Aquí entre nos, los muertos se divierten más.

por **Odette Pullex** Miér Mar 28, 2018 1:17 am

-Necesito dejar de hacer cosas por gente que no valora nunca mi esfuerzo- Refunfuñe al mismo tiempo que buscaba con la mirada el nombre que indicaba la nota. En aquel cementerio las cosas parecían ser más animadas que en la realidad que vivía en Paris. –Vaya, aquí deben de estar pasándosela mejor.- Bromeé en voz alta mientras asomaba la cabeza hacia el interior de un pequeño mausoleo. –Aunque dudo que las cosas puedan mejorar en tu caso- Añadí al señalar al ángel que sostenía las puertas.

-Al parecer las alas no te excluyen de formar parte del club de los sirvientes.- Había estado merodeando el mismo lugar inconscientemente, y sin obtener nuevos resultados.

Después de haber recorrido el lugar con absoluta dedicación, llegue a un punto de quiebre y los cuestionamientos personales apenas comenzaban. –Probablemente ni siquiera está muerto.-
Patee la piedra que se encontraba entre el grisáceo pasto.

-¿Por qué siempre me tocan los trabajos raros?- Volví a patear la piedra, pero esta vez ejerciendo más fuerza hasta que la misma logro que la perdiera de vista. –Este tipo de cosas son más para Sylvana.-
Me estremecí por la fuerte brisa que me golpeaba por sorpresa, e instintivamente gire hacia el origen de esta.

Una gran lapida triangular yacía al final del pasillo, imponente y casi brillante por la luz de luna. -¿Cómo es que no te vi?- Trate de acercarme con paso firme pero algo en mi interior me llamaba a la cautela.

-Este no es tu territorio, adéntrate más y la única anfitriona que encontraras será tu muerte.- La amenaza había erizado cada cabello de mi cuerpo, y sin embargo seguía sin ser suficiente.
Mis pies pesaban cual anclas, pero cada paso era un pequeño triunfo y un acercamiento hacia el final de mi tarea.

-Conmigo aprenderás que hay peores cosas aparte de morir.- Sonreí y deshice el perfecto tocado que adornaba mi cabeza.

por **Sylvana Di Angelo** Miér Abr 04, 2018 10:59 pm

Balanceo las piernas de manera delicada, una después de otra mientras alzaba la mirada a la copa de aquel gran árbol en medio del cementerio, su lugar predilecto al que iba algunas veces después de visitar su propia tumba, cantando en voz baja una antigua nana que su madre le había enseñado.

Se sentía relativamente tranquila. Su trabajo como informarte estaba dando resultados favorables la mayor parte del tiempo, logrando alertar a varios clanes, familias y manadas de diferentes lugares para mantenerlos a salvo. Aquello le brindaba una paz que pocas veces podía sentir para sí misma.

Sosteniendo el dije en forma de lagrima que colgaba de su cuello entre sus manos, la melodía cambio a una más triste y melancólica sin que ella pudiera evitarlo, añorando como siempre el calor de su familia.

Sin embargo, el movimiento que llego a captar por el rabillo del ojo la hizo callar de inmediato, ocultando su presencia al abandonar su forma corpórea para empezar a flotar entre las ramas, su vestido y cabellos agitándose de manera grácil y libre mientras ella se acercaba solo un poco, sonriendo al reconocer aquella figura.

Tuvo que evitar reír al ver como Odette se quejaba en voz alta, sin entender del todo el por qué estaba ahí.

—No me menciono que tuviera algo que hacer—pensó la fantasma, aun sin revelar su presencia, observando su ir y venir, su pequeño dialogo con una estatua, la mención hacia su persona que casi la hizo bufar hasta que al final se detuvo frente una enorme lapida que pocas veces volteaba a ver.

Noto la tensión en su cuerpo antes de que liberara su cabello, señal de que estaba lista para comenzar una pelea.

Sylvana no pensaba quedarse al margen.

Sonriendo de manera traviesa, se colocó detrás de su espalda, apoyando sus manos en los hombros de la cambiante antes de hacerse visible.

—¿Qué trabajo es mas de mi tipo, Odette? —pregunto la mujer en tono jocoso, dejando que su frio aliento chocara contra la oreja de su amiga—. ¿En qué te has metido ahora?

Aquí entre nos, los muertos se divierten más.

Aquí entre nos, los muertos se divierten más.

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