Ten piedad de mi - Con Bard Blase

por **Sweet Von Teese** Mar Sep 22, 2015 1:02 am

El labial carmesí completaba el semicírculo de sus labios, tenía sus uñas pintadas en el mismo tono rojo sangre que tanto amaban los vampiros. O eso al menos era lo que ella suponía…
Apenas hace unos días se había instalado en la villa donde Lucciano Vechio, su nuevo y tentador empleador, le había ofrecido un lugar y un trabajo, incluso contaba con un tutor que la ayudó con algunos detalles importante cuando se trataba de vampiros (que eran los seres que mas abundaban por ese lugar), sus necesidades eran muy variadas y no solo se trataba de algo de sexo.

Estaba allí la prostituta, evaluando su rostro para aguardar su primer cliente de la noche. Había pedido por ella entre otros nombres de la lista asi que se consideraba afortunada por ello además de prepararse para darle lo mejor de sí a este primer cliente de la noche. Respiró profundo, no demoraría mucho en aparecerse por allí. Era mejor que se fuera acercando al lobby de la entrada asi causar un mejor impacto. En esta oportunidad y sabiendo que recién comenzaba aquí, optó por una falda corta por delante y larga por detrás, un corset de los ajustados todo en perfecto blanco, algún cinto color pastel y de compañía ese tono rojo que sugería mas en su boca, invitando a deleitarse no solo con ello sino con mas…

Aguardó unos breves momentos en el lobby del club donde muchas prostitutas y esclavas de sangre se disponían en sensualidad pura. Sus cuerpos recordaban el paraíso aunque bien sabido era que lejos estaban allí del paraíso que ofrecen los cielos sino mas bien de los placeres lujuriosos del infierno.

De pronto las puertas se abrieron y una figura conocida la cruzó con porte seguro, su capa confirmaba que no podía ser alguien mas que él. La había visto en su cuerpo reposando varias veces y la curvatura de sus hombros era reconocible. Su corazón se freno de repente, le traía recuerdos, de los placenteros a los que aun le movían las tripas. Su estomago se hizo un nudo presa de los sentimientos encontrados que le traía encontrarlo allí.

Santo Cielo…

por **Bard Blase** Mar Sep 22, 2015 3:10 am

El poder de la magia era un peso que en muchos casos se hacia muy difícil de cargar, por eso en algunas ocasiones para mantener en control la esencia mágica en mi realizo viajes en búsqueda de mas poder y mas equilibrio entre las energías que mueven el mundo, eso había estado haciendo estos últimos meses, pero en todo el tiempo que estuve fuera extrañaba que me acompañaran, extrañaba esos placeres que me hacen tan humano.

Al volver solo deseaba una cosa, liberarme de mis inhibiciones, sabia que en la ciudad habían muchos lugares donde ir pero había una persona que en mucho tiempo no veía, alguien que en mi búsqueda nunca se acordó de mi, que ni si quiera una nota dejo bajo mi puerta, alquilen cuyos actos demostraban que necesitaba un severo castigo, y conociéndola, estaría en un lugar donde cualquier otro que no sea yo la tomara sin pensar ni un momento en mi.

La busque entonces entre esos lugares que frecuentaba pero no estaba, averigüe entre quieres podrían conocerla y al final di con ella, en un nuevo local que no conocía, pero no importaba la tendría entre mis manos sin importar nada, me dispuse entonces a buscarla en ese local, pregunte por ella pero, aparentemente tenia que esperar para conseguirla, fui entonces a acomodarme, me coloque un chaleco marrón con una camisa blanca y mi capa negra, mis pantalones eran negros junto con mis zapatos y mi corbata, me gusta vestir común para no llamar la atención.

Me dirijo al lugar pero siempre me ha gustado crear expectativa por lo que me tome mi tiempo en llegar, si ella se había tomado tantas libertades sin mi ahora podría esperarme un poco, hacer que este ansiosa de mi llegada hará que su cuerpo este mas dócil y maleable. Entre entonces por la puerta y la vi tan hermosa y radiante como siempre había sido, luciendo toda su figura sin ningún remordimiento, dejando que otros la vean y que la disfruten, haciendo que me llenara de ira.

