Siguiendo mi amuleto (Aylyn Kraemer) / priv.

por **January Isther** Jue Mar 30, 2017 3:19 pm

No había pasado mucho desde mi vuelta a este mundo. Aún me encontraba algo desorientada, pero ya había perdido un tiempo precioso en el que podía haber encontrado a lo que quedaba de mi familia.

Cuando por fin llegué a Paris, agarre con fuerza mi pequeño amuleto; el colgante que mi padre me había dado poco antes de morir para que recordase a mi madre y les encontrase. Únicamente me permití el lujo de perder una noche antes de comenzar la búsqueda. Tras tan largo camino y dormir de mala manera en el bosque o en pequeñas posadas, me permití el lujo de alquilarme una habitación en una posada bastante decente. La verdad es que necesitaba una noche en una buena cama, pero ciertamente... había sido la peor idea de la historia. Al estar tan cerca, al tener a mi familia tan cerca de mí me parecía una completa perdida de tiempo el estar tumbada en una cama cuando podían estar incluso en la calle de al lado. Por ello, nada mas salir el sol me levanté de la cama y tras arreglarme y ponerme uno de esos odiosos vestidos que a las mujeres tanto les gustaba ponerse (aún no entendía el motivo) salí a la calle con el colgante fuertemente apretado en mi mano. Cerré los ojos y cogi aire. Me centre en el colgante y seguidamente pensé en su pareja para comenzar a guiarme por esa sensación.

Estuve andando durante un rato, sin tener muy claro porque callejuelas me estaba metiendo o sin saber a donde me estaba dirigiendo. Al girar en una esquina, el colgante comenzó casi a arderme en mi mano y lo solté. Mire a mi al rededor, fijándome en las personas que ahí había hasta que una muchacha algo mas joven, pálida y con pelo oscuro que yo capto mi atención. Me quedé mirándola fijamente, con la cabeza ladeada. ¿Podría ser ella? Si tan solo pudiese ver si llevaba un colgante como el mío...

por **Aylyn Kraemer** Sáb Abr 01, 2017 7:09 am

Llevaba unos días de mala suerte. No encontraba ninguno de aquellos trabajos por días que servían para alimentarme o dormir caliente durante un corto periodo de tiempo. Estaba agotada, pues dormir donde dormía no me dejaba recargar bien las pilas, de forma que los pocos trabajos que conseguida los realizaba con torpeza, hilando así un ciclo del que solo podía salir con un golpe de suerte. Pasar noche en las casas abandonadas era duro, no solo por el frío que hacía por la madrugada y al alba, sino por la necesidad de dormir con un ojo abierto, con precaución.

Agotada, me dejaba llevar por mis pies, que se arrastraban por el empedrado de París, llevándome a cualquier lugar. Iba sin rumbo, sin saber muy bien donde probar mi suerte y encontrar algo que comer, pues la debilidad física era tal que caminaba sin reparar en con quien me cruzaba. Por fortuna, uno de los tenderos conocidos me dio un trozo de pan y una pequeña cuña de queso, algo pasado, pero que servía para alimentarme. Agradecida, lo cogí y fui a sentarme a un pequeño murete que había cerca. Al acabar el mercado me acercaría para ayudarle a recoger, agradeciéndole así su muestra de cariño.

Mientras degustaba mi pequeño festín, o al menos eso era lo que a mí me parecía mi comida, comencé a sentir algo extraño a mi alrededor. No sabría explicarlo, pero el ambiente había cambiado y la piel de la nuca se me erizó, como ocurría últimamente. Además, el saquito con mis pertenencias y que llevaba en mi cadera comenzó a emitir calor. Una especie de temor me invadió y, dejando a un lado lo poco que quedaba ya de comida, me lo quité y lo abrí, las piedrecitas estaban bien; sin embargo, el colgante en forma de péndulo que siempre llevaba conmigo emitía un brillo. Fui a sacarlo pero su calor me sobresaltó, haciendo que lo soltara de inmediato. Volví a cogerlo, esta vez aprovechando la manga de mi camisa, agarrándolo con ésta. Lo saqué y lo alcé hacia el sol, mirándolo a través de la luz. Brillaba más que de costumbre, emitiendo un brillo anaranjado, algo que jamás había hecho. Sorprendida, me quedé mirándolo, esperando a que hiciera algo más.

por **January Isther** Sáb Abr 01, 2017 6:14 pm

Observaba a la chica con curiosidad, intentando buscar algún rasgo en ella que me recordase a mi madre o a alguien, pero anda. Aunque realmente, el tener apenas recuerdos de ella no es que me facilitase la labor, la verdad.

