El camino más difícil {Libre}

Había estado paseándome por todos los rincones de la comunidad buscando alguna respuesta a mi sin fin de preguntas, ahora que había llegado aquí sin que me pidieran nada a cambio... ¿Qué haría? ¿Cómo sería todo desde ahora? Estaba bastante acostumbrada hasta a matar por un buen dinero. Ahora ya de eso nada. Todos me habían acogido en la civilización sin conocer mis antecedentes en las demás ciudades... ¿Qué harían cuando se enteraran? Seguramente nada, todo era por lo bajo y los gitanos no iban a darle la espalda a sus compañeros, porque todos eramos discriminados por igual.

Ahora que me encontraba deslizándome con pasos lentos sobre los caminos de tierra y esquivando amablemente a mis compañeros de raza, estaba buscando algo con qué distraerme realmente, tal vez algunos gitanos con sus asuntos típicos o alguien interesante.

—¿Será que habrá alguien con quién hablar?— Me pregunté a mi misma mientras me recargaba a un lado de las carpas construidas y me acomodaba un poco la prenda blanca que cubría desde mi cintura hacia arriba y sacudía la falda azul marino.

Vengo corriendo, los músculos se aclambran, se tensan... miro en derredor con angustia, alguien pudo seguirme hasta aqui por el rastro de sangre que voy dejando, mas mis heridas aun no paran de sangrar. Lentamente la carne se regenera cerrándose, respirando ahora que aminoro la marcha.
Respiro y me muevo con la adrenalina bombeando al máximo en los musculos atrofiados que se mueven por instinto, paleando tierra sobre el suelo mientras corro entre setas y arbustos... no puedo parar, no debo... no hasta llegar al campamento.

Finalmente me desplomo, presa del mas terrible dolor en cada parte de mi cuerpo. Casi inerte me dejo vencer unos segundos al divisar el humo de la zona gitana. Me arrastro un ultimo tramo doloroso por la tierra que bebe de mi hasta que por fin me quedo semi inconsciente en un tronco. Las heridas se han cerrado ya, pero el dolor permanece. Debo continuar pero no puedo andar un paso mas... mi piel bañada en sangre pide un descanso.

Algo mas quedó roto esta noche y que no se reparará como mi cuerpo, por los dones de Gaia. Derrotado fue mi orgullo, mas pedir perdon parece ser aún un camino aún mas duro.

- Epoch...

Cierro los ojos. Estiro los sentidos para alcanzarle. No puedo sentir su presencia en la aldea gitana, mas percibo el olor de sus cachorros y de su amada mujer. Se que no estará lejos de casa por mucho tiempo. Solo queda esperar.

Una gitana, alejándose de la algarabía que siempre acompaña al campamento comienza a caminar en dirección a donde estoy. Aún no la veo pero recibo un atisbo del aroma de su pelo y de su piel. Se acerca y mira, aunque sé que aun no me ha descubierto entre las sombras.

—¿Será que habrá alguien con quién hablar?—

La pregunta, algo cándida, escondía un llamado, una invocación al destino para que suceda de imprevisto.

- Puedes hablar con las piedras, o el viento... - le digo a la mujer; - puedes hablar con los Dioses del cielo o con los demonios en el agua. -

No sabes quien te escucha...

Al ver que captaba su atención, comencé a cantar suave y quedo una algo que le escuché una vez a mi hermano Hans...

- "Care for what you wish...You may regret it... Care for what you wish... you just might get it!"

- Close your eyes and see the skies are falling...


Confusión, miedo... como si alguien tirase un delgado velo

de realidad, de pronto el mundo se vino abajo. Todo se salió

de su sitio. Batiendo el aire con rabioso vuelo zurco en cada

lugar, desesperadamente por ella.

- Oh! Stella... Stellaaa...

