First date (Golnar)

por **Mirko Lautrec** Miér Mayo 04, 2016 9:49 pm

Recuerdo del primer mensaje :

First date

Pasaron dos días como en el batir de las alas de un pájaro. Habían sido días extremadamente agitados en el restaurante gracias al nuevo buque con marineros que había tocado puerto esa semana, al parecer el restaurante se había vuelto popular en el gremio y los marineros lo recomendaban a otros, por lo que la clientela había aumentado tanto que había escuchado al jefe decir que pensaba ampliar el restaurante y comprar el local vacío continuo para hacer la cocina más grande.

Mirko también esperaba que esto significara un aumento de sueldo. Con más clientela significaba que debían trabajar más arduamente y últimamente les había tocado trabajar horas extras a todos por igual. De cualquier manera ese domingo que tenía libre, iba por fin relajarse y dejar de lado todos los apuros de su vida laboral. Muy temprano en la mañana había salido al mercado y había comprado los ingredientes necesarios para lo que tenía planeado y los había empacado en una canasta luego de preparar los aperitivos.

El invierno estaba muriendo conforme la primavera lentamente se daba paso en el mundo y la nieve había desaparecido por completo, Era una mañana soleada, un tímido sol de primavera que parecía haber despertado de un letargo durante todo el invierno y suavemente bañaba la tierra con una tibieza delicada. Sin embargo aún hacía frío y era necesario usar abrigo, por lo que Mirko se vistió con pantalones camisa, chaleco y un abrigo de lana. Había quedado de arribar a las 10 de la mañana en la casa de Golnar y estaba empecinado a no llegar tarde como la última vez, había organizado todo meticulosamente en la mañana y había tomado el carruaje con anticipación.

La casa de Golnar quedaba bastante lejos de la suya y tardaría casi una hora si hubiese ido a pie. En carruaje llevó en un poco más de media hora. Le pidió al cochero que esperara y se bajó del carruaje dejando la canasta en el asiento. Tocó la puerta de madera y se quitó el sombrero mientras esperaba a Golnar.

Pocas veces se había sentido tan nervioso en toda su vida.

por **Mirko Lautrec** Vie Jun 17, 2016 1:43 am

Se sintió desmesuradamente aliviado al escuchar la respuesta de Golnar, estaba acostumbrado a que la gente reaccionara de manera muy negativa a su falta de fé, sólo en ambitos universitarios junto con otros colegas que se dedicaban al a investigación de las mismas áreas que él se encontraba a gusto y libre de expresar sus ideas.

- Es un alivio saber eso - Comentó con voz entusiasmada y continuó comiendo, luego cuando ella le preguntó se sintió emocionado para responder esa pregunta, nunca habían hablado de ello y normalmente el no tenía la oportunidad de hablar de sus estudios con nadie más aparte de los profesores o colegas en la Universidad.

- Son varias ramas las que me interesan - Comenzó con entusiasmo - En la Universidad he estudiado Física y Química principalmente, pero también me he interesado por la Herbología - Le explicó y terminó con el pedazo de pastel que se había servido - Me interesa como utilizar las diferentes hierbas y plantas para tratar enfermedades, me interesa saber sobre el comportamiento de las bacterias, como es que se transportan en el aire o en la sangre, no es que quiera ser doctor directamente... es decir, no me imagino trabajando en un hospital, sino más bien en la parte de la investigación de la medicina -

Eran muchas las áreas que le interesaban y a veces se sentía frustrado por querer abarcar muchas cosas al mismo tiempo y no poder hacerlo por falta de tiempo.

- Mi trabajo como cocinero me ayuda a poder pagar la renta de la casa y vivir aquí, pero lo que realmente quiero en el futuro es trabajar en investigación -

por **Golnar Richelieu** Dom Jun 19, 2016 4:19 am

Escuchó sus intereses, sus gustos sobre la ciencia. Ella no es que supiera demasiado sobre aquel tema pero lo intentaba. Sí, sabía algo de herbología pero principalmente por Joële. Y no es que supiera una gran cantidad de plantas y recursos, todo lo contrario, conocería como mucho un par de ellas.

Le sonrió al escucharle decir que no quería ser médico. Además, ella no se imaginaba al joven en un hospital de mala muerte tratando con gente que realmente estaba muy enferma. Ser médico era un trabajo duro, tenías que lidiar con la muerte todos los días y más de una vez…

─Así que lo que quieres es ayudar a la gente con tus descubrimientos. ¿Estás trabajando ahora en algo en concreto?─ le interesaba lo que Mirko hacía, quería conocer más sobre el tema y no dudaría en preguntar lo que fuera. Seguro que él estaría encantado de enseñarle─. ¿Dejarías tu trabajo para dedicarte plenamente a investigar?

