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por **Asagi Dunkelheit** Jue Jul 20, 2017 1:13 am

Apenas oscureció salió de la mansión para atender unos asuntos. Prometió que no tardaría, todo por el bien de aquel ser con quien compartía la eternidad. Suspiró pesadamente pensando en cómo habían llegado hasta ese punto. Todo parecía regresar a la normalidad. Le tenía de nuevo consigo y no podía pedir más.

Al llegar al centro de parís dio una caminata ligera por las calles. El lúgubre ambiente le parecía encantador. Había cierto terror en esas calles solitarias. Era un color gris que cubría la ciudad como si anunciaran una terrible nevada. La humedad en las calles, la peste, las personas de clase baja mezclándose con los de alta le parecía una pantomima.

Llegó a un café parisino. Ese lugar le gustaba y se había hecho dueño de una pequeña cadena. Iba de vez en cuando a vigilar las finanzas. Aunque ahora tenía a una persona de total confianza ir de vez en cuando y que le vieran por ahí, no hacía ningún mal, además adoraba aquel olor de café inundado el lugar ver charlar a las personas o simplemente perderse admirando a la humanidad caminando delante de los ventanales del negocio. Eso le alejaba de todo. Sus pensamientos cesaban por momentos.

Se quedó absortó en la multitud de gente caminando en aquellas calles. Todo estaba lleno de paz hasta que un aroma familiar inundo su ser. Una presencia conocida le hizo dilatar sus pupilas. Se levantó de su lugar y se dirigió a las calles después de despedirse del personal. Aquel aroma se intensificaba. Le conocía y le era tan atrayente que eso lograba sorprenderlo.

Sonrió al fijar sus ojos en aquella cabellera castaña y casi dorada. Era un chiquillo paseándose con los de alta sociedad. Un muchachillo que le había llevado a la locura y que se había librado de sus garras por un golpe de suerte. Le veía jugando frente a cada aparador de las tiendas en aquel lugar. Con cuidado comenzó a seguirle.

Tras un rato de seguirle a una distancia prudente le vio encaminarse a uno de los tantos callejones. Y le pareció el momento perfecto para tomar su brazo y acorralarlo. -Buenas noches, Alexis. -Fijó sus pupilas en las ajenas. Algo había cambiado en aquel chiquillo. Aparte del aparente miedo, podía notar algo. Pensó que había muerto, o que de haber sobrevivido estaría traumatizado por lo sucedido, pero había cierta calma, como si hubiera superado aquella tortura. Acarició con suavidad la mejilla del joven y se acercó a su rostro sonriendo con malicia.

por **Alexis VanVollehoven** Sáb Jul 22, 2017 1:10 am

Había pasado el tiempo y las cosas parecían estar realmente bien. No se ponía a pensar demasiado en lo que podía pasar, era inútil estarse preocupando de esa forma sin motivo alguno. No es que fuese positivo, pero lo que iba a pasar, pasaría de cualquier forma. Aunque él podría intentar cambiar en más de una manera las cosas por sus habilidades, no sentía una verdadera necesidad de ello.

Ese día había salido solo, simplemente a distraerse. Tener un lugar en el cual vivir y no tener que preocuparse de muchas cosas de hecho resultaba algo frustrante a veces y para desestresarse salía simplemente por ahí a buscar algo interesante que cruzara su camino.

Alex no notó la presencia que le seguía, si lo hubiese hecho, probablemente habría intentado hacer algo para alejarse tan rápido como hubiese podido, pero para cuando fue consciente de ello, estaba frente a aquel rostro conocido y que no le traía ni un solo agradable recuerdo. Tomó aire como si fuese a gritar, pero no lo hizo. Dejó de respirar por un momento, clavando sus ojos claros en el vampiro que aún lo sujetaba.

El miedo que había desaparecido durante ese tiempo regresó de golpe y aunque tardó en recomponerse, cuando lo hiz lo empujó con toda la fuerza de la que era capaz, intentando alejarse y salir del callejón donde estaba. Desde ahí pudo ver y escuchar a la gente, tan cerca y tan lejos al mismo tiempo.

Su corazón había dado un vuelco y se sentía no como un hechicero, sino como un chiquillo que no podía hacer nada para defenderse de aquel ser que le superaba en más de una manera.

