Victorian Vampires
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) 2WJvCGs


Unirse al foro, es rápido y fácil

Victorian Vampires
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) 2WJvCGs
PARÍS, FRANCIA
AÑO 1842

Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.

Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.

¿Estás dispuesto a regresar más doscientos años atrás?



NIGEL QUARTERMANE

ADMINISTRADOR

ENVIAR MP
NICOLÁS D' LENFENT

ADMINISTRADOR

ENVIAR MP
ESTACIÓN


Espacios libres: 11/40
Afiliaciones élite: ABIERTAS
Última limpieza: 1/04/24


COPYRIGHT/CRÉDITOS

En Victorian Vampires valoramos la creatividad, es por eso que pedimos respeto por el trabajo ajeno. Todas las imágenes, códigos y textos que pueden apreciarse en el foro han sido exclusivamente editados y creados para utilizarse únicamente en el mismo. Si se llegase a sorprender a una persona, foro, o sitio web, haciendo uso del contenido total o parcial, y sobre todo, sin el permiso de la administración de este foro, nos veremos obligados a reportarlo a las autoridades correspondientes, entre ellas Foro Activo, para que tome cartas en el asunto e impedir el robo de ideas originales, ya que creemos que es una falta de respeto el hacer uso de material ajeno sin haber tenido una previa autorización para ello. Por favor, no plagies, no robes diseños o códigos originales, respeta a los demás.

Así mismo, también exigimos respeto por las creaciones de todos nuestros usuarios, ya sean gráficos, códigos o textos. No robes ideas que les pertenecen a otros, se original. En este foro castigamos el plagio con el baneo definitivo.

Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos autores y han sido utilizadas y editadas sin fines de lucro. Agradecimientos especiales a: rainris, sambriggs, laesmeralda, viona, evenderthlies, eveferther, sweedies, silent order, lady morgana, iberian Black arts, dezzan, black dante, valentinakallias, admiralj, joelht74, dg2001, saraqrel, gin7ginb, anettfrozen, zemotion, lithiumpicnic, iscarlet, hellwoman, wagner, mjranum-stock, liam-stock, stardust Paramount Pictures, y muy especialmente a Source Code por sus códigos facilitados.

Licencia de Creative Commons
Victorian Vampires by Nigel Quartermane is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://victorianvampires.foroes.org


Últimos temas
» Savage Garden RPG [Afiliación Élite]
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMMiér Sep 18, 2024 9:16 am por Afiliaciones

» REACTIVACIÓN DE PERSONAJES
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMMar Jul 30, 2024 4:58 am por Frederick Truffaut

» AVISO #49: SITUACIÓN ACTUAL DE VICTORIAN VAMPIRES
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMMiér Jul 24, 2024 2:54 pm por Nigel Quartermane

» Ah, mi vieja amiga la autodestrucción [Búsqueda activa]
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMJue Jul 18, 2024 4:42 am por León Salazar

» Vampirto ¿estás ahí? // Sokolović Rosenthal (priv)
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMMiér Jul 10, 2024 1:09 pm por Jagger B. De Boer

» l'enlèvement de perséphone ─ n.
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMSáb Jul 06, 2024 11:12 pm por Vivianne Delacour

» orphée et eurydice ― j.
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMJue Jul 04, 2024 10:55 pm por Vivianne Delacour

» Le Château des Rêves Noirs [Privado]
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMJue Jul 04, 2024 10:42 pm por Willem Fokke

» labyrinth ─ chronologies.
La sangre, el karma (Razvan Kournikov) NXLYMSáb Jun 22, 2024 10:04 pm por Vivianne Delacour


<

La sangre, el karma (Razvan Kournikov)

2 participantes

Ir abajo

La sangre, el karma (Razvan Kournikov) Empty La sangre, el karma (Razvan Kournikov)

Mensaje por Victoria M. Austerlitz Dom Nov 30, 2014 5:22 pm

"Y aquí estoy escuchando al viento silbar,
llevándose los pétalos que desprevenidos se soltaron"


“¿Eres idiota o te haces la idiota?” esa mañana al despertar sola, esa frase de Rylan vino a su mente como si fuera la luz que aparece al abrir los ojos cada mañana, esos mismos ojos que ella ya no tenía, que ya no vivía. Recordó entonces las negras mañanas de sol cuando era niña, es decir ayer, es decir hace siglos. Sintió que lo poco que hablaba, era como el idioma de los niños en los parques, la dulce mezcla de sus gritos y la ausencia de sus risas cuando la diversión termina. Estaba erosionada a pesar que las cicatrices ya habían desaparecido al igual que el escozor de sus párpados. Continuaba con marcas como las que le había dejado la plata en los tobillos y muñecas pero la mayoría no eran visibles. Estaba perdida, lacerada, confundida, enmudecida y oprimida en medio de la extraña libertad que le otorgaba el gitano que la encontrara hace ya unos meses tendida y casi desnuda sobre la playa.