Si él tenía una meta en aquella vida, había que ponérselo fácil para cumplirla y Golnar estaba decidida a ayudarle. No podía permitir que trabajase tanto y después le quedase un par de horas para poder centrarse en lo que realmente le gustaba, aunque parecía que la cocina también era una de sus pasiones. El caso era que ver un sueño que no se estaba llevando acabo aún, le resultaba algo doloroso. Los sueños estaban para cumplirse, no para dejarlos abandonados hasta que hubiera una buena oportunidad. La vida era corta y no se podían permitir malgastarla.

por **Mirko Lautrec** Dom Jun 19, 2016 10:29 pm

La pregunta sobre lo que estaba estudiando en concreto le hizo dudar por unos segundos en si debería responder. ¿Sería capaz Golnar de comprender la belleza en su investigación o lo tacharía de depravado y blasfemo?. La miró en silencio mientras terminaba de masticar nunca le había mostrado su laboratorio en el sótano, de hecho nadie lo conocía, era tampoco un gran laboratorio lleno de aparatos de alta tecnología, el no tenía el dinero para comprar cosas tan costosas, pero era un sitio en el que había realizado experimentos que ante los ojos de la real academia de la ciencia estaban prohibidos.

- Quizás... en un futuro - Murmuró evitando la primera pregunta, no sabía hasta cuando trabajaría en el restaurante y era cierto que le quitaba mucho tiempo de su día por lo que sólo podía dedicarse a sus investigaciones en la noche y esto sólo lograba agotarlo hasta el punto de lucir siempre demacrado y con sendas ojeras bajo los ojos. ¿Pero debía compartirle todo eso a Golnar ahora que eran pareja?.

Aún le costaba imaginar que eran pareja, le había pedido salir en una cita, pero la verdad era que no tenía idea de hacía donde iban, el sólo estaba siguiendo los pasos protocolarios que un hombre se suponía debía seguir a la hora de cortejar una mujer. ¿Se sentía culpable por haberla besado estando ebrio? Quizás había parte de eso en la razón por la cual la había invitado a salir.

- No quiero hablar de mi trabajo- Mintió desviando la mirada, de repente tenía miedo de hablar de sus experimentos con la muerte, de permitir a Golnar conocer esa oscura parte de su vida. ¿Y si se asustaba y decidía salir de su vida?. Bebió un poco de agua del cuenco y se dio cuenta de que ya no tenía hambre. - Hoy es un día paras relajarnos y disfrutar ¿no? - Notó que Golnar también estaba terminando de comer - ¿Quieres dar un paseo? -

por **Golnar Richelieu** Lun Jun 20, 2016 8:55 am

No contestó a su primera pregunta. Al principio le pareció normal, quizá no deseaba que nadie se enterase de su investigación, quizá no quería que alguien comenzase la misma investigación. Pero Golnar no sabía qué hacía y ni se le pasaría por la cabeza, robarle las investigaciones a Mirko, no era de lo más inteligente. Entonces, ¿por qué no le había respondido?

Su comentario no hizo más que desconcertarla. Al preguntar por qué parte de la ciencia se decantaba, había parecido muy ilusionado de poder compartir esa parte con ella pero ahora… todo había cambiado. No entendía qué podía haber dicho mal para que se comportase de esa manera. Quizá la pregunta de dejar la cocina había hecho que sus pensamientos se alejasen a un lugar más sombrío. No podía comprenderlo y lo seguiría sin entender. Siempre había creído que los hombres eran demasiado… sencillos. Todos los que había tenido el “placer” de conocer, no paraban de hablar de ellos mismos y todo lo que pensaba se reflejaba en su rostro, absolutamente todo. A ella no se le escapaba nada pero con él, parecía que ni se acercaba a lo que le pasaba por la mente.

Ahora no podía dejar de pensar en otra cosa. Ella le había contado todo. Desde el primer momento sabía a lo que se dedicaba, sabía qué hacía y le había contado más cosas sobre su penosa vida. No entendía por qué él no decidía abrirse también. Se suponía que se estaban conociendo más pero si Mirko no ponía de su parte aquello iba a ser de lo más complicado.

La excusa de que era un día para relajarse no la convenció en absoluto. ¿Se sentía enfadada por el simple hecho de que no le contase más sobre él? Era posible. Era evidente que el mundo de la ciencia era una parte muy importante en la vida de Mirko. ¿Qué era lo que le impedía contarle lo que hacía? Sí, era posible que estuviera un poco molesta por aquel hecho. Se levantó casi de inmediato cuando terminó la pregunta, alargándole el plato para que lo guardase de nuevo en la cesta. Nunca olvidaba los buenos modales a pesar de todo.

─Claro, un paseo. Suena bien

Estaba pensando de una manera infantil. Ella ya era una adulta, tenía que actuar como tal. ¿Por qué de repente esa actitud hacia un tema? Debía decir algo más para que no notara su molestia. Si él no quería contarle algo estaba en su derecho de no hacerlo pero no podía evitar pensar en lo que le estaba ocultando. La curiosidad era una de su gran debilidad y no sería la primera vez que la llevaba a situaciones malas.

