AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
Espacios libres: 11/40
Afiliaciones élite: ABIERTAS
Última limpieza: 1/04/24
En Victorian Vampires valoramos la creatividad, es por eso que pedimos respeto por el trabajo ajeno. Todas las imágenes, códigos y textos que pueden apreciarse en el foro han sido exclusivamente editados y creados para utilizarse únicamente en el mismo. Si se llegase a sorprender a una persona, foro, o sitio web, haciendo uso del contenido total o parcial, y sobre todo, sin el permiso de la administración de este foro, nos veremos obligados a reportarlo a las autoridades correspondientes, entre ellas Foro Activo, para que tome cartas en el asunto e impedir el robo de ideas originales, ya que creemos que es una falta de respeto el hacer uso de material ajeno sin haber tenido una previa autorización para ello. Por favor, no plagies, no robes diseños o códigos originales, respeta a los demás.
Así mismo, también exigimos respeto por las creaciones de todos nuestros usuarios, ya sean gráficos, códigos o textos. No robes ideas que les pertenecen a otros, se original. En este foro castigamos el plagio con el baneo definitivo.
Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos autores y han sido utilizadas y editadas sin fines de lucro. Agradecimientos especiales a: rainris, sambriggs, laesmeralda, viona, evenderthlies, eveferther, sweedies, silent order, lady morgana, iberian Black arts, dezzan, black dante, valentinakallias, admiralj, joelht74, dg2001, saraqrel, gin7ginb, anettfrozen, zemotion, lithiumpicnic, iscarlet, hellwoman, wagner, mjranum-stock, liam-stock, stardust Paramount Pictures, y muy especialmente a Source Code por sus códigos facilitados.
Victorian Vampires by Nigel Quartermane is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://victorianvampires.foroes.org
Últimos temas
Hijo de la luna...
2 participantes
Página 1 de 1.
Hijo de la luna...
Tonto el que no entienda… cuenta una leyenda….
Cerro el libro que tenia frente a si sin lograr concentrarse realmente, estaba en el estudio de una vieja casona en la que vivía desde hacía unos 5 años, ya se había acostumbrado a la ciudad y tenía una rutina diaria bien establecida. Normalmente podía ir a la cama con tranquilidad pero ese día… ese día no podía, había algo extraño en el ambiente, una sensación rara en su pecho …algo extraño, un vacio…una necesidad inquietante…
Dejo el libro en la mesita de noche y se masajeo el pecho sin entender qué diablos le pasaba… suspiro, tal vez solo era demasiado trabajo… estaba inquieto y ya que un libro no estaba ayudándole a conciliar el sueño tal vez una caminata pudiese ayudarle… le gustaba salir por las noches y aquel lugar era tranquilo, los índices de delincuencia eran bajos y de cualquier modo el siempre había tenido una suerte estupenda, nunca le habían asaltado ni había sufrido alguna clase de ataque en su vida, así que no tenia aquel sentido del peligro que normalmente tienen las personas, el sentido de preservación en él era casi nula.
Bajo los escalones del pórtico de dos en dos y suspiro al sentir el aire frio golpear su rostro, la noche era tranquila y sonrió al levantar la vista y ver la luna llena en todo su esplendor… la noche estaba callada … de algún modo reconfortante. Sus pies se movieron sin seguir rumbo alguno y cerró los ojos un segundo escuchando el sonido de sus propios pasos, las calles le eran tremendamente familiares sentía que podía verlas aun a través de los parpados cerrados, mientras apreciaba el sonido del silencio mismo ser roto por el golpear de sus zapatos contra el suelo.
Dejo el libro en la mesita de noche y se masajeo el pecho sin entender qué diablos le pasaba… suspiro, tal vez solo era demasiado trabajo… estaba inquieto y ya que un libro no estaba ayudándole a conciliar el sueño tal vez una caminata pudiese ayudarle… le gustaba salir por las noches y aquel lugar era tranquilo, los índices de delincuencia eran bajos y de cualquier modo el siempre había tenido una suerte estupenda, nunca le habían asaltado ni había sufrido alguna clase de ataque en su vida, así que no tenia aquel sentido del peligro que normalmente tienen las personas, el sentido de preservación en él era casi nula.
Bajo los escalones del pórtico de dos en dos y suspiro al sentir el aire frio golpear su rostro, la noche era tranquila y sonrió al levantar la vista y ver la luna llena en todo su esplendor… la noche estaba callada … de algún modo reconfortante. Sus pies se movieron sin seguir rumbo alguno y cerró los ojos un segundo escuchando el sonido de sus propios pasos, las calles le eran tremendamente familiares sentía que podía verlas aun a través de los parpados cerrados, mientras apreciaba el sonido del silencio mismo ser roto por el golpear de sus zapatos contra el suelo.
Jean Baptiste Fontaine- Realeza Francesa
- Mensajes : 312
Fecha de inscripción : 17/05/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
¿Cuánto más podría lograr soportar? Lo había intentado todo, había llegado hasta el límite de ser considerada loca, ella quería una familia ¿Pero quién quería una familia con ella? Recordaba la ultima relación seria que tuvo, la misma que se fue por un tubo cuando descubrieron que simplemente no podía estar completa porque le costaría trabajo quedar embarazada ¡Que ironía! En esos tiempos, ella no quería un hijo pero si quería a un hombre a su lado…lastima para ella, que los hombres no la consideraban suficientemente buena si no podía engendrar. Había acudido desesperada a uno de esos lugares de mala fama en donde los charlatanes se ganaban el dinero de otros solo para decir que un simple “hechizo” solucionaría sus problemas, le habían dicho que funcionaría, solo tenía que salir de su casa a altas horas de la noche y recitar unas cuantas oraciones a la luna ¡Lo haría escéptica o no! ¿Qué más podía perder? En realidad no tenía nada, solo su carrera pero no era del todo feliz.
-Favor con favor se paga ¿Qué quiere decir eso?-se burló mientras comenzaba a caminar por las calles desiertas y oscuras con el cárdigan pegado al pecho gracias sus propias manos, hacía frío pero ni el frío haría que se retractara de su, según ella, bizarro intento. Un parque fue su elección después de estar 15 minutos caminando, se sentó en uno de los bancos de color blanco que parecían más incomodos que normalmente aunque también se podía deber a que no estaba del todo segura de seguir con su pequeño juego de la bruja-Muy bien…ya estoy aquí, recuerda lo que te dijo el tipo ese ¡Vamos Zavannah, hazlo con fe!-se trató de animar pero eso no la ayudo mucho, una atea no es que creyera en muchas cosas y en su cuerpo no quedaba ni un gramo de fe pues se le había escapado en el trascurso del último año.