No puedo hallarle por ningun sitio, mas que como un eco en mi

mente que me grita que no esta aquí. Pero yo siento su

pulso... su pulso... ¿Por que no puedo verla? Doy vueltas

lastimeramente sobre los lugares en que ya habia revisado,

persigo las mismas sombras donde se que nada hay, tan solo

para desengañarme de nuevo. Deseando con todas mis fuerzas

que la ilusión me devuelva su cuerpo, su rostro, su risa.

Nada consigo, mas que aquella asquerosa y fatal sensación...

el familiar presentimiento de que mi amor ha desaparecido.

- Still, there's a trace.

No me rindo, no me perdonaría jamás si me rindiera. Debo

buscar de nuevo... latir con fuerza para que ella me sienta,

para que encuentre el camino de vuelta. Pero pasan los

minutos, mas y mas me alejo, trazando espirales inútiles bajo

el cielo mudo. Negro, como mi corazón. Hay alguien sin

embargo...comienzo a percibirle a algunos metros. Es como si

siempre hubiese estado ahí, oculto. Su aroma de pronto me

brilla en el olfato, una súbita ráfaga que despierta la

memoria. El recuerdo de la fatidica noche en que perdimos a

Kelpie.

Redoblo el vuelo cansado, hasta no sentir las alas y entonces

aleteo mas fuerte. Reconozco el sitio al que me voy

acercando. Es la zona de gitanos. ¿Y que es este olor?
Sangre de lobo.

¡Hagen!

Mirada perpeja y el silencio de la mujer humana, impávida ante el espectáculo de esta loba rota, quizás ese halo de misterio que envuelve a esta comuna humana no sea mas que niebla que cubre a las mas simples entre las criaturas. Nada responde la jovencita y por un rato sopeso cuanto bien podría hacerme su carne y su sangre para reponer el poder perdido en mi reciente combate, la distancia del campamento es considerable... sin embargo aleteando baja el cuervo y me devuelve a la espantosa realidad.

- Corax... Busca al hermano Montaña... ¡deben permanecer unidos! Vé... ¡no pierdas el tiempo! Traélo aqui... yo... no puedo seguir.

Me desplomé sin reparos sobre el piso. La chica permaneció inmóvil, lo cual me relajó, sin embargo se que estos seres temen a los demonios y lo mas prudente es no bajar la guardia. No fuera que me confundiese con alguno de esos seres. El mundo daba vueltas y lo unico que quería era descansar. Matthew llegó como enviado del cielo, probablemente alertado de lo que sucedió por ese sentido especial que tienen los cambiaformas.

- ¡Nina!... ¿pero... ¿¡Que sucedió!?

No podía contarle, aunqnue me moría de ganas. No podía decirle a Corax mas que un atisbo de verdad y eso tan solo confesado en un murmullo. Nadie! absolutamente nadie debe saber el secreto que el Reverendo nos reveló. Lo que hallamos en su sangre. Nadie debía reclamar para si ese poder.

- Tienes que encontrar a tu hermano. Ambos deben estar juntos...ve! Dile que el último de los Stargazer ha despertado...

No era necesario ir hasta su enorme carreta para saber que Epoch no estaba ahí, su pulso se encontraba cerca; mas no dentro de la zona de los gitanos. De ninguna forma dejaría a Nina en esas condiciones, sobre todo ahora que aquella jovencita nos ha escuchado hablar. ¿En que estaba pensando Nina?... ¿La conoce? ¿tendrá algo que ver en esto y por eso se esconde detrás de su mutismo? Su atuendo daba la pinta de gitana, pero habia algo extraño en sus facciones. Como si viniese de otro lugar...

Sin embargo tampoco quería entrar en detalle sobre por que es que Epoch, Stella y yo estabamos fuera de nuestros escondites. No puedo hacer otra cosa que esperar a ver su reacción.

* (El cuervo que estaba posado en una rama voló hasta posarse en una roca saliente, cerca de la mujer humana, le miraba intensamente intentando interpretar la muda de su rostro. No parecía tener miedo y sin embargo se mantenía detrás de su mutismo sin atinar a moverse para acercarse o salir huyendo.)