La alemana ya era inercia y no impulso, no le quedaban ganas de sugerir nada a su salvador tirano porque la última vez que lo hizo, él la llamo “idiota” y en medio del regaño que acompañó la frase, supo lo que realmente ocultaba o quería. Pero ella creía que no era así, que su idea de permanecer en su forma animal era la mejor para terminar olvidando un día que podía ser humana, que podía tener ganas de llorar pero que tenía prohibido hacerlo, que tenía un don al que maldecía porque su memoria fotográfica no le serviría de nada sin ojos. Ella era como una muñeca de trapo, arrastrada por un gitano que la enseñaba a hurtar en forma de ave, a callar cualquier idea que le cruzara la mente o cualquier sentimiento que de nuevo le atravesara el alma. En resumen, estaba dominada y difícilmente volvería a sentir otra cosa.

Se levantó con calma de en medio de los cojines, se vistió como pudo con sus ropas gitanas por más que no hiciera parte de ese clan y salió descalza de la carpa, con los ojos cerrados y el cabello cayéndole bajo las cejas. Aguzó el oído y avanzó despacio hacia el lado opuesto del río, hacia la salida del campamento y buscando una especie de alas que le permitieran volar para rescatarse a sí misma del hoyo negro en el que había caído. Quizás Rylan, el gitano, no era tan malo, pensaba a medida que se iba, puesto que él la domesticaba para esquivar las balas, la hería hasta demostrarle que su suerte no era tan mala y era como las astillas que se le clavaban en las encías y le enseñaban a hablar sólo cuando era necesario ¿Acaso eso no podría salvarle de nuevo la vida?

Avanzó pegada a las paredes en cuanto se supo en las calles de París, con las manos palpando todo lo posible en una caricia calma que pretendía reconocerlo todo, deteniéndose a escuchar antes de atravesar las calles y sintiendo los susurros de aquellos que critican cuando observan algo raro que saben que no encaja, que no pertenece allí o a ninguna parte. Olió la humedad y el aroma rancio de una calle cercana. Olía a licor, a orina penetrando las paredes. Olía a sangre, a óxido y gritaba de ese modo un “Escapa”. No debía correr, no podía hacerlo, pero sí podía desviar los pasos. Tomó aire, mantuvo el silencio y pretendió avanzar en sentido contrario hasta que unas manos la sujetaron con fuerza.
—No debí salir así, perdón— dijo de inmediato, creyendo sin motivo que aquél que la agarraba de ese modo era Rylan y que estaba enojado por su modo de partir ¿Vendría entonces algún castigo? Probablemente, aunque el dueño de aquella fuerza no fuera el gitano que ella esperaba.
Victoria M. Austerlitz
Victoria M. Austerlitz
Cambiante Clase Media
Cambiante Clase Media

Mensajes : 79
Fecha de inscripción : 09/04/2014

Volver arriba Ir abajo

La sangre, el karma (Razvan Kournikov) Empty Re: La sangre, el karma (Razvan Kournikov)