Sus dedos fríos y temblorosos abrieron el pequeño papel que tenía las palabras correctas para pedirle el favor a ese astro que iluminaba todas las noches, tomo una gran bocanada de aire antes de comenzar a hablar con susurros, repitió eso unas ocho o nueve veces, tanto así que casi creyó que en verdad tenia poderes sobrenaturales. Un escalofrío extraño e incómodo le recorrió la espalda, no había ido asustada pero justo en ese momento había empezado a tiritar del frío que se acrecentó extrañamente en solo cinco minutos, los pies la guiaron hasta una jardinera que tenía a dos metros, con los dedos comenzó a escarbar un hoyo lo bastante profundo para un papel que doblado en dos era del tamaño de una uva pequeña. Metió el papel dentro de su nuevo recinto, quito el prendedor de su cabello y se pinchó uno de los dedos, no se quejó, simplemente cerró los ojos…Una gran y brillante gota de sangre broto de la piel, apretó con fuerza para sacar toda la que necesitaba y volvió a echar tierra en el pequeño hoyo.
Salía de su escondite rápidamente pues un sonido le advirtió que tenía compañía. Se acicalo y salió de nuevo a la acera. Zavannah no había entendido las palabras del hombre quien le vendió el conjuro, ella era demasiado abrupta en sus decisiones, sobre todo en esa, como para ponerse a pensar que su deseo era tan grande como para que en verdad lo que hizo funcionara.
Off: No sabía como adaptar que una mujer estuviera haciendo un rito en el siglo XIX sin parecer una loca xD Espero te guste.
-Favor con favor se paga ¿Qué quiere decir eso?-se burló mientras comenzaba a caminar por las calles desiertas y oscuras con el cárdigan pegado al pecho gracias sus propias manos, hacía frío pero ni el frío haría que se retractara de su, según ella, bizarro intento. Un parque fue su elección después de estar 15 minutos caminando, se sentó en uno de los bancos de color blanco que parecían más incomodos que normalmente aunque también se podía deber a que no estaba del todo segura de seguir con su pequeño juego de la bruja-Muy bien…ya estoy aquí, recuerda lo que te dijo el tipo ese ¡Vamos Zavannah, hazlo con fe!-se trató de animar pero eso no la ayudo mucho, una atea no es que creyera en muchas cosas y en su cuerpo no quedaba ni un gramo de fe pues se le había escapado en el trascurso del último año.
Sus dedos fríos y temblorosos abrieron el pequeño papel que tenía las palabras correctas para pedirle el favor a ese astro que iluminaba todas las noches, tomo una gran bocanada de aire antes de comenzar a hablar con susurros, repitió eso unas ocho o nueve veces, tanto así que casi creyó que en verdad tenia poderes sobrenaturales. Un escalofrío extraño e incómodo le recorrió la espalda, no había ido asustada pero justo en ese momento había empezado a tiritar del frío que se acrecentó extrañamente en solo cinco minutos, los pies la guiaron hasta una jardinera que tenía a dos metros, con los dedos comenzó a escarbar un hoyo lo bastante profundo para un papel que doblado en dos era del tamaño de una uva pequeña. Metió el papel dentro de su nuevo recinto, quito el prendedor de su cabello y se pinchó uno de los dedos, no se quejó, simplemente cerró los ojos…Una gran y brillante gota de sangre broto de la piel, apretó con fuerza para sacar toda la que necesitaba y volvió a echar tierra en el pequeño hoyo.
Salía de su escondite rápidamente pues un sonido le advirtió que tenía compañía. Se acicalo y salió de nuevo a la acera. Zavannah no había entendido las palabras del hombre quien le vendió el conjuro, ella era demasiado abrupta en sus decisiones, sobre todo en esa, como para ponerse a pensar que su deseo era tan grande como para que en verdad lo que hizo funcionara.
Off: No sabía como adaptar que una mujer estuviera haciendo un rito en el siglo XIX sin parecer una loca xD Espero te guste.
Zavannah Dellepiane- Gitano
- Mensajes : 368
Fecha de inscripción : 27/04/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Ya se sentía mucho más tranquilo aunque aun no tenia sueño, suspiro, seguramente todos tendrían días como aquel, días en los que simplemente se sintiese inquieto. Volvió a respirar hondo, dirigió su mirada a la nada y curiosamente encontró algo, la figura de una bonita mujer castaña saliendo de debajo del puente... que estaría haciendo ahí? Y de noche?
-Disculpe- le llamo, desde donde estaba no podía verla bien, pero parecía indefensa y además bonita- se encuentra bien?- acercándose, tal vez se le había caído algo o alguien le había hecho algo, a saber que podría haberle pasado, aunque era una zona con poco crimen eso no quería decir que no existiera- perdón mi impertinencia, solo me preguntaba si necesitaba ayuda-hablo mientras se acercaba- o algo...-su voz bajo un poco cuando ella giro su rostro a el... no se había equivocado... era bonita, en verdad muy bonita! Se quedo mudo durante un segundo; ella tenía los ojos grandes, muy grandes, un rostro bello y facciones delicadas enmarcadas en el cabello castaño, cabello que deseo poder tocar… enredar sus dedos en el...
El rumbo de sus pensamientos le asusto y desconcertó al mismo tiempo, no era propio de el ponerse a fantasear con una mujer de la cual ni siquiera había escuchado palabra... tendría una voz tan bonita como su rostro? Se regaño a si mismo por la pregunta, la gente significaba mas que una cara bonita, quien sabe tal vez era una asesina o una maltrata perros o…o…que sabia el. Su cerebro no estaba funcionado muy bien de todos modos.
-Disculpe- le llamo, desde donde estaba no podía verla bien, pero parecía indefensa y además bonita- se encuentra bien?- acercándose, tal vez se le había caído algo o alguien le había hecho algo, a saber que podría haberle pasado, aunque era una zona con poco crimen eso no quería decir que no existiera- perdón mi impertinencia, solo me preguntaba si necesitaba ayuda-hablo mientras se acercaba- o algo...-su voz bajo un poco cuando ella giro su rostro a el... no se había equivocado... era bonita, en verdad muy bonita! Se quedo mudo durante un segundo; ella tenía los ojos grandes, muy grandes, un rostro bello y facciones delicadas enmarcadas en el cabello castaño, cabello que deseo poder tocar… enredar sus dedos en el...
El rumbo de sus pensamientos le asusto y desconcertó al mismo tiempo, no era propio de el ponerse a fantasear con una mujer de la cual ni siquiera había escuchado palabra... tendría una voz tan bonita como su rostro? Se regaño a si mismo por la pregunta, la gente significaba mas que una cara bonita, quien sabe tal vez era una asesina o una maltrata perros o…o…que sabia el. Su cerebro no estaba funcionado muy bien de todos modos.
