Jugando para olvidar (Anuar & Soren)

por **Soren Kaarkarogf** Mar Ago 24, 2010 12:41 pm

Recuerdo del primer mensaje :

Soren había golpeado la puerta de la galería de Anuar un par de veces y mientras esperaba a que el chico abriera (si es que estaba en casa), lo ocurrido en la reunión de profesores llegó a su mente lividamente.

- Y así es como se dividirán las clases para el resto del semestre - Había concluido el decano de la facultad de artes y humanidades, un hombre calvo y regordete. Soren había anotado los nuevos horarios en su cuaderno viejo de apuntes, para esa semana se esperaban los nuevos alumnos y comenzaría así un nuevo ciclo en las clases que impartía. Se levantó y cuando estaba saliendo del salón, uno de los directores se acercó a él y lo detuvo.

- Profesor Kaarkarogf - Comenzó el hombre - Hemos... recibido algunas quejas... del cuerpo estudiantil sobre sus clases - Soren tragó saliva y apretó el cuaderno de apuntes y los libros - Algunos alumnos han firmado una solicitud para que se les sea cambiado el profesor, los detalles están aquí - Explicó pasándole un sobre cerrado con el sello y escudo de la Universidad. - Mañana el decano tendrá una reunión con usted en privado -

Dejó escapar un largo suspiro intentando no pensar en que demonios contenía el sobre, que por cierto estaba en su maletín de cuero junto al cuaderno de notas y un par de libros y pinceles manchados. Ahora debía enfocarse en lo que le habia prometido al chico que harían esa noche. Le llevaría al Luna Park y tendrían una segunda cita. Le gustaba como sonaba eso de cita y aunque se sentía igual de nervioso que la primera vez, la perspectiva de pasar un buen rato tonteando con Anuar era justamente lo que necesitaba para no pensar en sus problemas en la universidad.

Esta vez no iba tan bien vestido como en el circo, porque había ido a la universidad primero y siempre que iba a trabajar, se ponía cualquier cosa, apenas calló en cuenta de que su apariencia no era la mejor y comenzó a repararse y a sacudirse el pantalón añejo y entonces notó que llevaba una media verde y otra negra. Mierda... Con suerte Anuar no lo notaría.

por **Soren Kaarkarogf** Jue Ago 26, 2010 2:54 am

Anuar le haló y Soren siguió caminando prácticamente colgado a su espalda como si este lo estuviera llevando cargado, apoyó el rostro en su hombro y se dejó arrastrar, hasta que el chico se detuvo, había un sonido extraño más adelante, Soren observó curioso la superficie de la pared, tenía una rendija que debiddo a la oscuridad pasaba desapercibida por los visitantes, más no por él. Suponía que de ahí saldría otro bicho. ¿Que sería esta vez? ¿Un hombre lobo?.

La voz de Anuar produjo ganas de comercelo. Si, de comercelo a mordiscos, una extraña idea se formó en su cabeza, como una mezcla del salvajismo que como vampiro llegaba en su instinto y la ternura que le provocaban esas palabras. Ese humano le producía demasiadas cosas y sospechaba que aún quedaban muchas más por descubrir.

- Yo tampoco quiero ir al frente - Se quejó murmurándole en la oreja - ¿Y si es un hombre lobo? No me gustan los hombres lobo... - Agregó juguetonamente - Tengo una idea, ven aquí... - Soren tomó a Anuar del brazo y lo haló hasta un grupo de cajas pintadas que simulaban ser rocas o algo por el estilo, se escondió tras ellas, halando al humano con él, al cabo de unos segundos, el grupo de personas que iba detrás de ellos apareció caminando lentamente, con expresiones nerviosas, entonces cuando bordeaban la esquina, pasando por las cajas, Soren saltó de ellas y les enseñó sus colmillos y gruñó con todas sus fuerzas.

Pobres almas mortales, se habían llevado el susto de sus vidas, el niño pequeño que traían comenzó a llorar y sus padres corrieron como almas perseguidas por el mismisimo diablo gritando por el corredor. Soren se llevó las manos a la boca y retrocedió dando traspies hasta quedar al lado de Anuar, intentó contener la risa, oculándola con sus manos, pero no pudo y finalmente dejó escapar una risotada con ganas enseñando libremente los colmillos al hacerlo.

por **Anuar Dutuescu** Jue Ago 26, 2010 3:10 am

Escucho su voz sobre su oído y su gélida respiración lamerle la misma –yo crei que te agradaban- murmuro con sorna sonriendo de medio lado dirigiéndose hacia donde el le dirigida sin reproche debía saber que hacia y por donde iba si el intentaba andar a tientas terminaría muy probablemente tropezando con cualquier cosa, un escalón, una pata de una mesa, alguna persona inclusive asi de mal era su visión de noche mas no cuando pintaba aquello lo habia perfectamente bajo la luz de las velas.