─Siempre he querido perderme, ¿sabes?─ le dijo intentando cambiar de tema─. Ir a un sitio que no conozco y, simplemente, perderme. Descubrir lo que no descubriría si tuviera un mapa. Evidentemente, acabaría regresando tarde o temprano pero tiene que ser interesante la incertidumbre de no saber hacia dónde ir… ¿Tú qué opinas?─ miró a Mirko poniendo la mejor sonrisa que sabía. Solía ser muy fácil mostrar lo que deseaba con su rostro aunque por dentro sintiera cosas opuestas.

por **Mirko Lautrec** Miér Jun 22, 2016 3:29 am

Golnar se puso de pie y se sorprendió un poco con el movimiento brusco, guardo los platos y los restos de lo que había sobrado en el canasto, inclusive el mantel sintiéndose algo incómodo con el silencio. Era consciente de que había cortado el flujo de la conversación y era probable que ella lo hubiese notado también. Se puso de pie cuando hubo terminado, frente a ellos tenían el riachuelo de quizás unos dos metros de largo, no parecía muy profundo, quizás no más de un metro y el agua era tan cristalina que se podían ver los peces nadando perezosamente en el fondo.

Al otro lado del riachuelo comenzaba el bosque, enormes sauces y abedules se alzaban frente a ellos, algunos aún completamente despojados de hojas, otros con los retoños verdes adornando sus ramas. No encontró ningún puente cercano para cruzar el riachuelo, así que buscó con la mirada alguna forma en la que pudieran cruzar.

- ¿Porqué no lo averiguamos? - Preguntó con expresión divertida señalando unas piedras que sobresalían sobre el pequeño rio - Vivamos nuestra pequeña aventura - Agregó indicándole que lo siguiera, las piedras se veían húmedas y musgo verde creía por sus costados, pero eran lo suficientemente grandes como para que una persona pudiera pararse sobre ellas - Podemos explorar el bosque - Exclamo con voz entusiasmada.

Dio un pequeño salto sobre una de las piedras y extendió las manos para mantener el equilibrio, quería asegurarse primero de que fuera seguro cruzar por ellas, cuando se dio cuenta de que las piedras podían sostener su peso, le indicó a Golnar con la mano extendida que le siguiera - ¡Vamos! -

por **Golnar Richelieu** Jue Jun 23, 2016 4:15 pm

No pensó que aquellas palabras se la tomase en serio pero así había sido. Él le propuso vivir una pequeña aventura, los dos juntos. Una sonrisa se formó en sus labios y el enfado que había sentido tan solo segundos atrás parecía haberse disipado por completo.

Le observó cruzar el pequeño riachuelo por unas piedras suficientemente fuertes para soportar el peso de una persona. Ya estaba casi por la mitad del riachuelo y ella seguía allí de pie, estática. No se podía creer que lo hubiese dicho en serio pero así era. Sacudió su cabeza para eliminar todos los malos pensamientos que le aseguraba que aquello podía salir mal.

Se puso en marcha y se acercó hasta la orilla del río. Nunca había hecho algo parecido. ¿Sería capaz de cruzar sin caerse? Supuso que sí. Alargó la mano y agarró la del joven, así se sentía más segura y si se caía, él lo haría también- o evitaría la caída… La mano de Mirko era cálida. Se notaba que había trabajado bastante con ellas pero aun así no las tenía tan maltratadas como otros las podían tener. A pesar de todo, encontraba cierta suavidad en ellas, seguridad y calma. Nunca pensó que un simple contacto pudiera transmitir todo aquello.

Con paso seguro, avanzaron por el riachuelo hasta la otra orilla. Llegaron sanos y salvo. Golnar sonrió aliviada pero emocionada por lo que habían hecho.

─ Qué divertido ─ le comentó echando un último vistazo a las piedras por las que habían pasado─. ¿No será un bosque muy profundo, no?─ se calló al segundo. No podía decir cosas como aquellas. Se encogió de hombros─. Lo mejor será averiguarlo. Voy a hacer algo que no es propio de damas…

Sin darle tiempo a pensar, comenzó a correr. Iba con un ritmo pausado, fácilmente alcanzable. Tampoco quería volverse loca aquel día pero siempre había querido correr sin que la mirasen mal por la calle y allí no había prejuicios algunos. Se detuvo cuando ya se hubo adentrado en el bosque y se quedó observando las plantas y los árboles, ahora sí que estaban en contacto con la naturaleza.

─Es tan diferente a pasear por la calle… Aquí nadie puede hacerte daño. Puedes gritar tu mayor secreto que este sitio lo guardará sin importar qué. Puedes hacer lo que te plazca que no serás juzgado, ¿tú qué opinas?─ miró al joven y le regaló una radiante sonrisa. Aunque lo cierto era que ella sabía que sí podía ser juzgada, en el momento en el que había una segunda persona, la sociedad se interponía en su camino. Pero no debía pensar así, solo eran dos personas que se habían escapado del mundano ruido de la calle para conocerse mejor y descubrir un poco más sus sentimientos.

por **Mirko Lautrec** Sáb Jun 25, 2016 5:13 am

Temió caer al rio gracias a su falta de agilidad, no era el tipo de hombre aventurero que había hecho cosas heroicas ni nada por el estilo, así que internamente deseaba con todas sus fuerzas poder ayudar a Golnar a cruzar el rio sin ningún problema. Respiró tranquilo cuando estuvieron del otro lado y se acomodó mejor el canasto en la espalda, con los nervios que había sentido saltando de piedra en piedra, no había notado la agradable sensación que le había producido tomarle de la mano. De repente fue consciente de ello y sintió por primera vez, que eran pareja.

