Destinos cruzados - Libre -

por **Andrew Lamberti** Lun Mar 21, 2016 10:00 am

Su mirada estaba perdida por la ventana de aquel pequeño café , el lugar se comenzaba a vaciar ya que la noche comenzaba a caer, por alguna razón le estaba causando nostalgia el recordar a su familia ¿ Por que justo ahora? Siendo que ya había pasado mas de un año desde que los dejo atrás en su amado Inglaterra .Tomo con cuidado su tasa de café y le dio un profundo sorbo sintiéndose lleno por el amargo sabor de este majestuoso brebaje, aunque de forma personal prefería el té.

Por unos segundos su vista se fijo en el vestido de una dama , le encantaba admirar esas bellas telas llenas grabados de flores en su mayoría , era ropa pomposa y atractiva para su gusto , pero, la ropa de los caballeros también era de su agrado, se le hacia inevitable mirar las piernas de estos, siempre había pensado que lo mas atractivo de un hombre eran sus piernas , suena algo bobo ¿no? Se le hizo imposible no reír por sus propios pensamientos, llevo su mano hacia el pequeño pastel de chocolate y saco un trozo que luego llevo a su boca para saborear de forma lenta, con su mano libre tomo un libro de poesías que traía en el bolsillo interno de su chaqueta, ah, como amaba la buena literatura, era su hobby favorito, en su casa tenia al rededor de 230 libros que en su mayoría hablaban del romance , era algo así como un sueño inalcanzable para el, ya que pensaba que el romance era algo que solo se podía encontrar en la literatura , ya que en la realidad solo era un vil fantasía .

La noche había llegado y el café estaba a punto de cerrar, algo desganado por haber sido interrumpido de su lectura se dispuso a ponerse de pie , se estiro un poco y le dedico una cálida y coqueta sonrisa a la chica que atendía aquel lugar, aun cuando ya estaba de pie y caminando su mirada seguía fija en su libro de poesías, por lo que no se fijo que delante de el había alguien , provocando el choque de ambos cuerpos , solo en ese momento se percato de lo que había ocurrido , cerro su libro y lo guardo, quedándose viendo a la persona que ya hacia tirada en el suelo

- Mis disculpas...-

Murmuro con tono apenado, estirando su mano para ayudarle a ponerse de pie, , con su otra mano hizo sus cabellos rubios hacia atrás y le sonrió de forma nerviosa al no saber como este podía reaccionar .

-Si se a provocado alguna lesión pagare los gastos médicos -

Continuo con su mano estirada a la espera de que el contrario la recibiera, pero pareciera que este cegado por su orgullo no lo iba a hacer , así que solo se dispuso a bajarla y agacharse un poco para verle de mas cerca y sonreírle.

- O simplemente le podría invitar a ir por una copa de vino, claro, solo si no le incomoda.

sonrió por ultima vez.

por **Arielle Krauz** Lun Mar 21, 2016 11:57 am

Después del susto que se llevó la otra noche, ya se cuida mucho más, aunque intenta siempre llegar a su casa pasadas ciertas horas, así su padre está dormido, no hay problema con que la mire,e incluso le golpee como la última vez, porque es más un gasto que una verdadera ayuda, le duele, a Arielle le duele que su padre le mire de aquella forma, con el odio reflejado en la mirada, pero ahora no puede hacer nada más que esperar a que se le pase aquello. Muerde sus labios mientras camina distraídamente por la calle, de la casa donde trabaja le han dado de cenar, así que ya no tiene de qué preocuparse al respecto, al menos por hoy, puede decir que no le ha costado un solo peso a su padre, espera que así siga siendo para que después ella pueda seguir ahorrando y por fin salirse, sin que ello implique el matrimonio, no piensa en que tenga que aceptar que alguien la compre ¿Por qué? No es carne barata, de esa que tienes en subasta, se niega a aceptar que aquello en realidad pueda ser su verdadero destino.

Se queda de pie mientras mira hacia una de las cafeterías cercanas, se le ha antojado que la noche es muy fría, pedirá un chocolate, para poder entrar en calor, se apresura, apenas si tiene unas monedas de sobra y espera que con eso le sea suficiente, está entrando mientras se distrae pues parece que ya van a cerrar, tendrá que rogarle al dependiente que le prepare un chocolate, será rápido, en eso está pensando cuando... -Ay- susurra al caer al piso, sintiendo como su trasero duele en ese momento, al igual que las palmas de sus manos, levanta la mirada y acomoda sus cabellos castaños detrás de sus orejas -No se preocupe, sir- menciona tomando su mano para poder ayudar a levantarse, no es que en realidad se haya lastimado demasiado, pero ahí está, tirada en el piso y no es lo correcto. Muestra una leve sonrisa mientras se sacude el faldón para acomodarlo por completo.