Mis puños se cerraron para intentar aguantar la rabia que corría por mis venas y con pasos lentos me acerco hasta ti sin dejar de verte a los ojos impregnados en cólera, cuando me pongo frente a ti mis puños tiemblan un poco intentando mantener la compostura y aguantando las ganas de lanzarme sobre ti y darte tu merecido, Vamos alcance a decir toscamente mientras apretaba mis dientes haciendo que se escuchara un poco No hay tiempo que perder.

por **Sweet Von Teese** Mar Sep 22, 2015 8:08 am

La cara del brujo reflejaba el enojo, algo de furia contenida, sus puños cerrados indicaban que no iba a ser tolerante con ella esta vez.

Pero Lucciano le había dicho que tenía su consentimiento siempre que ella quisiese de retirarse de la habitación en caso de ser maltratada. De hecho el motivo por el cual había abandonado el burdel era justamente por los maltratos de algunos hombres que saciaban no solo sus necesidades de sexo sino de pasiones extrañas como los golpes que dejaban marcas en la piel. Pero en el caso de Bard ¿podían llamarse maltratos y abusos cuando tenía tales sentimientos encontrados por él?

Le daba miedo y era justamente ese el motivo que la había llevado a retirarse de su domicilio esa noche cuando tuvo la posibilidad. Aunque no podía decir que sus maltratos eran tales, incluso le había llegado a gustar esa forma que tenia de manipularla, de hacerla sentir tan mujer como podía, y como la había hecho disfrutar a base de juegos que ella nunca había imaginado que él podía idear.
Su abdomen se contrajo ligeramente. Él caminaba hacia ella y su mirada la dominaba, la acorralaba.

Se levantó con sus palabras y le sonrió ligeramente a modo de disculpas, era extraño como él mundo terminaba siendo un pañuelo. Observó de soslayo a su alrededor, nadie de las chicas que allí trabajaban notaba su nerviosismo en ese momento. Se dio vuelta y trago saliva luego de tomarle una de sus manos y conducirlo por un estrecho pasillo que conducía a las habitaciones. Se decidió al menos a preguntarle algo para romper esa tensión entre ellos – Bard ¿deseas una sesión de masajes, una tina caliente o prefieres directamente que nos acerquemos a la habitación? Tenemos todas disponibles. – dijo aun con una mano en la suya sintiendo como le comenzaban a sudar. Se sonrojo al ver que él tenía la vista clavada en ella.

por **Bard Blase** Mar Sep 22, 2015 2:11 pm

Siento como mi corazón se acelera con cada paso, mis músculos se tensan y mi piel se eriza, con la respiración aceleraba trato de mantener un paso constante y tranquilo continuando por ese lugar donde los gritos y gemidos solo contribuían a mis ansias que en ese momento estaban tan altas que para bajarlas tendrían que pasar muchos días y muchas horas de desquite y de desenfreno como en nuestro ultimo encuentro.

¿Así que recuerdas mi nombre? esboce apretando tu mano y sintiendo como tu sudor la humedece entre la miá, Pensé que te habrías olvidado de mi ya... después de todo este tiempo no me buscaste... no me dejaste un mensaje... de no ser por mi este encuentro nunca se habría dado continué hablando con un tono irónico Se nota que no has perdido el tiempo en mi ausencia... disfrutando del tiempo con otros... dejando que te miren y que te usen dije con rabia Permitiendo que otros que otros... que individuos que no soy yo te tomen a su antojo... incluso yo... he tenido que pagar por ti llevo mi puño frente a mi y lo aprieto con fuerza dando un largo suspiro para calmarme ¿Algo que tengas que decir en tu defensa?.

por **Sweet Von Teese** Mar Sep 22, 2015 7:33 pm

La prostituta estaba muy nerviosa pero este sentimiento fue cambiando a medida que el brujo hablaba.

Ella se acordaba perfectamente de él. Recordaba no sólo su nombre sino mucho más. Aún recordaba sus dedos sobre su rostro, sobre su cuello, sus labios posándose una y otra vez sobre su cuerpo. Se estremeció al volver a recordar esas vivencias.

