un segundo, una cuerda nos aferra a su cuerpo, es una cuerda que no podemos ver y que él mismo ha tejido para nosotros, nos tiene, no es una cuerda, son muchas, es una red y somos peces, presas, peces del mar de su lugar, presa de sus palabras de susurro amado, amado, no sabemos lo que es eso, no queremos saberlo, queremos, no podemos.

-Vamos a donde no nos alcance el tiempo, queremos, podemos, estamos, no somos vastos, somos nosotros, - más besos, más intensos, las palabras se confunden con gemidos en la banda sonora de nuestra noche, - Haremos que al salir el sol algo nuevo aparezca, somos, estamos, renacemos con cada suspiro, sientes como nuestro corazón se acelera y aún así no haces nada para evitar la pequeña muerte.- Nuestro cuerpo se mueve a un ritmo que él nos impone, somos de él, nos tiene, sin tenernos, es el primero, no es el último, despertaremos, lo haremos.

Estamos cayendo, una y otra vez, pero es su abrazo el que nos atrapa, el suelo no está hecho para nosotros como lo está él, el suelo no nos recibe con música como lo hace él, el suelo no es, como lo es él. - ¿Éxtasis es como lo llama? ¿Ese es el nombre? Nosotros lo llamamos Epoch, Epoch ojos de tierra húmeda, Epoch lleno de trampas para nosotros, Epoch piel hipnotizante, sólo Epoch… - tal como nosotros éramos sólo dolor, manía y por sobre todo locura, el aroma nos indica que es tiempo de partir, no conocemos el camino. Somos ciegas y él, es nuestro lazarillo.

por **Epoch** Lun Sep 13, 2010 1:47 pm

Ligeramente, entre arrumacos, caricias y besos (instantes eternos) la niña se fue quedando dormida. Aun en sus sueños traía mi nombre entre sus labios. ¡Con que naturalidad nos habiamos amado! Con que simples gestos adquirió el mundo un sentido. Lejos estaban el mundo y sus tribulaciones mientras que aquí entre sus brazos, al compás de sus respiraciones tranquilo, nuevas estrellas giraban para estos nuevos ojos con los que comenzaba a ver.

Permanecí un par de horas inmóvil, contemplando su sueño hasta que escuché de nuevo a los caballos inquietos. Habían pasado toda la tarde corriendo, y aun lo les había alimentado. Eran criaturas fuertes y resistentes, mas eso no justificaba mi olvido. Con cuidado me moví para no despertarle y salí de nuevo al aire de la madrugada. En verdad parecían nuevos mis ojos pues todo lo miraban de una forma distinta.

Subí al techo del remolque para desatar el forraje de heno. La noche era límpida, mas las corrientes de viento delataban que en no mas de una hora el sol comenzaría a desgarrar el manto de la noche desde el profundo horizonte. Dispuse el alimento a los caballos y eso me hizo reflexionar en mi propia naturaleza. (*Volvió al remolque donde Folie dormia aún y se quedó mirandole embelezado) durante el día y la noche que habían pasado juntos no había sentido hambre, pero tarde o temprano tendría que salir a cazar. En algún momento tendría que revelarle a su nuevo amor su verdadera naturaleza.

¿o no?

"How I wish that I could break into your dreams. Do I have the force I need to break into your dreams? . I hold you in my arms dimmed by scarlet morning red. I whisper in your ear...
Do you dream of me? "

por Contenido patrocinado

Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}

Re: Mi intención una bala, tu cuerpo el dedo que aprieta el gatillo {Epoch}