Sendas estropeadas || Libre

por **Markus Rousseau M.** Vie Ago 21, 2015 7:59 pm

Recuerdo del primer mensaje :

Sabía que el arribo debía ser de noche pues en la mañana nadie lo recibiría más que solo su prima pero ¿Qué más daba? Su barco arribo a las costas parisinas en la mañana nueve en punto según su reloj todo iba acorde a su plan, con una sonrisa tomó su equipaje bajando del navío, sus ropajes no eran los de un hombre de clase alta sino de uno de clase trabajadora con un pantalón algo rasgado con los tirantes a medio colgar de uno, la camisa medio fuera y medio fajada, una chaqueta más grandes y zapatos ya algo gastados, con una boina que le cubría el cabello, pero aun así las féminas no paraban de verle y echarle miradas mientras él solo les sonreía moviendo su boina caminando lejos de las miradas de las mujeres.

El del carruaje no le quiso llevar pensando que no tenía dinero al menos hasta que escucho a donde iba, a las afueras de la ciudad de Paris justo a la Mansión Morel, él ya había llevado algunas veces a unos de los habitantes de esa mansión y siempre pagaban bien y en exceso ¿cómo sabía Markus de él? Su prima en cartas anteriores le había informado con lujo de detalles ¿por qué? Porque ella conocía muy bien a su primo y sabía cómo vendría y por ende que nadie en su sano juicio lo llevaría y la caminata del puerto a la mansión era un largo tramo y no llegaría en semanas quizás.

Al llegar a la mansión un hombre con un traje elegante le recibió dejando una bolsa de monedas mirando al joven que arriba a la mansión.

Silba ante la imponencia del lujo y lo costoso del terreno, se alza la boina dejándole su equipaje para dar una vuelta por el lugar, una vuelta por sus alrededores conociendo su nuevo hogar se percata que hay un lago y un bosque, además de jardines extensos y partes privadas de entrenamiento, todo un castillo como en Italia, además la decoración delicada de los jardines y rosas se ven que son de féminas que habitan en la casa, ahora entiende el por qué fue llamado a Paris.

15:00
Luego de un baño y una charla muy larga con su prima se le indica donde ha de pasar sus días en la habitación más grande que cualquier otra que haya visto, bueno en Italia son superiores pero aquí ellos viven como reyes realmente, entiende por qué el de tanto espacio y el porqué del lujo, y no le desagrada en el interior lo disfruta muy en el interior pues corre la misma sangre de ellos. Un paseo por los alrededores de la mansión aligeran el almuerzo con su prima, ella sale dejándole solo con sus primos descansando en las habitaciones cerradas con llaves extrañas y sus ataúdes dentro, sabía que dormían en camas pero igual guardaban ataúdes escondidos en sus habitaciones ¿por qué? Eso era un secreto familiar.

Por el paseo que daba llega al bosque, un bosque privado según su prima, que les pertenecía lo que hizo que divagara hasta acostarse en la tierra recargándose sobre un árbol caído cubriendo su rostro del sol con su boina, iba con una ropa que no delataba que era dueño también de ello si no como un empleado más, así podría despistar a todos y todo de su familia.

El sueño le llego hasta que el silencio lo despertó.

por **Markus Rousseau M.** Dom Sep 10, 2017 5:19 pm

Entre los dos parientes la miraba iba y venía, y al final a él lo puso tenso como para bajar la mirada cual sirviente de la mujer de cabellos de fuego que se acercó la hombre reposando sus brazos alrededor de los hombros del joven por la espalda, una figura tan fraternal como familiar que poco se podría creer de aquel tipo de personas que se muestran los caninos entre sus sonrisas.

La tensión desapareció por un momento cuando la mujer ingresó a la vivienda mirando de un momento todo lo que ahí se encontraba, es más su semblante cambio al dar un pie dentro, al seguir con sus pisadas delicadas hasta tomar asiento como era para de sus modales y la buena costumbre. Con ojos cerrados tomó el té y probó aquel pie recién horneado, el hombre se sentó en silencio algo incómodo por la visita de su prima trató de decir algo pero solo se mantuvo en silencio mirando a la cambiante con un semblante algo apagado, la mujer de ojos como el hielo tan claros y fríos miró a los dos sonriéndoles –No soy yo quien deba proponer eso, aunque sea también la cabeza de familia, si no el mayor de los Morel, pero hasta que él lo descubra pasará mucho tiempo, además ¿por qué cobraríamos una renta? Nosotros no hemos invertido nada en este lugar, más que solo comprar toda la propiedad y nada más, el resto lo has hecho tu, sería injusto que pagaras un valor por algo que no sabías, pero ahora que lo sabes lo único que pedimos es que cuando algo ocurra no te involucres. En este lugar suelen darse muchos encuentros con seres como, el caballero de aquí y lo que yo represento, pero también de otra índole y especie, y si te encuentran te matarán sin contemplaciones– dejó la pequeña tacita en su lugar tomando el pie para partir, su coleta alta era tan roja como el fuego del mal.

Giró para encontrarse con los ojos ambarinos de su pariente –Un gusto Sigrid, tal vez deberías venir hoy a la mansión Morel, mi hermano llevará acabo una hermosa reunión con socios y aliados comerciales y políticos, tal vez puedas ser de ayuda, deberías llevarla Markus, igual ella ya conoció a dos de los propietarios, los otros dos no serán tan difícil– una sonrisa oscura se cruzó en sus rosados labios al partir por la puerta en una reverencia muy elegante y militarizada mientras bajaba de un salto donde estaba su caballo blanco y donde otros hombres la esperaban. Alzo la vista sonriendo de buen grado a los dos individuos partiendo rumbo a casa.