Jadeó al sentir el jalón en su cuerpo y aquella mano cubriéndole la boca justo cuando pensó en que gritar realmente podía ser una opción. Sus ojos buscaron ayuda, pero Paris era un lugar escalofriante, incluso si hubiesen visto aquello, probablemente ninguna de aquellas personas hubiese hecho nada por él. Pero ni siquiera esa vana esperanza existía, nadie se percataba de nada, a pesar de que solo eran unos cuantos pasos los que los separaban.

por **Asagi Dunkelheit** Sáb Jul 22, 2017 1:42 am

FccEl terror en los ojos ajenos era lo que mas adoraba. Ver el rostro de Alexis descomponerse le pareció tan excitante. Sonrió ligeramente cuando le vio perdido y sin fuerzas, pudo notar como los recuerdos de aquella noche llegaban a su memoria. Sacudió la cabeza cuando sintió el empujón y los pasos torpes y desesperados del menor en aquel callejón. Le había parecido un roedor corriendo a toda prisa en busca de una pequeña rendija para salir de aquello.

No le fue difícil hallar al chiquillo y silenciar sus labios antes de que pudiera provocar un escándalo, aunque nadie le fuera a hacer caso alguno. -Calma mi pequeño Alexis. -Le acarició esos casi rubios cabellos mientras se lo llevaba con facilidad lejos de ahí cuidando que nadie les viese. Veía la resistencia y el terror aumentar en aquel rostro y eso solo le ponía ansioso.

Cuando estuvo lo bastante alejado de aquella céntrica zona aminoro su agarre y le fue destapando los labios, pero sin dejar de sostener su cintura. -No deseo hacerte daño, pero si sigues desprendiendo ese aroma a miedo, será inevitable abalanzarme contra ti. -Pero si eso deseaba. Quizás habían empezado por lo peor, pero ahora solo quería deleitarse con ese cuerpo y aquella sangre corriendo deprisa por sus venas.

Se acercó a sus labios y los rozó con calma deseando un beso profundo. Lo hizo de una manera tan amorosa que incluso le hacía reír. -Recuerdo porque te elegí desde un principio. -Susurró sobre sus labios pasando su lengua con lentitud.

por **Alexis VanVollehoven** Sáb Jul 22, 2017 1:52 am

Habría mentido de un forma tonta si hubiese dicho que sentía algo de calma. Su corazón palpitaba a toda prisa y podía escucharlo tan claramente. Y aunque luchaba y se movía con toda la fuerza que tenía, sentir de nuevo esa desesperación al no poderse librar de la fuerza sobrenatural del vampiro le hicieron querer llorar. El cansancio empezó a sentirse apenas ligeramente cuando le soltó un poco y al sentirlo sobre sus labios se quedó paralizado y un quejido apenas audible fue todo lo que salió de sus labios.

Su reacción a aquellas palabra fue tan infantil, pero no podía pensar en hacer nada sin que eso tuviese consecuencias tal vez más desastrosas de las que quisiera pensar. Se cubrió los oídos, no quería saberlo. no quería escuchar por qué había sido él en aquella ocasión y probablemente porque también era la razón por la que estaba en esa situación en ese preciso instante. Negó con la cabeza, moviéndola y tratando de alejarse de sus labios, cerrando los ojos con fuerza.

Aunque una parte de él había querido preguntar justo eso la primera vez, era algo que no tenía sentido y ahora solo quería volver a casa, la que ahora consideraba su casa...

Dejó escapar las lágrimas y se negó a abrir los ojos, como si eso pudiese evitar algo de lo que pasaba, como si al abrirlos todo fuese a desaparecer. Pero como sabía que no lo haría, simplemente se negó a abrirlos. Trató de plantarse en el suelo y no moverse de ahí, impedirle arrastrarle a cualquier sitio. No quería ser de nuevo el juguete de aquel desquiciado ser, sabía que era inútil rogar, por eso no lo hacía, solo se removía inútilmente como para decirse que estaba intentándolo.

por **Asagi Dunkelheit** Sáb Jul 22, 2017 2:12 am

Le fue soltando hasta dejarlo casi libre. Solo bajó los brazos y le observó cubrirse los oídos y llorar como el chiquillo que era. En aquel momento le parecía la criatura mas sublime que hubiese visto nunca. Lo que él provocaba en Alexis le maravillaba y le atraía de una manera que nadie consideraría sana. Suspiró buscando envolver el cuerpo del hechicero con sus brazos. De alguna forma busco calmarlo.

