Como usar a su bestia interior, para tontos

por **Eslatan Pilligram** Lun Jul 08, 2013 4:13 pm

Era temprano, quizás las 9:00 o menos inclusive. Faltaba bastante para que el bar de don Otto abriera.
El chico, que no tenía donde ir, decidió caminar para conocer la zona. Sumido en sus pensamientos, camino guiado por una mano intangible hacia el bosque. El chico miraba sin ver, concentrado en recuerdos de una vida pasada, que ahora solo podía añorar.
Era verano, en este lado del océano y tanto la temperatura como la vida lo ponían en manifiesto, con verdes tonos, fragancias diversas, jolgorio de cantos y una leve brisa, que no aportaba demasiado alivio para el calor que iba en aumento.
Había enormes robles por toda la zona, con abundante césped entre ellos. No se veía rastro de la civilización, salvo este despistado chico que aceleraba su paso, conforme en sus pensamientos se acercaban los eventos traumatizantes, que lo obligaron a partir hasta el viejo mundo.
Caminaba hacia un destino que no sabía, pero indudablemente lo hacía ya que su trayecto era directo. Perdido en su pseudomeditación, ni siquiera noto que tenía compañía hasta que…

por **Xaziel Morel** Dom Ago 25, 2013 9:50 am

De la carne de Ymir la tierra fue creada,
y de sus huesos las rocas,
la bóveda del cielo fue hecha con el cráneo del gigante de hielo,
y el mar se formó con su sangre
-canticos nórdicos-

La noche llegaba a su punto más interesante y dentro de una mansión muy lujosa, costosa y cual laberinto del que ni una presa podría salir, toda una prisión, alberga a una familia de la cual poco y mucho se ha oído hablar, entre ellas una mujer que ahora está en el estudio, sentada leyendo unos fólders con información, fotografías, y apuntes extraños; un suspiro y cierra los fólderes dejando una nota sobre estos ¿a quién? A su hermano ¿quién? Un vampiro, ¿una lycan y un vamphry? Así es, una familia donde existen un lycan y dos vampiros.

Sale de la mansión, su ropa es algo más extraña esta ocasión, pues al ser una dama, no lleva lo típico de estas, un vestido, guantes, sobreros, y cosas por el estilo, más bien lleva un pantalón ajustado en color negro, una blusa a estilo vestido, con los pechos ceñidos por un medio fajín que le realza, las mangas son bombachas y elásticas, lo que le da mayor agilidad para montar a caballo, sus cabellos como el fuego del infierno recogidos en una coleta, así se dispone y sale de su mansión a las fueras de la ciudad, directo al bosque ¿con qué objetivo? Pensar sobre algunos problemas, llegó hasta la entrada del bosque y dejó su caballo para comenzar a caminar, lo más relajante para ella, era eso, hasta que el aroma de algún otro lycan le llego, lo que le hizo gruñir.

Si, para ser una lycan no le gusta mucho estar con los suyos, pues ha tenido experiencias poco agradables, son pocos los lycan con los que aquella mujer los mantiene de amistades, pues la verdad, es que por su forma fría y gélida o su forma apática de tratar a las personas le ha llevado a un sinfín de peleas con lycanos por lo que ha tenido que matarlos o la han dejado muy mal herida, en su orgullo, y para ella eso es lo más importante, y claro sin olvidar las veces que algunos lycanos de su ascendencia la creían menos por ser mujer y tener una familia con vampiros y lycans unidos. Así que su orugllo estaba herido desde hace mucho por otros semejantes a su línea de sangre.

Olió a aquel hombre y rápido fue a ver quién era, no sin antes cerciorarse de que solo fuera uno y no fuera una embocada, su familia había sufrido un sinfín de emboscadas, por su clan; una vez hecho eso, se acercó al acecho y cuando lo tuvo algo desprevenido lo acorralo, quedándose a la espalda de él apuntándole con el dedo –Di tu nombre, que haces aquí o a quien buscas, si te volteas esta arma (mentira no había ni una) disparará una bala de plata justo a tu espina, y sabes lo que eso te hará verdad, te matará al instante- se ríe, su voz suena delicada y firme, como si fuera una asesina, mentira, ella lo era, lo es y siempre lo será.

por **Eslatan Pilligram** Dom Ago 25, 2013 12:06 pm

Una voz de una mujer, lo saco de su meditación. Extrañamente lo amenazo de buenas a primeras y el chico al escuchar lo del arma, palideció al instante.

