La dulzura de la sangre - Libre

por **Dimitra Le clairemond** Dom Ene 06, 2013 1:06 pm

El cuerpo de la joven cayó sobre los adoquines del suelo mientras sus blancos y delgados brazos se sujetaban a los encajes del final de mi falda, la mire con dulzura como si aquella niña fuera algo más que mi cena, pero es imposible no hacerlo cuando su hermoso rostro se llenó de luz al decirle que terminaría con el suplicio de prostituirse.

Los ojos marrones se opacaron de apoco mientras su vida se escapa en pequeños sorbos magenta , me acerque a ella para tomarla de la nuca y terminar de poner el cuerpo sobre el suelo, me senté justo al lado del cuerpo medio inerte acomode la falta del hermoso vestido de seda negra que con tanto esmero mi empleada había preparado para mí, mi propio cabello fue corrido hacia un lado mientras los colmillos salieron del rosa de mis labios y se hundieron nuevamente en el cuello de la joven absorbiendo por completo y antes de que esta muriera el ultimo sorbo y el más delicioso trago de sangre.
Una vez sus boca dejo de moverse y sus labios de suplicar, deje la cabeza sobre el frío de la calle y el cabello rubio de la dulce jovencita se extendió y mezclo con el agua que corría por la reciente rubia, me levante mientras le veía el rostro – cuanto dolor en una sola chica – murmure mientras tapaba mi rostro con la parte superior de la capa; camine por la callejuela con la plena certeza e ser observada y me trate de mezclar con la multitud que entraba al teatro.

por **Marlene Kaiser** Lun Ene 07, 2013 4:51 am

Había estado caminando por las calles de París queriéndome asentar y familiarizarme con la gente de allí. Hubo algo que llamó mi atención mientras daba un recorrido, una mujer castaña se alimentaba de una como si de un sandwich de milanesa se tratase. Observé cada movimiento de aquella mujer desde la vereda del frente, tal vez me podía ubicar un poco por allí ¿y qué mejor guía que otro vampiro?.
Se escabullía entre la gente pero no pasaba desapercibida para mi, la seguí por unos momentos hasta que pude acercarme lo suficiente para hablarle. -¿Es legal dejar los residuos en el suelo luego de comer?-Pregunté esperando a que se detuviera, tal vez no había sido la mejor pregunta para iniciar una conversación, y esperaba haber pronunciado bien cada palabra para que se entendiera.
Miré hacia atrás fugazmente buscando con la mirada el cuerpo. Sería fácil encontrar víctimas por allí por lo visto, eso hacía que me tranquilizara un poco. Aún me encontraba ansiosa por saber qué sorpresas tenía Francia.

por **Dimitra Le clairemond** Lun Ene 07, 2013 6:23 am

Sonreí levemente permitiendo que se mostrara uno de los colmillos al escuchar la voz dulce y suave, era una rubia de rostro hermoso … bueno todos nosotros somos hermosos … ya estábamos encaminados a la entrada del teatro cuando decidí contestarle – Todo querida, absolutamente todo aquello que hacemos es un acto de ilegalidad, pero acaso importa .... estamos por encima del bien y del mal y esa muerte que presenciaste sera atribuida a los ladrones– y solté una pequeña risa, una vez pasada la taquilla y quedando frente a la hermosa escala de caracol que comunicaba con los palcos reservados me gire hacia ella con la intensión de verle completamente y presentarme de la manera debida – Un gusto enorme … mi nombre es Dimitra Leclairemond , deseas acompañarme esta noche en la ópera – le dije mientras con mi mano indicaba hacia las escaleras donde se encontraba el palco separado.

Esta era una obra de François-Adrien Boïeldieu. Llamada el califa de Bagdad y estaba digamos que recién salida del horno por lo que la sociedad parisina luchaba y pagaba esperando figurar en las noticias concernientes a tan gran acto de interés y cultura, el teatro estaba repleto de gente de clase alta y media ; muchos como nosotras ocupaban otros palcos y muchos de otras especies también habían asistido a ver esta obra muy parecida a una narrativa de amor imposible. Me tome el tiempo de examinar el teatro y sus asistentes mientras con el programa en la mano y unos pequeños binoculares esperaba la respuesta de la joven.

por **Marlene Kaiser** Lun Ene 07, 2013 9:45 am

Al escucharle fruncí levemente el ceño, tenía ganas de creer que uno podía ir por allí alimentándose, haría las cosas más fáciles, pero no. Aunque era una buena táctica la de los ladrones, igualmente estaba consciente de que los cazadores podían estar en cualquier lado.
Cuando se giró completamente pude admirar sus profundos y bellos ojos. El color sobresalía notablemente. -Bonito nombre...-Dije luego de escuchar su presentación. Seguí la indicación por las escaleras aceptando su propuesta. -Mi nombre es Marlene Kaiser, vine hace unas horas a Francia. -Al tiempo que avanzaba iba haciendo una presentación sobre mi.