Acarició esa cabellera que tanto le gustaba y le colocó contra su torso. -He dicho que no te haré nada… -De momento, claro. Ahora solo tenía ganas de joderlo en la cama sin ese miedo que lo paralizara, quería que cooperara. Limpió aquellas lágrimas como si lo estuviera haciendo con aquel ser con él que tenía toda la intimidad posible y el cual era el único que conocía ese lado blando y amoroso, pues solo lo mostraba ante él. -Alexis. -Intentó que no le tuviera miedo, que confiara. Aunque después de todo lo que le había hecho aquello era más que difícil.

Mantenerse calmo y sereno le resultaba difícil cuando solo lo quería desnudar y comer a besos. Buscar esa resistencia que tanto le gustaba y finalmente joderlo con fuerza, con esas ganas locas con las que se había quedado en aquella ocasión. Sin jugar tan rudo como aquella última vez.

por **Alexis VanVollehoven** Lun Jul 24, 2017 7:11 pm

Sin embargo, lejos de tranquilizarlo, sus muestras de 'afecto' solo le asustaron más, sin embargo dejó de luchar, se quedó viéndole con una epresión en su rostro que mostraba, sin un intento de ocultarlo, lo que sentía en ese momento. Negó apenas ligeramente. Queria huir, pero incluso si había logrado superar el trauma después de un tiempo, estar frente a la causa le hacía sentir algo más, como si supiese que luchar no estaba permitido. Contrario a la primera vez, su mente se creía incapaz de escapar de aquella situación al ser la segunda vez que estaba en ella.

Su respiración se había acelerado y se mordió el labio tratando de calmar sus propias emociones. No iba a ganar nada entrando en pánico.

-¿Qué es lo que quieres? -Y su voz sonó trémula a pesar de sus intentos de decir aquella pregunta tan firme como quería hacerla sonar. El escalofrío que sintió en la espalda por las caricias suaves en su rostro le hizo sentir que perdía las fuerzas. -Déjame ir- Y sonó más a una súplica que a una orden, pero no había nada en su interior más que la idea de salir de ahí, no importaba cómo. Sólo quería ser capaz de sobrevivir, pues no creía tener tanta suerte como la primera vez.

Cerró los ojos, temblaba involuntariamente, y aunque aquellas caricias demostraban un afecto que era imposible que aquel ser sintiera por él, aunque le recordaban a las de otra persona por el cuidado con el que tocaba su piel, la sensación era totalmente diferente.

-¿Por qué? -Preguntó al fin, aferrando sus manos a las ropas ajenas, como si fuese a empujarlo, pero jamás llegó a hacerlo. ¿Por qué él? ¿Qué veía en él que quería arrastrarlo a su oscuridad? No tenía idea y la desesperación le hizo preguntar algo que quería y a la vez no quería saber.

por **Asagi Dunkelheit** Jue Jul 27, 2017 1:29 am

Observó la forma en la que se ‘rendía’, y eso le hizo aminorar su insistencia. No dejó de acariciar esa piel que lucía tan viva y hermosa. Observó esos orbes color cielo y se perdió en ellos. En ese momento simplemente se concentró en sus facciones, y reafirmo el porqué de sus acciones en aquella ocasión. Verlo con terror era normal, después de lo que le había hecho y el estado como lo dejo, no era algo fácil para un ser humano como él. Sin embargo, había algo en Alexis… no era un miedo profundo. Sabía o se sospechaba que el chiquillo había superado aquello de alguna manera y alguien estaba detrás de ello. Y que ahora podía ser tomado de esa forma que tanto deseaba sin rememorar lo sucedido.

Te quiero a ti. -Respondió con firmeza, sin dejarle de verlo con seriedad. Y es que hablaba en serio. A pesar de todo eso era lo único que deseaba. Pudo ver el terror, el asco, y todas esas emociones proyectadas en las facciones del castaño. -No quiero dejarte ir. Ya lo hice una vez. -Susurró contra sus labios al acercarse. -Quiero tomarte, reclamarte como mío, porque sé que alguien más pretende hacerlo contigo… Necesito… marcarte. -Sonrió. -Pero sin lastimarte esta vez.

