Llamado a la guerra || Privado

por **Lusian D'Aramitz** Dom Jul 02, 2017 4:52 pm

Una carta había llegado a su mansión solo era una invitación casual a visitar los terrenos de cierta mujer que al parecer tenía una gran urgencia de hablar con él. En secreto de toda su bastarda familia salió con la excusa de un viaje a Italia, regresar al vaticano por orden de su eminencia el Cardenal Borgia, una mentira que fue creía por la seriedad de las palabras y el poco equipaje que llevó, solo le bastó su presencia como siempre que viajaba a lugares que no eran de su agrado.

Al cabo de meses llegó a su destino y las puertas de aquel caserío se abrieron de par en par para recibirlo, de empleados no había nadie pero aun así todo estaba bien limpio y en su lugar. Se mantuvo en la entrada hasta que la voz así como el encender de las luces hizo posible ver a la dueña de tal voz potente y autoritaria, la recibió con una sonrisa de oreja a oreja molesto claro por la espera y la invitación —Puedo saber la razón de que me hallas mandado a llamar con esa invitación tan barata y vulgar, si lo que quiere es una fiesta de té para eso tengo una mujer y a las bastardas de mis hijas para que juegue con el resto de putas, digo mujeres, que inviten a este tipo de asquerosas cosas— ante la invitación de la mujer que solo sonreía al bajar las escaleras por la presentación del inqusidor.

Pasaron a un salón más amplio donde grandes ventanales dejaba entrar la claridad del exterior, una mesa de jardín en medio del salón y comida así como té. Ella tomó asiento invitando a hacer lo mismo —Solo estoy aquí para saber la razón nada más, así que habla bruja— el ambiente se tensó entre los dos.

por **Györgyike** Sáb Jul 08, 2017 12:48 am

baje las escaleras con apenas una sonrisa el llego pero sus primeras para mi fueron un atropello por mi tan amable invitación a tomar el te –no te inquietes lusian solo es una invitación casual no puede una vieja amiga invitar a otro viejo amigo a pasar un momento muy agradable entre los dos? no seas tan reservado no voy a comer tranquilo para eso tienes esposa a que te chupe hasta los huesos más pequeños de tu cuerpo
el quería enseguida contradecir mis palabas pero lo lleve al salón del ala este cerca al jardín el de mis favoritos con el amplio salón decorado solo con ventanales y cortinas blancas de seda exportada de la china e india que da colores extravagantes al salón –no termines así con una reina lusian para ser un zorro no tienes mucha astucia-
alce la mira nuestros ojos se encontraron y el ambiente se puso insoportable para los dos y todo por el aura que deja ver el inquisidor rei por ello una risa estidente solte que se hizo sonar por todo el lugar dejando a le molesto por mi actitud –disculpa lusian pero te ves muy comico parado de esa manera y con tus palabras y no solo eso si no también con tu rostro enojado de verdad una reina no puede invitar a su mas leal subdito
alce mi taza de te rojo entreviendo al inquisidor que apretaba sus dientes enfurecido sus nudillos s pusieron blancos de apretar los dedos contra la silla no tomo a siento se dispuso a quedar de pie por la incomodida que le causaba por no ser su reina esperaba que no soltara eso no si lo estaba deseando y saboreando el oir esas palabras a mostrarle quien mandaba

por **Lusian D'Aramitz** Miér Ago 02, 2017 10:02 pm

Siguió a la mujer cuyas ínfulas de superioridad eran tan altas como inciertas, trató de darse media vuelta pero el se lo impiden las doncellas que ha aparecido en silencio atrás de él llevándolo a rastras donde su “señora” les ha guiado. Dejándolos solos en aquel salón demasiado amplio como para ser real; sus sentidos se ponen alerta y percibe el aroma de la magia en aquel lugar puede ver los rastros del poder de la mujer alterando la habitación a su gusto al menos en lo que el viento trae las hojas y pequeños pétalos que entran, las puertas desaparecen y todo está rodeado por ventanales