-¿Usted está bien, sir?- pregunta de nueva cuenta mientras le mira finalmente, mostrando sus dientes blancos mientras esa sonrisa angelical sigue dibujada en sus labios -¿Una copa?- se muerde el labio inferior, calcula más o menos la hora, iba a paso lento porque todavía no era tiempo de llegar a casa, así que puede pasar un poco más fuera de su hogar, con tal de no llegar -Claro, sir, aunque no tiene nada de qué disculparse, yo he venido un poco distraida- menciona haciendo una mueca con los labios pero al final sonríe de nuevo.

por **Andrew Lamberti** Lun Mar 21, 2016 2:04 pm

Cuando esta por fin accedió a tomar su mano le ayudo a levantarse, dedicándole una tierna sonrisa para luego ayudarle a desempolvar su gran vestido . La miro de forma detenida , fijándose en cada rasgo de la chica, lindos ojos, cabello brillante y sedoso ¿Podían existir ojos mas encantadores que los de color verde? Fue lo que pensó, soltó una pequeña risita, a lo que la chica solo le miro confundida por su acto.

-Oh, madame, la copa no es solo para disculparme , sino que también quiero saber mas sobre usted-

Dijo con sinceridad, saliendo esta vez por completo del café esperando a que la muchacha le siguiera, de verdad que sus ojos le habían cautivado y no era algo que pasara comúnmente, era alguien difícil de atraer , sonrió por dentro comenzando a caminar por las calles del centro de paris , todo estaba bellamente iluminado , de vez miraba de reojo a la joven, algo le parecía raro en ella, como si estuviera asustada de algo o quizá su imaginación solo estaba siendo paranoica .

Llegando a una pequeña avenida , justo en la esquina de esta había un pequeño local bajo el nombre de ‘ L’obscuritéf ’ según el, era el lugar con el mejor vino a bajo costo de parís, invito a la joven a pasar y se acerco a pedir dos tragos de vino ‘Géorgie’ , era su vino favorito, al menos el mejor de los vinos que el podía costear con su sueldo de pastelero , una vez que ambas copas de vino fueron entregadas se acerco a la señorita ofreciéndole una de estas , se le quedo viendo unos segundos, notando como en su cuello tenia una pequeña marca morada.

-Disculpe mi imprudencia madame, pero, ¿ Que le a ocurrido en el cuello ? -

pregunto para luego sorber del majestuoso vino, la chica aprecio sentirse incomoda por la pregunta, lo pudo notar a la perfección, le sonrió de forma tranquila y espero a que le aclarada su duda .

-Si mi pregunta le a incomodado simplemente puede ignorarla, no quiero que se sienta presionada bajo ninguna circunstancia-

Dijo mientras dama otro gran trago de vino .

por **Arielle Krauz** Jue Mar 24, 2016 4:20 pm

Termina por levantarse, no le duele nada, al menos no demasiado como para no poder mantenerse en pie así que le muestra una sonrisa al hombre, no es que tenga deseos de preocuparle ni mucho menos, ha sido todo un accidente y Arielle ha contribuido, de cierta forma, pues iba pensando en mil cosas, menos en caminar hacia donde debía -¿Conocerme?- pregunta en un susurro y muestra una leve sonrisa mientras se acerca un poco a él, le apetece la idea, después de todo eso de llegar a casa no le parece la mejor opción -Pues yo no tengo problema en ello- mantenía aquella sonrisa en sus labios, después de todo hoy estaba de muy buen humor, lo cual era generalmente habitual cuando las cosas iban bien.

Comienza a caminar junto con él mientras observa la noche, al menos no va sola, esperaba que este hombre no fuera como el de la ocasión pasada, tampoco es que se viera mala persona, se mordió los labios, huir de casa le había metido en problemas, así como ahora, pero tenía esperanzas en que todo estaría bien, así tenía que estar, no podía ser un imán para los problemas, no, no y no.

Se sonroja un poco al escucharle y se soba el cuello en una ocasión, va a mentir, es lo mejor, pues ni siquiera ella tiene idea de lo que le pudo haber pasado en aquél callejón, le debía la vida a alguien, eso sí lo tenía claro, hasta cierto punto -Preparo comida, en la cocina de una mansión, para los habitantes y para algunos de los empleados, hace unos días tuve un percance, iba distraída, como hoy, y uno de los utensilios voló de mi mano, fue una cosa bastante extraña- no sabía si aquello era creíble o no, pero no podía decir más, porque tampoco sabía más.

Entró al lugar junto con el hombre y pidió lo mismo que él, así que comenzó a degustar aquél vino, que parecía realmente delicioso -Me llamo Arielle, perdone que no me haya presentado antes- comentó mientras daba otro pequeño sorbo, apenas si había mojado sus labios con el líquido carmesí, quería disfrutarlo.

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