No iba a negarlo que algo de razón tenía. Ese brujo la había conquistado de una forma extraña, sus prácticas habían sido muy nuevas para esa época que pasaron juntos y eso fue justamente lo que la había llevado a huir de su casa sin siquiera un adiós. Sabía a ciencia cierta que con Bard no habría un "hasta siempre", sino un "hasta dentro de un rato" y ella no estaba dispuesta a abandonar todo por un hombre que la veía como su mujer pero con el cual no tenía un futuro prometedor. Y allí que había sostenido esa decisión.

Pero cuando él la reclamaba como suya no tenía derecho, absolutamente ninguno sobre ella. Fruncio el ceño mientras lo observaba terminar sus frases, obviamente era una forma de descargar su ira.
Lo dejó terminar haciendo gestos que denotaban sarcasmo también. ¿Quien era él para reclamarla como suya cuando lo único que habían compartido era su lecho y algunas prácticas sexuales innovadoras para ese momento? ¿Acaso pensaba que iba a entregarse a un hombre sólo por placeres carnales? Bufó.

- Te equívocas de persona Bard...yo no me despose contigo como para que vengas a plantearme aquí con quien entrego mi cuerpo. Nuestra relación era sólo eso, una relación. ¡Tengo mi libertad personal para entregarme en cuerpo a quien me plazca! - reprochó la prostituta quitando su mano y enfrentándolo. Era pequeña en comparación, siempre era pequeña por altura y menudez.

Y allí frente a él tuvo un deja vu. La vez pasada habían tenido un enfrentamiento así, ella marcando su actitud, él le sacaba esos aires rebeldes que tenía y esto en el pasado habia generado tales ataques de ira de Bard que terminaban ambos enojados y como dice el dicho : Del odio al amor hay un sólo paso. Ya podia sentir un movimiento en su interior que no era producto de la bronca que le profesaba en sus palabras sino el preludio de una sinfonía que componían sus cuerpos atrayéndose inconscientemente.

por **Bard Blase** Miér Sep 23, 2015 1:56 am

Cada paso que daba se me hacia mas difícil controlarme, trataba de relajarme y de resistir mis impulsos, pero tus palabras hicieron mella en mi concentración, doy un suspiro fuerte y pongo la palma de mi mano fuerte justo al lado de tu rostro haciendo que se escuche el golpe y te miro fijamente luego de escuchar tus palabras ¿Así que eso es lo que piensas? pongo mi otra mano al otro lado de tu cabeza encerrándote entre ellas No necesito desposarte para saber que estas encadenada a mi dije en un tono bajo No importa donde estés o donde te escondas tus cadenas siempre te arrastraran a mi continué un poco mas fuerte Y te escapaste con la tonta idea que con eso lograrías alejarme pero aquí me tienes frente a ti me acerco un poco mas a ti ¡NO! No eres libre de hacer lo que se te antoje dije sacándote un poco los dientes cual perro rabioso Pero aun así crees que puedes andar por hay haciendo lo que se te antoja y acostándote con quien se te da la gana, usando este cuerpo que solo yo puedo disfrutar cierro mis puños ¡Eres una estúpida! termino dándote una fuerte bofetada liberando una ínfima parte de mi enojo.

por **Sweet Von Teese** Miér Sep 23, 2015 12:09 pm

Sweet lo observaba con recelo, aun no consentía esos tratos ni pensaba hacerlo más ¿quién se pensaba que era? Sólo por poderla, por esos sentimientos no se iba a entregar, estaba decidida a soportar tener una vida de prostituta eternamente si así fuera. Su orgullo podía más.

Sintió el golpe de su mano y automáticamente recordó esas mismas manos en sus muslos golpeando con ímpetu y esa revitalizante sensación volvió mezclada con la actual. Lo odiaba por causarle esto. Sabía que el sadomasiquismo le gustaba apenas Ryley le mostró lo que era, de eso ya algunos años en sus primeros meses de burdel. Pero con Bard esas practicas habían terminado mal, no podía amarlo por más que quisiera una parte de el se mostraba tan machista como ella orgullosa.