Aun con el disgusto en su rostro de mala gana tomó asiento con los brazos cruzados —La astucia del zorro no se mide a simple vista, Györgyike, va más allá de tu comprensión, como el saber que de esta habitación la mitad está hecha con tu magia y la otra mitad no, las flores no son reales pero si hay plantas por aquí pero no son tan dulces, así que ¿Qué escondes maldita bruja?— tomó la taza de té oliendo el contenido ante la risa que estalla en la bruja y el bebiendo de la taza —Al menos el té es real y está bueno, es lo único cierto, porque el que tú seas Reina algún día está muy lejos nadie en su sano juicio dejará que controles un reino Györgyike, crees que el Rey y Reina de Rumania te nombraran princesa o futura reina, eso jamás pasará nadie dejaría nada en manos de la destrucción, tú, ni eres ni serás nunca mi reina— se mofo de la mujer que no pareció agradarle el comentario

Tiró la taza con brusquedad como para que se rompiera el aza, ambos se miraron con desprecio —Si lo que quieres es parar a Xavier, debiste invitarlo a él y no a mí, y no creas pseudo reina que alguna notificación de su eminencia la cambiaré por ti, porque no somos ni seremos amigos nunca así que no se a qué demonios vino tu invitación de manera urgente— con el puño hizo sonar la mesa donde se regó algo de té.

El viento soplaba tranquilo, muy sereno y con los pétalos volando por la habitación pero tras el perfume de la magia de los pétalos había otros uno un poco más fuerte.

por **Györgyike** Vie Ago 04, 2017 12:37 am

la sonrisa la aparte de mi rostro el ambiente que cree que se tenso entre los dos el zorro resulto mas astuto de lo que esperaba deje la taza de te sobre la mesa cruzando las piernas al recargame contra la silla -es simple lo que quiero maldito zorro
use sus propias palabras contra el - no creas que no podre ser reina alguna dia lusian es mas hasta te invitare a mi coronacion y mi matrimonio a toda tu familia sobre todo a tus hijos xavier y georgiana unos encantadores hijos que tienes pero antes que eso - tome la taza de te y se la arroje asi de caliente al rostro del inquisidor vulpino

el me dio lo que deseaba sus palabras de completo rechazo para la futura reina de rumania - mide tus palabras lusian no sabes que te puedo mandar a cotar el cuello con una sola palabra mia - el iba a protestar y mis dedos trajeron el silencio al lugar el ambiente se seco entre los dos y las plantas con sus flores y encantos de magia se tornaron en su real apariencia estabamos en el invernadero que habia creado ivy para mi deleite - mira a tu alrededor lusian no estas en condiciones de negociar conmigo si quisiera parar a xavier lo hubiera hecho con mi propia magia hasta lo hubiera matado nunca se han preguntado ¿por que no he borrado a la familia d´aramitz de la faz de la tierra? porque me son utiles porque ustedes me ayudaran a matar a la diosa y ganarle para luego destruirlos a ti y a tu mundo que proteges, el mundo al que xavier proteje su preciada iglesia hasta verla en pedazos -

recree de nuevoa la ilusion de un bello jardin con el ambiente fresco - se que la organizacion de xavier es corrupta y el tambien esta manchado pero lo que quiero es tu lealtad lusian ¿me serás leal? - extendi mi mano con el anillo de zafiro amarillo que tenia en el dedo anular de la mano izquierda sonrei y aguarde su respuesta pero sabia que el no se doblegaria ante yo buscaba otra cosa de el

por **Lusian D'Aramitz** Sáb Sep 02, 2017 10:32 pm

Miró a la mujer con todo su odio, tensó la mandíbula completamente apretando los dientes deseando transformarse en su animal interno para destrozarla pero se mantuvo en su asiento soportando ese ambiente tan tenso, pesado y desagradable que le estaba encrespando completamente y estaba a punto de retirarse y maldecir a la mujer cuando su poder se hizo evidente, aquel poder que la iglesia quería eliminar y no solo ellos sino otros también. Su boca se enmudeció y sonrió al ver el jardín real de aquella bruja, tomó asiento tratando de grabar en su mente cada detalle de la magia de la mujer sintiendo de dónde provenía esta, sabía que la mujer no estaba sola.