Me fije en como cogía un saquito que tenia colgado en la cadera y de ahí sacaba un colgante similar al mio, que emitía un brillo similar al mío. Si no era ella, al menos, ese era el collar que estaba buscando. Quise esconder el mío bajo la basta tela de mi ropa, pero el calor no era precisamente soportable y el ligero brillo se podía seguir notando, por lo que finalmente opte por llevarlo en la mano, en vuelto en un pañuelo para que el calor no me resultase insoportable...

Con paso lento y ligeramente ausente, me dirigí hacia ella, sin tener demasiado claro como comenzar una conversación sin que me tomase por una loca y saliese corriendo. ¿De verdad era ella la persona a la que estaba buscando? Una estúpida sonrisa quiso dibujarse en mi rostro mientras un sentimiento cálido recorría mi cuerpo.

Carraspee con suavidad, intentando llamar su atención y sonreí débilmente.- El mio hace algo similar-dije lentamente. Abrí la mano y de entre los pliegues del pañuelo de color azul que mi padre me había obsequiado con el colgante, se lo mostré. -Puedo... ¿puedo saber de donde lo has sacado? Estoy buscando a su propietaria-dije con un tono de voz suave, mirándola a los ojos fijamente y sintiendo como algo en mi interior me decía que era ella. Su aura... ese aura... me llamaba como si fuese un canto de sirena y yo el marinero.

-Mi nombre es January y... estoy buscando a mi familia-susurre.

por **Aylyn Kraemer** Miér Abr 05, 2017 6:02 am

Estaba sentada, observando mi colgante en forma de péndulo, que brillaba como nunca lo había hecho. El entorno a mi alrededor era como electrizante, poniéndome la piel de gallina. Nunca me había pasado nada igual. Observé a mí alrededor, desviando mis ojos del colgante un momento, para centrarlos en una chica que venía hacia mí. Nuestros ojos se cruzaron y sentí otro escalofrío, algo estaba pasando, sin duda.

Llegó a mi altura, y mostrándome un colgante como el mío, me dijo que el suyo hacia lo mismo, y que buscaba a su propietaria. Su propietaria era yo, desde siempre. Me molesto su pregunta, pues implicaba que yo lo había encontrado en algún sitio, y que no era la propietaria original. - Es mío. - Comenté, guardando mi colgante en su sitio, y cerrando la bolsa con fuerza y de malas maneras. Estaba enfadada, me había ofendido con su pregunta y con sus insinuaciones. Era probable que reaccionara así debido a la falta de sueño y al hambre, pero su comentario me hirió.

-Yo no tengo familia- Solté, sin más y de forma seca. Me levanté y me coloqué de espaldas a ella, para coger el trozo de pan y queso que aún había sobrado. Mire al tendero amable: - Volveré al anochecer, para ayudarte, Pierre, muchas gracias - Comenté con una sonrisa a mi salvador del día. Miré hacia atrás, por el hombro, a la mujer que me había ofendido.- Que tenga usted suerte - Eché a andar entre el gentío intentando perderme y dejar atrás a esa desconocida, aun sin poderme quitar de la cabeza las palabras de esta. ¿Cabía la posibilidad de que fuéramos familia? ¿Que su colgante y el mío procedieran de la misma persona?

por **January Isther** Miér Abr 05, 2017 2:37 pm

En cuanto mis palabras salieron de mi boca para llegar a sus oídos, supe que había dicho algo mal. Su aura estaba comenzando a cambiar y las sensaciones que transmitía... No, estaba claro que algo había expresado mal.

Observé como guardaba su colgante y me quede mirando el escondrijo como una tonta, sin percatarme de que el mio seguía expuesto y brillando cual farol en la oscuridad.

Su siguiente afirmación me sacó de mi ensimismamiento, haciendo que mi mano se cerrase con fuerza al rededor del pequeño colgante que aun emitía destellos y calor. La mire fijamente, a los ojos y el frío se instalo en mi persona. No tenia familia. Si ella realmente era quien yo creía... eso quería decir que nuestra madre... Cerré los ojos unos instantes, agachando el rostro. Cogí aire y al ir a abrir la boca, escuche como se despedía de un tal Pierre y seguidamente se despedía de mi para echar a andar, casi perdiéndose entre la gente.