Jean Baptiste Fontaine- Realeza Francesa
- Mensajes : 312
Fecha de inscripción : 17/05/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
No tardo ni dos segundos en dar tres pasos cuando una persona le hizo retroceder los mismos, pudo correr pero no lo hizo, cualquier en su sano juicio hubiera gritado como loco pero ella, no después de ver el rostro con el que se había encontrado. Era un chico demasiado apuesto, se sentía extremadamente tonta y extraña de estar vagabundeando por la noche en calles que a esas horas eran desconocidos para todos-Si estoy bien solo estaba-se pasó un mechón de cabello por detrás de la oreja, agradeciendo que la oscuridad ocultara el color rojo del que se habían teñido sus mejillas ¿Quién se preocupaba por una extraña? Nadie se acercaba a averiguar, no se cometían muchos crímenes en esa zona en concreto pero la verdad era que nadie conocía bien del todo a las personas-Si-acabo por decir tontamente-Es una de esas noches en que no sabes que hacer y tampoco puedes dormir-Zavannah había luchado durante mucho tiempo y estaba cansada, tan cansada que no se daba cuenta de lo que pasaba enfrente de sus ojos. Se había bloqueado automáticamente unos cuantos segundos para después dar paso a esos pensamientos que inevitablemente llegaron a su cabeza ¿Había funcionado? ¿Era él?
Advirtió después de unos segundos que no podía pensar así y que mucho menos tenía que seguir en medio de esa oscuridad-Soy Zavannah…creo que es peligroso que sigamos aquí-sonrió tratando de ocultar su encandilamiento con el joven. Era mucha su atracción hacia él y no solo física, era como una especie de imán que la jalaba en contra de su voluntad, nunca antes había sentido una necesidad parecida, el corazón le latía a un ritmo diferente del normal, amor definitivamente no era, no podía serlo pues apenas se acababan de ver, la afinidad como tal no existía entre lo que eran su persona y la del joven ¿Cómo es que pensaba tantas cosas en un solo minuto? Había olvidado aquel estúpido ritual que creyó le solucionaría tan sola que llevaba, había olvidado incluso que se había manchado las manos y que alguien seguramente preguntaría por ese hecho.
Se escondió las manos en las bolsas de los jeans, encogiéndose de hombros para mostrarse un poco menos intimidad por la oleada de sentimientos extraños que de un momento a otro la inundaron. Lo estaba mirando y no podía parar, no había actuado como una acosadora jamás y no era una niña para comenzar a hacerlo pero a veces era imposible detener las acciones que dictaba el cerebro-Debemos salir, no creo que a estas horas sea seguro.-sentencio con un tono de voz tembloroso provocado por el inminente frío que azotaba su piel apenas cubierta por el pequeño suéter gris que seguía apretando contra su tronco-Pero bueno yo no soy nadie para decirle u obligarlo a hacer algo-rió y por enésima vez en esa noche volvió a clavar sus orbes marrones en los de él.
Advirtió después de unos segundos que no podía pensar así y que mucho menos tenía que seguir en medio de esa oscuridad-Soy Zavannah…creo que es peligroso que sigamos aquí-sonrió tratando de ocultar su encandilamiento con el joven. Era mucha su atracción hacia él y no solo física, era como una especie de imán que la jalaba en contra de su voluntad, nunca antes había sentido una necesidad parecida, el corazón le latía a un ritmo diferente del normal, amor definitivamente no era, no podía serlo pues apenas se acababan de ver, la afinidad como tal no existía entre lo que eran su persona y la del joven ¿Cómo es que pensaba tantas cosas en un solo minuto? Había olvidado aquel estúpido ritual que creyó le solucionaría tan sola que llevaba, había olvidado incluso que se había manchado las manos y que alguien seguramente preguntaría por ese hecho.
Se escondió las manos en las bolsas de los jeans, encogiéndose de hombros para mostrarse un poco menos intimidad por la oleada de sentimientos extraños que de un momento a otro la inundaron. Lo estaba mirando y no podía parar, no había actuado como una acosadora jamás y no era una niña para comenzar a hacerlo pero a veces era imposible detener las acciones que dictaba el cerebro-Debemos salir, no creo que a estas horas sea seguro.-sentencio con un tono de voz tembloroso provocado por el inminente frío que azotaba su piel apenas cubierta por el pequeño suéter gris que seguía apretando contra su tronco-Pero bueno yo no soy nadie para decirle u obligarlo a hacer algo-rió y por enésima vez en esa noche volvió a clavar sus orbes marrones en los de él.
Zavannah Dellepiane- Gitano
- Mensajes : 368
Fecha de inscripción : 27/04/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Sonrió al escucharla, que bonita voz…parecía algo tímida y eso la hacía ver solo más bonita, metió las manos en sus bolcillos y sonrió ladeando el rostro- no te preocupes, creo que tienes razón, así que tampoco podías dormir? Lo mismo me ah pasado a mi- soltando una risita sin motivo aparente, solo se encontraba feliz de haber salido aquella noche.
-tienes tiempo? Pregunto sin que la sonrisa se apartara de sus labios- te invito un café… ya cenaste? Hay un restaurant muy acogedor por aquí cerca- normalmente no salía con nadie ni tenía por costumbre invitar a mujeres a salir y menos a las que conocía de poco. Pero le resulto sumamente natural invitarla. Sus ojos buscaron los ajenos, agachándose un poco como buscando su rostro sin que la sonrisa desapareciera- que dices? Nos tomamos algo?
El sonido del riachuelo bailaba en el aire cual susurro, las lechuzas le hacían eco y si se prestaba mucha atención tal vez podrían escucharse las voces humanas, las conversaciones en la distancia. Pero el no estaba prestando atención, solo estaba viendo a la muchacha que tenía en frente, la luna la iluminaba y el efecto etéreo de su rostro bajo ella resultaba mágico…
Aceptaría ella su proposición? Tal vez era poco probable, tal vez le pareciese un extraño sospechoso- por cierto mi nombre es jean, Jean Baptiste- extendiéndole la mano mientras hablaba- Que dices…una cena? Un café? Apiádate de este pobre solitario
-tienes tiempo? Pregunto sin que la sonrisa se apartara de sus labios- te invito un café… ya cenaste? Hay un restaurant muy acogedor por aquí cerca- normalmente no salía con nadie ni tenía por costumbre invitar a mujeres a salir y menos a las que conocía de poco. Pero le resulto sumamente natural invitarla. Sus ojos buscaron los ajenos, agachándose un poco como buscando su rostro sin que la sonrisa desapareciera- que dices? Nos tomamos algo?