No podía...y estaba dispuesta a abandonarlo cuantas veces sean necesarias antes que tener que vivir sumisa eternamente con él o consciente y libre de amar a otro sin él en su vida. Él la tenia entregada en bandeja de plata pero la decisión la tomaba ella, ya no era una niña por más que su cuerpo decía lo contrario y debía decidir entre el capricho y sus sentimientos.

Al golpe le siguió sus manos en réplica empujándolo por el pecho y terminando contra una de las paredes del pasillo, el peso de su cuerpo la incitaba a golpearlo más, como una forma de dominar su ira. Lo odiaba más sólo por pegarle.

- ¡Vete! No te quiero ver aquí ni en mi vida nunca más. No sabes lo que estas diciendo, crees conocerme pero no lo haces ¡Ni siquiera sabes que es lo que busco en ti! Si vas a venir aquí a regañarme como si fuera una niña te comento para que sepas, que ni mis padres pudieron logarlo.
Y te aconsejo bajar un poco la intensidad o llamaré al dueño, Bard. Tu decides...soy tu puta, no tu esposa - comentó furiosa la blonda, enojada por sus palabras, su golpe y porque algo de cierto decían cuando apuntaba que había algo que la ataba a él.

por **Bard Blase** Miér Sep 23, 2015 10:25 pm

Retrocedo un paso pero no fue mas que un débil empujón, esto no me detendría, estaba demasiado enojado y ansioso como para rendirme ahora, aun estando en un lugar que no podía controlar, ya encontraría la forma de solventar cualquier problema que sucediera lo importante era tener lo que habia ido a buscar y haría todo lo necesario para conseguirlo.

Me acerco de nuevo a ti y metí mi mano bajo tu cuello tomando tus cabellos y halandote hasta mi, haciendo con esto que nuestros cuerpos queden muy juntos y haciendo que tus pies se levanten un poco mas. ¿Crees que voy a hacer lo que se te antoje? dije pegando un poco tu rostro al mio Aquí quien decide lo que se hace o no se hace soy yo, tu eres mi juguete y voy a usarte y abusar de ti todas las veces que se me antoje replique dándote un empujón haciendo que avanzaras en dirección a la habitación No creas que te vas a escapar de mi de nuevo con tan solo unas palabras te agarro de la muñeca y la doblo tras tu espalda mientras que con la otra mano tapo tu boca para que no puedas gritar Ya no tendré mas contemplación contigo dije mientras te llevaba empujada a la habitación.

por **Sweet Von Teese** Miér Sep 23, 2015 11:47 pm

Un largo suspiro de aire la abandonó apenas la levantó con facilidad, la asediaba con su tono y con sus acciones, la seducía sin quererlo ¿Qué podía hacer para que la dejara? ¿Podría mantener su rigurosa conducta como para al menos cumplir con su cometido de prostituta que era satisfacerlo y nada más? Después de todo, ella trabajaba de eso y además él ya había pagado.
A empujones la llevaba hacia la mas lejana de las habitaciones, que gracias a Dios estaba vacía.

La tenia sujeta por la manos y por la boca por lo que gritar suponía solo algunos golpes mas y ya estaba harta, no deseaba mas de esos golpes, no quería mas jugar con tal violencia y sin sacar rédito de ello. Asi que se trato de controlar en sus arranques de ira y respirando solo por la nariz buscó la paz y un poco de sentido común entre tanta ira contenida del brujo.
La soltó una vez en el cuarto. Ella tomó aire respirado con cierta dificultad, si algo tenia era una gran fortaleza. Su pecho subía y bajaba. Buscó concentrarse en su papel, si él quería servicio lo tendría solo por el pago.

- Eso no era necesario, lo que te dije afuera era solo una advertencia… - comentó ella ya recuperada mientras lo observaba con ciertos aires altaneros. La sacaba de quicio el tener que tratar así con un conocido. Era intolerable él en si mismo.