-So...soy Eslatan Pilligram. So...so solo caminaba por el bosque. No sab sab sab sabía, que era privado, perdóneme.

Dije levantando lentamente mis manos, demostrando que no estaba armado. Sentía intriga por ver a quien me hablaba pero la amenaza surtió efecto, dejándome helado sin mucho ánimo de oponer resistencia.
Busque con la vista más gente, pero el corto área de visión de los arboles me sugería que sería poco probable que alguien aparezca para rescatarme. Junte valor y empecé a girarme lentamente para mirar a la chica.
En mi mente, algo intentaba ponerme sobre aviso. Aunque aún poco desarrollado, mi instinto lycan estaba atento a los aromas que mi sensible nariz captaba, e intentaba ponerme sobre aviso de con quien tenía la suerte o quizás MALA suerte, de haberme cruzado. Pero ignorando mi nueva naturaleza, los avisos cayeron en oídos sordos, que no supieron interpretarlo correctamente.

por **Xaziel Morel** Vie Sep 27, 2013 2:48 pm

Nadie me dio de comer,
nadie me dio de beber.
Contemplé el más hondo de los abismos
hasta que vi las runas.
Con un grito de rabia las agarré,
y después caí desvanecido.

-canticos nórdicos-

La voz del lycan le hizo pensar en algo, jamás se comportaba así pero vamos que cuando hay una presa fácil no es posible desaprovecharla, sería un pecado hacerlo y es más hasta un delito penado con la muerte, si alguien dejara pasar una oportunidad como esa, con una sonrisa en los labios que aquel hombre no podría notar, la mujer apunto más en la espalda de él para ver su reacción ¿sería así de tonto, acaso no se daba cuenta que era una igual a él? Bufó y pensó el nombre de él lentamente “Eslatan” saboreando en su mente cada letra una a una, por lo que pensó que aquello no era coincidencia, mentalmente iba repasando si tenía entre su lista de conocidos o contactos a aquel sujeto, luego entre los del lado oscuro pero nada, era una sombra y eso le molestaba y mucho, negó con la cabeza y coloco su zurda en el cuello del lycan presionando sus uñas en la piel.

-Eslatan, Eslatan que, cual es vuestro tu apellido y es mejor que no oses en mentirme porque ahora no solo será una bala, tu cuerpo será destrozado y tus miembros divididos por todo Europa- una fuerte amenaza con un toque en su voz serio, demandante casi hasta el punto de sonar más que su tono normal gélido y apático.
Empujó al chico para que hablara con una sola idea en su mente “Tan tonto que no se ha percatado que soy otra lycan” lo que le hizo fruncir el ceño –Esto es un bosque privado, y siempre se mata a quien se atreve a poner un pie en esta propiedad, cosa que tu has hecho, por ende, tu vida ha llegado a su fin, pero como soy tan generosa, dadme un solo motivo para que no arranque tu vida así de rápido y dolorosamente- anunció sin reparo de sonar amenazante.

El viento comenzó a golpear las hojas de los árboles, a mecerlos con lentitud pero con calma, parecía que todo se había manifestado en contra de aquel pobre indefenso ser, un poco más de viento agitando los cabellos de ambos y las hojas secas caídas que revoloteaban por el silbido del viento nocturno y el crujir de las ramas a su paso. Ni uno de ellos daba un pie en falso, no dejaban y no tomaban prisioneros aunque quizás ella si los tomaría, pero jamás sus cartas se develan antes de la partida, solo hay que esperar tener calma y esperar.

por **Eslatan Pilligram** Vie Sep 27, 2013 3:30 pm

Ya...ya...ya lo dije. Pilligram. Ese es mi apellido. No...no miento.