Se anuncillo detrás de las cajas aguardando en silencio mientras su mirada iba de aquí a alla curiosa centellante como dos mares de miel mas no asi dulces sino solo curiosos, se preguntaba cuando saldría el próximo hombre disfrazado a pretender asustarlos, observo desde abajo la escena un tanto sorprendido de las acciones de Soren escuchando mas que observando lo que ocurria, supuso entonces y sonrio negando.

Se levanto del suelo sin apoyarse de la pared dado que ahora no sabia cuales se movían y cuales no, rio por lo bajo observando el destello de su perlada y nívea dentadura tan perfecta como ninguna otra y tan mortífera cavia decir, le parecía que solo la habia visto anteriormente mientras le llevaba al limite y aquella noche en que se habían conocido, cuando habia atacado al lupino…-pobres- murmuro riendo por lo bajo mientras le observaba de soslayo, lo abrazo por detrás besando su hombro –eso no quita que vayas a ir al frente- asevero asintiendo con tranquilidad porque el no pretendía ir de primero –porcierto que pintoresca sonrisa- murmuro a su oído escuchando los pasos del próximo grupo de personas acercarse a sus espaldas.

por **Soren Kaarkarogf** Jue Ago 26, 2010 4:15 am

Intento calmarse, pero la risa llegaba y llegaba desbocada por su garganta, aún cuando Anuar estaba allí de pie burlándose de ella. La ironía de todo aquello era demasiado graciosa, el no solía asustar a la gente de esa manera, ni siquiera cuando cazaba, porque era muy metódico y sus presas raramente eran conscientes de lo que sucedía cuando bebía de ellas, pero dejárse llevar por el instinto y gruñir como un animal, le había hecho sentir fresco y vivo. Quizás en esa acción había expulsado algunas de sus preocupaciones, porque se sentía más liviano luego de reír con tantas ganas.

Los ojos se le volvieron cristalinos y se le llenaron de lágrimas sanguinolientas mientras reía, se apresuró a limpiarse con el dorso de la mano porque no quería exibir espantosas manchas rojas bajo sus ojos, aspiró con fuerza y finalmente pudo calmarse. Miró de reojo a Anuar, apenas iluminado suavemente por la poca luz que entraba por las rendijas de madera de las paredes y sin decir nada le haló del brazo y lo atrajo contra su cuerpo que quedó a su vez contrá la pared detrás de las cajas.

- No pienso ir al frente... - Murmuró recostándose en la pared y dejándo que el peso de Anuar quedara sobre él, con una mano atrajo la nuca de Anuar, haciéndo que sus rostros quedaran a pocos centímetros - Así que si quieres que lo haga... oblígame... - Le ordenó, con una voz que se mantenía entre la rudeza y la picardía, su aliento gélido rozándole la nariz y los labios en la oscuridad.

Y no supo si fue por lo que había liberado con esa risotada o si era porque la oscuridad le hacía sentir más seguro, más en su mundo, fuese la razón que fuese, sus manos se encontraron bordeando la cintura de Anuar, juntándola contra la suya, moviéndola de manera sujestiva...

por **Anuar Dutuescu** Jue Ago 26, 2010 11:04 am

Sonrio cuando le halo y dejo su peso sobre el cuerpo de Soren sabia ya que podia cargarle con facilidad de modo que recargarse sobre el no debía suponer ninguna molestia -¿quieres que te obligue?- le cuestiono reafirmando su orden, no debía ser un trabajo demasiado difícil suscitarle algunas palabras al oído lo que sabia esque no planeaba irse el enfrente porque si algo lo tomaba por sorpresa realmente terminaría escondido detrás de Soren.

Entreabrio los labios sintiendo el gélido aliento lamerle la parte baja del rostro y su frio tacto sobre su nuca incitándolo a acercarse –puedo hacerlo- aseguro dejando sus labios abiertos a milímetros de los de Soren intentando vislumbrar sus ojos aun en aquel umbral. Apoyo sus manos sobre sus costados entrecerrando los parpados.

-Soren aquí no- murmuro tan bajo como pudo sin poder evitar que los recuerdos de aquella noche llegasen como estrellas fugaces a su mente, negó internamente y estrecho su cintura contra la del vampiro manteniendo sus labios cerca mas sin asi besarle -¿quieres ir enfrente?- le cuestiono amablemente sonriendo de medio lado si no funcionaba tenia otras tantas formas…las descubriría si rechazaba la primera.

{perdona lo corto =S}

por **Soren Kaarkarogf** Jue Ago 26, 2010 11:22 am

Era increible como la confianza se había ganado tan rápidamente. Quizás a ojos de otras personas ellos dos podrían ir desesperádamente lento, Soren sabía de hombres y mujeres que tenían sexo en la primera cita y bueno, se entregaban fácilmente sin pensar en nada más, sin embargo consideraba increible que ahora estuviera estrechando a Anuar contra su cuerpo, diciéndole esas cosas que en cualquier otro momento no se atrevería a decirle a nadie. Insinuándose descaradamente. Pero con Anuar había descubierto que...le gustaba jugar.