Golnar había corrido de repente, diciendo que era algo que no hacían las damas. Mirko se apresuró a correr tras de ella notando lo fácil que le resultaba alcanzarla muy a pesar de que no tuviera un buen estado físico, mientras corría observó como el cabello de ella ondeaba al viento, completamente libre y salvaje, una melena roja que más bien parecía una antorcha encendida agitándose suavemente con las pisadas.

Cuando le alcanzó le escuchó decir que aquel era un sitio en donde podías hacer lo que quisieras sin ser juzgado, estaban lejos de los ojos de la sociedad, del prejuicio y de todas aquellas reglas y etiquetas que se imponían entre las personas. En un impulso que surgió sin previo aviso dentro de si mismo, la tomó por los hombros y la empujó hasta que ella quedó contra la corteza de un árbol. No había sido un empujón lo suficientemente fuerte como para que doliera, pero si resultaba bastante inesperada aquella rudeza de parte de alguien como Mirko.

Se inclinó y con la mano derecha alzó el mentón de ella, para depositar un beso en sus labios.

El beso fue suave al comienzo, menos casto que el primero que se habían dado noches atrás en la fiesta. En cierta forma ese beso se sentía más libre, como si de verdad ese bosque hubiese desatado algo en su interior.

por **Golnar Richelieu** Jue Jun 30, 2016 11:53 am

A penas notaba que Mirko se acercaba a ella. Le asustó levemente sentir sus manos sobre sus hombros y sobretodo aquel empujón que la llevó a chocarse contra un árbol. Aun así no sufrió daño, lo hizo con elegancia y cierto aire de dominación de la situación. No sabía lo que pretendía. Mirko no era de esos que iban haciendo algo así y menos a una dama. Quizá se había olvidado de todo los modales.

No fue capaz de mirarle a los ojos sin embargo, él levantó su cabeza y la besó. Se sorprendió ante aquel gesto, no se lo había esperado a pesar de estar en una situación que indicaba a aquel final. Golnar se quedó unos segundos paralizada, con los ojos abiertos y con la mente llena de preguntas.

No pasó mucho tiempo hasta que acabó rendida ante aquel beso. Cerró los ojos y se dejó llevar sin importar las dudas o cualquier otro contratiempo que pudiese surgir. Solo eran ellos dos en aquel bosque, ellos dos y nadie más. Había creído que el joven tardaría más tiempo en dar aquel paso pero pareció que la aventura había supuesto un cambio para él. Quizás habían sido sus palabras… No sabía qué había sido el desencadenante de aquello pero, internamente, le dio las gracias.

Había querido sentir sus labios de nuevo y por fin podía hacerlo. Alzó sus manos y rodeó el cuello del joven, atrayéndolo un poco más hacia ella. Estaba casi encarcelada entre el árbol y el cuerpo de Mirko pero le dio igual, ella no quería escapar. Puso lo mejor de sí misma en aquel beso, quería hacer que él tuviese más ganas de besarla y que lo hiciera siempre que quisiera.

Necesitaba que él quedara prendado de sus besos o de sus caricias, de cualquier pequeño roce. No quería dejarle escapar y se aseguraría de que no le fuese tan fácil desprenderse de ella. Sin pretenderlo, sus manos estaban recorriendo la espalda de Mirko sin descanso. Enredaba sus dedos en su pelo corto y era una sensación que le encantaba. No quería separarse de él pero también era consciente de que quería tomarse las cosas con más calma. Sin embargo, no veía la forma de parar, no quería. Así que siguió entregándose a aquel beso como si fuese el primero que había dado y como si fuera el último que daba en su vida.

por **Mirko Lautrec** Sáb Jul 02, 2016 4:13 am

Se perdió en el beso y se dio cuenta de que la sensación era tan envolvente que le costaba pensar. Se había dejado llevar por el momento y descubrió que no estaba tan mal dejarse llevar por los impulsos sin estar razonando cada uno de sus movimientos con tanta meticulosidad. Quizás era debido a su inseguridad, a su falta de experiencia en el campo amoroso, que pensaba dos y tres veces el mismo asunto.

Las manos de Golnar acariciando su espalda le hacía sentir escalofríos y le hacían desear besarla con más intensidad. Era la primera vez que sentía ese tipo de deseo dentro de su interior. Obviamente se había sentido atraído por otras mujeres antes, pero con Golnar estaba experimentando de primera mano lo que se sentía la exitación sexual a través de un beso. ¿Estaba bien sentirse así sólo con un beso?.

Se separó al fin para tomar aire y se quedó mirándola con las mejillas sonrojadas, de repente Golnar le parecía más atractiva. No se había fijado con detenimiento en la forma de sus ojos o en la redondez de sus mejillas.