Estaba entrando en pánico, esta mujer parecía estar fuera de sus cabales matando gente por que sí. Acababa de darle un ultimátum. Ya estaba muerto.
Pero el instinto de supervivencia, afloro en el con violencia, manifestando su naturaleza lycan. Con la gran velocidad obtenido en la transformación inconsciente giro y con su mano a medio camino entre garra y mano, golpeo el arma con fuerza, arrojándola varios pasos a la izquierda e incluso quizás habría lastimado la mano de la mujer. En el mismo movimiento le metió un empujón en el pecho intentado hacerla caer y corrió hacia el arma sin mirar atrás. Su corazón latía a mil, desenfrenado por la adrenalina recorriéndole su sistema sanguíneo. Se jugaba el pellejo y ahora, no habría posibilidad de pedir misericordia.
Se percató que estaba frente a una mujer madura. Aunque no era capaz de precisar qué edad tenia, veía experiencia en los ojos.
Tenía una larga caballera rojiza que lo hubiera cautivado en otra situación. Cuando recogió el arma, descubrió su mano cambiada. La miro anonadado por unos instantes. Que le estaba pasando, se giró hacia la chica, con una mirada de perplejidad absoluta tratando de ver, el reflejo de alguna respuesta, en el rostro de ella. Cara de horror, más precisamente., era lo que esperaba descubrir en su antagonista.
Sus ojos amarillos, por la transformación, era lo único que había cambiado visualmente además de sus manos, pero él creía verse como un monstruo peludo.

por **Xaziel Morel** Lun Oct 28, 2013 1:42 pm

Obtuve bienestar
y también sabiduría.
Salté de una palabra a otra palabra
y de un acto a otro acto...
-canticos nórdicos-

Quien podría decir que cuando se coloca entre la espalda y la pared a un cachorro, este mostraría ser una bestia con todas las de la ley y la palabra, si bien es cierto que jugar con los lycans no es buena idea y menos si se amenaza con la vida de ellos con una arma ficticia también es cierto que se puede lograr mucho con aquella mala idea y eso es lo que pensó aquella mujer, que después de haber trasgredido a aquel lycan con lo más sagrado de muchos consideran la “vida” ahora estaba siendo empujada con toda la fuerza, aquel golpe le hizo desestabilizar su postura pero no cayó del todo se puedo mantener a medio con ayuda de sus manos en el suelo y sus pies algo abiertos para evitar tocar el suelo, se levantó limpiando sus manos para luego caminar frente al chico que miraba de forma asustada, al parecer el haberle quebrado tanto lo llevaba a su transformación o mejor dicho a su media transformación.

-Vaya vaya, si ahora no eres un patético cachorro frente a mi, ya eres un verdadero lycan, serenate, lobo, no voy a matarme y no creo que quieras una lucha entre nosotros sabiendo que podrías perder tu vida, soy mayor que tú en esto, pero si así lo quieres no diré que no y no tendré piedad- Agarro sus cabellos en una coleta recogiendo sus cabellos por completo colocando sus brazos abiertos frente a ella sin puños en una posición de defensa, algo extraña pero solo lo golpearía con sus palmas abiertas –Y entonces niño Eslatan, ahora tú decides, toma la decisión correcta porque no hay vuelta atrás-

Amable? No, había amabilidad en sus palabras, estaba lista para todo y más si era con una enfrentamiento con otro lycan, sabía muy bien sobre defensa personal y lucha, cada noche entrena con su hermano un vampiro antiguo y viejo, así que de trucos limpios y sucios se los conoce y por eso a optado una posición de defensa con sus manos abiertas

por **Eslatan Pilligram** Jue Oct 31, 2013 1:14 pm

- A...a...ahora, ahora soy yo el que tiene el arma.

Dije tragando saliva, tratando de serenarme. Aunque la constante puya de aquella mujer, no hacia más que instarme a dejarme llevar. ¿Qué clase macabro plan estaría elucubrando?

-Debería ser más medida con sus palabras, ahora la que peligra es...usted.