- Mmmm buen intento pero, No - Negó meneando la cabeza - No iré adelante - Repitió sintiendo el calor del cuerpo de Anuar. Un calor que se había vuelto adictivo, quizás debido a la falta de calor corporal en si mismo, estar cerca de la tibieza de un humano era agradable. No era que sintiera frío todo el tiempo, pero digamos que, nunca había estado tanto tiempo con una persona y de una manera tan cercana, entonces era como si estuviera estrenando un juguete nuevo.

Quería jugar con él a todas horas, descubrirle, sentirle y disfrutarle. Porque ahora era suyo. ¿Verdad?, le gustaba pensar de esa manera, aunque como catedrático y filosofo, que había vivido centenas de años, sabía que ningun ser vivo tenía derecho a poseer a otro y que iba en contra de los derechos humanos y de los ideales de la revolución, el valor del hombre según Marx y Nieztche, iba más allá de los objetos y su potencial... ¡Al carajo con todo eso!. Anuar era suyo y punto.

por **Anuar Dutuescu** Jue Ago 26, 2010 12:11 pm

Sonrio de medio lado dejando ver su blancuzca dentadura y un brillo inusual en sus ojos, como el de un pequeño al que al contrario de negársele algo se le habia permitido explorar un mundo de pasadizos y laberintos con mil sorpresa en cada vuelta -¿no?- le cuestiono con picardia rodeando su cuello con sus brazos apoyándose aun por completo sobre Soren y con aquella postura dejando su torso mucho mas descubierto.

-porfavor ve adelante- le pidió besando sus labios castamente, aunque aquello era tan poco el que al instante una risilla afloro de sus labios enredo sus manos en el cabello de Soren mesándole con suavidad era tan extraño estar de aquella manera en un lugar publico, estarle convenciendo de ir frente a el en una exhibición de terror, ir frente a el su mente se lleno de morbo ante aquellos pensamientos que le obligaron a cerrar los parpados temiendo que Soren pudiese descubrir lo que pensaba atraves de ellos.

-si caminas enfrente prometo darte una sorpresa- murmuro a su oído mordiendo suavemente su lóbulo, bajando sus manos por su torso hasta donde la tela del pantalón le producía un tacto diferente –oh- le indico soltándolo cuando sus dedos comenzaban a rosar la fría piel bajo el pantalón –puedes no ir enfrente y quedarte…también puedo ir yo solo- asevero asi cuando minimo si retrocedía o tropezaba Soren no le veria.

por **Soren Kaarkarogf** Jue Ago 26, 2010 12:39 pm

Se lo estaba pidiendo 'por favor' y le gustó como sonó esa petición en sus labios, Anuar resultaba ser como un postre dulce con mucha crema. Soren había apenas probado la superficie, como un niño curioso que mete el dedo en la nata sin que nadie lo ve, pero aún no sabía que sabor tendría en el interior. ¿Chocolate? ¿Vainilla? ¿Avellanas y nueces? sus besos eran apenas la superficie de esa crema.

El beso fue demasiado inocente para su gusto y quizo profundisarlo, pero el chico se habia dirigido a su oreja. Cuando le mordió sintió como si un corrientazo eléctrico le hubiera sacudido de repente e inevitablemente la excitación llegó a su cuerpo de manera inconciente. Cerró los ojos y dejó escapar un suspiro cuando sus dedos habían rozado la piel.

- Me gustan las sorpresas - Dijo al fin, relamiéndose los labios, intrigado con lo que pudiese ofrecerle, escuchó entonces pasos y murmullos de voces, un nuevo grupo de personas se estaba acercando al lugar, estarían allí en cualquier momento, pero Soren no quería abandonar aún la intimidad de ese pequeño rincón secreto que habían descubierto, buscó los labios de Anuar y los mordió suavemente, para luego abrir la boca y profanar la de él con un beso más profundo, una de sus manos se perdió en el cabello de fuego del chico y la otra se aferró a su espalda, como si ese fuera el último beso que fuera a darle en años.