El sonido del riachuelo bailaba en el aire cual susurro, las lechuzas le hacían eco y si se prestaba mucha atención tal vez podrían escucharse las voces humanas, las conversaciones en la distancia. Pero el no estaba prestando atención, solo estaba viendo a la muchacha que tenía en frente, la luna la iluminaba y el efecto etéreo de su rostro bajo ella resultaba mágico…
Aceptaría ella su proposición? Tal vez era poco probable, tal vez le pareciese un extraño sospechoso- por cierto mi nombre es jean, Jean Baptiste- extendiéndole la mano mientras hablaba- Que dices…una cena? Un café? Apiádate de este pobre solitario
Jean Baptiste Fontaine- Realeza Francesa
- Mensajes : 312
Fecha de inscripción : 17/05/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Las voces le gritaban a Zavannah desde lo más hondo que dijera que no, que diera la vuelta y fuera feliz de la forma en que le había tocado ser, no podía ilusionarse simplemente por una invitación a tomar café…igual ninguna regla decía que podía declinar y pasar un buen rato, el chico parecía afable, normalmente las buenas platicas salían de ese modo-Está bien acepto-rio ligeramente el escuchar el adjetivo que el mismo chico se auto puso-Pero solo un café-levanto el dedo índice y lo puso cerca de su rostro mostrando la blanca hilera de perlas que tenía por dientes, razonó cuando fue le última vez que había sonreído de esa forma…tan genuinamente gentil. Su juego de la bruja había quedado en el olvido cuando el chico la invito a murad de la noche en busca de una distracción para evadir la cama que al parecer no quería recibirlos para que conciliaran el sueño. Tal vez solo era una forma de entrever que tan mal se sentía estando sola pero eso era lo que menos le importaba ahora, por dos horas se le olvidaría que era lo que buscaba con tanto anhelo-Bueno y ¿Dónde es ese lugar? Yo vivo cerca, en realidad casi todo me queda de camino…no te preocupes en llevarme…lejos-formo con los labios una pequeña O, apretando y haciendo que las pequeñas líneas le dieran el aspecto hinchado a su boca.
Camino hacia atrás unos cuantos pasos, sin dejar de mirarlo esperando que siguiera el camino que los llevaría fuera de esas calles que no albergaban a nadie más que solo a ellos-¿Y porque no puedes dormir? ¿Que te quita el sueño?-tenían que tener un tema de conversación y que mejor que hablar con algo que los identificaba, giró dando vuelta sobre su propio eje para comenzar a avanzar a mitad de la calle con pasos pequeño, como si fuera una pequeña niña que apenas aprendía a caminar, volteo unas cuantas veces al darse de cuenta de que estaba dejándolo algunos pasos más atrás, lo miro por encima del hombro y sonrió, a esas alturas ni el frio que le revolvía ligeramente la melena castaña le impediría dejar de soltar sonrisas, nadie hubiera pensado que de salir se encontraría tal vez con alguien nuevo que la hacía olvidar, aunque sonaba muy raro, por unos momentos.
Camino hacia atrás unos cuantos pasos, sin dejar de mirarlo esperando que siguiera el camino que los llevaría fuera de esas calles que no albergaban a nadie más que solo a ellos-¿Y porque no puedes dormir? ¿Que te quita el sueño?-tenían que tener un tema de conversación y que mejor que hablar con algo que los identificaba, giró dando vuelta sobre su propio eje para comenzar a avanzar a mitad de la calle con pasos pequeño, como si fuera una pequeña niña que apenas aprendía a caminar, volteo unas cuantas veces al darse de cuenta de que estaba dejándolo algunos pasos más atrás, lo miro por encima del hombro y sonrió, a esas alturas ni el frio que le revolvía ligeramente la melena castaña le impediría dejar de soltar sonrisas, nadie hubiera pensado que de salir se encontraría tal vez con alguien nuevo que la hacía olvidar, aunque sonaba muy raro, por unos momentos.
Zavannah Dellepiane- Gitano
- Mensajes : 368
Fecha de inscripción : 27/04/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Se quedo un poco atras pues se detuvo un poco sacándose la chaqueta y la alcanzo cuando ella se giro el, era tan bonita...- toma cúbrete del frio-le sonrió y comenzó a caminar a su lado- el lugar que te menciono esta por aqui- haciéndole una seña hacia el frente y riendo un poco como burlándose de si mismo- aunque si eres de por qui seguramente lo conoces- cruzando el puente unas casas mas alla estaba un cafe pequeño, acogedor... habia apenas un par de personas que al parecer tampoco podian conciliar el sueño. Lograron vislumbrarlo aun a distancia.
-No podia dormir- comenzó a hablar, respondiendo a lo que la chica le habia preguntado- no has tenido noches asi? en las que inexplicablemente no puedes conciliar el sueño? como si algo...- hizo una pausa pequeña y movió la cabeza como si fuese una tontería- te faltara...- se acercaba ya al lugar y se sintió algo nervioso- supongo que solo era insomnio, y tu? que te quita el sueño? mira hemos llegado- se interrrumpio a si mismo alargando la mano para tomar la ajena y llevársela a los labios, el no acostumbraba tener aquella clase de gestos pero por alguna razon le resulto inevitable- por cierto, me llamo Jean, disculpa no decirlo antes- dejando un beso casto en su mano antes de abrirle la puerta.
- y de antemano te informo, que no aceptare solo compañía para un café- espero ver su reacción y rio un poco- desde luego también tienes que aceptarme una rebanada de pastel- al tiempo que la hacia pasar y buscaba con la mirada alguna mesa que le resultara cómoda- por aqui?- pegunto haciendo una seña hacia una de las mesas, como preguntándole si aquella le parecía bien.
-No podia dormir- comenzó a hablar, respondiendo a lo que la chica le habia preguntado- no has tenido noches asi? en las que inexplicablemente no puedes conciliar el sueño? como si algo...- hizo una pausa pequeña y movió la cabeza como si fuese una tontería- te faltara...- se acercaba ya al lugar y se sintió algo nervioso- supongo que solo era insomnio, y tu? que te quita el sueño? mira hemos llegado- se interrrumpio a si mismo alargando la mano para tomar la ajena y llevársela a los labios, el no acostumbraba tener aquella clase de gestos pero por alguna razon le resulto inevitable- por cierto, me llamo Jean, disculpa no decirlo antes- dejando un beso casto en su mano antes de abrirle la puerta.
- y de antemano te informo, que no aceptare solo compañía para un café- espero ver su reacción y rio un poco- desde luego también tienes que aceptarme una rebanada de pastel- al tiempo que la hacia pasar y buscaba con la mirada alguna mesa que le resultara cómoda- por aqui?- pegunto haciendo una seña hacia una de las mesas, como preguntándole si aquella le parecía bien.