Hay bullicio entre los gitanos, trazas de musica se perciben hasta acá, otros humanos podrían acercarse, tengo que sacar a Nina de aqui.

* (Croax comienza a gritar, mirando fijamente a la chica, hace aspevientos con las alas esperando ahuyentarla, o al menos prevenirle de acercarse hasta que Nina se recupere)

- Que haces? Te digo que vayas donde Epoch y su familia! Yo estaré bien en un minuto.

¡Lo hizo otra vez! Estando transformada en lobo, habló. ¡Lo tenemos prohibido! Algo terrible debió pasar para que Nina rompa sus propias reglas. Con suma desconfiaza miro en los ojos de la mujer humana, sin apartar los ojos ni un instante en espera de lo que pueda hacer. Definitivamente la chica no esta con nosotros - hay confusión en su gesto - y parece inofensiva, apesar de eso no quisiera dejar sola a la Loba.

Hasta que Nina no hizo mención de ellos, no habia reparado en el peligro que corrían Folie y sus cachorros si alguien estaba tras de Epoch. Ay! Hermano Montaña!... en cuantos problemas te hemos metido! Giré la cabeza para mirar una última vez a Nina antes de emprender el vuelo hacia Liebe y Freheit, los dos pequeños cambiaformas hijos de mi hermano.

- Largo! - Ladró Nina y yo salí volando, dejándola con esa extraña.

- ¿El último Stargazer? ¿al menos podría explicarme que quiere diantres quiso decir?

Aminoro el paso conforme me estoy acercando al acampamento, intento pensar en alguna excusa para explicarle a Folie la razón de mi retraso. Nada sabe ella de la conspiración de los Dragones Azules ni de las tribulaciones que hemos pasado hoy, mi intención es que así se mantengan las cosas, aunque las ganas de contarle todo a mi amada niña me consumen y se que sucumbiré a ellas algún día pero con suerte será dentro de mucho tiempo, cuando toda esta pesadilla sea solo un recuerdo.

Sin embargo conforme mas me acerco el latir de un corazón se apercibe con mayor claridad. Mi hermano el cuervo esta en el campamento y por la intensidad del pulso, sé que se encuentra donde los niños. Mis pequeños saben que Croax esta aquí, pues lo sienten como yo. Lo que era un caminar meditabundo de pronto se torna en una carrera. Hay una carga de angustia en el aire por lo que mi preocupación aumenta cuando le veo salir a recibirme envuelto en sus negras plumas. Stella no esta con él.

Nos encontramos finalmente en la entrada del campamento; esta noche había fiesta y algarabía entre los hermanos gitanos, de modo que si queríamos hablar lo mejor era permanecer lejos de la gente. Mat se posó ligeramente sobre mi hombro derecho y comenzó a murmurar, con voz apresurada

- Es Nina hermano... alguien la atacó. La encontré muy cerca de aquí, estaba buscandote. Decía incoherencias sobre el último Stargazer.

Las palabras del cuervo me pusieron los pelos de punta. La bruja es una fiera en combate y realmente me sorprendía que alguien siquiera considerara atacarle. ¿quien tenía semejante fuerza como para derribar a la terrible Nina?

- ¿Dónde esta ahora?

- Curando sus heridas, en la periferia al norte de campamento.

- ¿La has dejado sola?

- Me pidió que te encontrara, dijo que era importante que permanecieramos juntos.

- Llévame con ella...

Como dos sombras camino al hades atravezamos sombríos el alegre campamento gitano en silencio. Mi olfato percibe en el aire el olor de la sangre de la loba. Mat me mira desde sus ojos de pájaro y un repentino escalofrío me disuade de interpretar los signos en sus ojos.

Reverend is a black jaguar running free trhough the Woods. On no-man’s land were the wild things are, a new king made his kingdom. Inside his heart the stargazer’s souls are pumping pure energy like a torrent overwhelming nerves and veins. He had this image in his head, an image of Hagen’s Cab. But he wasn’t there… ever!... where do this memories came from? – He wonders - but fail to see what is becoming of him. The changes beneath the skin.