Las voces se escuchaban cada vez más cerca al igual que los pasos, ¿cuanto faltaría para que los vieran? ¿minutos? Soren no podía pensar, su cuerpo y mente sólo obedecían al impulso que esos labios deliciosos le otorgaban...

por **Anuar Dutuescu** Jue Ago 26, 2010 1:02 pm

Sonrio ¿le habia logrado convencer? Aunque debía admitir que no se encontraba en aquel estado en que lo que decía no era pensado y por ende muchas veces mas tentativo que sus usuales palabras –entonces estamos de acuerdo…- aseguro escuchando los pasos y murmullos apenas y audibles, que llegaban a sus oídos como desplazados por el ambiente del lugar no comprendía lo que decían seguramente se preguntaban unos a otros que vendría a continuación o se estarían intentado asustar o quizá se debatían por bien quien iria al frente…

Inclino su rostro hacia enfrente abriendo los labios para permitiré la entrada y al mismo tiempo explorar nuevamente su interior aquel que comenzaba a memorizar y parecía conocer perfectamente, viro el rostro embonando con el ajeno como dos perfectas piezas de un rompecabezas aplastando suavemente su nariz con la mejilla del vampiro y dejando que su calido aliento se estampase sobre esta sin remedio.

Le tomo por las caderas estrechándolo contra la pared y estrechándose contra el parecía perder todo control de su cuerpo cuando estaba con Soren y le besaba de aquella forma tal cual se habia entregado completamente a el noches atrás, con una facilidad abrumante y excitante no podia negar, la sensación le habia sido fascinante y deseaba experimentarla nuevamente pero deseaba experimentarla con Soren y mas nadie, solo a el quería besarle de aquella manera indecorosa, solo a el quería hacer suyo.

Se separo para recuperar el aliento mordiendo con delicadeza su labio inferior y tirar de el soltándolo antes de poder hacerle daño aunque por la nula fuerza con que lo hacia parecía mas un gesto juguetón el cual era su verdadero intención -¿Qué diran si nos ven?- cuestiono en voz baja besando su mejilla repetidas veces en un camino que le dejo parado sobre su cuello, se detuvo en aquel instante rodeando su cintura con sus brazos para abrazarle.

por **Soren Kaarkarogf** Jue Ago 26, 2010 1:25 pm

Se permitió perderse en la sensación abrumadora del beso, en esa conexión extraña en la que tiempo y espacio parecían desaparecer para dar paso sólamente al instante. Se rindió a la boca de Anuar y a su cuerpo que le estrechaba contra la pared, quizo quedarse alli infinitamente, pero el humano cortó el beso con un delicado mordisco que sólo logró encenderlo más.

- Que nos hemos alejado del camino de Dios viviéndo en el pecado de la lujuria y la promiscuidad y que seremos juzgados por la ira del señor y enviados al infierno a pagar por nuestras culpas eternamente - Respondió, devolviéndole el abrazo. Lo cierto era que, Soren no tenía intención de pasar por otra humillación como la del circo, no le parecía justo para con el chico. Los pasos estaban ahora realmente cerca, a pocos metros si su intuición no le fallaba.

- Más te vale que esa sorpresa sea buena - Comentó en una amenaza que pretendía parecer seria, más sonando juguetona. - Iré adelante, me expondré al peligro como el macho que soy y te protejeré - Rió bajito con su broma, halándo al joven por el brazo, apresurando el paso por el corredor estrécho de madera hasta el nuevo tramo oscuro y silencioso.

Habían varios cajones de madera, a ambos lados del pasillo, Soren caminó seguido por Anuar por entre ellos y cuando iban por la mitad, los cajones se abrieron y sendas momias despertaron de sus sueños eternos, estirando sus manos vendadas y polvorientas para intentar agarrar a la pareja...

por **Anuar Dutuescu** Jue Ago 26, 2010 1:42 pm

Enarco una ceja ¿promiscuidad? Ya estaba le venia valiendo poco lo que las personas dijesen o no si existía un Dios bien sabia el la rabia que le guardaba y de ser tan negligente como Aunar creía tenia ya su lugar en el averno, desconocía aquella divinidad del todo poderoso o la forma en que actuaba ayudando a sus creaciones ayudando a quienes ¿a su preferidos? Los primeros meses después del incidente hubiese y habia deseado que Dios le demostrara que era verdadero y que ayudaba mas no, ahora tampoco le importaba demasiado.

-pero la lujuria no es solo el deseo carnal- su padre era un devoto de Dios y decía temer de el de modo que le habia explicado desde corta edad la biblia y sus leyes, se debía amar a Dios por sobre todo lo demás, que ironico era aquello amar a quien no se conoce y quien jamás pretendió preocuparse por uno –oh ya veras- rio por lo bajo enarcando una ceja –farfullas acaso que no se protegerme o que no soy macho- le cuestiono bufando –no soy ninguna damisela en peligro pero esta bien…veremos quien es el macho- sonrio siguiéndole con tranquilidad.