Me agradaba aquella mujer, aunque siempre había que ir con precaución y no ser tan confiada. Observé aquel lugar lleno de gente, no había asistido a demasiados teatros en mi vida, pero parecía interesante. -¿Vienes seguido por acá?

por **Dimitra Le clairemond** Lun Ene 07, 2013 12:46 pm

Seguí a la joven de cabellos rubios por la escalera hasta llegar a uno delos 3 palcos principales donde uno de los empleados del teatro habría cortesmente la puerta, dentro de la habitación exquisitamente decorada con cortinas de un paño pesadísimo en azul rey había una mesita plateada en el centro con 2 copas y una botella de un vino tinto merlot; el mozo del teatro hizo lo propio ofreciéndonos una copa a la que por mi parte asentí gustosa – no sé si tú quieras querida Marlene – y termine de acomodar el vestido de terciopelo negro frente a la silla de la parte derecha.

Apoye los brazos sobre las descansaderos de la silla para poder sentarme y toque con los dedos suavemente el tallado de la madera y las incrustaciones de cobre y oro que con total habilidad incrustaron en cada mueble – Que puedo decirte querida, llevo apenas 4 meses en la hermosa ciudad pero realmente no he salido mucho …. Hace poco mi ama de llaves Ana – y con el dedo indique la parte inferior del pasillo en la tercera fila a una mujer de unos cuarenta y tantos de edad con una linda pava color azul celeste - decidió sacarme de mi encierro y de apoco me ha llevado a diferentes eventos, de los que afortunadamente este me parece el más encantador.

Empecé con movimientos suaves a retirar de mis manos los guantes de ébano – Y qué hay de ti, porque en Francia ? , en donde te estas hospedando – le dije una vez terminada la labor de retirarme los guantes.

por **Marlene Kaiser** Lun Ene 07, 2013 7:51 pm

Observé detenidamente el lugar, se veía bastante cómodo y de buen gusto. Sonreí al hombre que abrió la puerta y ofrecía algo para beber, apenas me encogí de hombros mirándola a Dimitra, no era de beber alcohol pero un poco no me perjudicaría en lo absoluto.
-Si, se lo agradezco-Dije seguido con un gesto de la cabeza. Me acomodé en el asiento contiguo, no estaba nada mal, había empezado a relajarme. Apoyé mi espalda al respaldo, crucé las piernas delicadamente para luego colocar mis manos sobre mis rodillas sin perder detalle de lo que ella decía. Giré mi cabeza al ver la persona que señalaba. Sonaba a ser una persona solitaria, tal vez podía guiarme por allí con ella, pero tampoco quería abusar.
-Creo que es un buen lugar para empezar a conocer. Tiene buen gusto -Comenté volviendo a ver a la ama de llaves.-Elegimos Francia con mi hermana porque...bueno, ya hemos estado en varios países en nuestras vidas, y no nos podía quedar pendiente semejante país, suelo interesarme mucho por la cultura.-Expliqué mirándola fijamente, a veces solía ser molesto eso. Dudé acerca de la segunda pregunta, pero realmente no tenía nada definido.-Aún vamos de lado en lado, no tenemos un lugar fijo para quedarnos. También influye que queremos conocer todo y somos algo impacientes.-Me sinceré enfocándome luego en la copa de vino que había ya servido el hombre.

por **Dimitra Le clairemond** Mar Ene 08, 2013 8:37 pm

Escuche atentamente el relato de mi interlocutora, la linda joven hablaba de conocer y valla que la entendía, tome la copa y mientras bebía un sorbo del líquido oscuro dentro de esta, pensaba que cada año el vino perdía mas su sabor y que las cosas dejaban de ser interesantes, la escuchaba hablar de su impaciencia y recordé que hace un par de siglos yo misma quería comer el mundo de una vez, pero eso no es suficiente y al igual que todas las cosas en la vida de un vampiro el viajar se convierte en un sueño difuso que pierde brillo – Comprendo y espero que disfrutes de tu estadía, no obstante si gustas pasar una larga temporada por aquí o sencillamente decides establecerte – y tome otro sorbo de vino – te ofrezco mi mansión la cual se encuentra ubicada en el distrito XVI en Porte-Dauphine, inclusive allí mismo puedes ir buscando una residencia permanente o de verano … te aseguro que no encontraras lugar más hermoso – le dije mientras le mostraba una sonrisa.