Esgrimo el arma, para hacérsela notar ya que parecía ignorarla. ¿Qué estaba haciendo? estaba siendo incauto y temerario. Si era cierto que invadí su propiedad, además ahora estaba robándole y amenazándola. Intentaría salir de esta de la manera más pacifica posible. Al menos todavía parecía ser esa, una salida viable.

-Como dije al principio. No sabía que esto era privado. No vi cerco ni nada. Dejare el arma y me marchare. Mi prueba de buena fe.

Arroje el arma a un costado. Creía que de estar ambos desarmados, yo tenía las de ganar por ser hombre. Separe las manos abiertas, para que vea que también estaba desarmado. Olvidaba que aún tenía pseudo garras.
Algo raro en todo esto, era que no había reaccionado con terror y hablo de "ser un lycan". ¿Que quería decir con eso? ¿Acaso ella sería como yo? Entonces la idea de un enfrentamiento limpio, dejo de parecerle buena idea y miré hacia el arma casi inconscientemente, pero aguardé la decisión de la chica. La postura que mantenía, decía que esperaba mi ataque.
Era raro sentirse un malo, un peligro. Era probablemente una de las primeras veces que se sentía así y de no ser por la tranquilidad que demostraba la señora aquella, quizás le hubiera gustado. En otra situación claro.

por **Xaziel Morel** Miér Ene 01, 2014 4:14 pm

Una estructura concreta en forma de embudo que en total tiene nueve
entradas. El infierno consiste entonces en que todo se repita,
avanzar no se puede. El infierno está congelado.
Adónde se van todos los comilones obesos después de morirse?

-Canticos Nórdicos-

La mente crea lo que quiere creer, quiere ver y quiere pensar para su dueño, no es más que solo ilusiones de algo que no existe, los lycan por naturaleza son seres desconfiados seres protectores y a la vez territorialitas , todos lo saben y aun así malgastan tiempo con palabras absurdas, la mujer se levantó del suelo con el movimiento de sus cabellos de fuego como el infierno de su familia, miro al otro lycan enfrentándole con la mirada.

-Arma? Cuál arma, niño, eran mis dedos los que asumían una arma, era una ilusión y tu cerebro así lo creyó y te lo hace creer, ¿Qué vas a hacer, dispararme con tu mano? Si quieres hacer algo entonces pelea, pelea con una mujer y no me vengas con las típicas estupidces de “yo no golpeo a una mujer”- se colocó frente a frente a él incluso hasta podría haberlo besado, pero no, porque si de lobos son peligrosos de humanos algunos son peores, como ella –Porque yo si te golpearé, y no me importa que seas un niñato- su manó se alzó en vuelo, justo a la cara del joven…

SPLAT

El sonido de la palma femenina tocando la mejilla del otro ser, pero no era un golpe corriente, aquel sonido venía acompañado de otro.

SCRATCH

Las uñas hermosa y largas, finas y relucientes habían dejado una marca en la mejilla de su contendiente, un pequeño rasguño que seguramente haría enfadar a cualquiera, y bien que lo sabía la mujer.

-Entonces niñato, dame tu mejor golpe o es que te asusta una pelea, la tierra? No me importa, eso te las arreglarás con mi hermano cuando lleve tu cuerpo golpeado frente a él, y decidirá tu castigo, pero mientras nada impide que yo me pueda divertir con un semejante- un gruñido y mostraba sus dientes, la ira aparecía en ella.
Irá? Por qué? Porque al parecer para la mujer le molestaba que él fuera igual a ella en raza, y sea tan débil y delgado, sin carne ni huesos, pero eso se podía arreglar, a las buenas o a las malas.