Agacho la cabeza empujando con suavidad a Soren haciéndole andar mas aprisa mientras reia intentando no tocar aquellos seres, una pregunta le embriago entonces -¿conoces tu a los cambiaformas?- le cuestiono cerca del oído era la única especie de la cual no habia escuchado nada anteriormente.

por **Soren Kaarkarogf** Jue Ago 26, 2010 9:59 pm

Mientras pasaban a las momias que no habían resultado ser tan temibles después de todo (pero cuando se es inmortal pocas cosas reusltan temibles, para ser sinceros) Anuar había comenzado a hablar de nuevo, preguntándole si lo consideraba macho, dejó escapar una sonrisa pensando en aquello, ciertamente el chico era masculino, a su modo, se atrevía a decir que más masculino que él mismo, pero bueno, todo el mundo era más masculino que él...

Pero al parecer todos aquellos que de alguna manera se relacionaban con el arte y se movían en ese mundo, eran personas sensibles con tendencia a la delicadeza, personas perceptivas que captaban o sentian cosas que para el resto pasaban desapercibidas, ¿Entonces un artista no podría ser nunca un macho?.

- Eso depende de la definición que le des a 'macho' - Comentó, bordeando otro corredor, escuchando los gritos lejanos de otro grupo de personas que probablemte habían pasado el otro nivel - Creo que todos los interesados en el arte y los artistas, tenemos ese problema... - Concluyó, aunque dudaba que algún otro hombre, por muy rudo, peludo, grande y macho que fuera, se enfrentaría a un hombre lobo como ellos dos habían hecho o arriesgaría su vida por otra persona. Ser bien 'hombre', iba más alla de las preferencias sexuales o los gustos reflexionó.

- Creo que ambos somos más hombres que cualquiera allá afuera... - Concluyo . Entonces una enorme bola de pelos apareció en escena de la nada, el vampiro estaba muy distraido con la cuestión, hablándole a Anuar y realmente lo tomó por sorpresa, el hombre lobo rugió guturalmente y los amenazó con sus colmillos y garras, por un momento Soren creyó que eran verdaderas, estúpidamente había olvidado donde estaban y de un saltito muy poco 'macho', quedó detrás de Anuar.

(( se me olvidó mencionar lo de los cambiaformas, luego traré el tema a colación D: ))

por **Anuar Dutuescu** Jue Ago 26, 2010 10:24 pm

-es porque a ojos de la sociedad las mujeres son quienes se muestran sensibles ante los hechos y detalles, ante la belleza delas cosas pero no por eso uno es menos hombre …¿no?- reflexiono sobre sus propias palabras creyéndolas firmemente porque a fin de cuentas ¿Quién habia decidido que implicaba ser hombre? Se lo cuestiono unos instantes intrigado por sus propias incógnitas, seguramente un hombre que no habia descubierto la dulzura del arte. Recordo entonces sus manos, aquellas dignas de cualquier dama de sociedad no por su forma sino por su tacto pero ¿era usual no? Entre pintores debía serlo ¿cierto? Nunca antes se habia cuestionado que tan hombre o que tan poco hombre era pero a fin de cuentas fuese macho o no no dejaba de ser y no dejaría de serlo solo por lo que otros pudiesen decir.

Se quedo estático unos instantes observando al hombre lobo de frente por el repentino abandono de Soren, por unos instantes no reacciono mas cuando cayo en cuenta de la situación sus labios formaron una inmensa o y la risa comenzó a aflorar melodiosa y fresca quizá se conservaba asi por las pocas veces que se permitía hacer aquello aunque no lo habia pensado sencillamente la platica y lo que el vampiro habia hecho le causaba gracia –claro que eres todo un hombre- bromeo aunque aprendería a hacerlo dado que no era algo usual en el, tiro de su mano por otro pasillo sonriendo de manera amplia abrazando el cuerpo del vampiro con apremio –pero has faltado al acuerdo…te has ido atrás-le indico besando su mejilla para soltarle completamente y seguir andando sin prisa, el ambiente estaba aun cargado de sonidos extraños que rompían con el silencio y ocasionales gritos del lugar.

¿Por qué se separaba de el? Alla afuera no podría siquiera pretender sujetar su mano, se acerco nuevamente entrelazando sus dedos con los ajenos escuchando nuevamente gritos, la gente normal se asustaba con esas cosas ¿Qué tan inusual era el para no hacerlo? No por lo menos en la medida que debería.

{sin cuidado =)}

por **Soren Kaarkarogf** Jue Ago 26, 2010 11:08 pm

Escuchó la risa de Anuar, reía con ganas y era la primera vez que lo escuchaba reír así, (aunque fuera a costa suya) le pareció de lo más adorable, pero eso no evitó y le diera un golpe en el hombro a modo de protesta.

- ¡No-no se vale! - Exclamó Soren apurando el paso tras Anuar - Tu me hiciste hablar y me entretuve, me tomó por sorpresa, ¡No estaba asustado! - Explicó siguiéndole por los corredores, el humano le tomó de la mano entralazando sus dedos con los de él, como le gustaba la sensación de su mano contra la suya, creaba una especie de conexión entre ambos o al menos eso quería creer, era una verdadera lástima que no pudieran hacerlo cada que quicieran.