- Who is Ivan Hagen?

What are this memories playing like pictures in my head? What are those feelings? They must belong to my brothers, they must have grown in their bodies that I’ve fed upon. Their memories… their lives… all coming back to me.

The black jaguar then stops his insane race and looks over the road. He has arrived to a crossroad. Some thought explodes inside the mind but this time is a memory from long ago. Tense as a bow about to shoot an arrow, the Beast remembers
“There is always a demon waiting at every cross road. Honor him, and he will bless you on your path“

- Salam Aleikum…

Just before those words came from his mouth he realized that he couldn’t tell if he had always heard them from his mother, or never at all… his mind mixed what the other shapeshifters remember with his own thoughts! He needed to make up his mind before facing the remaining three… Epoch, Corax…

- And where’s Oxun?

En su cuerpo del Reverendo ocurre entonces otra transformación, al sentir cerca un aroma conocido. El cuerpo se estiliza, las dimensiones se reducen y una energía ardiente como el magma de la tierra le posee dándole nuevos brios para reanudar la carrera. Esa es una habilidad que no conocía y que ahora que se ha puesto a prueba corriendo a lo largo de la ciudad hasta las orillas donde reina la silenciosa floresta, agotándose al principio, pero ganando energía extra al transformar su cuerpo en el de un perro negro, pudiendo aun correr el tramo que falta, no sin antes detenerse a mirar por sobre la ciudad. A sus embotados sentidos, afinados por el poder que estaba asimilando le parecía que todo el bosque olía a Nina, a su sangre. Recordó entonces entre la bruma de la locura a donde es que la Loba lo estaba guiando. ¡El campamento de los Gitanos! En ese lugar el pulso de los cambiaformas es claro y fuerte. Dos cambiaformas con olor a bosque se encuentran en este lugar. Atravieza la distancia que le queda caminando entre recuerdos y sensaciones, estremecido, recorre el sendero que lleva hasta el Campamento. Nina esta esperándolo. El lo sabe mucho antes de entrar por el olor del miedo en su sangre.

Por mas que camina, corre, se estira... por mas que cierra los ojos el reverendo no consigue la transdormaciòn deseada. Domina ya con facilidad los cambios de piel entre los seres de la tierra, de humano a tigre, de tigre a perro como mudando de expresiíón su cuerpo se transforma en otros seres y absorbe sus energìas vitales. pero a pesar de haber devorado a Stella y de sentir su poder inflamando su cuerpo, la transformación en ave aun no ocurre. En cambio su mente se ve asaltada por recuerdos y fantasmas, las sombras de sus hermanos que le rodean. No muertos... dormidos, respirando dentro de su ser.

Aturdido por intentar hacer emerger sus alas, el reverendo camina con paso erratico hasta Nina. En ultimo momento decide erguirse en su forma humana para llegar donde la loba en mejor aspecto que el que debía tener despues de semejante carrera. Puede sentir ya la vibra de Epoch y Corax pulsando con fuerza cerca de aquí. Un sentimiento extraño, como un dolor sin raices le brota del pecho al pensar en el cuervo.

- You've served me well Nina.

Mis acalambradas alas aún remontan presuroso vuelo, ligeras como el viento que me ayuda a descansar un poco mientras me lleva a cuestas. Mi gran ventaja sobre el oso que no puede ver por estar pegado a la tierra como a un imán. Su rango de visión no le deja ver a Nina y sin embargo bien puede oler su sangre, de nuevo humedeciendo la tierra. ¡De nuevo! Y ese pulso... Nos basta intercambiar una sola mirada para enteder que ambos sentimos el batiente corazón de un Shapeshifter en las afueras del campamento.