Sentía su irá desbocarse pero trató de controlarse al menos hasta que sintió el té caliente derramarse y quemar su rostro en heridas que sanaban lentamente cuando pasaba su por el rostro quitándose los restos de ese amarga bebida.

Sonrió apartando las últimas gotas —Que mal, aquel te pudo ser una buena bebida pero al parecer quien lo bebía no sabía apreciarlo realmente, es una lástima que existan perras, digo, mujerzuelas, oh perdón, mujeres tan arrastradas y miserables que no sepan disfrutar con decencia algo de te— tomó su taza y se la arrojó de nuevo a la mujer levantándose de su asiento —Y que si la organización de Xavier es corrupta, el tiene sus intereses como cada uno de nosotros o no es eso lo que buscas Gyo, no buscas mi lealtad tu quieres otra cosa maldita casquivana, habla ya— enfrentó con la mirada a la bruja —puedes ser la reina de las siete coronas, que me importa a mi, si no eres mi reina realmente. Quieres la organización que tiene Xavier con la iglesia, quieres a la familia D´Aramitz, adelante maldita puedes intentarlo pero nunca lograrlo por una razón, no somos unos malditos santos ni puritanos conocemos el lado malo así que quien debería tener cuidado eres tu Gyo, quien te dice que no estoy aliado con tu enemiga o que Xavier no está con ellas—

El ambiente se paralizó y se escucharon los vidrios trisarse uno por uno tal como la mirada de la bruja que se iba llenando hasta estar a punto de explotar..

por **Ivy1** Dom Sep 24, 2017 11:42 pm

Mi reina estaba acompañada de aquel hombre, tras el jardín espero junto a Gerhard que apenas susurra como un ave el se va volando lejos del castillo de nuestra amada señora por un secreto que aun no logro descifrar, pero lo haré lo juré a mi señora. Oigo la conversación a través de las rosas que adornan el jardín de mi reina.

Mary esta en las catacumbas del castillo preparando la protección de todo el lugar, muevo mis manos haciendo los rezos de los hechizos se que mi señora es muy poderosa pero con ese inquisidor cuyo apellido desprecio es mejor tener cuidado.

Meto mis manos en la tierra rezando más fuerte aquel idioma celta olvidado, de entre los enormes piedras del castillo brotan como margaritas un jardín de hermosas rosas rojas con espinas entre todo el camino que han creado, pero su color es tan vivo que se asemeja a la sangre pura. Oigo como sonríe y veo sus ojos entrecerrados, serios, me inclino ante ella pidiendo perdón y ella me ordena aparecer frente al inquisidor, me niego la principio pero la orden de mi reina es definitiva. Llamo a Gerhard enviando con el un mensaje a Mary –dile a Mary que tenga cuidado, que ella debe proteger a la reina a toda costa– susurro entrando al jardín entrando por la ventana.

Las cortinas vuelan al dejarme pasar y el venenoso jardín que cree que se oculta cuando doy mi pie al dar el paso acercándome a mi reina, pero es el poder de ella que lo hace, ella puede ocultar y marchitarlas con su presencia. Trago algo nerviosa de que me regañe delante de ese hombre pero toma mi mano besándola, me asusta –¿Me llamaba mi Reina?– pregunto y miro con odio a aquel inquisidor cuyo apellido solo debería desaparece de la faz de la tierra.