Mensaje por Razvan Kournikov Vie Dic 05, 2014 1:37 am

Habían pasado dos siglos desde que Razvan perdiese su humanidad al salir borracho de una taberna en Rumanía. Recordaba su despertar con lujo de detalle. El infierno instalado en su garganta, la fuerza inhumana, los olores, los sonidos y las voces. Ellos, sus hermanos, habían llegado junto con la maldición para condenarlo. Dracul había sido el primero y él, había intentado ignorarlo desde un comienzo. En Transilvania, no existía ni una sola alma que no hubiese escuchado historias sobre los bebedores de sangre. Los padres, usaban aquéllos cuentos para infundir el miedo en sus pequeños. Razvan, también había sido uno de ellos. Excepto que cuando creció, dejó atrás su fascinación por esos monstruos. Un gruñido vibró en su mente, tan sonoro que borró la sonrisa que se había estirado en sus comisuras. Aunque los cuatro sonaban exactamente igual, habían aprendido a diferenciarse los unos de los otros. Cada uno había elegido su nombre por sí solo, sintiendo esa estúpida necesidad de saberse únicos. ¿Qué tan retorcida y jodida se había convertido su existencia que tenía que luchar consigo mismo cada maldito día? “Joder, eso es lo que necesitamos.” Arañó una de las voces en su cráneo. El inquisidor no se dejaba engañar por la falta de interés de sus compañeros. Eso solo significaba que Dracul y Tudor habían llegado a un acuerdo y que esperaban el momento adecuado para tomar el mando. Tenía que andarse con cuidado. A ellos no les importaba mantener el puesto como líder de los condenados. No estaban de acuerdo con las misiones impuestas por su alto mando, puesto que afirmaban que podían jugar al cazador sin rendir cuentas. Aunque muchas veces había intentado conversar con ellos sobre las ventajas de formar parte de la Santa Inquisición, la arrogancia de éstos le sublevaba. Dracul seguiría bebiendo de inocentes, Tudor experimentando y arrancando partes de los cuerpos de sus víctimas y Bogdan, jugando con las mentes de quienes se cruzaran cuando apareciese. “¿Y tú qué, Razvan? ¿Piensas seguir fingiendo que no te excitas y que no nos envidias mientras hacemos todas esas cosas?” Sarcasmo destilaban aquéllas palabras que terminaron siendo acompañadas por una fuerte carcajada.

Apretó su mandíbula con fuerza. No iba a responder a ello. Bogdan tenía la teoría de que ellos, solo eran el producto de los placeres que había intentado reprimir cuando se dio cuenta de lo que era. El deseo por la sangre, la curiosidad por la muerte, la envidia por el poder. “Saca nuestro trasero de esta taberna. No hace más que ponerte patético.” El cazador apuró su trago mientras se levantaba, pero no porque Dracul se lo ordenara, sino porque su objetivo salía en esos momentos. Por supuesto, ellos tenían otros planes. Caminaba por una de las calles de París, cuando los escuchó discutir. Intentar ignorarlos, se volvía difícil a cada paso. ¡Maldita sea! ¿No podían ser más inoportunos? “Sí.” “¿Lo somos?” Klaus se había perdido en uno de los callejones. El olor de otros sobrenaturales llegaron a sus fosas nasales como si de una droga se tratase. Él, quería ir tras el vampiro; mientras que Dracul, por el cambiante. Había algo en ese olor que le atraía, pero ¿qué no lo hacía? Cuando se trataba de beber sangre y follar, todo lo que importaba era que su víctima cumpliese con el único requisito que importaba: ser hembra. “Me gusta pensar que soy más selectivo, cazador.” Dijo éste, luchando por el control. “Tudor y yo queremos jugar esta noche y ser la mascota de los inquisidores no forma parte de nuestros planes.” El cirujano, excitado por la promesa de conseguir un nuevo trofeo para su habitación, también luchó. Cuando sus manos se cerraron sobre los antebrazos de la cambiante, no era más Razvan. Ella había golpeado contra su pecho al intentar dar la vuelta. – ¿No debiste? – Refutó Dracul en una burla. Su lengua golpeaba sus incisivos, como si los estimulara, pero no fue hasta que su mirada se clavó en los ajenos que comprendió su situación. – Pero ahora ya no estás sola, chérie. Nunca más. – Su aliento cayó sobre los labios ajenos, mientras con sus dedos le obligaba a levantar la barbilla. “Mía,” esa fue la palabra que esperaba. A Tudor le gustaba adueñarse de ciertas personas, aquéllas que consideraba especiales. – Siempre tan buen samaritano, hermano. – No se molestó en hablar en voz baja. Jamás lo hacía. Después de todo, sus víctimas siempre desaparecían.
Razvan Kournikov
Razvan Kournikov
Condenado/Vampiro/Clase Alta
Condenado/Vampiro/Clase Alta

Mensajes : 86
Fecha de inscripción : 02/01/2012

DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:

Volver arriba Ir abajo

La sangre, el karma (Razvan Kournikov) Empty Re: La sangre, el karma (Razvan Kournikov)

Mensaje por Victoria M. Austerlitz Sáb Dic 20, 2014 7:28 pm

“Tranquila, lo malo ya ha pasado. Y lo peor está por venir”

En algún momento su mundo se puso frío, y el viento seco le quemó desde los huesos hasta la vista, hasta la vida. Pero su ceguera había empezado antes de perder los ojos con esos amaneceres naranja incluidos y con ese modo ingenuo y suicida con el que veía la vida. Había empezado cuando cambio de forma como si fuera tan natural como cambiarse de zapatos. Había empeorado cuando no se detuvo a pensar en la malicia de ojos ajenos que la observaban tras la hierba con la que adobarían la carne de los que serían sus muertos.