¡El último de nuestros hermanos! El sin-nombre al fin se revela a mis ojos. Entre mas claro ven, mayor es el horror, pues aquella bestia disfrazada de humano esta masacarando a la loba sin que esta tenga oportunidad de defenderse. Una rabia se incendia en el pecho, un grito como jamás surgió de mi garganta reverberó hasta sus oídos. Tome gran altitud y luego caí como una flecha salvaje, envuelto en las llamas del odio sobre aquel ser.

Vi al cuervo caer sobre el reverendo, sirvió de distracción para escapar; mas bien sé que Mat no podrá pelear contra su hermano a menos que tome su forma humana. Sin embargo he visto (y sentido) la frustración del reverendo por no poderse transformar aún en una criatura alada, si se mantiene en el aire, tendrá siempre una ventaja.

En cuanto adquiero una distancia segura, bastante lejos de las patadas de ese maldito me vuelvo, transformándome en Lycan para mejor responder a las agresiones y le grito al cuervo:

- MAT! NO PUEDES GANARLE TU SOLO... NI TU NI EPOCH!... TIENEN QUE ESTAR UNIDOS... UNIDOOOS!!

Como explicarle la gran desventaja a la que se enfrentaban. El reverendo absorbió la energía de Kelpie, Basenji, Krimson y Stella. ¿Como podrían combatirlo? Aunque mi cuerpo este tambaleante, coraje no me falta para cargar de nuevo contra el traidor.

- HA DEVORADO A TUS HERMANOS MAT!! NO DEBES DEJAR QUE SE HAGA MAS FUERTE... TU Y MONTAÑA DEBEN HUIR!

Las garras y los colmillos emergen de nuevo entre el dolor de mi cuerpo desecho, la sangre moja mi pelaje reluciendo de carmesí. Mientras tenga fuerza pelearé. El cuervo es quizás mas necio y cansado de asediar a su enemigo desde el aire entra también en su forma humana, dispuesto a pelear... debí saberlo.

- No me iré.

Le escuchó decir y entendí que había escuchado la condena del clan Stargazer. Pues la ultima salvación del mismo eran los seres que en este momento se dirijen a una muerte segura. Resignada a ver caer el clan que yo forme le grité al reverendo la vieja afrenta:

- Non serviam!

Nada como mi rostro favorito, aquella primera cara humana que me inventé para caminar enrtelos hombres, nada como ese cuerpo fuerte, ágil, flexible. Los hay mas rápidos y mas letales, pero este diseño siemplemente me gusta para recibir a mis hermanos. Mat es el primero en llegar, ¡voy a desplumarlo con singular alegría!

La loba se me escapa antes de que la ponga a dormir pues me tengo que ocupar del emplumado. La velocidad que alcanza es impresionante, grandes son los dones que Tloque-Nahuaque ha impuesto en el hermano cuervo, sin embargo los reflejos de toda una memoria colectiva y la fuerza conjunta de Tierra, agua, fuego y trueno me pertenecen y me dan rapidez para evadir al furioso cuervo.

Cansado de fallar sus ataques desciende en su forma humana. Mi memora esta inflamada de recuerdos sobre estos momentos previos al combate; los recuerdos donde Mat le enseñaba a sus hermanos las artes marciales. ¡Todas las peleas!

Nina toma su forma humana. Parece que aún tiene ánimos para recibir otra paliza. El Oso no se anima a levantar la cabeza todavía, extrañamente rezagado entre las carrozas de los gitanos. Puedo combatir contra dos estos dos aun tiempo sin problemas. Pero el hermano montaña es el verdadero reto. ¿Por qué no se aparece? mis instintos buscan también las piezas faltantes. En el aire busco sin exito algún rastro de Hans... y el pulso de Oxun no se percibe por ninguna parte.

- ¿What ever happen to our sister breeze?