- Valla... así que esto es lo que se siente un beso de verdad - Dijo en tono de broma - La última vez estaba demasiado ebrio como para haberlo disfrutado a cabalidad - Agregó, la experiencia era completamente diferente estando sobrio - Es cierto... este bosque es mágico - Agregó sintiéndose liberado, a pesar de seguir nervioso, el beso había de alguna forma aliviado un poco la tensión.

por **Golnar Richelieu** Mar Jul 12, 2016 8:33 am

Él se separó y ella intentó que no lo hiciera pero necesitaban respirar así que lo dejó ir. Tardó un poco en volver a abrir los ojos pero, cuando lo hizo, le regaló una sonrisa a Mirko. Le agradaba el hecho de que hubiera dado aquel paso, poco a poco se podía ir liberando de la espera. No quería asustar al joven desde el primer momento así que se tendría que morder la lengua y esperar hasta que él estuviera decidido a lo que quería y que estuviera seguro con lo que estaba sintiendo. Si él no estaba cómodo era imposible que pudiera disfrutar de todo aquello así que lo único que Golnar tenía que hacer era darle un poco más de seguridad en sí mismo.

─ Nunca des un beso que sea de mentira. No suelen ser demasiado buenos ─ le recomendó Golnar y le sonrió al escuchar sus siguientes palabras─. Eso me deja un poco tranquila, supongo. Aquel día estaba bastante nerviosa ─ tenía que confesarle aquello, así él no se sentiría tan estúpido por estar nervioso o por no tener experiencia en aquel tema─. Sí, supongo que tendrá algo de magia. Aunque es posible que la magia la pongamos nosotros, ¿no crees?

Se alejó del árbol en el que Mirko la había arrinconado y dio un leve paseo en círculo por el lugar, observándolo con detenimiento. Pudo ver algún insecto o algún animal pequeño y, sobre todo, un gran número de plantas de las cuales ignoraba sus nombres o para qué servían.

─ Siempre he pensado que cualquier lugar tiene algo de mágico si le pones empeño en ello. Cualquier momento también puede serlo─ dijo, agachándose para contemplar unas flores que crecían junto a un árbol, como si le estuvieran haciendo compañía.

¿Quería volver a besarle? Sí. Pero sabía que no debía. No quería que la presión hiciera mella en él. Quería que estuviera relajado, que se sintiese confiado y que todos sus miedos y sus dudas se disiparan. Por eso se había alejado de él, si lo sentía cerca, podría ser que perdiera un poco de razón y volviera a besarle. Necesitaba respirar y dejar a su mente pensar con claridad.

─ ¿Te sientes a gusto conmigo?─ le preguntó sin siquiera mirarle, seguía concentrada en la flor y en sus detalles─. Quiero decir, ¿sientes algo parecido a cuando estás haciendo lo que más te gusta, a cuando estás enfrascado en una de tus investigaciones?

por **Mirko Lautrec** Miér Jul 13, 2016 4:19 am

Cuando ella se alejó, Mirko sintió el anhelo de estrecharla contra sus brazos y no dejarla ir. Era extraño sentir todas esas cosas por una mujer, en el pasado le habían gustado otras mujeres desde la distancia, pero no había tenido una relación con ellas como para poder llegar a un contacto, descubría que una vez dado el primer contacto resultaba demasiado difícil en no pensar en otra cosa.

- No lo había pensado de esa forma - Murmuró cuando ella dijo que cualquier lugar podía ser mágico, nunca lo había visto así, quizás era porque era la primera vez que estaba en un sitio con una persona que le gustaba, luego de ese beso, ese lugar en el bosque adquiriría un nuevo significado para él, definitivamente le habían puesto algo de magia como ella decía.

Golnar contemplaba las flores y le preguntaba si se sentía a gusto con ella, como cuando trabajaba en sus proyectos. Era una pregunta extraña pero se obligó a responderla luego de pensar por unos momentos.

- Son dos situaciones muy distintas - Comenzó a decir, acercándose a ella y agachándose frente a ella - Me gusta mi trabajo y nunca antes... bueno, había ocupado mis pensamientos en una mujer... así que es algo nuevo para mi, siento que estoy acostumbrándome a la idea - Todo era nuevo para él, nuevo y excitante, nunca creyó que el amor podría ser algo tan embriagador. Era desconcertante y a la vez emocionante, porque deseaba seguir descubriendo ese sentimiento y avanzando más en ese terreno desconocido.

- Pero por supuesto que me gusta estar contigo... si no fuera así no te habría pedido salir conmigo hoy - Le indicó sus mejillas volvían a ruborizarse - Se que... venimos de mundos distintos... y pareciera que no tuvieramos nada en común que compartir pero... aún así me gustas - Carraspeó avergonzado.

por **Golnar Richelieu** Dom Jul 17, 2016 3:21 pm

Le sonrió al escucharle hablar de esa manera. Le gustaba oír de su propia boca que sentía aquello por ella. Era la primera vez que estaba viviendo aquella experiencia. Tantos hombres que había conocido y ninguno la había tratado de la misma forma que él. Tantos hombres de lo que se podía haber enamorado y había decidido hacerlo de uno que la valoraba y no se atrevía a juzgarla a la ligera.

