Duele...[Privado]

por Invitado Vie Abr 22, 2011 12:12 pm

-"Joder, de nuevo te has quedado dormido en un sitio como este"

Un gemido suave acarició sus labios mientras se masajeaba la frente detectando un rastro de polvo y suciedad que se habia impregnado en sus facciones, sabia que estaba solo debido a su aspecto especialmente porque no tenia donde caerse muerto en alguna loseta, habia intentado vivir en los lugares abandonados de Paris pero el simple miedo que le producia en las noches que alguien le descubriese pudo mas que su yo oscuro y se tuvo que marchar corriendo, se apretó un momento la piel del brazo, dolia un poco.

Habia tenido una pelea en la mañana y habia ido a ese sitio tan hermoso para curar sus heridas, pero en vez de eso se habia quedado dormido del cansancio, se abrió la camiseta y vió una herida que seguramente estaria infectada, pero no era muy importante o profunda asi que no le tendió toda la importancia que debia y se incorporó, quitándose un poco el polvo de las ropas, no hizo caso a la voz en su cabeza que se burlaba y buscó una de las fuentes que habia allí.

Se lavó las manos, la cara, se hecho agua en los cabellos y tambien en la herida, imaginaba que el agua se volvía negra de toda la suciedad asi como de la falta, de la poca pureza que poseía disturbia y de que era lo mas parecido a un demonio que habia pisado este planeta, por un momento más se fijó en su reflejo mientras seguia hechando agua a la herida quitandose los restos de sangre que tenía debajo de la herida-

Ya no...duele tanto.

por **Ginebra Le Boursier** Vie Abr 22, 2011 12:30 pm

Lejos de mi observe un pequeño joven, el entre las multitudes seria como un gato indefenso entre temibles leones. Notaba que estaba herido, impregnado en suciedad y un estigma en su alma, no podía dejarlo así. No me permitía dejarlo así.

Hice uso de mis habilidades aumentando mi velocidad y apareciendo a metros del joven, para luego aparentar como si no hubiese pasado nada en estos instantes estaba en pleno uso de mi conciencia. Llevaba un rato que bebí un poco de sangre humana, no los mate pero fue sumamente divertido tenerlos como una presa indefensa.

-¿Necesitas ayuda? ¿Te puedo ayudar? - comente en un tono dulce.

Sus heridas eran de una riña que tuvo lugar un tiempo antes, los cortes eran profundos y los siseos de dolor fuertes. El pequeño era de clase baja, un poco mas de razón para ayudarlo.
Aun recordaba el sufrimiento que es estar dentro de esa clase, abusos y ningún respeto hacia a ti, preocupado siempre al siguiente día sobre que comerías. Si serias capaz de soportar otro día más de tu condena. Ahora que era inmortal, no comía alimentos humanos y gracias a eso tenía la oportunidad de juntar su fortuna.

-¿Cuál es tu nombre? -

por Invitado Vie Abr 22, 2011 1:44 pm

-Cuando alguien se posó a su lado su cuerpo se tensó mirando en dirección a donde habia escuchado esa voz, tenso...asi permaneció apretando la fuente con las uñas mientras las gotas de agua finalizaban su recorrido de su frente a su barbilla, algunas caian al agua pero otras morian en su cuello y su camisa ¿le estaba hablando a el? era extraño que le hablasen de ese modo incluso porque estaba muy sucio y nadie se habia atrevido a hablarle especialmente por su aspecto.

"Pero ahora te has duchado un poco, mira, hasta se te acercan las mujeres"

Su yo interior se lo tomaba a broma todo, incluso ahora cuando el interior de disturbia estaba confuso porque no sabia si aceptar o no la ayuda, era una mujer muy linda eso hacia que dudase doblemente de lo que quería hacer. Siempre habia tenido ese pensamiento maldito que se adelantaba a todo pero es que habia permanecido mucho tiempo encerrado sin poder confiar en las personas porque muchas veces las personas en las que se confiaban eran las que antes te traicionaban por sus propios intereses-

Disturbia

-Habló rapido, para él esa pregunta no habia sido como una charla sino que se lo habia tomado como una orden, sus orbes volvieron a fijarse en el agua mientras su reflejo ahora parecia un poco mas calmado que antes, ya no tenia tanta suciedad y podian verse sus ojos, aunque los seguia escondiendo bajo una mata de cabello que escondia su rostro-

¿El suyo?

-recordó las palabras de Kei acerca de ser mas sociable con las personas, porque no tenia que verles como sus "amos" aunque era inevitable, cualquier cosa que ella dijera lo tomaria antes como una orden en vez de por una conversación normal porque nunca habia sido del tipo de persona que pudiera charlar normalmente con las personas-

por **Ginebra Le Boursier** Vie Abr 22, 2011 2:05 pm

Sonreí tiernamente, tome sus manos acariciándolas un poco. Estaba lleno de heridas sus manos se encontraban llenas de moretones y raspones, me daba ternura encontrar a alguien a sí, indefenso y frágil, llamando a gritos la ayuda de alguien. Note cuando su cuerpo se tenso, de alguna manera se encontraba nervioso.

- ¿Disturbia? - pensé un poco preocupada, grito su nombre como si yo le hubiese ordenado algo. Como si hubiesen dado una orden.