Soltó el aire que contuvo durante la visita de su prima –Lamento la conmoción causada por la visita de mi prima, no le haga caso, aunque ella le haya invitado no le recomiendo que vaya por ahí, es un lugar donde puede asustarse una joven dama como usted, así que es mejor que se quede aquí y no se manche con la suciedad de una familia tan corrupta como endemoniada como la mia– ingresa al lugar serio buscando sus ropas para salir, era cierto que pronto estaría la luna y la razón de la reunión familiar era del tipo social lo que distraería de aquella semana tan infortunada para los dos miembros licanos de la familia.

por **Alexi Wolfkang** Mar Sep 26, 2017 1:02 pm

*Sigrid Sonrio y se despidio de la mujer de cabellos de fuego, y se quedo callada por unos instantes evaluando la situacion y la invitacion hecha por la chica, alzo una ceja y sonrio de nuevo a su invitado joven y riendo de lo que le advertia al escuchar las palabras del hombre y dijo rompiendo el icomodo sielncion mientras ayudaba al joven a buscar sus ropas*

-Joven Markus...no deveria de preocuparse tanto por mi seguridad bien dicen que hierba mala nunca muere, y bueno se que le he dado la impresion de que soy tan frajil como el cristal, pero no se deje engañar, pues mis dos oficios le dirian lo contrario, creo que seria bueno que asistiera a aquella reuinion si no es que le molesta para poner todo claro, despues de todo espero en dos semnas la llegada de una enbarcacion con plantas del nuevo mundo, una en especial y me gustaria tener todo en orden antes de planear si quiera replantar en caso de que tubiera problemas con la ley. Por otra he tratado con personas peores, verdaderos monstruos asi que no tengo ningun problema en poner en claro todo y hablar de lo esencial. ....Y aunque no soy muy dada a asistir a reuniones sociales de este tipo me ayudan tambien a conseguir nuevos clientes, me se cuidar yo misma si no no hubiera sobrevivido de pequeña al orfanato ni al entrenamiento militar Ruso.....

*Dice haciendo una reverncia y dandole la ropa mientras sonrie ampliamente y ve en los ojos ambar del joven el reflejo de los ojos propios tan frios como el hielo y como el resto de su apariencia y dice acompañadolo a la puerta*

-Mas como usted me diga si desea que vaya voy....si no pues digame y me quedare en casa tranquila....

*Dijo mientras le envolvia en una tela algo de pie y se lo ponia en las manos del joven mientras le entregaba la ropa doblada y espera una respuesta del joven *

-A parte no creo que una reuinion asi impida que sigamos siendo amigos o usted que cree??...

*Dijo sonriendo amablemente*

por **Markus Rousseau M.** Dom Oct 29, 2017 10:06 pm

Sumido en el silencio meditaba por todo laberinto en su mente alguna forma de rebatir y encontrar una mejor salida a las palabras de la singorina. Soltó un suspiro cansado frotándose los ojos y parte de la sien; tomó sus cosas mirando con esos ojos fijos en la señorita hasta que en su rostro sus facciones y músculos se relajaron pero no del todo, aún estaba en alerta como el lobo que era. Tomó sus cosas entre las manos alistándose a partir, sabía que su familiar estaría esperándolo en tierra, no se irían sin él, y sabía a ciencia cierta que aun llueva a cántaros, truene o sea el fin del mundo, la pelirroja no se movería de su sitio a menos que así ella lo crea conveniente o reciba la orden. Ella era la mejor de los soldados de los cuatro jinetes y representaba la guerra en si. Aunque más como una viuda negra, una araña que teje lento las redes y luego enreda a todos sin que se den cuenta. Una fría asesina sin remordimientos ni expresiones.

Miró hacia abajo viendo la melena roja, pero antes de salir miro a la joven reverenciándola –No es que no pueda ni desee que asista o no, mi preocupación recae en el sentir que es por su segunda profesión que ellos la quieran, signorina, no se deje llevar por lo que sus ojos ven. La familia a la cual pertenezco y de la que estoy atada, no son unas palomas santas e inofensivas, mientras uno cree que es por buena voluntad ellos tienen otros planes más siniestros, y no creo que nos quiera tener de clientes, menos al mi primo, el señor Morel, no es un cliente muy asiduo de este tipo de conversaciones, pero quizás sea bueno que alguien extraño a nosotros ingrese a esa mansión oscura e infernal–

Tomó sus cosas dando una última reverencia a la jovencita –Espero y no se pierda de camino a la mansión, queda muy cerca, usted cruza el bosque unos cincuenta metros podrá ver parte de la gran estructura de la mansión Morel, en cuanto a la formalidad, no importa, incluso es mejor que vaya disfrada con alguna máscara. En nuestra familia somos devotos a las reuniones con máscaras – sonríe dejándose como quien oculta algo más detrás de aquellas palabras. Se deja caer llegando junto a la pelirroja que con un silbido ordena que unos hombres le entreguen un caballo al moreno en aquel momento.

Dirigiéndose ambos a la mansión Morel.

Pdt: Creo que con este tema podemos comenzar con el que está en la mansión morel que lo ha abierto Santhiago y del que seremos partícipes todos los morel y la última que revivirá para ese tema. Si así gusta.

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