- Aún me darás mi sorpresa ¿verdad? - Preguntó tímidamente luego de caminar un poco más - Quiero mi sorpresa... - Se quejó, doblando una esquina hasta una nueva habitación de la casa del terror, se detuvo en medio obligando a Anuar a detenerse con él.

- Si fuera un lobo de verdad... - Comenzó esta vez usando un tono más serio - No escaparía... lo enfrentaría y te protegería - Murmuró - Justo como la primera vez en el bosque...- Tragó saliva y agregó - Te salvaría cientos de veces más si fuera necesario -

por **Anuar Dutuescu** Jue Ago 26, 2010 11:30 pm

No se inmuto por el golpe dado que no le habia dolido ni muchos menos y bien merecido se lo tenia aquello por haberse burlado de aquella manera tan descarada del susto del vampiro aunque debía admitir era irónico y gracioso hasta el punto de no lograr aguantar la risa dentro de sus labios –hay tantas injusticias- aseguro encogiéndose de hombros sonriendo de medio lado, del lado que Soren no podia ver para fingir seriedad y con aquel rostro letárgico no habia demasiado que hacer ni mucho que ocultar.

Se detuvo sintiendo el suave tirón del brazo de Soren observándole con una ceja enmarcada escuchando su protesta –estoy consciente de ello- aseguro crispando los labios de medio lado y no tenia duda de ello porque aquella noche erala primera en que se habían visto y aun asi se habia arriesgado por el, ahora que tenían una relación amorosa y comenzaban a conocer cosas del otro tan profunda, por lo menos en su caso, que nadie mas conocía, suponía que debía actuar de la misma forma su volvía a suceder aquello.

-torpe…claro que te dare tu sorpresa-aseguro pensando porque no tenia ni la mas remota idea de que pudiese darle o como pudiese robarle una sonrisa pero se esmeraría en aquello preparándole algo especial aunque para su mala suerte no tenia a nadie para asesorarle en aquello y el era aun demasiado inexperimentado en aquello para suponer como actuar, aprendería pues a base de caídas y errores como lo habia hecho toda su vida –aunque no te hagas muchas ilusiones no quiero romper tus expectativas –le indico en voz baja relamiendo sus labios que comenzaban a secarse.

-yo no te abandonare como no lo hice aquella noche no planeo hacerlo ahora ni aunque fuese una manada contra los que estuviésemos-asevero recordando como sus piernas le decían corre y su cuerpo le aferraba al suelo como imantado y ahora algo en su interior le mantenía atado a el –pensar que todo comenzó con la caída de un despistado- murmuro observando a Soren recordando como lucia aquella noche con el cabello de diverso color y el rostro ensuciado y después del incidente completamente magullado, beso la punta de su nariz incitándole a seguir andando quería poder recorrer la mayor parte del parque aunque quería también seguir en aquel lugar para poder sentirse cerca porque era muy diferente sentir esa libertad de no ser visto por la sociedad de saber que nadie le apuntaría con el dedo aunque y tampoco le importaba debía aprender que habia cosas que sencillamente las personas no tenían porque enterarse.

por **Soren Kaarkarogf** Vie Ago 27, 2010 12:12 am

Si, le salvaría una y otra vez si era necesario, ¿Arriesgando su propia vidA? Soren recordó que aquella vez, debido a las circustancias, había terminado salvándole, sin embargo aquello había sido algo no premeditado, había actuado por instinto más que por cualquier otra razón, porque en ese momento no se le pasó tan siquiera la remota posibilidad de que llegaría a conocerle y a quererle.

- ¡Me estoy emocionando! - Exclamó ciertamente con una voz de niño curioso - ¡Ya quiero mi sorpresa! - Agregó aún cuando el chico le había dicho que no se ilusionara tanto. Le daba igual, nunca recibía regalos de ningun tipo, ni materiales, ni espirituales, ni nada que se le asemajara, así que lo que fuera, seguro le tomaría por sorpresa.

- Es verdad... ya te podrás haber dado cuenta lo torpe que soy... ¿Porque estás conmigo? - Preguntó abrazándolo por la espalda y apoyándo su rostro en el hombro mientras seguían caminando - Eres... guapo, intelectual y lleno de talento... ¿Cómo es que te has fijado en alguien como yo? ¿No hay acaso decenas de jovencitas suspirando por tener una cita contigo? mmm... deberían... - Finalizó besándole la mejilla.