Besó aquellos labios al notar que cerraba los parpados y acarició despacito aquellas facciones. Le soltó poco a poco y se alejó un par de pasos… tomó su mano derecha y le sonrió. Esa pregunta era un tanto difícil de comprender, o quizás su respuesta no la comprendería el otro.

Para una bestia como yo, tú eres lo mas atrayente que ha cruzado en mi eternidad. Puse los ojos en ti, y me hiciste enloquecer. -Le jaló para poder hacerlo caminar y llevarlo a otro sitio. -No pongas resistencia, camina. Esta vez prometo no hacerte daño alguno. Solo entrégate a mí. -Entrelazo sus dedos con los aje

nos.

por **Alexis VanVollehoven** Jue Jul 27, 2017 2:07 am

Verle de aquella forma era un tanto extraño, sus palabras no concordaban con sus recuerdos y eso le hacía snetir mareado de alguna forma. La confusión que ponía un velo en su mente empezaba a pesarle.

Sus besos eran extraños, pero había algo en él. Había escuchado sobre la naturaleza atrayente de los vampiros, pero la vez anterior no la había sentido. Esta vez sin embargo, pudo notarlo. Era sutil, pero podía darse cuenta del aura que rodeaba a ese ser inmortal a pesar de que ya no era 'humano'. as palabras que había usado le provocaron un escalofrío. ¿Marcarlo? ¿Cómo? Le parecía algo de lo cual temer, independientemente de que prometiera no lastimarlo. Marcar a alguien como su propiedad, eso no le gustaba nada.

Negó con la cabeza aunque no intentó huir a pesar de que parecía tener la oportunidad. No quería generar una huída que fuese a terminar frustrada un momento después. Baj´la mirada y su propio ser se estremeció antes la idea -¿Qué pasa si digo que no? -Preguntó casi con firmeza. Sin embargo, su mano temblaba mientras él la sujetaba y no encontraba el momento para apartarla. Aún quería correr, pero su cuerpo no respondía adecuadamente pues su mente era un torbellino difícil de calmar.

Alzó la mirada encontrándose con aquellos ojos y se apartó rápidamente, dándose cuenta de que no podía caer en aquel juego. No dejó de mirarle, solo había dado un paso atrás, Su respiración se había calmado, pero no estaba tranquilo en absoluto. No, había alguien esperando por él. No podía permitir que aquel ser simplemente hiciera con él lo que quisiera. Tenía que calmarse y sali de ahí cuanto antes si no quería perderse a sí mismo en la oscuridad.

por **Asagi Dunkelheit** Jue Jul 27, 2017 2:38 am

Quiso decirle que no tuviera miedo, que no temblara, pues podía sentir aquello al estarlo sosteniendo. Suspiró y solo escuchó lo que decía. Observó el comportamiento del otro y la forma en la que evitaba mirarlo.

No quería dar un respuesta que pudiese alejarlo de golpe y provocar algo peor. Pero sabía que si Alexis se negaba él sin dudas terminaría matando al brujo. -Simplemente te tomaré a la fuerza. -Murmuró al acercarse y tomar aquel rostro con ambas manos. Le parecía el ser mas perfecto en aquel instante tanto que se permitió olvidar a aquel ser que tanto decía amar, o el que al menos debería estar en sus pensamientos en ese momento. Pero ver a Alexis había cambiado todo en aquella noche.

Te dejaré libre, solo tienes que cooperar y ser mío hasta el último día de tu vida. -Susurró sobre sus labios al acercarse a aquellos. Le penetró con la mirada como queriendo desnudar aquella alma. Marcarlo como suyo solo sería el primer paso. No quería perder a Alex, deseaba mantenerlo como un amante, pero lo deseaba con una desesperación única. -¿Es que acaso tienes a alguien? -Sonrió sabiendo que daba en el clavo. -Si no fuera por eso, estoy seguro vendrías conmigo.

Necesitaba convencerlo pero sabía que con él las amenazas no servirían. Se acercó de nuevo a aquellos labios y le observó por varios segundos que le parecieron eternos. Se perdió en aquel color cielo y sus manos bajaron por la espalda del castaño metiéndose debajo de la prenda. Quería arrastrarlo con él.

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