Era mejor así. No echaba de menos el mundo de la noche. Ya no necesitaba el calor del cuerpo de un hombre para pasar su vida un poco más tranquila. Era cierto que algunos abusaban de ella, la maltrataban pero luego pagaban bien. Sabían que había líneas que no debía traspasar. Pero quería dejar de pensar en eso. Aquello sonaba a pasado.

Se sentó en el césped casi sin darse cuenta. Alzó la vista y le sonrió. Era agradable estar con él. Decía la verdad al asegurar que sus mundos eran completamente distintos pero daba igual. Tenían derecho a estar allí y lo mejor era que lo hacían por voluntad propia.

─A mí también me gustas─ le aseguró para que se quedase más tranquilo─. Es gracioso. Toda mi vida he imaginado cómo sería el hombre ideal y, lo cierto que ninguno se parece a ti. Pero ahora veo que los que imaginaba eran completamente insoportables ─ le aseguró con una sonrisa y mirando al cielo por unos segundos. Se quedó unos segundos en silencio─. Oye, ¿sabes cuál es esa planta de allí? ¿La de las flores violetas?

Señaló un punto cerca de donde estaban ellos. Esperó a que él girase su cabeza para aprovechar y acercarse lo más posible a él. Apoyó su barbilla en su hombro izquierdo. Quizá pudiera intimidarle pero le gustaba sentir cómo su calor la envolvía y cómo su corazón latía al tenerle tan cerca. Se arriesgaba demasiado pero le gustaba. Levantó sus manos y vaciló un poco antes de siquiera colocarlas sobre la espalda del joven. Comenzó a acariciarla suavemente mientras esperaba una respuesta. Aquello se sentí bastante bien.

por **Mirko Lautrec** Miér Jul 20, 2016 5:14 am

Se estaba preguntando como sería ese tipo de hombre ideal con el que Golnar había soñado, Mirko nunca se vio así mismo como el típico buen partido para esposo, él estaba lejos de ser ese macho Alfa que hacía estremecer a la mayoría de damas. Entonces ella le preguntó por unas flores y cuando se giró para identificarlas (era bastante versado en botánica, aunque todo su conocimiento era más bien amateur) ella recostó su rostro y se acercó más a él.

Un escalofrío recorrió su espalda al sentir el contacto y la sutil caricia, de nuevo sintió las mejillas arder, de repente le pareció que hacía calor aún en esa mañana primaveral. Se quedó muy quieto sin saber que hacer, no recordaba el nombre de las flores que ella había señalado, el perfume del cabello de Golnar le embriagaba y no le dejaba pensar en nada más.

- C...cómo es el... tu tipo ideal de hombre? - Logró preguntar al fin, la curiosidad le estaba matando, de repente le resultaba sumamente importante cumplir con las características que Golnar tuviera en mente para su hombre ideal .

Se giró lentamente y pasó su brazo por la espalda de ella en un torpe abrazo un tanto incómodo gracias a la posición en la que estaban.

por **Golnar Richelieu** Vie Jul 22, 2016 9:55 am

La pregunta la cogió totalmente desprevenida. No imaginaba que fuera a preguntar aquello. Pero lo había hecho y ahora tenía que responderle. Se sentó sobre el césped y dejó que Mirko tomase una posición más cómoda. Se separó un poco de él para aquella transición pero volvió a acercarse más a él.

─Mi hombre ideal…─ dijo y miró al cielo intentando recordar cómo había imaginado a su esposo perfecto─. Siempre creí que un hombre debía tener dinero, un buen puesto y mucha educación, además de ser de buen ver. También imaginaba que sería un hombre que le gustasen los eventos sociales, que me acompañase a misa todos los domingos. Un hombre que supiera defenderme de cualquier mal. Quería que me mimase y me llenase de regalos todos los días─ se quedó en silencio durante unos segundos antes de proseguir─. Pero eso era antes de vivir en el mundo real. Ahora buscaba alguien que me tratase bien y que me quisiera. La lista se ha reducido como puedes ver. Además, se supone que el amor no se elige, ¿no?

Se recostó sobre el hombro de Mirko y cerró los ojos. Debían ir creando esa atmósfera de intimidad y acostumbrarse a ella. Debían ir sintiéndose cómodo poco a poco. Golnar no sabía demasiado de relaciones. La única que había visto había sido la de sus padres y no era demasiado romántica, había que admitirlo. Así que ella no tenía ningún referente respecto a ese tema y Mirko tampoco sabía demasiado. Tendrían que ir averiguando poco a poco cómo se solucionaría las cosas.