- Bien, cuéntame ¿qué tienes en mente ya que rechazaste la tina caliente y los masajes? – preguntó con los brazos cruzados sobre el pecho.

por **Bard Blase** Vie Oct 02, 2015 7:37 pm

Después de cerrar la puerta detrás de mi me sentía mas relajado, sabia que estas habitaciones estaban hechas para minimizar el ruido aunque aun se podían escuchar entre algunas paredes aquellos eróticos sonidos que me hacían calentarme mas y daban una atmósfera mas perversa a toda la situación, me siento tenso pero a la vez excitado, siento mi miembro duro y ansioso de poseer de nuevo todo tu cuerpo sin piedad.

Me acerco de nuevo a ti y te suelto otra bofetada sujetándote luego del rostro apretando un poco tus cachetes y abriendo tu boca un poco para luego escupirte dentro de ella y luego te suelto lanzándote atrás, Tu eres mi perra me acerco y te tomo del cabello lanzándote halandote hacia la cama Ahora si me las vas a pagar por tu altanería Te lanzo a la cama mirándote a los ojos con odio.

Te miro en silencio mientras me comienzo a quitar el saco con algo de rudeza y rapidez, no podía contener mis ansias y lo demostraba con los movimientos que hacia, luego se sacarme el saco te lo lanzo en la cara y sigo con mi camisa y la quito con la misma intensidad para luego lanzarla de nuevo en la cara, me quedo un momento mirándote con el torso desnudo, un tanto sudado por lo caliente que me siento y luego doy un paso mas acercándome a la cama Voy a hacer contigo lo que se me antoje... y mas te vale no volver a fallarme o ya sabes lo que pasara.

por **Sweet Von Teese** Lun Oct 05, 2015 11:05 pm

El golpe se sintió aún más fuerte que el primero y Sweet profirió un grito que sólo podía oírse en la habitación donde estaban.

El color rojo de las paredes parecía acentuar aún más la rabia contenida del hechicero que se desquitaba contra ella. No tuvo demasiado tiempo de reponerse cuando le escupió en la boca y ya cuando la sujetaba del pelo volvió a enfrentarlo con algo de saliva en la comisura de sus labios -¡ No te tengo miedo! - le dijo mientras éste la conducia ahora de un empujón hacia la cama, se giró sobre si misma, quedando recostada con el cabello despeinado y se secó los labios corriéndose el labial con su brazo.

Sin comprender bien que quería, corrió el saco y la camisa que este le arrojó. No perdería su sensualidad por más que este la estuviera tratando de humillar en privado, cruzó una de sus piernas incitándolo. Si, sería su perra, pero sólo por esta noche y esperaba lograr conseguir el control de si misma que tanto buscaba.

Le sonrió con cierto descaro, conforme a la rabia que dentro de ella reinaba, por fuera quería lucir al menos superada. Le dolía, le ardía que la tratara como su puta personal cuando sólo era presa de la pasión que Bard le generaba y la fiebre en su cuerpo se incrementó aún más cuando notó su torso resplandeciente a causa de esa agonía que se hacía notar en el bulto en su pantalón.

- Ya deja de amenazarme como si pudieras controlarme Bard, ya te dije que con un simple chasquido llamó a seguridad aquí - le restregó en la cara con esa sonrisita sobradora que sólo conseguiría despertar a la bestia en él. Tenía que hacerlo. Mostrarse así era el único camino que tenía, aunque ... Ya sabía como terminaban esos juegos.
- ¡Ya esta!... Hagamos como si nada de esto hubiera pasado ¿si?. Haz lo que necesites con mi cuerpo y te largas ¿te parece bien? ¿Qué deseas que te haga?- preguntó mientras intentaba controlar bajo su cuerpo sus propias manos que temblaban, canalizando el volcán interno. Muy a pesar de sus ansias de ser poseída, sabía que él sólo buscaba su cuerpo. Contuvo sus lágrimas presa de sus emociones, aún debía ser más fuerte.