por **Eslatan Pilligram** Miér Ene 01, 2014 7:44 pm

Cambiante como el viento, la situación volvía a ser cuesta arriba. Culpa del miedo de perder la vida, había creído ver, incluso tocar un arma. Pero tal cual menciona la dama…solo lo crei.
La mujer parecía estar en ascuas y siguiendo con su temperamento alocado no cesaba de hostigarme e insultarme. Quería intimidarme y hacerme huir, como quien diría, con el rabo entre las patas.
En mi cabeza se formaban alocadas ideas y muchas las descartaba casi en segundo. Una elucubración era seguro. Lo único que tenia de humana esa señora, era la apariencia. Probablemente no era solo una actuación intimidante, sino que eran amenazas reales y seria inteligente no ignorarlas, pero antes que siquiera poder hacer algo se adelanto y dio un bofetón en mi cara desprotegida, magullando mi mejilla. La mano no se detuvo y también sus uñas dejaron una impronta sanguinolenta en mi rostro.
No, me equivocaba. Esas no eran uñas, eran garras. Y estaban afiladas como navajas
-Jamas golpearía a una mujer, y hoy no será la excepción. Pe…pe…pero usted cla…cla…claramente no lo es, asi que te…te…te…te…tenga cuidado de su accionar
Murmure apretando los dientes. La adrenalina corría en mi sistema circulatorio en cantidades y mi parte animal contaminaba mis ánimos con ira y deseos oscuros...de muerte, de violación, de lastimar. La pequeña voz en mi mente que me sugería ser prudente ya era ahogada por gruñidos que venían de lo mas profundo de mi ser, mientras mi naturaleza lycan asomaba.
Ya no era un chico. Tampoco un lobo. Era una abominación a medio camino entre las 2 formas. Un pelaje tupido y una piel gruesa protegían el cuerpo. Afiladas garras crecían en mis extremidades. Los caninos de desarrollaban mas en poderosos colmillos para desgarrar carne.
Encorvado sobre mis piernas, miraba a la mujer que tenía delante y se había atrevido a lastimar sin ningún rastro de otra cosa, más que de odio e la mirada. Avance rápido buscando su cuello para morderlo con todas mis fuerzas.

por **Xaziel Morel** Lun Ene 27, 2014 3:48 pm

A veces podemos pasarnos años sin vivir en absoluto, y de pronto toda nuestra vida se concentra en un solo instante.
Oscar Wilde

Que nos impone el rango o categoría en la sociedad? Somos hombres mujeres, mujeres hombres, pero que nos impone? Acaso son los rasgos físicos? Es la fisionomía la que nos hace tan diferentes los unos de los otros, la verdad son pequeñeces eso de la anatomía, quizás la forma de pensar sea la que nos separe, ¿pero? Si fuera eso, porque existen tantos similares?, bien dejemos entonces solo la fisionomía lo que nos categoriza socialmente.

La mujer, en este caso, no veía un hombre si no un cachorro, miró sus uñas con la imprenta de la sangre, dejando una estigma en el cachorro, automáticamente se dio la vuelta dándole la espalda, con el recuerdo de su hermano cuando ambos “jugaban” (entrenamiento) ¡jamás des la espalda al adversario! Ella solo murmuraba –aquí no hay adversario, solo un tonto cachorro asustado, un niño, solo eso, bah- recogió sus cabellos en una coleta, como un solo cuerpo de fuego caminando por aquel bosque de su mansión. Hectáreas heredadas de sus padres y clanes.

-Bah, no vales la pena, ni un solo esfuerzo de alguien y menos de uno superior como el mío, ya se de que estas hecho, ahora lárgate de aquí, esfúmate, no quiero volver a verte, eres una vergüenza para los lobos, una completa vergüenza, y así no me sirves para nada- masculló sin importarle en lo absoluto lo que el joven pensara.

De que ella era mayor a él, lo era, de que tenía mayor control, lo tenía, pero a qué punto podría controlar las cosas a su alrededor?.