por **Györgyike** Mar Oct 17, 2017 1:54 am

la voz de ivy resono por el la pequeña salita con sus flores alce la taza bebiendo el te nuevamente acallando al perro fiero sin dientes de lusian d´aramitz pero cuando ivy entro mas con una ligera mirada que le di ella se detuvo antes de llegar a estar mas cerca de nosotros. volvi a sonreir y me puse de pie ofreciendole a lusian una cachetada tan fuerte que sono y vi el rostro de ivy que se ria

relami la mano que golpeo aquel rostro horrible y deformado - mide tus palabras lusian d´aramitz no estas ante cualquier zorra de corona estas frente a tu reina la reina de rumania y si no estas contento con eso entonces ofreceme tu cabeza peor no vengas a tratarme como una idiota de esas que tu acostumbras en tratar no soy tus perros soldados ni soy los bastardos recogidos de tus hijos crees que no se que solo los has tomado como hijos con tu esposa para hacer mas fuerte al apellido que tomaste eso es todo buscabas hacer que tu pequeño apellido tenga mas peso ante los ojos del ambicioso cardenal - ante el ataque que lusian tomo contra mio ivy rapido se adelanto con sus flores

Miraba a ivy con las gracias pertinentes -crees que puedes hacerme daño en mi jardin - las flores se enredaban en los brazos del zorro detiendo su puño - no me importa su organizacion pero pienso destruirla porque son un estorbo para mis planes y se que nunca tu hijo se iria de aliado de kalypso porque el nos odia odia a muerte a las brujas todo porque la hija de kalypso lo violo por ordenes de ella para destruir al unico d´aramitz y lo logró ahora solo queda desaparecerlos uno a uno pero puedo ser benevolente y muy buena persona en ofrecerte a ti y a tu familia que me des tu lealtad eterna como tu unica reina y todos seran salvados o de lo contrario moriran en medio de esta guerra - sonreia e ivy sujeto con fuerza a lusian

La miraba dandole una señal con la mano -ivy querida no tan fuerte no quiero que su sangre manche los pisos del castillo mejor usarla para tus bellas flores- pero ivy lo ajustaba mas ivy siempre entendia mis necesidades

por **Ivy1** Mar Oct 24, 2017 11:40 pm

La orden de mi reina fue sencilla no tenía que matar a aquel insolente inquisidor pero no quiero dejar pasar la oportunidad de hacerle sentir el poder de mi reina, se que a ella no le gusta mucho pero aquel vulgar hombre debe aprender una lección. Jamás alzar la mano contra su majestad la reina.

Asiento y muevo las manos con las runas antiguas sobre mis labios pronunciando aquellos cantos antiguos manipulando las plantas para que no se aferren tanto a la vida del inquisidor, la sonrisa de mi reina me da la plena confianza de poder lastimarlo. Hago que crezcan espinas entre las enredaderas, espinas cuyas puntas son como cuchillas y lastiman el cuerpo del inquisidor de lo que estoy muy feliz como para reir delante de él. Me acerco a mi reina inclinándome frente a ella mostrando el respeto que aquel bastardo no tiene, tomo su mano y beso su anillo de poder –Mi reina por qué gasta tiempo con esta escoria, debería dejar que sea yo quien lo entretenga y obtenga lo que usted desee seguro que bajo mis manos este zorrito canta hasta las rancheritas más agudas–

La cara del inquisidor es de completo desagrado por mi apreciación mi reina rie y mueve su mano perdonando al insolente hombre, las plantas regresan a ser el hermoso jardín venenoso del cual estoy orgullo y solo sirve para proteger a su majestad, me quedo a un lado sin permitir que el hombre se acerque a mi reina –El que la reina te perdone debes ser agradecido por conservar tu cabeza unos minutos más por mi fuera, si en mis manos estuviera, ya te la habría arrancado y tu cuerpo envuelto en mis bellas plantas como abono– mi reina solo rie y se acerca a él pidiéndole, no, exigiéndole, su lealtad y compromiso para con nuestra causa ella me mira y se que me pide que sea más benevolentes con los aliados es lo que siempre me pide de entre todas sus hijas soy a la que más regaña por la falta de benevolencia hacia esos infames humanos.

por **Lusian D'Aramitz** Dom Nov 05, 2017 7:26 pm

La magia del lugar lo estaba afectando, él sabía muy bien los poderes de alcance de aquella bruja y con su forma de reírse lo estaba demostrando. Casi sintió su vida extinguirse en aquel momento, momento en el cual no pudo dejar de pensar en una cosa y no era precisamente su esposa ni sus bastardos hijos, sino otra más visceral.