Salir del campamento gitano era en resumen marcharse sola para insultarse en público, para que cada una de las personalidades con las que se cruzara, la miraran como dibujos sin trazos de alguien que no sabe hacer nada. Era como obligarse a masticar lápices hechos con la fuerza perdida y cuyas minas se introducirían en sus ojos cuando intentara mirar sin éxito hacia otro lado, hacia otro rumbo. Era también colgarse inocente por querer abrir las alas y no calcular el espacio en el que podía moverse. Era estar perdida, sin encontrarse de nuevo.

Ya no podía revalorizarse cuando le habían saltado escorpiones en la boca y se le habían tragado la lengua, las palabras, las quejas. Caminaba a ciegas buscando demostrarle al gitano y a ella misma, que sí se podía, que había perdido los ojos pero no las manos que la guiaban al tacto, ni los pies que aunque torpes avanzaban y aunque tropezaban, se reponían.

El choque en la calle no había sido para Rylan, sino para un desconocido que no parecía querer soltarla. El tono burlón en él le erizó la piel y supo que debía mentir. Pero ¿Cómo? La bondad en el sujeto incorrecto es una mera estúpida, una trampa en la que se cae y de la que no se puede salir a menos que se construya una escalera hecha de solas mentiras. Sus labios rozaron el aliento de la muerte y la frialdad del mismo le reveló lo que sus ojos no podían: Era de noche y quien la sujetaba, un vampiro. Los recuerdos se le agolparon en la mente y se supo incapaz de responder de algún modo creíble. Ella no veía las auras, no parecía gitana pero vestía como una, caminaba descalza y desaliñada y para esas alturas él ya debía notar que ella era ciega. Y no sólo ciega, sino desgraciada. Por eso no podía mentir sobre su propio paradero o desvío, tenía que mencionar a otro.

En su mente el recuerdo era el agujero, lo demás eran sólo balas que a la larga le iban quemando partes de su propia personalidad. Y bastantes disparos tenía ella en la cabeza, como para encima ir tropezando con el arma. Monicke era un seguro de muerte que sabía que debía pagar sin saber las clausulas. Era de esos que atraen el mal y que aprenden a vivir con él mientras se pierden a sí mismos. Como su familia. Como sus ojos. Tomó una bocanada de aire e intentó desviar el rostro, usando la suficiente fuerza como para obligar a que el cabello le cubriera la zona de los ojos
—Mi amo fue a tomar algo. Vendrá a buscarme pronto, luego de rendir cuentas en la iglesia— mintió sabiéndose una especie de esclava pero que jamás sería buscada. Incluyó en su versión a su peor enemigo como si ponerse del lado contrario pudiese salvarla de lo que no sabía. Se intentó creer su historia hasta que de la misma voz y de la única presencia que se sentía allí, surgió un diálogo consigo mismo que la hizo pensar que algo marchaba aún más mal —No estoy sola. Espero a alguien, alguien muy viejo—agregó a la mentira como si su propio amo mental fuese algún otro vampiro. Su cerebro entró en caos, jamás se había cruzado a un vampiro, pero sí sabía que alguien podía ser tan cruel como un inquisidor. Ese mismo, era un ser inmortal, como ese que ahora se hablaba a sí mismo y que la sujetaba todavía con fuerza.
Victoria M. Austerlitz
Victoria M. Austerlitz
Cambiante Clase Media
Cambiante Clase Media

Mensajes : 79
Fecha de inscripción : 09/04/2014

Volver arriba Ir abajo

La sangre, el karma (Razvan Kournikov) Empty Re: La sangre, el karma (Razvan Kournikov)