por **Bard Blase** Lun Oct 19, 2015 4:00 am

Todas mis intenciones ya estaban claras, desabroche mi cinturón junto con mi pantalón dejándolo caer un poco para luego escuchar tus palabras que solo lograba que mi ira aumentara y se me hacia casi imposible soportar mas -¿Como te atreves a decir eso zorra?- lleno de rabia tomo tus piernas y las halo un poco abriéndolas para luego llevar mi mano hasta tu ropa interior y de un fuerte tirón desgarrarla y terminar arrancándola completa para dejar tu intimidad desnuda y volver a ver ese agujero que antaño me ofreció tanto placer hizo que mi voluntad se doblara y me lance sobre ti con mucho deseo ubicando mi entrepierna sobre la tuya y acomodando mi miembro entre tus labios vaginales lo metí con brusquedad sin siquiera preocuparme si estabas preparada o no.

Empujo tan fuerte que tu cuerpo se arrastra un poco sobre la cama y lo dejo unos segundos adentro mientras presiono -Vamos... Grita... Pide ayuda...- dije apretando los dientes mientras movía mis caderas entrando y saliendo de tu vagina con la misma rabia con la que entre al principio arrastrando tu cuerpo arriba y abajo una y otra vez -Diles que no me quieres dentro de ti...- Voy aumentando la velocidad y un poco el desespero -¿QUE ESPERAS? ¡HAZLO!- me tomo de las esquineras de la cama para aumentar aun mas la fuerza y brusquedad de las embestidas.

por **Sweet Von Teese** Mar Nov 03, 2015 8:12 am

Un grito mezcla de enfado y placer también inundó la habitación, estaba siendo impelida por el hombre con tanta brusquedad que además de ser algo que no sentía hacía ya tiempo, le sonaba a nuevo. Le generaba esa adrenalina que en algún momento de su trabajo quedaba dormida. Sus golpes no eran los mismos que los que podía proporcionarle cualquier hombre, estaba extasiada internamente, dentro de su vientre bailaban las sensaciones ejecutando una danza que lejos de alejarlo, pedía mas.

¿Acaso dudaba de sus poderes sobre él? Obviamente había regresado por ella, para poseerla solo a ella porque en otras no había encontrado eso que tenía. Aunque no sabía exactamente que era, había recorrido los burdeles de París solo para tener sexo con ella. Sonrió cuando no la miraba y al costado de su mejilla una lágrima había retomado el curso que venía llevando. Aunque intentaba siempre algo la hacía llorar con él. ¿Qué le pasaba? ¿Porqué tenia este tipo de tratos con Bard? No buscaba otra relación con él, sin embargo, en lo profundo de ella quería más. Siempre lo quiso.

Su miembro golpeaba con violencia su entrada y ella mas se mojaba con cada embestida. Obviamente la intención de este era la de violarla, pero no podía sentirse asi siendo ese cuerpo tan familiar. Habiendo tenido previamente una relación similar. La primera vez había sido algo traumatizante pero su cuerpo luego se acostumbró a ello, a su violencia, que ya ahora le daba un toque personal.

La cama se movía, terminaría por ceder bajo su presión, esta iba a en aumento con sus gritos. No tenía miedo que estos se escucharan por el pasillo, sabía que nadie vendría a quitar un cliente asi porque si de la habitación, a menos que este estuviera flagelándola. Sus palabras resonaban en su mente mientras este continuaba empeñado en el trabajo, “Diles que no me quieres dentro de ti...”. Oh Bard…sabes que no podría…te deseo, por mas que me lo niegue, adoro cuando me tratas mal. ¿Será que soy masoquista y aun me lo niego?

Aumentó la fuerza, realmente estaba dejándose llevar por el momento, no podía mas que aclamarlo por ello y Sweet gemía mas y mas con cada golpe, sintiendo como este la tomaba por completo, llegando a lo mas profundo de su ser con su rigidez. Arqueó su cuerpo para entregarse más – Vamos, viólame, hazme tuya, acábame adentro si quieres. Siempre terminas saliéndote con la tuya… - dijo con una fingida resignación en su voz aniñada. Si quería de ella una niña que cooperaba, la tendría. Solo por esta noche al menos. Habría suficiente tiempo después para aclarar las cosas.

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