El corredor finalmente llegaba a su fin, habían pinturas a ambos lados con rostros de mujeres sumamente feas, con el pelo greñudo y expresiones fieras, probablemente brujas, todo estaba en silencio una vez más y de repente con un sonido metálico muy fuerte, de uno de los cuadros salió una mujer de verdad, maquillada y greñuda, dando alaridos. Soren apretó a Anuar más contra su cuerpo, aunque no por miedo, sino porque, la ocación era una excusa perfecta para sentirlo cerca, sin tener que dar explicaciones.

por **Anuar Dutuescu** Vie Ago 27, 2010 9:28 am

Suspiro ampliamente por aquel entusiasmo hubiese sido mejor para el que no fuese asi porque ahora sentía la necesidad de tener que llenar todas sus expectativas y no defraudarle con la sorpresa la cual iba a tener que pensar minuciosamente jamás le habia dado una sorpresa o un regalo a alguien…Angeliqueé quizá pero aquello no contaba era una mujer y eran unos niños, darle un dulce o un juguete era lo mejor que podia hacer en su cumpleaños ahora, ni dulces ni juguetes le parecían suficientemente buenos para darle a Soren.

¿Por qué estaba con el? No habia un motivo eran tantos y ninguno que ni el mismo podia contestar aquello –tu también eres atractivo Soren pero la belleza exterior es relativa difiere a ojos del corazón…- sonrio al sentir su abrazo y el beso sobre su mejilla –uno no decide a quien querer que fácil seria de ser asi, me he fijado en ti por todo lo que eres y lo que no- finalizo asintiendo como si fuese aquella su respuesta final. Rio por lo bajo –si están ebrias posiblemente la verdad esque algunas lo han intentado pero puedo contarlas con una mano y…siempre terminan dándose por vencidas ante mi…indiferencia supongo pero jamás me intereso alguna de ellas era ese el motivo de que no las tratase como deseaban…- le indico con franqueza.

Y no habían sido demasiadas las que se habían mostrado interesadas en su infancia habia tenido una conocida que le gustaba pero solo habían salido en una ocasión a jugar y no se habia atrevido a decirle nada, el resto de quienes sele habían acercado eran mujeres no faltas de belleza pero si de cosas mas importantes y entonces pensó, no se habia fijado en ningun otro hombre antes que en Soren salvo los autores de los libros que leia que con sus escritos le hacían desear que siguiesen vivos y pudiesen contarle todo aquello, aunque eso eran nada mas que sueños y fantasias.

Los ojos de Anuar se abrieron de par en par fingiendo asombro se llevo una mano a los labios cubriéndolos con fuerza como si asi escondiese un grito que a punto estaba de escapar mas no se movio, el no iria adelante…

por **Soren Kaarkarogf** Vie Ago 27, 2010 10:16 pm

Aquel había sido uno de los diálogos más largos que le habia escuchado a Anuar desde que lo había conocido, casi siempre terminaba siendo él, quien hablaba como una cotorra mojada y Anuar sólo respondiendo con medidas frases escuetas. Pero ahí estaba el chico, llamándole atractivo y diciéndole que se fijaba en él más allá de su físico, lo que era y no era. Sintió de nuevo el impulso de besarlo y apretarlo tan fuerte que terminaría por absorverlo y hacerlo parte de su cuerpo.

Con la aparición de las brujas, el lugar volvió a quedar sumido en la oscuridad y Soren percibió como el corazón de Anuar había aumentado su rítmo, sintió su miedo, porque esa era una de sus habilidades innatas más desarrolladas, oler el miedo de la presa era tan fácil como parpadear o rascarse la nariz. Algo natural en él. El chico estaba asustado después de todo, ese chico que se jactaba de ser más macho que él. Valla ironía.

Decidió entonces gastarle una pequeña broma, se separó de él y le empujó para que siguiera caminando, pero no esperó a que el chico hubiera dado un par de pasos, para esfumarse del lugar. En realidad sólo se había movido demasiado rápido y en silencio, con esa agilidad propia de los suyos. En cuestión de segundos estuvo escondido tras una esquina, amparado y cobijado por la oscuridad del lugar, observando a Anuar sólo en medio del corredor.

A lo lejos se escucharon otros gritos, al parecer en un piso superior, seguido de pisadas que hacían traquetear la madera tétricamente y el aullido de algún tipo de animal desconocido. Soren aguardó en su lugar, esperando a que el chico se acercara.

por **Anuar Dutuescu** Sáb Ago 28, 2010 1:32 pm

Trastabillo hacia enfrente agachando un poco la mirada para no golpearse o tropezar con nada ¿Qué estaba sucediendo? Se giro con rapidez no logrando encontrar a Soren, se volteo entorno suyo buscándole aunque su visión no era ni remotamente buena para intentar hacer aquello –Soren no es gracioso- aclamo en voz firme y alta siguiendo andando con lentitud, deteniéndose al escuchar las pisadas y observar el techo sobre el soltar virutas de algun material polvoso, arrugo la nariz sacudiéndose el cabello al cual le habia caído de aquel material inusual, estornudo por lo bajo pensando en si seguir o quedarse ahí de pie.