Mensaje por Razvan Kournikov Lun Mar 09, 2015 10:03 pm

La sonrisa que estiró las comisuras del condenado no solo escondía promesas, sino también turbios secretos. Sus uñas, largas y afiladas, acariciaron la mejilla de la fémina, apartando los mechones del cabello que ocultaban la imperfección de su mirada. Con el dedo índice rodeó el borde de uno de sus ojos. Estaba tan malditamente tentado de arrancarlo de la cuenca, que su mano temblaba ante la excitación que lo embriagaba. “Cógelo.” La voz de Tudor, el hermano que coleccionaba toda clase de órganos en una habitación en el castillo de Pierrefonds, suplicó. Por un segundo, Dracul jugó con la idea de simplemente extirparlo, pues nada le gustaba más, que provocar conflicto entre él y sus camaradas. “Cógelo.” El gemido, que terminó siendo acompañado de un sonoro gruñido; lejos de hacerle retroceder, le hizo carcajearse con arrogancia. – No. – Su mano descendió, siguiendo el contorno de su barbilla. La cogió con fuerza al llegar al cuello, disfrutando de la fragilidad de la hembra. Saberse verdugo, le ponía, si fuera posible, más loco.  – Dile que no puede, que yo gané mi derecho para tenerte primero. – El vampiro le hablaba como si estuviese contándole un secreto, pero la burla impregnada en el tono, no desmentía que era una amenaza. Ante la evidente falta de respuesta, su ira fue en aumento. No parecía importarle que no pudiese obtenerla porque obstruía las cuerdas vocales con su agarre. – Dile, ¡demonios! – A pesar de que los suyos no podían tener dolores de cabeza, ellos eran la excepción a la regla. Constantemente, se golpeaban en la desesperada búsqueda de grietas para hacerse con el control del cuerpo. La soltó al oír que alguien se acercaba. – ¡Maldita sea! – Blasfemó, acariciando inconscientemente las marcas que había dejado en la piel de la cambiante. Éstas, no tardarían en desaparecer. – ¿Será tu amo? – De pronto, estaba muy interesado porque lo fuera.

– Quizás pueda reconocerlo. Si es tan viejo como presumes y pertenece a la Iglesia, sin duda es de los míos. Mi perro, es el líder de ellos.  Nos divertiremos. – ‘¡Basta!’ ‘Ya sabes que no obedezco tus órdenes, pero eso quieres, que el juego empiece.’ ‘¿Quién utiliza a quién?’ Apretó los hombros de la mujer, obligándole a retroceder. La espalda golpeó contra la pared al mismo instante en que sus colmillos se alargaban, mismos que segregaban de excitación por la sangre caliente. Su miembro se había endurecido, siguiendo sus pasos. Le cogió una mano para obligarle a tocarlo. – Espera aquí, iré a comprobar quién es. – Se alejó, aunque no por las razones dadas y, no sin antes tragar una pequeña cantidad de su sangre. Fue tan malditamente rápido, que incluso si ella hubiese podido, no lo habría visto. Era, después de todo, la parte de ellos que disfrutaba clavando sus colmillos. Sin embargo, conforme se acercaba a su presa, perdió el control. La mirada desenfrenada, dejaba en claro que quien se encontraba al mando era el cirujano. En su mente, una lucha encarnizada se daba por el poder. Si no podían controlar a Tudor por esa zona de París, pasarían el resto de la jodida noche limpiando su rastro. Por suerte para ellos, éste regresó sobre sus pasos. Estuvo tras la espalda de la hembra en un santiamén. Por la manera en que se movía y actuaba, cualquiera podría decir que no se trataba del mismo vampiro. Solo el sonido de su voz, coincidía. – ¿Uno o dos? – Tarareó, consultándolo con nadie, sino consigo mismo. Las uñas de sus dedos índices se clavaron en los ojos inservibles de la cambiante, hundiéndose miserable y lentamente en ellos. Estaba seguro que, de seguir así, los sacaría limpiamente. – ¿Izquierdo o derecho? – La quería, aunque de manera diferente a Dracul. Mientras al otro le gustaba el sexo, a él le ponía remover órganos de los cuerpos. – Tal vez ambos. – Murmuró, consciente de que el intruso se había marchado y estaban de nuevo solos en ese callejón desierto.
Razvan Kournikov
Razvan Kournikov
Condenado/Vampiro/Clase Alta
Condenado/Vampiro/Clase Alta

Mensajes : 86
Fecha de inscripción : 02/01/2012

DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:

Volver arriba Ir abajo

La sangre, el karma (Razvan Kournikov) Empty Re: La sangre, el karma (Razvan Kournikov)

Mensaje por Victoria M. Austerlitz Dom Mar 15, 2015 10:32 pm

“Su misión es someterme.
Hacerme partícipe de una invierno que no he pedido,
creerme devota de un verano que no me agrada.”

El filo de la muerte le recorrió la mejilla en forma de uñas inmortales. Se estremeció su cuerpo, se le heló la vida. El terror le trazó un camino alrededor de las cuencas de sus ojos y supo que tomar aire sería tan inútil como pretender escapar. Era todo.