Su intuición exacerbada por las memorias de otros combates, le reveló por donde atacaría el veloz hombre-cuervo con un puñetazo directo al rostro a velocidad ultrasónica que el reverendo esquivó ladeando el cuerpo en un ágil movimiento que permitiera asirse de la mano de Corax con la garra izquierda para hacer girar la muñeca hasta torcerla, al tiempo que su garra libre asestaba un golpe fatal en la quijada, haciendo que la cabeza de Mat mirara el camino de donde nuca debió salir. Después de eso solo restaba jalar del brazo al inerte cuerpo hasta hacerlo morder el polvo y de nuevo otra vez contra la loba que ya venia a la carga. Todo ocurrió en un solo y brutal instante.
Golpeó a Nina con el cuerpo de Mat como su fuese este un costal de huesos, dejando caer toda su ira sobre la loba una y otra vez.

- Like a 10 ton hammer, lass.

Reverend dragged the fainted brother Crow trough the ground a few steps away from Nina who flinched in agony. Suddenly, he began to feel an unknown sadness as he saw Corax fallen without any chance of resistance. Destroyed, but still alive thanks to the God’s gifts of self-healing.
It was the first time he tested his own strength against a creature of the night since his last transformation, so it was just natural that he exceeded his anger and ran over his brothers. But why does he cares for him now that he’s wasted? What is this disgusting pity that overcomes his thirst of blood? An Urge to kill him as quickly as he could became the only thought in his mind.
To end this at once.

- I will possess your heart.

The hand turned into claw, stroke his brother’s chest, breaking in, tearing Mat’s life wide open to the hunger that burns inside him.

(*La garra penetra en el pecho y se afianza del corazón de Mat)

Todas las rotaciones de su vida, han tenido como eje el sentimiento - o los sentimientos ya que las máscaras son múltiples y los disfraces infinitos- Presente se hace la inquietante sensibilidad de la piel. Periferia mundana, limite cotidiano, definición social y religiosa de las formas del cuerpo, recipiente de humores y de aromas, transformación de todos los desechos y de toda la sabiduría, atanor terrenal de toda materia que se sabe y se siente y se percibe a si misma desde el dolor y el placer y la consciencia, ensayo evolutivo de la perfección amorosa, límite, si toca, si se traspasa, límite…

(* Región de la frontera que impide o favorece las uniones, censor de la agresión y puerta del erotismo, conducto irracional de las pasiones, caduco vestuario, cementerio de células.)
Através de toda su piel, dispersos, los restos de ajenas memorias no solo las de Stella Maris sino las de sus otros hermanos reconstruyen su historia. Breve instante de sagrada perplejidad que no le permite ver como Nina se incorpora a sus espaldas...

Un gruñido desesperado se me escapa de la garganta mientras veo como el reverendo arranca el corazón de Mat de un tajo y extasiado lo contempla. Esa visión incendia mi coraje, levantándome de un solo impulso.

Ay! que Son los esfuerzos nuestros, de los desventurados, son los esfuerzos nuestros como los de los troyanos…

(*Aquiles en el foso enfrente a nosotros sale y con grandes voces nos espanta.)

No si aun tengo fuerzas para combatir aunque poco pueda hacer para enfrentarme con semejante bestia, debo encontrar la manera de aturdirlo. Ya le veo distraído y aprovecho para lanzarme sobre el de un salto derribándolo. Mientras caemos muerdo con todo el coraje de mis fauces sangrantes la mano que sostiene el corazón hasta hacer que lo suelte ¡hasta arrancarle la mano!

Pero son los esfuerzos nuestros como los de los troyanos…

(* Creemos que con decisión y audacia cambiaremos la animosidad de la suerte, y nos quedamos afuera para combatir. Mas cuando sobreviene la gran crisis, nuestra audacia y decisión desaparecen; se turba nuestra alma, paralízase; y en torno de los muros corremos buscando salvarnos con la fuga. Empero nuestra caída es cierta. )

Arriba, sobre las murallas, comenzó ya el lamento.

… a través de las ascuas sólo la oscuridad desciende.