por **Eslatan Pilligram** Sáb Feb 01, 2014 5:56 pm

Tan de pronto como la situación se salió de control, fue que termino. La mujer se dio vuelta y empezó a caminar, dándole la espalda y diciendo cosas hirientes.
Sin embargo las palabras de la mujer tenían mucha información entre líneas, y aunque el joven Eslatan no había captado mucho de aquella información, no le paso por alto eso de "no, me sirves". Como si hubiera estado testeando algo.
- ¿Que no sirvo para qué? No sé qué me pasa, ni tampoco que es usted...pero sería bueno que alguien me explique un poco. Podría intentar servir para eso que tiene en mente.
Dijo levantando la voz, mientras pasaba a una postura más lánguida, ahora que el aparente peligro se esfumaba. No le gusta ser un simple peón, pero tendría que aguantarse si aquella mujer podía guiarlo. Abrirles los ojos aunque sea.
La mujer no respondió inmediatamente, e incluso pareció que no lo había oído. Era bastante desagradable que lo tratara así, como si fuera el más insignificante y molesto insecto que existiese. Empezó a observar el bosque de su alrededor para darse una idea de donde estaba y no cometer la estupidez de entrar devuelta en la propiedad de una loca. Quizás no fuera realmente de ella, pero no había mucho que un extranjero sin contactos pudiera hacer para quejarse.
Entonces recordó la sensación de hace un rato y levanto sus manos para mirarla, pero eran nuevamente normales. Las toco buscando alguna marca, o indicio de lo que habían sido sin éxito.
Su imaginación voló en extrañas direcciones mientras su cerebro se inventaba retorcidas suposiciones de lo que podria ser.

por **Xaziel Morel** Miér Feb 26, 2014 8:56 pm

Recogió sus cabellos por completo en una coleta alta, con aquel cabello de fuego que tanto la había identificado como hija del mismo demonio, si supiera que era hermana de él, sonrió se soslayó limpiando sus ropajes viendo que no tenga ni una arruga, porque lo que más le molestaba era eso que su ropa se arrugara y mostrara algo que no era una pordiosera, esa era su aversión aquella gente débil y que sentía pena por sí mismo, esa gente que solo hacia estorbo dentro de la sociedad y su avancé.

Miró al lycan con desprecio rodando los ojos, como si pidiera más paciencia de la que tenía esta mujer–lo que escuchaste, no sirves para nada, ni como lycan ni como manada, eres solo un despojo más de algunos que existen por ahí, quizás hasta un error para el que te convirtió, o quizás eso fuiste siempre, un erro de conversión- masculla cada palabra sin bajar la mirada, es más su pose era de la mujer altiva que siempre era aquel ser si emociones y con su mirada apática, repudiando todo lo que no consideraba –Qué soy yo? Soy lo superior a tu presencia, cachorro, al menos en eso estamos de acuerdo, eres un cachorro que no sabe dónde está parado ni qué hacer con lo que es, patético-

La mujer iba entrando a un terreno peligroso, tocar el ego de un hombre y sobre todo de un lycan era muy riesgoso, pero ella también estaba en un estado de riesgo para el que la enfrente, aunque no tomaba una pose de pelea, de por sí su actitud era de una de esas poses de lucha, pero ¿Por qué no la optaba? Por algo simple que ella considera “no avisar al enemigo de tu próximo paso” enfrentó al lycan con su mirada celeste de un cielo que esconde algo, que esconde más de lo que muestra en reflejo.

por **Eslatan Pilligram** Sáb Mar 08, 2014 7:54 pm

¿Un error? Esas palabras, cargadas de malas intenciones, en especial el tono menospreciandolo, fueron como una daga intangible que apuñalo en lo mas profundo del chico. El chico queria auto convencerse que esa desagradable mujer, no sabia lo que el valia, pero la opinion, tan gratuitamente dada, no era facil de ignorar... ¿y si tenia razon?

- Todos empezamos desde abajo, incluso usted. ¿Que tiene que perder?

dijo apretando la quijada, tratando de retener todo los insultos que se agolpaban en su garganta. Los nudillos de sus puños, blancos por la presión. Desde que habia recibido el mordisco, su humor era mas inestable, pero sin embargo, aun siendo normal ese tipo de palabras eran capaz de sacar lo peor de cualquiera. Nadie se merecia que lo trataran asi.

por **Xaziel Morel** Miér Mar 26, 2014 11:05 pm

- Todos empezamos desde abajo, incluso usted. ¿Qué tiene que perder?-

Tontos y re tontos, algunos seres no ven más allá de lo que está sobre sus narices, al mujer volteo a verle con un aire de superioridad en su mirada, sus puños cerrados, se encorvó un poco como si quisiera atacarlo, pero solo se limitó a gruñirle, como una advertencia de que al segundo strike estaría siendo atacado, sus uñas eran unas garras letales de color rosado pálido que se iban volviendo blancas por tenerlas tensionadas.