Jean Baptiste Fontaine- Realeza Francesa
- Mensajes : 312
Fecha de inscripción : 17/05/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Sintió algo frío en el estómago cuando, él decidió cederle su chaqueta, había pasado mucho tiempo desde que alguien tuvo ese gesto con ella. Zavannah estaba comenzando a creerse que su idea de despejar la mente no había sido tan mala después de todo, pasara lo que pasara después eso no importaba, la propia fuerza que ejercía por no caer en la esperanza la obligaba a olvidarse de todo. Apretó con los dedos la chaqueta y sin querer hundió la nariz justo en el cuello de la misma para sentir el olor, cerró los ojos al sentir como las fosas nasales se embriagaban del aroma de ese chico al que acababa de conocer-Gracias ¿Seguro que no la quieres de vuelta? Me sentiría muy mal si te enfermas-abrió los ojos por inercia tratando de buscar la acción que justificara lo que acababa de hacer pero lo único que había encontrado fueron palabras algo tontas. Inclino la cabeza para poderse ubicar espacialmente, si era el lugar que ella creía que era entonces el chico tenia buen gusto. Ese lugar en especial le encantaba, cada que podía se escapaba del trabajo solo para ir a comer y cenar ahí.
Incluso cuando no lo estuviera mirando del todo por miedo de incomodarlo estaba consciente de todo lo que hacía, sus gestos, la forma en que fijaba la mirada en un punto…todo lo que pasaba con ese chico Zavannah lo sabía y no necesitaba mirarlo fijamente, la sorpresa de la chica llego cuando mágicamente el describió justo lo que le venía pasando a ella cada noche. Su cabeza se giró para verlo más que interesada-Somos dos…-susurró tratando de recordar el sentimiento que la despertaba o que simplemente le arrebataba el sueño-Llevo un mes tratando de conciliar el sueño, intento de todo y con todas las clases de pastillas que te puedas imaginar y simplemente nada, la sensación de vacío sigue ahí-se encogió de hombros para después tallar sus ojos al sentir la luz cegadora del restaurante que tenían a pocos pasos. El frío del estómago se volvieron miles de alas de mariposas cuando sintió sobre la piel los labios ajenos, pudo haber rechazado el gesto pero no lo hizo, extrañamente le gustaba la compañía y el tacto de ese joven.
Sonrió ligeramente-De hecho ya lo habías dicho pero está bien yo también tengo mala memoria-apretó la mano de Jean con ganas de fundirla con la suya, un rubor extraño la hizo entrar repentinamente en calor y querer meterse a la nevera del restaurante.-Ten por seguro esto…va a ser pastel y un café-rio antes de aventurarse por el camino que el señalaba, asintió con la cabeza apretando fuerte la chaqueta que le parecía cómoda y no precisamente porque el chico le gustara. Era algo distinto…extraño y raro. Llego a la mesa en la cual apoyo las manos para hacer avanzar su cuerpo hasta la silla-Es mi lugar favorito-admitió mirando por uno de los cristales desde los cuales se podía ver el puente en el cual se habían encontrado.
Incluso cuando no lo estuviera mirando del todo por miedo de incomodarlo estaba consciente de todo lo que hacía, sus gestos, la forma en que fijaba la mirada en un punto…todo lo que pasaba con ese chico Zavannah lo sabía y no necesitaba mirarlo fijamente, la sorpresa de la chica llego cuando mágicamente el describió justo lo que le venía pasando a ella cada noche. Su cabeza se giró para verlo más que interesada-Somos dos…-susurró tratando de recordar el sentimiento que la despertaba o que simplemente le arrebataba el sueño-Llevo un mes tratando de conciliar el sueño, intento de todo y con todas las clases de pastillas que te puedas imaginar y simplemente nada, la sensación de vacío sigue ahí-se encogió de hombros para después tallar sus ojos al sentir la luz cegadora del restaurante que tenían a pocos pasos. El frío del estómago se volvieron miles de alas de mariposas cuando sintió sobre la piel los labios ajenos, pudo haber rechazado el gesto pero no lo hizo, extrañamente le gustaba la compañía y el tacto de ese joven.
Sonrió ligeramente-De hecho ya lo habías dicho pero está bien yo también tengo mala memoria-apretó la mano de Jean con ganas de fundirla con la suya, un rubor extraño la hizo entrar repentinamente en calor y querer meterse a la nevera del restaurante.-Ten por seguro esto…va a ser pastel y un café-rio antes de aventurarse por el camino que el señalaba, asintió con la cabeza apretando fuerte la chaqueta que le parecía cómoda y no precisamente porque el chico le gustara. Era algo distinto…extraño y raro. Llego a la mesa en la cual apoyo las manos para hacer avanzar su cuerpo hasta la silla-Es mi lugar favorito-admitió mirando por uno de los cristales desde los cuales se podía ver el puente en el cual se habían encontrado.
Zavannah Dellepiane- Gitano
- Mensajes : 368
Fecha de inscripción : 27/04/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Jean sonrió.
-supuse que si eras de por aqui seguramente lo conocerías, me gusta, la comida es buena y el ambiente agradable, aunque es la primera vez que tengo tan buena compañía- la verdad era la primera vez que tenia compañía, era un hombre solitario y pasaba sus horas encerrado con sus libros.
Su apariencia era buena pero su falta de “desenfreno” le volvían un tipo aburrido, por lo que tampoco es que fuese demasiado asediado por los demás.
Una jovencita se acerco hasta ellos para preguntar que querrían y Jean pidió un café y una rebanada de Flan Napolitano, no le gustaban demaciado las cosas dulces pero sorprendentemente el flan era su postre favorito. Ademas aquella noche estaba siendo bastante buena, solo algo dulce podía combinar con aquello.
La muchacha espero a que la joven frente a el pidiese algo y después se marcho, también le gustaba el personal del lugar, siempre eran muy amable, nunca les faltaba una sonrisa, incluso el tono de voz de las jovencitas era bastante suave.
- por que no me hablas de ti mientras esperamos?- inclinándose un poco al frente, centrando su atención en ella, para ser sinceros todo lo que respectaba a su persona llamaba su atención...por ejemplo... su cabello era naturalmente asi? Era poco probable, le gustaba como dibujaba sutiles ondas alrededor de su rostro...-me gustaría escuchar...no se, que te gusta... a que te dedicas?- sus labios se curveaban en un gesto de simpatía, estaba de buen humor y sus ojos tenían un brillo extraño... una emoción incomprensible
-supuse que si eras de por aqui seguramente lo conocerías, me gusta, la comida es buena y el ambiente agradable, aunque es la primera vez que tengo tan buena compañía- la verdad era la primera vez que tenia compañía, era un hombre solitario y pasaba sus horas encerrado con sus libros.
Su apariencia era buena pero su falta de “desenfreno” le volvían un tipo aburrido, por lo que tampoco es que fuese demasiado asediado por los demás.
Una jovencita se acerco hasta ellos para preguntar que querrían y Jean pidió un café y una rebanada de Flan Napolitano, no le gustaban demaciado las cosas dulces pero sorprendentemente el flan era su postre favorito. Ademas aquella noche estaba siendo bastante buena, solo algo dulce podía combinar con aquello.
