¡Brindo por las desgracias!{Privado}

por **Nallely R. Mihail** Sáb Sep 15, 2012 5:05 am

Imposible. Imposible.Imposible. ¿Cuantas veces me había repetido aquella palabra en mi cabeza?.Ciento de veces y sin embargo seguía haciéndolo en una de las tabernas más sucias y mugrientas de París. Bebí un trago de mi vaso. Vodka. Necesitaba beber,aunque no era ninguna fanática de las bebidas alcohólicas . Lo hacía por necesidad, como cuando necesitas el oxigeno en espacios pequeños. Estaba encerrada en un espacio y alrededor mío solo flotaba un sentimiento: la culpabilidad. Me había vengado por la supuesta muerte de mi hermana gemela y ahora ella venía a ¿vengarse? de mí. ¿Por qué? .Porque me había enamorado de los dos hombres que rondaban junto a ella. Vlad y Sorin. Ambos estaban muertos ,asesinatos por aquellas manos finas que eran la tapadera de una asesina. Mi tapadera. Mi garganta aguantó una vez más las sustancias de la bebida . Cómo respuesta mis parpados se cerraron por completo, apretaron fuerte con el deseo de cesar con la bebida.

Me sentía mareada y aun así bebía para cubrir mis pensamientos. Era una imagen algo rara y crítica en aquel lugar. Una mujer de clase alta, de apariencia dulce y amable sometida en el alcohol. Patético. Desconectaba las risas, los gritos y los gemidos del local. ¿Que había hecho mal?.¿Cómo podía ayudar a mi hermana ,a mi gemela a salir de aquel lugar tan poco común?. Me quedaba la esperanza o rezar. Ambas cosas eran invisibles como deseaba serlo en aquel momento. Bebí otro trago y me relamí los labios con suavidad.
De una cosa estaba segura, no iba a volver a casa. Al menos no con esas pintas tan varoniles. Dorna me echaría la culpa. Era criada pero para mi era como una segunda madre. Comencé a soltar carcajadas armoniosas - que coloreaba un poco aquel lugar oscuro- debido a mis pensamientos y al alcohol que adornaba mis mejillas de un color vivaz. Esta vez acabé el vaso y lo tendí al tabernero - Otro,por favor - apenas articulaba palabra y apenas sujetaba la cabeza ,por eso mismo apoyé el codo en la barra y en la palma de mi mano el rostro.

- No parece que aguanta el alcohol.¿Está usted segura? - palabras y mas palabras. Tenía razón ,no era consistente a la bebida y me sentía un poco mareada . Fruncí los labios e intenté hablar correctamente - Yo le pago para servirme,no para cuestio...narme - nunca había sido tan borde pero necesitaba olvidar aquel encuentro fortuito y el alcohol era la mejor solución. Me sirvió sin reprocharme nada más y lo llevé hacía los labios para dar un trago más. Cada trago que daba era el paso perfecto a la adicción y la perdición . Se notaba en mi rostro los disgustos. Odiaba ser tan expresiva y aun más cuando la gente me decía que era cómo un libro abierto. Bufé molesta y acabé el vaso de golpe .
Necesitaba tomar el aire, no había comido nada y el alcohol con el estomago vacío no hacía nada bien. Dejé unas monedas y me levanté de la butaca. Tuve que hacer un esfuerzo en sujetarme fuerte de la barra o iba a ser la risa de todo el mundo. Ya había sido la payasa muchos años atrás,eso debía llegar a su fin.

por **Santana López** Dom Sep 16, 2012 11:29 am

Después de haber estado un buen rato buscando alguien de quien alimentarse decidió andar un poco para pensar en la noche libre de tantas miradas. Paseaba tranquila metida en sus pensamientos pues tenía la cabeza bastante llena de preocupaciones últimamente y necesitaba un poco de aire, a lo mejor le daba algunas ideas. A pesar de sus preocupaciones podía estar bastante feliz, bueno, estaba radiante. Según se había enterado una vieja amiga estaba por París lo que no sabía era durante cuanto tiempo y donde encontrarla, pero eso no seria problema ya que cuando quisiera que se la viera encontraría a Santana. Aunque la primera cosa que la tenía tan feliz sin duda era la razón de su existencia, que otra cosa si no podía tener a Snixx bajo rejas.

Le estaba sentando bastante bien el paseo, puede que no estuviera encontrando soluciones, pero si encontraba razones para sonreír o por lo menos no llevar una cara de fastidio continuo. Además de que le venia bien estar fuera de casa, no solo para alimentarse. Claro estaba que conociendo esta ciudad podía haber peligro hasta para una criatura de la noche, pero era improbable que pasara nada si no llamaba mucho la atención que es lo que procuraba. Ahora tenía razones para no meterse tanto en problemas, aunque alguna emoción de vez en cuando no viene mal.
Estaba llegando a una zona con alguna que otra taberna, se le pasó por la mente quizás entrar en alguna pero eso rompería su tranquilidad y no le serviría de nada. Se encogió de hombros y pensó seguir con su camino hasta que de golpe una de las puertas se abrió bruscamente cuando una joven salía de uno de esos tugurios y se podría decir a la legua que iba un tanto ebria. Antes de acercarse o seguir con su camino decidió observarla aunque fuera por unos segundos. Finalmente optó por acercarse, si la joven daba un solo paso más se caería al suelo, gracias a los callejones logró adelantarse un poco a ella esperando a que diera esos pasos. Se quedó en la sombra apoyándose en la pared y cruzando los brazos.

-No es conveniente que una chica ande sola a estas horas y mucho menos si va ebria, hay demasiados peligros a esta hora-salió lo suficiente de la sombra como para que se apreciara que había alguien pero sin dejar ver su rostro y sin dejar de estar apoyada y con los brazos cruzados. Esperó a que la joven se diera cuenta de su presencia ya que sus sentidos estaban un poco aletargados y era normal, esta no sabía la suerte que había tenido al encontrarse con Santana y no con alguien menos… ‘’amable’’. Visto que necesitaba una ayuda para poder vislumbrar a alguien, decidió salir de su improvisado escondite dejándose ver por completo y acercándose un poco más sin llegar a alcanzarla.

¡Brindo por las desgracias!{Privado}

¡Brindo por las desgracias!{Privado}

Re: ¡Brindo por las desgracias!{Privado}