Ronda al atardecer [Kaine de Ronsard]

por Invitado Dom Abr 17, 2011 3:31 pm

Recuerdo del primer mensaje :

Todo París era nuevo para mi y quería conocer todos sus rincones, aquel día había decidido no salir a tocar sino dar un paseo lejos de las concurridas calles centrales. Atardecía y el cielo se pintada dorado, mandarina y violeta, era una visión hermosa, era como para tocarle una pieza en violín. Me quedé parado observando el cielo y la poca gente que caminaba por esta zona.

El ruido, tantas conversaciones, los cascos de los caballos, todo me aturdía a veces y sólo quería calma, así que me alejé de todo aquello por propia voluntad, una tarde nada más. No trabajar un día no me iba a hacer más pobre de lo que soy, de todos modos.

Debo parecer un loco, aquí en medio de la calle viendo el cielo como si en él descifrara mensajes trascendentales para el mundo, como si en él pudiera encontrar respuestas a mis preguntas, pero no, sólo lo observo por el simple hecho de hacerlo, porque es hermoso, porque nunca me detengo como hoy a observarlo, cuántos cielos tan maravillosos me he perdido por esta negligencia.

Suspiro, hay algo en este lado de la ciudad, y en el cielo, claro, que me tranquiliza, parece que siempre estoy ansioso y azorado. Luzco como un veinteañero, pero soy un cuarentón desesperanzado.

por Invitado Miér Mayo 18, 2011 4:37 am

Se alegró que al menos el saludo fuera correspondido, tal vez podía iniciar de nuevo, tal vez hasta llevarse bien, quién sabe. Un perro saltó a él y pensó que lo iba a atacar por tocar a su dueño, pero antes que pudiera quejarse una húmeda lengua, enorme y rasposa le llenó el rostro de baba, cerró los ojos y no tuvo tiempo de meter las manos si quiera.

-Eso creo -respondió cuando el perro lo dejó en paz y se limpió con el antebrazo, miró a Kaine, desde su ropa hasta su nombre supo que eran diferentes, que provenían de sitios completamente opuestos, pero aunque ambos mundos podían chocar, también podían complementarse-, parece que te gustan mucho los perros -se puso en cuclillas y acarició a ese que había mostrado agrado por su persona-, debe ser difícil mantener en orden a todos -alzó la mirada hacia Kaine, debía serlo, alimentarlos, limpiarlos, evitar que se pelearan entre ellos y con otros perros, o que atacaran a alguien, pues parecían muy protectores con su amo.

Offrol: no te preocupes, yo también tardé siglos ._.

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Re: Ronda al atardecer [Kaine de Ronsard]