¿No? ¿No qué? Lo que decía él era en su mayoría incomprensible; pero no era necesario entender nada cuando había caído en una trampa para suicidas que se sienten aventureros. La mano helada descendió y tomó su cuello, robándole el aire, otorgándole dolor al cerrarse en torno al mismo y arrebatándole las palabras que le pedía en una clara forma de ironía. Pero tampoco podía responder mucho, porque ¿A quién le hablaría de ese supuesto derecho de tenerle primero? El “No” que le exigía, lo gritaría ella por otro motivo, uno que sí comprendía y que se llamaba vida. Si es que en algún momento podía gritar. Sin embargo debía intentarlo y sus manos delgadas se cerraron en torno a la mano fría e inmisericorde del vampiro. Pero ¿Qué pueden hacer unas manos delgadas contra las fauces de un depredador? Nada.

Unos pasos no tan lejanos resonaron en los charcos que había dejado la lluvia de hace un par de horas y la presa en su cuello se redujo, dejando tras de sí una caricia inútil y burlona que sólo anticipó un ataque de tos de la cambiante que le impidió si quiera gritar por auxilio.

Intentó alejarse, caminar a tientas literalmente sin saber lo que había del otro lado. Era supervivencia y si alguien servía de distracción debía aprovecharlo. Aunque no sabría decir que tenía motivo alguno para conservar su vida y por eso ni siquiera gritó cuando él la retrocedió por los hombros con fuerza, aunque se moría de miedo porque presentía que se le moriría la vida. Y aún no hablaba, porque el temor le quitaba la capacidad de justificar sus mentiras. El choque con la pared le robó un dolorido jadeo y peor aún fue cuando le tomó la mano y la obligó a tocar un miembro firme bajo la tela de los pantalones. Los recuerdos se agolparon de nuevo, las múltiples violaciones a bordo del barco que la llevó a Francia resurgieron pronto de su mente y casi las sintió en el cuerpo. Esa noche era el peor deja vu de todos, el tema de sus ojos, de estar sola con un maldito y de presentir una violación de la cual no estaba segura de salir con vida. Y sólo eso le robó las palabras, más allá de quien llegaba, que en su pesimismo difícilmente la salvaría. “Que no sea Rylan” sólo eso quería. Comparado con el peso de los recuerdos, la mordida no significó nada.


—Abusarás de mí y no tengo como impedirle a un inmortal que lo haga. Eres un inquisidor corrupto como muchos y ni siquiera el amo del que te hablo te detendría en caso de ser menor que tú en edad o rango. Lo que has de hacer, hazlo pronto y déjame partir aunque tus marcas me recuerden que existes— le dijo cuando escuchó sus pasos alejarse, cuando supo que le daba la espalda pero que no iría lejos ¿Tendría sentido huir? Quizás no, pero su cuerpo se arrastró pegado a la pared y aún descalzo, dando un par de pasos en sentido contrario al suyo y pretendiendo que quien fuera que se acercara lo distrajera. Pero Monicke vivía a duras penas y ni energía tenía para correr o cambiar. Esos huesos suyos no le servían ni en verano y pronto se desmoronarían como la casa hecha de cartas burlonas del destino que representaba su vida misma.

¿Uno o dos? ¿Qué significaba eso? Prácticamente no alcanzó a moverse cuando ya lo tuvo de frente y sintió los dedos sobre sus ojos inútiles y quemados. Alzó los párpados como quien quiere ver, aunque en realidad era un intento inútil de nada que apenas le salvaría los parpados para no lucir como el horror que pronto sería. Gritó, claro que lo hizo, aunque pretendió enmudecerse para no alimentar el morbo del seguro asesino. Sus manos intentaron salvarla, los pasos de quien se acercaba antes ya no se oían. Estaban solos y ella, había perdido completamente sus ojos.


—No alargues mi muerte…— suplicó entre el llanto mezcla de lágrimas y sangre y se dejó caer sobre las rodillas —Que ese Dios al que mencionan en vano sirva para que elimines de la tierra mi rastro. Más temprano que tarde— agregó como si fuera una plegaria, con la diferencia que tenía frente a sí al mismo infierno.
Victoria M. Austerlitz
Victoria M. Austerlitz
Cambiante Clase Media
Cambiante Clase Media

Mensajes : 79
Fecha de inscripción : 09/04/2014

Volver arriba Ir abajo

La sangre, el karma (Razvan Kournikov) Empty Re: La sangre, el karma (Razvan Kournikov)

Mensaje por Contenido patrocinado


Contenido patrocinado


Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.