─No te preocupes por el hombre ideal que yo imaginé en mi adolescencia, eso son fantasías del pasado. No sabía lo que había en realidad en el mundo. Así que, cuando tuve que enfrentarme a la realidad, supe que había estado soñando con algo muy improbable. Pero nunca pensé en encontrarme contigo. Resultas ser mejor que cualquier imaginación─ le respondió con una sonrisa y sin atreverse a mirarle.

por **Mirko Lautrec** Miér Jul 27, 2016 5:13 am

Le escuchó y conforme ella hablaba se iba sintiendo cada vez más inseguro, el hombre que ella describía era completamente diferente a su personalidad. Intentó imaginarse así mismo asistiendo a fiestas y eventos sociales de la mano con Golnar, trabajando y ganando mucho dinero en negocios, vistiendo trajes de corte inglés como los que estaban de moda y fumando una pipa en un gran salón mientras leía el periódico y Golnar le servía el té. De repente se dio cuenta de que estaba visualizando a su propio padre en los días en los que no estaba en altamar en su navío o en la oficina controlando asuntos de comercio marítimo y demás.

Su padre inspiraba seguridad, no porque fuera precisamente fornido o muy alto, sino porque su trabajo le exigía una personalidad penetrante y una voz sólida de mando. Era un líder nato y tomaba las decisiones sin chistar. ¿Era eso lo que enamoraba a una mujer?.

Le alivió sumamente escuchar que ella ya no tenía ese estereotipo en mente, era cierto que había tenido una gran dósis de realidad trabajando en las calles como cortesana, y seguramente había conocido lo desagradable que los hombres podían llegar a ser cuando dejaban a la luz sus más perversos deseos.

- ¿Estás segura? - Atinó a preguntar, se sentía como un adolescente inseguro y a lo mejor no era muy distinto a un adolescente, pues en ese aspecto no sentía que hubiese madurado como el resto de los hombres - Porqué... yo no soy para nada ese tipo de hombre... acabas de describir bastante bien a mi padre - Agregó sintiendo la garganta áspera - En vez de manejar armas... se cocinar, en vez de fumar pipa... tomo té de manzanilla para calmar los nervios - Meneó la cabeza - No tengo un gran negocio o posición social y prefiero pasar desapercibido... ¿Realmente quieres estar con un hombre como yo? Es difícil de imaginar que una mujer pueda sentirse atraída por esas características en un hombre -

por **Golnar Richelieu** Jue Jul 28, 2016 3:31 am

Sus dudas le hicieron sonreír. No porque le pareciesen graciosas sino porque, a pesar de que no necesitaba sentir aquello, lo hacía. Se preocupaba por no ser lo que ella una vez quiso ver en un hombre. Todos aquellos ideales quedaban atrás, le parecían poco atractivos a día de hoy. Por eso él no debía poner tanto empeño en querer aparentar algo que no era. A ella le gustaba lo que veía, le gustaba la manera en la que se comportaba Mirko. Quizá muchas otras mujeres no le pareciese atractivo pero a ella sí. Estaba cansada de hombres que fingían ser lo que no eran solo para llamar la atención de una dama. Ella necesitaba un hombre real y el que tenía delante lo era.

─Sí, estoy totalmente segura. Sé lo que me gusta ahora y no es lo que te acabo de describir─ hizo una pequeña pausa para pensar por unos segundos─. Realmente odio el humo de pipa y las armas pueden matar a alguien. La cocina por el contrario, solo da alegría y el té… bueno, no molesta a nadie que esté en la misma sala. ¿Lo ves? Son solo ideales que tenemos en la cabeza pero que después a nadie le gusta. Yo tampoco soy lo que un hombre buscaría en una mujer pero me conformo con que a ti te parezca bien todo lo que ves─ agregó.

Quería quitarle sus miedos y sus dudas, no necesitaba que él estuviese siempre pendiente si era merecedor de Golnar o no. Más bien debería ser al revés, quizás ella no era merecedora de alguien como él. Pero no iba a ser ella la que sacase aquel tema.

─¿No tienes una buena posición social? Yo tampoco. No es algo que me importa, yo no voy buscando el dinero ni amigos falsos que te inviten a bailes noche tras noche. Me he cansado de todo eso.

A pesar de que se dijo a sí misma que se iba a controlar. Se acercó a él y rozó sus labios. Lo había necesitado mientras ella estaba hablando. Había sentido unas ganas horrorosas de hacer aquello. No iba a esperar un poco más para que él diese el paso. Necesitaba besarle y lo hizo, porque tenía derecho a hacerlo.

por **Mirko Lautrec** Jue Jul 28, 2016 11:13 pm

Era un alivio escuchar que ella no se sentía atraída por ese tipo de hombres, porque Mirko sabía que él nunca podría llegar a ser el estereotipo de hombre masculino y fuerte, simplemente no estaba en su naturaleza. Habían muchas cosas que una persona podía cambiar de si mismo, pero la personalidad, era una de las más difíciles.

Sonrió cuando dijo que el té no le hacía mal a nadie, aquello era cierto, tendría que invitarla a tomar té a su casa un día de estos, podrían pasar una tarde amena charlando y disfrutando de la cálida Chimenea. Golnar se había cansado de amigos falsos, Mirko no había tenido ninguno, era una extraña combinación, eran diferentes y a la vez similares en cierta forma.