Entro en la Casa rodante, las piernas me tiemblan como si se fuesen a doblar bajo mi peso. Entro en silencio, los niños me miran desde su cuna. Cuatro brillantes ojitos muy atentos a mis movimientos. No lloran, apenas y se mueven. Miran... desde que nacieron han tenido actitudes muy diferentes a las de los niños humanos. No se si he sido un buen padre hasta ahora; no hay razones en ningun lugar, ni reglas escritas para la escuela de la vida.

Folie duerme envuelta en las cobijas, tan solo veo su cabello y un poco de su albo cuello. Tal vez duerma, o tal vez este molesta por que he llegado tarde y no quiera hablarme. Sea una o la otra, es mejor eso. No sabría como empezar a decirle a donde voy con la carabina y las pistolas que me regalo Hagen con inscripciones en plata " Liebe" y "Freiheit" supuestamente para darlas a mis hijos cuando fueran mayores.

"Voy a deshacerme de esto" - le diría, aunque no tuve que mentirle, pues en verdad dormía. Lo supe por que se removió un poco intranquila en la estera.
(*se acerca con sumo cuidado hasta poder tocar suavemente su vientre)

- Aun no te conozco, nuevo hijo, pero ya te amo. Que la Diosa me traiga siempre de vuelta a ti.

El pulso de Corax parece estallar de pronto y luego menguar drásticamente.
¿Dónde estan los otros Contempla-estrellas? ¿Donde se ocultan mis hermanos mientras Cuervo es asesinado por otro Cambiaformas?

Debo salir corriendo, apenas una leve caricia en la mejilla a Frei y un beso en la frente de Lieb puedo dejar a manera de despedida. Esos cuatro ojitos se llenan de lagrimas pues perciben mi desasosiego. Salgo como alma que lleva el diablo antes de que despierten a mamá.

Llevo las dos pistolas a la espalda, al hombro la fiel escopeta que me ha acompañado toda la vida. Dos afiladas dagas ocultas en cada bota y la rabia de Gaia ardiendo en el pecho, pero mi intuición me dice que todo será poco, pues nada en toda mi vida me pudo haber preparado para lo que voy a presenciar.

Mientras corro entre las carrozas dormidas hasta el lugar. Muchas ideas pasan sobre mi cabeza. Podrìa pedir ayuda... gritar! aunque eso no funcionó la ultima vez que tuvimos una emergencia... mas el oráculo rezaba que en medio de las peores adversidades siempre surgen amigos.

Tal vez debí despertar a Folie, decirle que tomara la carroza y a los niños y se largara del campamento... que ya no era un lugar seguro...

Pero enviarla ¿a dónde? Los humanos eran por naturaleza egoistas y desconfiados. Abusivos si encontraban la oportunidad. Aqui al menos tenian amigos... aunque hace siglos que no sé de ninguno... amigos...

Al llegar al lugar de la batalla me esperaba una escena espeluznante. Un hombre al que estoy seguro que he visto muchas veces antes pero que soy incapaz de reconocer en ese instante tiene a Nina alzada por el cuello, llena de sangre y moretones inerte como un guiñapo. Mat está a solo unos metros, con el pecho abierto como una jaula que dejase escapar al ave que retenía. Sin embargo su pulso no estaba muerto. Aunque todos los signos dijeran lo contrario.

Desde esa distancia las pistolas no surtirían efecto, pero la carabina si. Afine la puntería y disparé al brazo de aquel asesino. El disparo, como el martillo divino de Thor hizo estallar el codo liberando a Nina de su opresor y haciendo a este tambalear. Arrojé la carabina lejos y me incorporé de un salto.

Corrí, esta vez haciendo acopio de toda la fuerza que la Diosa me permitía invocar para moverme a gran velocidad acortando la distancia en un parpadeo entre el cambiaformas y yo. Saqué las dos armas al mismo tiempo apuntando al pecho de mi supuesto hermano.

A esta distancia el impacto de las balas era un golpe fatal.

El ultimo de los Stargazers sale volando y cae como tabla sobre el suelo. Se bien que estas armas poco pueden hacer contra nuestros poderes de regeneración, de modo que interponiendome entre Nina y el hermano sin nombre arrojo las armas y me dispongo a pelear.

