En medio de la muchedumbre (Marko Santini)

por Invitado Miér Abr 27, 2011 1:27 pm

El sonido de la gente era ensordecedor, todos andaban de aquí allá mirando las mercancías y revisando los puestos tratando de buscar algo necesario, ya sea comida vestimentas y muchas cosas mas, o bien tratando de encontrar cosas mas vánales como joyas y adornos para lucir, mientras tanto por su parte, kaine caminaba animadamente entre la muchedumbre, el a diferencia de la mayoría de los que se encontraban ahí aun no sabia lo que buscaba, trataba de encontrar algo entretenido en interesante, un artilugio que lo hiciese sentirse como en una historia de embrujos o tal vez un monstruo marino, o quizá quizá quiza… el pastel mas rico del mundo. Bueno, tal vez lo que buscaba no lo encontraría a ahí pero nunca se sabía…miro en los puestos de libros viejos y abrió una pagina al azar leyendo una de las frases

"Lizzie Borden cogió un hacha"
y dio cuarenta hachazos a papá,
cuando vio qué había hecho,
dio cuarenta y uno a su mamá..

Sonrió al escuchar el sonido de su propia voz recitando aquella frase a su parecer fascinante y dio media vuelta para hablar con el dueño, sin embargo al estar tan distraído choco con alguien- que te pasa idiota!!!-exclamo casi inmediatamente y por pura y mera inercia

por **Marko Tartani** Miér Abr 27, 2011 11:52 pm

El día iba viento en popa los días habían pasado de grises a coloridos como era de esperarse en primavera. “Primavera, que recuerdos nos traes a la cabeza, primavera qua tanto odiamos en nuestras vidas… Primavera que con tus colores asustas la mente de un simple mortal” No entiendo a qué se debe tu extraño estado de ánimo, primero odio las primaveras por las razones que ya conoces y tú me sales con estas estupideces… segundo no tiene nada de especial esta estación es la que me recuerda que desde hace años estoy completamente solo, asi que evita tus comentarios sarcásticos que me cagas el día. “Sé muy bien lo que te produce esta estación del año, pero ya han pasado 14 años… ¿es tiempo de dejar las cosas atrás? Marko, No hay mal que dure cien años, ni cuerpo que pueda con él” En realidad no te entiendo, sabes que me mantiene vivo la esperanza de encontrar a mi hermana y tú quieres que me olvide de aquello. Olvídalo eso jamás lo hare. Las discusiones en la cabeza de Marko lo hacían subir y bajar en la ruleta de las emociones, un momento podía andar bien pero al segundo después podía ser la persona más pedante que se pudiera conocer.

Sus pies lo guiaron al mercado ambulante donde gente había por montón y de alguna forma u otra hacían que la voz en su interior se escuchara menos ya que la multitud hablaba y gritaba en todas direcciones, algunos ofreciendo productos y otros alegando por los mismos. El brujo andaba en busca de libros ya que eran los únicos que lo ayudaban a mantener la calma cuando todo parecía desvanecerse bajo sus pies. Un choque y unas palabras lo sacaron del extraño trance que llevaba mientras su caminar era detenido. –¿Idiota? Tú fuiste el que tropezó conmigo. – dijo con algo de molestia en su tono de voz y en la expresión de su rostro.

“Mmmh un espécimen interesante y como todos los que hemos conocido últimamente con un secreto tras ese rostro y esas expresiones. Insolente y quizás malcriado, pero ¿Yo soy asi también?. Sabes creo que el… puede ser alguien que te saque de quicios y asi podras al fin sacar al MALDITO que hay en tu interior.” Primero vas con los recuerdos y ahora quieres que me ponga malo, quien te entiende… Yo debería pero debo admitir que nuestros pensamientos son muy diferentes en todo sentido.

por Invitado Vie Abr 29, 2011 10:43 am

Kaine escucho al extraño responder bruscamente ante su grito, pero él no estaba escuchando, volteo por todos lados buscando el libro que traía en las manos, lo haba dejado caer al suelo donde había otro montón de libros apilados por todas partes, debería haber caído bastante cerca pero no sabía por qué no lo encontraba, miraba por todas partes hacia bajo, sin embargo aunque estaba distraído en otra cosa no pudo evitar contestar

- Muérete quieres???-sin duda no era bueno contestar cuando ni siquiera era habías escuchado a la otra persona y eso lo tenia muy presente, pero era una mal costumbre que aun con el paso de los años no se había logrado quitar, y lo peor del asunto no era que contestara si escuchar, sino que además siempre se refería a las personas de forma grosera y altanera sin importarle nada, a veces incluso lo hacía sin darse cuenta porque ya lo había tomado como su forma habitual de hablar

- Si no te vas a fijar por donde andas mejor no salgas de tu casa-comento con aires de superioridad mientras su vista se perdía entre las pilas y pilas de libro que había cerca, y mientras estas palabras salían de su boca, en su mente solo había una cosa “¿Dónde quedo el maldito libro…?”

por **Marko Tartani** Lun Mayo 02, 2011 9:27 pm

“Que fastidio de persona, Marko aléjate del lobo feroz… parece que no le dieron de comer” La risa malévola en el interior del brujo retumbaron en todo su interior y de alguna forma el también quiso reírse pero se quedo en completo silencio, intentando medir las palabras del joven. Hasta llego a pensar que había sido su culpa, pero no era así. “Déjate de pensar estupideces… eso déjaselo a los imbéciles como el que no saben o mejor no tienen ni un centímetro de educación… vamos no creo que haya algún libro de tu interés…” No, no me iré… el los conoce… el los conoce. Fue lo único que pudo decir a su cabeza mientras miraba con una sonrisa de medio lado al lican.