La muchacha espero a que la joven frente a el pidiese algo y después se marcho, también le gustaba el personal del lugar, siempre eran muy amable, nunca les faltaba una sonrisa, incluso el tono de voz de las jovencitas era bastante suave.
- por que no me hablas de ti mientras esperamos?- inclinándose un poco al frente, centrando su atención en ella, para ser sinceros todo lo que respectaba a su persona llamaba su atención...por ejemplo... su cabello era naturalmente asi? Era poco probable, le gustaba como dibujaba sutiles ondas alrededor de su rostro...-me gustaría escuchar...no se, que te gusta... a que te dedicas?- sus labios se curveaban en un gesto de simpatía, estaba de buen humor y sus ojos tenían un brillo extraño... una emoción incomprensible
Jean Baptiste Fontaine- Realeza Francesa
- Mensajes : 312
Fecha de inscripción : 17/05/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Zavannah miro alrededor mientras tecleaba con los dedos sobre la superficie de la mesa que ahora los tenia frente a frente-Me agrada que te guste la compañía, hace mucho no salgo...y bueno tal vez el destino nos cruzó-¡Que tonta! Ella hablando del destino, pestañeo varias veces antes de girarse rápidamente a la camarera para pedir el café y un pedazo de pastel de chocolate, su adicción para el chocolate era una cosa casi enferma casi como su obsesión por casarse antes de lo veinticinco-¿Sabes? Suelo ser bastante aburrida-hizo una mueca de desagrado después de su comentario. Desde que comenzó a creer que el futuro siempre la haría caminar sola las personas comenzaron a alejarse, antes por ejemplo en la secundaría siempre fue popular, todos querían salir con su grupo de amigos porque eran divertidos, ahora de eso quedaba nada. Apoyo los codos para no despegar la mirada de su acompañante, se relamió los labios y pensó unos cuantos segundos por donde comenzar ¿Cómo se suponía que debía hablar de su patética vida?
-Bueno la verdad es que no tengo mucho que contar…trabajo como traductora en una compañía en donde llegan muchos papeles importantes, jurídicos y cosas por el estilo, nada del otro mundo sin mencionar que es aburrido-rio para aminorar el hecho de que le ponía incomoda hablar sobre eso-Solía salir mucho, de viaje con mis amigos pero llego un momento en que me di cuenta de que no podía tenerlo todo…trabajo o diversión, sin trabajo no hay dinero y por lo tanto es poco probable que pueda divertirme-suspiro prolongadamente, sintiendo como el aire inexistente le oprimía los pulmones causándole dolor-Como ves elegí el trabajo-ya no se sentía la personas más interesante del mundo, antes la hubieran matado por pecar al tener una confianza extremosa, en esos momentos se sentía fea y sin chiste.
Le seguía inquietando el hecho de que justo en ese puente lo hubiera encontrado, era como una especia de ¿Señal? No, no podía ser…eso estaba bien cuando tenía 15 años, no ahora-¿Y tú? De seguro tu rutina es mucho más diferentes, te ves diferente-bajo la mirada para subirla después mordiéndose el labio ligeramente arrepentida de lo que había dicho. Sacudió las manos y se echó para atrás-Pero no…no me lo tomes a mal. Me refiero a que pareces diferente en un buen sentido…nada de chico malo, ni mujeriego tú sabes-Ella sabía de esa clase de chicos y él no era, tampoco se aproximaba a serlo. Se sintió tonta al sentir como el rubor le pintaba las mejillas, tuvo unas ganas tremendas de pegarse contra la mesa pero no lo vio muy adecuado de acuerdo a la situación que vivía. Se contuvo y cruzó una pierna, mitigando las ansias y el nervio.
-Bueno la verdad es que no tengo mucho que contar…trabajo como traductora en una compañía en donde llegan muchos papeles importantes, jurídicos y cosas por el estilo, nada del otro mundo sin mencionar que es aburrido-rio para aminorar el hecho de que le ponía incomoda hablar sobre eso-Solía salir mucho, de viaje con mis amigos pero llego un momento en que me di cuenta de que no podía tenerlo todo…trabajo o diversión, sin trabajo no hay dinero y por lo tanto es poco probable que pueda divertirme-suspiro prolongadamente, sintiendo como el aire inexistente le oprimía los pulmones causándole dolor-Como ves elegí el trabajo-ya no se sentía la personas más interesante del mundo, antes la hubieran matado por pecar al tener una confianza extremosa, en esos momentos se sentía fea y sin chiste.
Le seguía inquietando el hecho de que justo en ese puente lo hubiera encontrado, era como una especia de ¿Señal? No, no podía ser…eso estaba bien cuando tenía 15 años, no ahora-¿Y tú? De seguro tu rutina es mucho más diferentes, te ves diferente-bajo la mirada para subirla después mordiéndose el labio ligeramente arrepentida de lo que había dicho. Sacudió las manos y se echó para atrás-Pero no…no me lo tomes a mal. Me refiero a que pareces diferente en un buen sentido…nada de chico malo, ni mujeriego tú sabes-Ella sabía de esa clase de chicos y él no era, tampoco se aproximaba a serlo. Se sintió tonta al sentir como el rubor le pintaba las mejillas, tuvo unas ganas tremendas de pegarse contra la mesa pero no lo vio muy adecuado de acuerdo a la situación que vivía. Se contuvo y cruzó una pierna, mitigando las ansias y el nervio.
Zavannah Dellepiane- Gitano
- Mensajes : 368
Fecha de inscripción : 27/04/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Sonrio ante lo dicho por la chica.
-esa impresión te doy? Creo que me siento alagado pero no se si deberia- sonriendo de medio lado mostrando una expresión coqueta que no sabia que podia tener- ya sabes los malos son los deseados- riendose un poco y mostrando una expresion pensativa- tengo un trabajo que a veces me deja mucho tiempo libre y por ratos no puedo ni salir de casa. Soy escritor, eh escrito un par de libros y actualmente publico en un par de revistas tabajos pequeños. Me estoy dando un tiempo antes del siguiente libro...- comenzo a hablar. Su vida no era exactamente emocionante pero tendia a emocionarse al hablar de su trabajo. L e gustaba y lo demostraba.
En aquel momento, eran un par de desconocidos apenas intercambiando las primeras palabras. Recibiendo las primeras impresiones, quien diria que despues de eso volverian a verse, quien diria que podrian llegar a quererce... quien diria que seis meses despues estarian en aquella misma cafeteria... quien le diria a jean que estaria mas nervioso que en toda su vida.
Pero asi fue, seis meses despues en aquella cafeteria se reunieron como lo hacian ya tan regularmente, pedian algo, platicaban se observaban y simplemente... jean sentía que no consibia la vida sin ella. Ese dia quería decircelo...quería decirle claramente cuanto la necesitaba cuando se había llegado a enamorar de ella...