El pecho arde como el mismo infierno, un dolor agudo, como no habia sentido hace muchisimo tiempo (y he viajado grandes distancias en el umbral del dolor) atenazaba cada musculo en una contracción inclusive aquellas partes de mi cuerpo que ya no estaban ahí. ¡El maldito hermano Montaña me volo un brazo!

- Que has hecho? ...

Pregunta, cuando deberìa ser Montaña quien respondiera por su atrevimiento. Tarde entiendo que se refiere al cadaver de Mat que yace en el suelo. Hay algo mas fuerte que el miedo ardiendo en su espitritu. La escencia de la ira.

- ...Quién Eres? ...QUE..?

- Can't you remember?

En todas las memorias que soy capaz de atraer de los Stargazers, no hay ninguna que muestre al hermano montaña tan consternado. Fuera de su centro el que siempre permanecía ecuanime. Un delicioso sabor llena mi paladar mientras miro detenidamente sus gestos. El miedo le muerde el cuerpo y le hace temblar ligeramente la voz. Sin embargo se mantiene firme y fiero. ¿Será que en verdad cree que puede enfrentarme? No ha caído en la cuenta de lo poco que me tomó despachar al Maestro Cuervo y cree que puede oponer alguna resistencia. ¡Esta perdido! Mias son las memorias de sus puntos debiles, vistos desde seis diferentes puntos de vista. Seis espiritus me prestan poder para apalstarlo.


- I know you well, you are a part of me, I know you better than I know my soul...

Y la libertad resonó con el cañon de una escopeta.

Sonidos a través de las circunstancias. Oigo dentro lo que veo afuera veo afuera lo que oigo dentro. Soy un espacio que se desintegra. Escucho gritos, ira y dolor. Los gritos que inventan el silencio. El silenco es un espacio de la pelea. Rugidos caminando sobre el silencio. La tarde se a detenido, no obstante camina. Mi cuerpo oye al cuerpo de mi hermano y le responde.

tengo el cuerpo deshecho, los nervios destrozados, Con los ojos cansados cerrandose como un telón sobre la obra de esta derrota. Apenas soporto la luz, tengo la saliva espesa y la esperanza agarrada a veinte uñas de ese latido que escucho.

Epoch! Me queda apenas un hilito de mi alma, siempre oscuro, pero por ti he de levantarme. la vista esta nublada por sudor, lágrimas y sangre, sin embargo puedo presenciar como el monstruo que invente se levanta de nuevo, a pesar de los impactos y estirando su muñon sanguinoliento comienza a hacer brotar... ¡Una mano! EN CUESTION DE SEGUNDOS YA SE HA REGENERADO!

(* Escupe sangre mientras se incorpora debilmente)

- Maldito reptil...

Las nubes que lentamente se fueron congregando alrededor de la batalla finalmente se desgarraron en un repentino chubasco. El agua del cielo beso las heridas de las fieras bestias que se debatian danzando al compás de la muerte. Agobiado por las memorias que aun le asaltaban y el dolor, que era el coste que había que pagar para regenerarse en cuestión de segundos le obligaron a detenerse.

El sabio Epoch mantenía la guardía alta aunque comprometiendo su distancia por defender a la loba que ya se esta incorporando otra vez.

- Well, isn't she stubborn?...

Suavemente, casi parsimoniosamente torna su cuerpo en el de otra persona, la metamorfosis le permite regenerar la piel y los huesos quemados, reconstituidos en unos cuantos pasos. Ahora a través del cuerpo que antes perteneciera al rey Krimson, los ojos del reverendo miraron a Montaña.

(* dos voces, una voz ronca y otra mas aguda hablaron al mismo tiempo por la garganta del cambiaformas)

- Tus hermanos caídos en batalla te tenían en muy alta estima, hermano Oso. Te creían el mas fuerte entre los Stargazer... ¿tu que dices?