¿Por qué tan simpático?- le pregunto sin moverse ni un solo paso impidiéndole que el mismo lican pudiera pasar a otro lugar. – No deberías andar maldiciendo- negó con la cabeza – Mal educado – le replico, se agacho rápidamente para recoger el libro… - ¿Esto es lo que buscas? – levanto la mano para que no pudiera alcanzarlo. “El fastidia tú haces lo mismo… caes en un maldito juego de niños Marko, y averiguare a quien conoce este pequeñín… si es pequeño… pero… bueno el resto de la historia ya te la sabes”. Marko simplemente hizo lo que le parecía lo más divertido, no estaba para que vinieran y lo insultaran si no había sido su culpa. – Tu deberías, haberte quedado en casa si ibas a andar de tan mal humor – miro el libro que estaba sobre su cabeza.

“Anda cómpralo y que se cague el mal educado, no tengo interés en alguien así… y no sé qué haces aun tu ahí parado como… como imbécil” Eris tú no eres la más educada del planeta.. “Pero a diferencia de el… solo tú me escuchas… Ya calla y veamos con que nos sale. Sonrió ampliamente viendo la cara del joven de rasgos orientales.

Se quedo estudiando en silencio cada, movimiento por milimétrico que fuera del que tenía en frente, de alguna forma se le hacía familiar pero no sabía, ni donde, ni cuándo; llego a pensar que quizás había aparecido en alguna visión pero… El brujo recordaba todas sus visiones, su memoria fotográfica era muy buena y le sacaba provecho. Aquella duda lo carcomía por dentro, intrigando no solo a él si no a su voz que no dejaba de hablar en ningún momento.

por Invitado Miér Mayo 11, 2011 8:27 am

Kaine miraba para todos lados medio escuchando al brujo y sin prestarle mucha atención hasta que se metió en su camino escuchando lo que este preguntaba mirándole con aire malhumorado, lo observo unos segundos y vio como se agacho tomando el libro entre sus manos y alargo las suyas para tomarlo pero aquel libro se alejo mas de lo que hubiese querido ya que el muchacho al parecer trataba de hacerle una mala broma aprovechándose de su altura para molestarle

- Que mierda te pasa imbécil!!!!!!-exclamo molesto dando saltitos para tratar de alcanza el dichoso libro mientras miraba la mueca divertida del extraño- dame eso!!!! Y a ti que te importa si maldigo o si estoy de mal humor o lo que sea!!!-prosiguió tratando con todas sus fuerzas mientras sus dedos se movían nerviosamente como si no aguantasen las ganas de apretujar la pasta de cuero de aquella obra, los ojos le relampagueaban y apretaba los labios con una pronunciada mueca de disgusto, el no era ningún chiquillo para que lo estuviesen tratando de aquella manera, mas bien era un maldito viejo de 42 años amargado que gustaba de gritarle a la gente y cuyo hobbie era maltratar a todo aquel que le sacase de sus casillas, así que en vez de concentrarse en el libro se abalanzo sobre el brujo concentrando todo su peso en las mano y logrando que este se precipitase hacia atrás aunque el se también sufriera las consecuencias – Vamos dámelo!!!!!!-vocifero por ultima vez antes de que entre el montón de gente que corría alrededor de ellos en busca de ofertas y demás cosas se lograsen distinguir un grupo de animales de mirada amenazadora que los rodearon gruñendo con rabia pero manteniéndose al filo, Kaine noto las miradas de los caninos y se calmo un poco pero no aparto la vista del brujo- Dámelo!!

por **Marko Tartani** Dom Mayo 15, 2011 8:14 pm

“Parece que alguien se está aburriendo de tu comportamiento, tan solo mírale, como sigue con esa misma actitud. Anda compra el maldito libro y vamos por algo de entretención a otro lugar el cachorrito es simpático pero…” Vamos Eris, este libro ya lo tengo, no quiero dos del mismo…[/i] El brujo miro al joven y le dedico una sonrisa amplia, no estaba fastidiado si no lo contrario aquel parecía un. Sintió el peso del joven y antes de caerse dio un paso hacia a un lado, noto a los perros que habían a su alrededor y los quedo mirando con ganas de lanzarle algún objeto para que estos corrieran tras de él.

Toma ahí tienes tu libro – dijo serio, levanto las cejas y sin más remedio en sus palabras se fue al puesto que seguía al de los libros. Habían todo tipo de artilugios, de todos los precios posibles, desde finas joyas hasta simples cajas, sonrió a la señora que atendía y tomo un collar que tenía una piedra negra como colgante, era perfecto para la persona que tenía en mente. [i]“Déjate de imbecilidades y vamos a buscar algo interesante… me estoy aburriendo y de verdad cuando me aburro soy una persona insoportable y lo sabes” Ya, si pero te puedo callar fácilmente, te conozco y a lo largo de los años he aprendido mucho de ti mi querida Eris… “Lo se… lo se, pero hace algo entretenido…” Bien… Hagamos un par de ilusiones para fastidiar a nuestro amigo…

El brujo dejo el collar en su lugar y avanzo a otro puesto, se quedó entre la muchedumbre e hizo aparecer cuatro Marko’s por así decirlo, que con facilidad comenzaron a rodear al joven de rasgos asiáticos, las ilusiones no podían morir, si las tocabas no desaparecían además que al sentirla solo se sentía algo frio y sin vida, podían hablar y pasar desapercibidas si así uno quisiese… Marko se quedó mirando entre la multitud esperando a ver qué haría el lobo.

Off: siento lo corto... ando sin inspiración...

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