-Todos los que tienen que empezar de abajo lo hacen, otros nacen ya con la grandeza y la mantienen, pero los últimos se regodean en su inferioridad y no hacen nada por cambiar eso-

Le miro altiva y arrogante, unos ojos con un brillo de ira contenida, para aquella lycan no había nada peor que los inferiores poniéndose a su nivel y solo le estaba dando, por ves primera a alguien, la oportunidad de salir ileso sin rasguño y sin heridas graves, porque siempre que es enojaba terminaba lastimadas las personas con quien se enfrentaba.

-En que peldaño estas tú? Eh? En el inferior, en los normales o en los superiores, creo que los últimos que mencione ni los puedes distinguir, lo que deja a los miserables o los conformistas-

Masculla en posición de ataque para que el lobo se ponga en guardia.

por **Eslatan Pilligram** Dom Mar 30, 2014 1:14 pm

La mujer parecia ser inestable en cuanto a sus emociones y la postura indicaba que quizas volveria a atacar. Un sudor frio baño al chico que daba un paso hacia atras, conciente de que estaba sobrepasandoce. La actitud de la mujer, era bastante ofensiva y en el fondo, no queria seguir relacionandose con ella. Dio varios pasos hacia atras sin dejar de mirarla, con la manos levantadas y abiertas, en gesto inofensivo.

- Todos deben subir por esa escalera y llegar a algo mejor, pero los lobos no son cazadores solitarios, tienen compañeros con los que logran hazañas mejores.

Dejo en el aire la frase, dejando que la mujer entendiera lo que quisiera. A su punto de vista, el no era peor ni mejor que nadie, solo inexperto. Ya habia intentando congeniar con ella, pero su paciencia se habia agotado, no le gustaba eso de andar mendigando cosas, asi que adopto una postura mas relajada en la escaza distancia a la que estaba y espero la reaccion de la chica.

por **Xaziel Morel** Jue Abr 24, 2014 2:54 pm

La mujer miró al joven a los ojos y de pronto comprendió, aquel sujeto no era más que otro de los tantos que se había topado en Italia, un joven confundido que no sabía nada de nada, entre suspiros se relajó sus ojos se cerraron negando lentamente bajó la guardia dando la espalda al hombre, toda aquella fiereza se había esfumado de la forma que llegó. Miró sus uñas caminando por el bosque, era su hora de caminar por lo que no se privó de ello, más bien invitó al otro lycano a que le acompañara con un gesto de su mano.

-Se ve que eres joven y no has visto y menos vivido lo que otros ya han pasado, está bien lo entiendo, para ti esto de la vida como un lycan no debe ser fácil pero tampoco es difícil, no lo compliques más de lo que es o crees que sea, porque una cosa es lo que muestra la sociedad y otra de como tu te sientes con ello según tus propios razonamientos y castigos, lo único que te establece nuestra sociedad es el lugar en el que estas económica y socialmente y de ella dependerá todo, los que están en situaciones bajas quieren algo mejor pero poco lo logran, porque para hacerlo muchos venden sus dignidades si no, no hubiera burdeles, no hubiera ladrones o no hubieran asesinos, otros en cambio no venden su dignidad pero se matan trabajando por sueños muy lejanos y cuando alguien les quiere ayudar simplemente no lo aceptan porque creen que hay doble intención algunos lo tienen pero otros no, es ahí donde radica el problema, el mismo ser humano se complica tanto que olvida lo que está a su alrededor-

Soltó sin más la mujer, con su típica pose de mujer que no le interesa nada sin sentir empatía por nadie ese semblante apático y frívolo que posee en sus ojos, nadie ha podido romper ese hielo y menos entenderlo así que ahora pretendía ser clara como si estuviera hablando con niños de cinco años porque sus palabras siempre eran mal entendidas.

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Como usar a su bestia interior, para tontos

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