La música comenzó a sonar con estrepitosos violines y los tambores que daban paso a el acto de la opera y los espectadores guardaron silencio- me dijiste que estabas con tu hermana verdad … bueno ella también es bienvenida , la mansión de los Leclairemond está abierta para ustedes – y con tranquilidad saque la boquilla para encender el cigarrillo … lo hice mientras le ofrecía a mi nueva amiga uno, en esperar de conocer si fumaba o no … es cierto que tengo algunos dones propios de mi naturaleza oscura pero procuro no utilizarlos – espero te guste … es la típica historia de amor – y solté una carcajadita fina.

por **Marlene Kaiser** Mar Ene 08, 2013 9:50 pm

Me sorprendió bastante su ofrecimiento, no me parecía común que una persona invitara a otra a su hogar con tanta confianza, menos siendo desconocidas igualmente me agradó su gesto.
Sujeté la copa de vino pero no probé antes de contestar. -Muchas gracias por el ofrecimiento, lo tendré en cuenta.-Miré fijamente mi copa moviéndola en mi mano haciendo girar hacia la izquierda el contenido.-Pronto andaré por allí entonces. Aún no conozco, casi no he conocido nada.

Observé el lugar con detenimiento, escuchando la música sin perder nada de vista, asentí cuando mencionó lo de mi hermana. -Si, vine con ella desde Londres. Y nuevamente te lo agradezco, se lo comunico para que lo piense y allí estaremos. -Era agradable encontrar vampiros así, por lo general eran algo...engreídos y altaneros. Aunque yo también solía ser así dependiendo del caso, pero tampoco podía llevarme el mundo por delante en lugares aún no explorados con gente desconocida. Negué moviendo la cabeza ante el ofrecimiento del cigarro.-Te agradezco-Esbocé una pequeña sonrisa llevándome la copa a los labios y bebiendo un poco del vino. Escuché lo que decía acerca de la trama de la obra y sonreí de lado a lado. -¡Claro! Siempre uno está en la espera de que esas historias nos pasen...-Dije riendo un poco.

por **Dimitra Le clairemond** Miér Ene 09, 2013 9:08 pm

Sonreí un poco con su comentario puesto que el amor para mí era tan lejano y miserable como el mismo cuerpo que hacía poco tiempo había dejado reposando sobre el suelo, el amor no era mas que el espejismo causado por nuestros miedos de aferrarnos a alguien, no obstante no le tendría por qué exponer los sentimientos tan profundo de un caminante anciano como lo soy yo – Es verdad .. Todos esperan que les pase algo así – e inhale un poco del humo que realmente nada hacía en mi porque sencillamente estoy muerta – eres menor o mayor que tu hermana?, te ves muy joven y puedo notar que eres neófita …. Aunque eso realmente no importa pronto me alcanzaras, el tiempo que camines por sombras te será eterno – le dije mientras me terminaba de un solo sorbo el contenido de la copa.

Entonces en ese momento alcance a recordar cuando aún era joven, antes de ser vampiro antes de que todo pasara … recordé la vida , recordé el sol y el olor de las mañanas ; luego recordé el encierro y la muerte … eso es lo que ahora me convierte en un ser miserable sin escrúpulos , en fin una vez desperté de mi letargo me sobe los ojos y me dispuse a prestarle toda mi atención a Marlene, quien increíblemente había logrado agradarme sin hacer absolutamente nada.

por **Marlene Kaiser** Jue Ene 10, 2013 8:15 pm

Bajé un poco la mirada al escucharla. Realmente, si esperábamos algo de eso, algo mágico en la vida, o alguna cosa que nos emocione y nos motive. Pero odiaba todo el tema de sentimientos en cuanto al amor, podía ser fuerte para algunas cosas pero para otras era una estúpida de 5 años. Sonreí queriendo disimular lo que se me cruzaba por la cabeza y volví a mirarla enfocándome en sus hermosos ojos -Soy menor que mi hermana. Ella tiene dos años más que yo...y digamos que hace unos cuantos años que llevo una vida de muerta pero noto en todos los países algo diferente, los vampiros llevan vidas diferentes en todos lados. -Comenté mirándola y volviendo a dar otro sorbo a mi copa.- Está excelente.-Critiqué refiriéndome al vino. -Por qué Francia? -Pregunté interesándome más sobre su larga vida.

por Contenido patrocinado

La dulzura de la sangre - Libre

La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre

Re: La dulzura de la sangre - Libre