Se encaminaba hacia Soren sin asi saberlo con la mirada fija en el suelo y completamente ceñudo, no era agradable andar solo por aquel pasillo no poder ver mas alla de su mano, el sonido de un gutural ruido le hizo girar en media vuelta asomando el rostro, como intentando ver quien habia hecho aquello como si el causante fuese a darse a conocer en breve, mas no ocurrió asi.

-Soren…ya- le llamo esta vez en una voz apacible y casi rogándole, palpo con la mano la pared rugosa y bañada en algun material polvoso como para aparentar mas años de los que realmente tenia y menos higiene de la que le daban, mascullo algo en rumano no molesto sino nervioso, se concentraba en no saltar o salir corriendo si se topaba con algun hombre disfrazado.

El sonido de pisadas se hizo mas intenso de modo que apresuro el paso por donde debía estar el lado contrario al cual habían entrado al pasillo–nu-i amuzant-murmuro a pasos de terminar el tramo.

por **Soren Kaarkarogf** Sáb Ago 28, 2010 9:45 pm

Debía aceptar que sentia una facinación malvada mientras le veía caminando nerviosamente y a ciegas por el corredor. Le observó guardando cada detalle de sus movimientos para si mismo. ¿En que momento había terminado tan atado a esa persona que ahora contemplaban sus ojos? viéndolo así desde lejos, Anuar no tenía nada especial. Era un jovenzuelo apuesto si, pero habían cientos de jóvenes apuestos (inclusive mucho más que él), habían cientos de doncellas mucho más dulces, cariñosas y agradables allá afuera. ¿Como era que nunca se había fijado en una?

Observándole sacudir su cabeza por el polvo que había caído descuidadamente en ella, Soren se preguntaba si, su idea del amor había cambiado gracias a ese chico. Porque antes de conocerlo, se había jurado así mismo que no volvería a permitirse, abrir su corazón a nadie, por lo menos a nadie humano. Aceptaba la vida solitaria del vampiro y la disfrutaba, porque era algo que había escogido por voluntad propia. Pero ahí estaba él, tonteando con un humano, jugando con él, más no con la intención de deborarlo como a una presa, simplemente jugando como un niño, emocionado ante cada detalle y cosa nueva que descubría en él.

Se deslizó finalmente cuando le había escuchado hablar en esa lengua que desconocía y en segundos estuvo a pocos centímetros de Anuar, sus nanos frías se cerraron sobre los ojos del humano cégandolo y obligándo a que se detuviera, su rostro acercándose por un lado de la cabeza, dejándo que su aliento gélido de ultratumba cosquilleara en su cuello.

- ¿A donde crees que vaz Monsieur Dutuescu? - Le susurró modificando su voz y hacíendola más grave - No tienes escapatoria, eres mio... -

por **Anuar Dutuescu** Sáb Ago 28, 2010 10:51 pm

Dio un respingo al sentir que algo le cubria los ojos, como primer impulso tuvo dejar caer su codo hacia atrás con fuerza como en una especie de golpe defensivo pero aquel tacto frio le impidió aquello suponiendo que se trataba de Soren ya que solo un vampiro podia tener esa temperatura se que parecía tanto a la de el agua helada, a la temperatura que adquirían los ríos y laguna en la estación de transición entre otoño e invierno, cuando no se congelaban y aun asi entrar en ellos era imposible. Si recordaba ciertamente y dada la ocasión habia caído en uno de ellos ¿Cuál habia sido el motivo? ¿habia intentado hacer que Angeliqueé no cayese? No le parecía que no era eso ¿o si? Al final habia terminado con hipotermia y varios días en cama su padre le habia obligado a salir al mercado aun con la fuerte fiebre “el dolor esta en la mente, el dolor es de débiles” eso era lo que le habia dicho antes de darle las monedas y cerrarle la puerta en la cara, habia sido una persona obediente toda su vida hasta el dia en que se habia marchado.

-no planeaba huir señor- aseguro con voz serena y baja, le habia dejado solo aun a sabiendas de que se encontraba nervioso y si bien no como tal con miedo si algo que se le parecía bastante –soy de usted tanto como usted es mio- suspiro colocando su nuca contra el hombro de Soren, ladeando el rostro de modo que su barbilla quedaba apuntando al lado contrario del rostro del vampiro -¿Por qué me dejaste solo?- le cuestiono en voz baja con el mismo tono que un niño usaría para preguntarle a su padre si papa Noel existía y el padre le contestaría entonces que si porque un padre no debe romper las ilusiones de un hijo ¿no? Recordaba perfectamente como si padre le habia dicho que dejase de creer en cosas inexistentes, en cuentos de hadas creados por gente que quería gastar su dinero de forma absurda ¿Por qué de pronto se acordaba tanto de el? Nego internamente alejando los pensamientos y cruzando sus brazos sobre su pecho repeliendo aquella soledad.

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Jugando para olvidar (Anuar & Soren)

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