Ella le sorprendió con un beso que no vio venir, pero que aceptó encantado, abrió los labios y la besó con más seguridad esta vez, con pasión contenida, sentía como si dentro de si mismo hubiese un rio represado a punto de desbordarse con mucha fuerza. La abrazó y estrechó entre sus brazos y deseó no dejarla ir nunca de su lado.

La besó por lo que le pareció un rato infinito sin saber muy bien que hacer con las manos más que acariciarle el cabello ondulado y la espalda sintiendo la textura del vestido. Entonces fue cuando escuchó el gruñido. En medio del beso no le prestó atención pues creyó que era su imaginación, pero el segundo gruñido le hizo detener el beso y girarse para encontrarse con los ojos amarillos y amenazantes de un lobo gris que los observaba con el cuerpo parcialmente escondido en unos arbustos.

El lobo enseñaba los colmillos amenazadoramente y de repente Mirko tuvo la sensación de que otros ojos los estaban viendo.

- No hagas ningún movimiento brusco - Le susurró a Golnar, consciente de que el lobo probablemente había percibido el olor de los restos de la comida en el canasto.

por **Golnar Richelieu** Vie Jul 29, 2016 8:27 am

Se extrañó al ver que él se separaba de ella pero en seguida entendió por qué. Aunque no logró ver el peligro, sabía que estaba cerca. Le oía gruñir. Un extraño sentimiento inundó su pecho. Lo primero que quiso hacer fue salir corriendo pero las palabras de Mirko la tranquilizaron más de lo que podría admitir.

Trató de controlar la respiración y encontró al lobo que los observaba con aire amenazador. No sabía cómo debía reaccionar. Aun así le resultó un ser de lo más hermoso. Claro que era aterrador a la vez. Una mezcla un tanto extraña. Lo salvaje siempre la había atraído pero también lo había hecho la calma y la belleza. Al tener a aquel animal delante, su corazón parecía dudar entre correr o acercarse a la bestia y averiguar cómo de suave tenía el pelaje.

Miró a Mirko y tragó saliva antes de poder hablar correctamente. No encontraba las palabras para decirle. Al menos estaba cumpliendo con lo que él le había pedido: no se movía ni un solo centímetro.

─ ¿Qué hacemos ahora?─ le susurró siendo incapaz de encontrar una solución en aquel momento. Y eso que ella era capaz de resolver los problemas más difíciles pero siempre lo lograba cuando estaba sola, por norma general.

por **Mirko Lautrec** Dom Jul 31, 2016 11:10 am

por primera vez no tuvo respuesta alguna para la pregunta de Golnar, en su mente estaba repasando todo lo que había leído sobre lobos salvajes para saber como proceder, pero era difícil recordar cuando el miedo amenazaba con hacerlo reaccionar de manera precipitada. Nunca se había enfrentado a un animal salvaje antes, especialmente no con un lobo, él era un ratón de biblioteca principalmente, no solía adentrarse en los bosques a explorar.

El lobo avanzó lentamente sin dejar de enseñar su poderosa mandíbula, Mirko no recordaba por que dirección habían llegado pues había corrido trás Golnar sin pensar muy bien en los alrededores ¿Y si en vez de correr hacía el pequeño rio corrían hacía las profundidades del bosque donde los esperaba el resto de la manada?.

Mirko se fue levantando lentamente y tomando a Golnar del brazo le indicó que hiciera lo mismo, el lobo seguía los movimientos de ambos intensamente y sin parpadear. Se le ocurrió que quizás por ía intimidar al lobo con algún palo o rama y eso le daría tiempo a Golnar para escapar.

- Voy a intentar distraerlo... intenta subir a un árbol, los lobos no pueden escalar - Murmuró buscando con la mirada alguna rama en el suelo.

por **Golnar Richelieu** Lun Ago 01, 2016 8:10 am

Se fue levantando al ritmo de Mirko. No podía quitar sus ojos del fascinante animal. ¿Sentía miedo? Sí, era posible pero también sentía admiración. Aquel hecho nublaba levemente su pensamiento y al principio ni siquiera escuchó lo que Mirko le dijo.

Sacudió su cabeza para procesar la información que él le había dado. ¿Trepar a un árbol? Podía ser fácil pero ni loca iba a dejarle enfrentarse al lobo solo. Por el hecho de que fuera mujer no significaba que iba a dejarle allí tirado y salvarse ella misma. No, ella no iba a poner también en riesgo la vida de Mirko por el hecho de salir ilesa.

─¿Por qué no le hechas los restos de comida? Así tendremos una buena oportunidad para huir─ le susurró mientras no dejaba de mirar al lobo, si se despistaban podían acabar muertos.

De hecho, debía actuar y fue agachándose de nuevo con mucha lentitud para coger la cesta y cogió la primera comida que sintió. El lobo seguía gruñendo y esta vez dio un aviso de que permanecieran quietos o acabaría por atacar. Golnar le echó uno de los sándwiches que habían quedado. El lobo pareció distraerse con la comida y se acercó para ver lo que era. Golnar agarró la mano del hombre y comenzó a caminar despacio, muy despacio.

─Vámonos ahora que estamos a tiempo─ le apresuró.

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First date (Golnar)

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