-Tranquilo Disturbia, yo no soy superior a ti para que hables de esa manera- aleje el cabello de sus ojos, tenía unos ojos hermosos lo que hacía que el acapara mas mi atención. –Mi nombre es Ginebra le Boursier, no te hare daño si eso es lo que crees-

Solté sus manos levemente, sin querer dañar su cuerpo. Este joven lucia como un diamante ante mis ojos, era algo único y que antes no había visto. Bueno solo una excepción, Tani. Solo que el tenia un gemelo, llamado Tetsu. Tani en verdad era un chico tierno, no le haría daño ni a una mosca. Sin embargo, Tetsu siempre hacia berrinche o trataba de que la atención, de alguna manera fuese solo de él.

-Puedes confiar en mí- de un pequeño portafolio saque el collar que antes había comprado, de oro y piedras preciosas.Algo que solo había pensado regalar a alguien importante, Disturbia comenzó a serlo –No podría hacerte daño- susurre de la manera más sincera que podía.

por Invitado Sáb Abr 30, 2011 5:24 am

-Estaba completamente confuso pensando que no era bueno que una mujer le estuviera ni acariciando ni tomando de las manos, abrio y cerro la boca pensando que no podia ser tan dificil formular alguna frase pero solo estaba arrugando el ceño al alejar un poco su rostro de aquellas manos que ahora tomaban con familiaridad su cabello. Nadie le habia tocado ni tratado de ese modo asi que no era para menos que se comportase de ese modo porque le estaban gritando en su interior que no era nada mas que una trampa

¿que no era superior decia? lo era, con creces aquella mujer tenia el mismo aroma que el de su padre pero se comportaba distinto incluso parecia como si fuera su amo quien le habia salvado en aquel entonces del castillo, su yo oscuro se reia volviendo a burlarse de disturbia cruelmente pero ya estaba tan acostumbrado a las burlas que no le importaba e incluso ignoraba los chirrios de sus entrañas-

No, no me va a hacer daño confio en usted mad..mademo-mademoiselle ¿Se dice asi? Ginebra, Mademoiselle Ginebra

-Sintio tranquilo cuando le solto las manos, Hasta su propio amo sabia lo que sucedia cuando le tocaban en exceso a disturbia incluso el se tenia que limitar a los contactos con los ojos porque no le gustaba demasiado los toques, las caricias, le hacian sentir extraño por mucho que le gustasen, de nuevo repitio que no le iba a hacer daño y disturbia de nuevo asintio hasta que vió que habia sacado un collar precioso-

El quiere el collar para venderlo y poder comer, no me lo de si es importante, es mejorque lo guarde

-"IDIOTA"

El grito hizo que disturbia mirase hacia otro lado, podia escuchar como si alguien apretase las mandibulas en su interior haciendo que hasta sus venas doliesen era su otro yo que queria robar aquel collar para gastarlo en cualquierlujo de tercera necesidad como alcohol o tabaco cosas que no se necesitasen mientras que disturbia el que ahora estaba hablando con la mujer solo queria protegerla de su otro yo, de aquel monstruo que despues de todo era asi como le habian llamado, "monstruo"-

por **Ginebra Le Boursier** Miér Mayo 04, 2011 8:08 pm

-Lo lamento, ¿te incomode?-

Se notaba totalmente cohibido, no le haría daño. Lo único que hice fue alejarme de el, solo para que se sintiera seguro de ninguna manera pensé en incomodarlo. Era bastante obvio que se incomodara después de que me tome tales confianzas con él.

-Discúlpame por favor, me tome mucha libertad-

Incline mi cuerpo en señal de reverencia y no tardo mucho para que me reincorporara, pensé durante unos momentos sobre todo lo que sufría el joven enfrente de mí. Tenía heridas, entre otras cosas y lo único que hacía era portarse sumiso.

-¿El? ¿De quién me hablas? Oh entiendo, ¿tienes hambre? Te invito a comer entonces- Le brinde una sonrisa leve esperando su respuesta, el collar no me preocupaba demasiado era solo algo material. Otra cosa remplazaría su lugar.

[OFF: Lamento la respuesta tan corta, sin tiempo]

por Invitado Miér Mayo 25, 2011 1:18 pm

-No queria sonar descarado pero cuando se alejo suspiró tranquilo, no queria parecer alguien que no tenia modales pero no estaba acostumbrado a quel alguien estuviera tan cerca de él sin golpearle o sin pedirle algo de dinero como hacian muchas ocasiones los que habitaban Paris y no solo ellos sino en todos los sitios tenia que tener cuidado de hacer lo que quisiera-

No se preocupe madm..mad..

-De nuevo se encontró trabado con el francés, era dificil pronunciar aquellos distintivos para mujer y caballero asi que solo suspiro asintiendo, bajando el rostro, aun notaba los golpes en su cabeza que su otro yo estaba excibiendo, queria salir, queria tomar a la mujer alli mismo y luego robarle pero el propio disturbia detuvo aquellos pensamientos-

¿No seria mucha molestia?

-Pensó mientras colocó las manos en su estomago, llevaba algunos dias sin comer y lo que comia eran manzanas podridas o algo de carne en mal estado que al final le causaba vomitos, pero no tenia nada que comer, sabia que tenia la casa de su amo abierta para lo que quería pero al mismo tiempo...no queria ser una molestia, muchas veces cuando estaba al borde de la muerte por hambre iba a casa de su amo, comia todo lo que podia y despues se acostaba largos dias, sonrio suavemente volviendo a mirarle a los ojos a aquella mujer besando debilmente su mejilla-

Gracias...

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