Gruñó ante las duras acusaciones de las brujas, con su mirada fulminó a la nueva bruja que llegó haciendo uso y gala de su magia, aquella bruja solo logra que la paciencia del inquisidor explotara completamente apretando los puños hasta que sus nudillos se estremecían con la fuerza, se emblanquecieron al estar tan juntos y apretados, sus dientes crujían entre si mientras la bruja solo sonreía y mostraba su carita de inocente, y la otra, aquella que poseía su corona sobre la cabeza moría de gusto ante los juegos de su pequeña rata de bosque, respiraba con furia que su pecho subía y bajaba. Las enredaderas se ataban a su cuello y muñecas, pero no suplicó ante las mujeres y solo se dignó en reírse con fuerza ante sus osadías

Las ojos de las brujas no podía creer lo que estaban viendo —Yo no hablo con las mascotas, con las perras de las zorras, yo hablo con el dueño del circo y no con los lagartos feos y apestosos como tú, es mejor que te mantengas al margen perra de la reina o de lo contrario me veré en la obligación de romper con todas tus florecitas venenosas con mucho fuego y orine— la mujercita mostró su ira y su rostro de horror ante las duras palabras del inquisidor; mientras que la reina tomó asiento abanicándose y mirando a los dos enemigos naturales, y con una palabra suya dio fin a nuestra pequeña riña de palabras —Gyorgike, no sé qué pretendes tú y tu hermana, no se si lo que quieren es despertar a los cuatro, pero sabes, como has hablado del único D´Aramitz, debo decirte que no es Xavier, es otro de los recogidos como llamas, además no eres la única que esta en busca de despertarlos, sabes quienes más están tras todos ellos, puedes imaginarlo talvez si te sacas la corona puedas ventilar tu cerebro para que puedas encontrar la respuesta—.

Los ojos de las dos brujas se llenaron de pura ira y rencor y la guerra estallo en ese momento.

por **Ivy1** Vie Nov 24, 2017 11:58 pm

Atrevido el inquisidor ese que maldito y cruel hombre es le miro furiosa con todas las ganas de destrozar su orgullo y su carita de perro abandonado que tiene es un perro un maldito perro de la iglesia que solo sirve a esos vagabundos ecleticos de la iglesia solo pienso en ellos y se me llena el estómago de vilis con deseo de atacar a todos esos. Lo miro con desprecio y voy a darle un ataque de mi magia pero mi reina me detiene con su mirada y es ella que lo ataca me rio de solo ver como ha quedado. Miro a mi reina y ella solo sonrie acercandose a aquel perro no puedo negar que ella si sabe como controlar a los perros.

Me inclino ante mi señora y ella solo se sienta lentamente, que elegancia ella tiene no cae ante las provocaciones del perro de la iglesia, es verdad ella tiene otro métodos. Veo como la magia de mi reina opaca a la mia y la retiro por miedo de que ella haga algo peor con mi magia. La ilusión se rompe y el jardin vuelve a estar como estaba antes, con flores bellas, se que debo dejarlo así y no provocar la furia de mi reina.

Me aparto un poco mirando con interés y en silencio pero no puedo negarme a responder al maldito perro ese - Cuida tu boca perro, respeta si mi reina te habla tu debes agachar la cabeza y aceptar lo que diga no seas arrogante maldito perro los perros obedecen - escupí molesta contra aquel hombre que solo se ríe y me ignora, eso solo me enfurece más y más pero mi reina se pone entre los dos y su poder se desata.

Mi reina ha despertado.

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