Residencia Touluse (Libre)

La vieja mansion de la familia Deverau, llevaba mas de diez años abandonada y otros tantos mas en espera de ser vendida, los rumores que recorrian entre las villas circundantes narraban todo tipo de historias sobre ese viejo caseron...que si estaba encantado....que si uno de los hijos habia desaparecido en su interior en condiciones un tanto extrañas...pero al fin y al cabo todo eso quedaba en rumores.

Rumores que se acrecentaron con la llegada de su nuevo dueño.Del poco se conocia a excepcion del apellido...los rumores volvieron a correr por las villas frescos como el agua del rocio mañanero. Un miembro de la vieja familia Touluse....los expatriados.

La primera semana transcurrio con las idas y venidas de enormes carruajes cargados de los objetos personales de su dueño, un ir y venir de sirvientes como hormigas obreras que se afanaban en dejar listo el hormiguero para su reina.

La siguiente semana la calma a la vieja casa parecia que habia vuelto a regresar, los carruajes fueron dejando de llegar con tanta asiduidad. Ya se encontraba la servidumbre adecentandola,tanto los interiores como los exteriores, y los curiosos campesinos no podian evitar preguntar a algun miembro de esta que cuando llegaria el nuevo dueño. Pero no seria por tierra por donde lo verian llegar....

Llevaba una semana hospedado en un hotel de Paris mientras habia estado ultimando los ultimos detalles. Esa noche había llegado el momento de tomar posesion sobre sus bienes en la ciudad.
El pequeño barco descendia el rio con paso tranquilo custodiado por dos oscuros barqueros.A lo lejos las luces encendidas indicaban que en el muelle se encontraba todo dispuesto para dar la bienvenida a Monseieur Touluse.

La barcaza se detuvo junto al embarcadero y una vez los cabos estuvieron atados, los barqueros abrieron la puerta que daba acceso al lujoso camarote de su interior y esperaron pacientes a que su dueño saliese del mismo. Un hombre de porte gallardesco y ataviado con un sombrero de copa alta y una capa negra como la noche descendio del barco hasta el muelle en donde esperaba la servidumbre bien ordenada manteniendo una fila frente a el.

Todos al unisono hicieron una reverencia a modo de saludo.

Francesc levanto su diestra a modo de bienvenida dejando ver el cetro que portaba a modo de baston, el fenix bicefalo que lo coronaba brillo bajo la luz intensa de la luna llena, la cual se encontraba en su punto mas algido en el firmamento. El que parecia llevar la batuta de los sirvientes, un hombre que rondaba la senectud ataviado con ropas de mayordomo dio un paso al frente e inclinando la cabeza exclamo

August: Mi señor soy August y sere su ayudante personal, si es tan amable de acompañarme le enseñare su propiedad.hay un coctel esperandole en los jardines. Es un placer el recibirle al fin, monseieur Touluse.

Francesc no dijo palabra alguna tan solo sonrio y dio un par de golpes en el suelo con su cetro. August se dispuso a emprender el camino hacia los jardines.
Rodearon por un camino empedrado y adornado con faroles de gas, rodeaba la casa hasta los jardines directamente, alli ante ellos una enorme explanada ajardinada y con arios setos y arboles frutales se extendia. Varias carpas habia distribuidas por ellas iluminadas por farolillos que pendian sobre los jardines dandole un tono de fantasia.

August: Mi señor voy a comprobar que sus aposentos esten listos, tome asiento (dijo señalando a una enorme mesa que habia ubicada en mitad del jardin dispuesta con varios platos y bebidas dispares) la cena esta preparada.

La cena transcurrió tranquila y serena, la noche pese a las fechas en las que se encontraban era fresca y agradable. Frente a el una orquesta le deleitaba con música clásica para darle la bienvenida. En la mesa había todo tipo de platos, desde pollo asado, pasando por un delicioso y apetecible cordero a la brasa y un par de pescados recién pescados, hechos a fuego lento.

Se encontraba deleitándose el paladar con una exquisita botella de vino borgoñes, cuando volvió a hacer acto de presencia su nuevo ayudante, Augsut.

- ¿Monseieur todo se encuentra a la perfección? Espero que asi sea, todo esta listo para que se retire a descansar.

Francesc Touluse: No debeis de preocuparos (mirandole a los ojos) habeis hecho un trabajo formidable, la verdad pensaba que llegaria y me acostaria, pero creo que voy a deleitarme un poco mas con los musicos y esta exquisita botella de vino tinto. Por cierto...August, necesito que mañana me hagais un recado y que no delegueis en nadie, pues mis asuntos prefiero que sean privados.

El mayordomo asintió con la cabeza sin decir nada.

Frances Touluse: Veras... se trata del rey, necesito que me consigáis audiencia con el cuanto antes, la fabrica ya esta funcionando y necesito asegurarme buenos clientes entre la campiña frances y la unica forma de hacerlo sin perder el tiempo es haciendo amistades de...altas miras. Podeis retiraos y por favor...no me decepciones, mañana tendre todo el dia ocupado conociendo a mis nuevos peones en la fabrica asi que espero que tenga una buena recompensa al final del dia, pues me la merecere (esbozo una fina sonrisa)

Augusta volvió a asentir

-Mi señor,no me marchare de palacion sin vuestra cita tenedlo por seguro, si no me necesitais para nada mas me retirare a mi recamara para dejar listos los preparativos en la casa, para mañana cuando parta.

Francesc le indico con su diestra que podía partir sin problemas, después volvió a sumergirse en su botella de vino tinto.

La realidad era que Francesc no era un mal tipo, pero le gustaba la formalidad pues para algo mantenía a la servidumbre, para que fuesen eficaces. Y el que no lo fuese...que volviese a la cloaca de donde había salido. El dinero.....llama al dinero...