Desgraciadamente parecia que la suerte no estaba de su lado, la comida no le sabia a nada y apenas y la habia probado, las manos le sudaban y habia terminado por tirar el cafe en cuanto se los habia llevado.
-maldicion...- mascuyo al ver el liquido espacirce por la mesa y se dijo que las cosas no podian ir peor, intento secar pero solo logro que el liquido fuese a dar hasta ella ensuciandole la ropa- oh lo siento yo...- una mesera termino por ir a ayudarlos y jean se sento abatido frente a la chica que adoraba- lo siento esto no debería ser así...- suspiro. Para empezar tal vez deberia haberla llevado a un sitio mas elegante...por suerte no lo había hecho. Habría terminado haciendo un ridículo mayor- estoy nervioso y no se bien lo que hago, creo que estoy mas torpe que nunca- comenzó a hablar de corrido- no se lo que hago y luego tu estas ahi tan bonita...- se revolvió un poco el cabello y tomo aire viendola a los ojos- te amo savannah... creo que desde la primera vez que te vi...no concibo mi vida sin ti- despacio, pasando duro saco la cajita que llevaba rato quemandole los bolsillos- te casarías conmigo?- mostrandole el anillo de brillantes que resplandecía dentro del terciopelo negro- no puedes negarte...combina con tus ojos...- intento bromear un poco intentando evitar que los nervios terminaran de carcomerle.
-esa impresión te doy? Creo que me siento alagado pero no se si deberia- sonriendo de medio lado mostrando una expresión coqueta que no sabia que podia tener- ya sabes los malos son los deseados- riendose un poco y mostrando una expresion pensativa- tengo un trabajo que a veces me deja mucho tiempo libre y por ratos no puedo ni salir de casa. Soy escritor, eh escrito un par de libros y actualmente publico en un par de revistas tabajos pequeños. Me estoy dando un tiempo antes del siguiente libro...- comenzo a hablar. Su vida no era exactamente emocionante pero tendia a emocionarse al hablar de su trabajo. L e gustaba y lo demostraba.
En aquel momento, eran un par de desconocidos apenas intercambiando las primeras palabras. Recibiendo las primeras impresiones, quien diria que despues de eso volverian a verse, quien diria que podrian llegar a quererce... quien diria que seis meses despues estarian en aquella misma cafeteria... quien le diria a jean que estaria mas nervioso que en toda su vida.
Pero asi fue, seis meses despues en aquella cafeteria se reunieron como lo hacian ya tan regularmente, pedian algo, platicaban se observaban y simplemente... jean sentía que no consibia la vida sin ella. Ese dia quería decircelo...quería decirle claramente cuanto la necesitaba cuando se había llegado a enamorar de ella...
Desgraciadamente parecia que la suerte no estaba de su lado, la comida no le sabia a nada y apenas y la habia probado, las manos le sudaban y habia terminado por tirar el cafe en cuanto se los habia llevado.
-maldicion...- mascuyo al ver el liquido espacirce por la mesa y se dijo que las cosas no podian ir peor, intento secar pero solo logro que el liquido fuese a dar hasta ella ensuciandole la ropa- oh lo siento yo...- una mesera termino por ir a ayudarlos y jean se sento abatido frente a la chica que adoraba- lo siento esto no debería ser así...- suspiro. Para empezar tal vez deberia haberla llevado a un sitio mas elegante...por suerte no lo había hecho. Habría terminado haciendo un ridículo mayor- estoy nervioso y no se bien lo que hago, creo que estoy mas torpe que nunca- comenzó a hablar de corrido- no se lo que hago y luego tu estas ahi tan bonita...- se revolvió un poco el cabello y tomo aire viendola a los ojos- te amo savannah... creo que desde la primera vez que te vi...no concibo mi vida sin ti- despacio, pasando duro saco la cajita que llevaba rato quemandole los bolsillos- te casarías conmigo?- mostrandole el anillo de brillantes que resplandecía dentro del terciopelo negro- no puedes negarte...combina con tus ojos...- intento bromear un poco intentando evitar que los nervios terminaran de carcomerle.
Jean Baptiste Fontaine- Realeza Francesa
- Mensajes : 312
Fecha de inscripción : 17/05/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
El destino había hablado. Esa charla en la mesa había sido solamente una puerta de entrada a todo lo que después ocurriría. Nadie lo había planeado y ahora seis meses después, como todos los días y en el lugar de siempre ahí estaba ella, ansiosa, expectante por algo y sin saber en realidad que pensar. La idea de citarla con esa actitud tan ansiosa se le ocurría muy extraña, pero no menciono palabra, se dedicó a probar su comida en silencio dejando que este mismo los aislara en una extraña burbuja en donde nadie más podría oírlos. Durante media hora tratado de sacarle a Jean alguna frase completa y coherente, sin ningún tartamudeo pero lo único que logró fue que el silencio espesara y que la situación se le hiciera incluso más graciosa. Quería saber que era lo que pasaba por la cabeza de Jean, por eso sonreí mientras que su acompañante se ponía más nerviosa y eso de alguna forma la atarantaba.
Di un salto por el asunto del café, rápidamente sus manos buscaron servilletas para ayudarlo-¡Oh vamos Jean, es solo café!-dijo en tono de broma, esperando aminorar cualquier clase de stress por parte del chico. Comenzaba a creer las peores cosas pero como siempre se evadía así misma y trataba de convencerse de que él no la terminaría porque Jean la amaba y ella también lo amaba a él. Levanto la mirada para verle, estaba preocupado entre otras cosas, hubiera pagado por saber más pero si no era un buen momento entonces las cosas no acabarían bien. Se volvió a sentar con las manos en la mesa. Conteniendo el líquido que había llegado hasta sus jeans, cuando la consistencia de la servilleta absorbió todo volvió a poner las manos en su regazo dando gracias que el café no tuviera azúcar pues todo estaría pegajoso-Tranquilo-le sonrió sintiendo como su pulso comenzaba a bajar, acerco su mano –ya seca- hasta el cabello de su amado, acomodo cariñosamente detrás de la oreja, le parecía adorable como es que se ponía nervioso.
El corazón se le detuvo un milisegundo. Las manos se le helaron y se quedó sin habla cuando le enseño el pequeño anillo brillante-Yo…ahm-¿Cuántas veces había imaginado ese momento? Muchas y cuando por fin lo tuvo enfrente se quedó callada, abrió la boca pero descubrió que el aire le quemaba así que la volvió a cerrar. Soltó una risita nerviosa, demasiado extrañada-Yo…Jean-otra risa más por su cumplido y después dos pequeñas lagrimitas recorrieron sus mejillas, se posaron en sus labios y ahí desaparecieron gracias a que ella probo el líquido salado-Si…acepto-apenas articulo con un hilo de voz, estaba por demás decir otras cosas. Solo necesitaba eso, lo que siempre quiso.
Por fin tendría una familia y la vida como la deseo.
Di un salto por el asunto del café, rápidamente sus manos buscaron servilletas para ayudarlo-¡Oh vamos Jean, es solo café!-dijo en tono de broma, esperando aminorar cualquier clase de stress por parte del chico. Comenzaba a creer las peores cosas pero como siempre se evadía así misma y trataba de convencerse de que él no la terminaría porque Jean la amaba y ella también lo amaba a él. Levanto la mirada para verle, estaba preocupado entre otras cosas, hubiera pagado por saber más pero si no era un buen momento entonces las cosas no acabarían bien. Se volvió a sentar con las manos en la mesa. Conteniendo el líquido que había llegado hasta sus jeans, cuando la consistencia de la servilleta absorbió todo volvió a poner las manos en su regazo dando gracias que el café no tuviera azúcar pues todo estaría pegajoso-Tranquilo-le sonrió sintiendo como su pulso comenzaba a bajar, acerco su mano –ya seca- hasta el cabello de su amado, acomodo cariñosamente detrás de la oreja, le parecía adorable como es que se ponía nervioso.
El corazón se le detuvo un milisegundo. Las manos se le helaron y se quedó sin habla cuando le enseño el pequeño anillo brillante-Yo…ahm-¿Cuántas veces había imaginado ese momento? Muchas y cuando por fin lo tuvo enfrente se quedó callada, abrió la boca pero descubrió que el aire le quemaba así que la volvió a cerrar. Soltó una risita nerviosa, demasiado extrañada-Yo…Jean-otra risa más por su cumplido y después dos pequeñas lagrimitas recorrieron sus mejillas, se posaron en sus labios y ahí desaparecieron gracias a que ella probo el líquido salado-Si…acepto-apenas articulo con un hilo de voz, estaba por demás decir otras cosas. Solo necesitaba eso, lo que siempre quiso.
Por fin tendría una familia y la vida como la deseo.
Zavannah Dellepiane- Gitano
- Mensajes : 368
Fecha de inscripción : 27/04/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Hijo de la luna...
Se quedo estático esperando escuchar su respuesta, sabia que la amaba sabia que ella lo amaba o mejor dicho tenia la esperanza de que así era pero aun así la esperanza no quitaba el miedo…ella podía rechazarlo en cualquier momento mas sin embargo cuando pronuncio aquellas palabras… aquellas palabras que tanto había ansiado los últimos días el alma pareció volverle al cuerpo y una inmensa felicidad le inundo por completo.
La risa broto de sus labios sin control y sus dedos temblaron mientras hacia correr el anillo por su dedo... observando durante varios segundos como se veía le beso la mano clavando sus ojos azules en ella- seremos felices- le aseguro tomando ahora ambas manos en las suyas y dejando un nuevo beso- lo prometo- añadió antes de dirigirse a sus labios y perder el control levantándola de el asiento y alzándola un poco mientras la besaba- te amo!- dijo con efusividad mientras algo burbujeaba en su pecho…
Dos meses después la boda estaba arreglada y esperaba ansioso en el altar a la mujer con la que había decidido compartiría el resto de su vida, la sonrisa seguía ahí, como aquel día en la cafetería y veía a su padrino y al sacerdote alternativamente como diciéndoles una y otra vez lo afortunado que era. Los invitados lo observaban y se preguntaban si podría ser mas obvio lo nervioso que estaba y sin duda alguno se diría a si mismo que todas las bodas deberían ser así… con un cariño tan latente que podría sentirse aun en la multitud.
La música inicio anunciando la entrada de la novia y su cuerpo se tenso mientras su atención se dirigía únicamente al ángel que vestido de blanco entraba por la puerta, mas bella…mas radiante que nunca y se pregunto si se merecía tal cosa… no lo sabia…pero si sabia algo…que lo quería y aunque no lo merecía lo tomaría…
La risa broto de sus labios sin control y sus dedos temblaron mientras hacia correr el anillo por su dedo... observando durante varios segundos como se veía le beso la mano clavando sus ojos azules en ella- seremos felices- le aseguro tomando ahora ambas manos en las suyas y dejando un nuevo beso- lo prometo- añadió antes de dirigirse a sus labios y perder el control levantándola de el asiento y alzándola un poco mientras la besaba- te amo!- dijo con efusividad mientras algo burbujeaba en su pecho…
Dos meses después la boda estaba arreglada y esperaba ansioso en el altar a la mujer con la que había decidido compartiría el resto de su vida, la sonrisa seguía ahí, como aquel día en la cafetería y veía a su padrino y al sacerdote alternativamente como diciéndoles una y otra vez lo afortunado que era. Los invitados lo observaban y se preguntaban si podría ser mas obvio lo nervioso que estaba y sin duda alguno se diría a si mismo que todas las bodas deberían ser así… con un cariño tan latente que podría sentirse aun en la multitud.
La música inicio anunciando la entrada de la novia y su cuerpo se tenso mientras su atención se dirigía únicamente al ángel que vestido de blanco entraba por la puerta, mas bella…mas radiante que nunca y se pregunto si se merecía tal cosa… no lo sabia…pero si sabia algo…que lo quería y aunque no lo merecía lo tomaría…
Jean Baptiste Fontaine- Realeza Francesa
- Mensajes : 312
Fecha de inscripción : 17/05/2011
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Temas similares
» El Hijo de la Luna (privado)
» Hijo de la Luna (Sara, Vladimir)
» Busco al padre de mi futuro hijo (?) y al hijo de mi amiga :)
» luna brillante azul luna
» Halo de luna [Luna Bosch]
» Hijo de la Luna (Sara, Vladimir)
» Busco al padre de mi futuro hijo (?) y al hijo de mi amiga :)
» luna brillante azul luna
» Halo de luna [Luna Bosch]
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér Sep 18, 2024 9:16 am por Afiliaciones
» REACTIVACIÓN DE PERSONAJES
Mar Jul 30, 2024 4:58 am por Frederick Truffaut
» AVISO #49: SITUACIÓN ACTUAL DE VICTORIAN VAMPIRES
Miér Jul 24, 2024 2:54 pm por Nigel Quartermane
» Ah, mi vieja amiga la autodestrucción [Búsqueda activa]
Jue Jul 18, 2024 4:42 am por León Salazar
» Vampirto ¿estás ahí? // Sokolović Rosenthal (priv)
Miér Jul 10, 2024 1:09 pm por Jagger B. De Boer
» l'enlèvement de perséphone ─ n.
Sáb Jul 06, 2024 11:12 pm por Vivianne Delacour
» orphée et eurydice ― j.
Jue Jul 04, 2024 10:55 pm por Vivianne Delacour
» Le Château des Rêves Noirs [Privado]
Jue Jul 04, 2024 10:42 pm por Willem Fokke
» labyrinth ─ chronologies.
Sáb Jun 22, 2024 10:04 pm por Vivianne Delacour