Cuando conseguí reaccionar, guarde el amuleto entre mi ropa y eche casi a correr detrás de ella, buscándola entre el gentío que repentinamente había aparecido. Malditas ciudades grandes. Cuando la vislumbre, sonreí débilmente y me acerque a ella hasta adelantarla y colocarme bloqueandole el paso. -Por favor, espera, espera, por favor. No quería molestarte. Lo siento.-dije con rapidez- El colgante que tengo se lo dio mi madre a mi padre antes de separarse. Me dijo que ella tenia otro igual, que se llamaban entre ellos.- La verdad es que sonaba como una demente y no me extrañaría que terminase por salir corriendo. Ahora mismo ni siquiera estaba teniendo en cuenta mi falta de educación, me importaba mas no perderla. No si ella era a quien yo buscaba.- Por favor, me dijo que estaba embarazada cuando se separaron. Son la única familia que me quedan-susurré sin atreverme a colocar mi mano en su antebrazo. Me gustaría tato poder utilizar mi empatía, saber que sentía, como se sentía con lo que estaba diciendo... pero no podía violar su intimidad de aquella manera.

por **Aylyn Kraemer** Miér Abr 26, 2017 1:46 pm

Caminé entre la multitud, sin pararme, con paso firme y algo cabreada; pero también preocupada. Su colgante era el mismo que el mío, iguales, brillaban de la misma manera. Aquello hizo que recordara a mi madre, aunque no de forma positiva, aquella mujer no me había tratado bien nunca, y mucho menos tras descubrir mi posible procedencia. Si éramos familia, ¿Qué quería de mí aquella chica? ¿Qué haría conmigo al enterarse de que mi padre podría ser gitano, y yo también? ¿Qué haría al enterarse de mis capacidades?

Absorta en mis pensamientos, ralentice el paso sin darme cuenta, de forma que aquella joven mujer me alcanzó. Me bloqueó el paso y me fue imposible sobrepasarla debido a la cantidad de gente que se arremolinaba. Sus palabras no tenían sentido para mí, ¿si su madre le había dado un colgante como el mío, significaba aquello que éramos familia? ¿Hermanas, quizá?

Sentía un miedo atroz. Toda mi vida había estado sola, mi madre me había echado de casa por ser como era. Por lo que yo sabia, no era bien recibida en aquella familia. Era gitana, y era todo lo que podría llegar a ser en mi existencia, durara lo que durara, como había sentenciado mi progenitora antes de echarme a las calles con 3 años. En aquel momento, tomé una decisión, nada que proviniera de aquella mujer que recordaba había sido bueno para mi vida: -No quiero tener nada que ver con nadie que tenga relación con aquella mujer. -Murmuré mirándola a los ojos, dolida. No podría volver a sentirme rechazada.

por **January Isther** Lun Mayo 01, 2017 12:55 pm

Gracias a mis poderes podía sentir lo que ella sentía, podía ver como el color de su aura se había ensombrecido al mencionar a mi madre, a su posible madre. Estaba claro que algo había ocurrido, algo realmente malo para ella, ¿pero el qué? Ojala pudiese saberlo, ojala me lo dijera para poder entenderla. Quizás yo no era tan independiente como me gustaba pensar. Aunque cualquier pensamiento quedo en un segundo puesto cuando note su dolor y escuché la única frase que me ofreció como respuesta.

-No he venido con intención de hacer daño ni herir a nadie-susurré débilmente, para que únicamente ella me escuchase.- Solo quiero saber si realmente tengo mas familia, no vengo en busca de nada mas. Solo... quiero saber que no estoy sola en el mundo-murmure débilmente, siendo consciente por primera vez en lo real que era esa frase.- ¿No te gustaría saberlo si estuvieras sola?-pregunté.

Suspire y negué con la cabeza, desviando la mirada unos instantes. No era esto lo que quería, estar forzando la maquinaria mas de lo necesario. Podría acabar enfadandola, asustandola o a saber qué, pero podía acabar haciéndole algo que la alejara de mi para siempre y sinceramente, si ella era mi hermana “perdida” prefería que no ocurriera.

-Perdóname, se que es mucha información que viene de una desconocida, pero yo siento en mi interior que podría ser cierto-mire a mi al rededor.- Me quedare unos días por aquí, si decides que al menos quieres hablar... el colgante te guiara hasta mi- dibuje una débil sonrisa en su dirección.-Buscare algún lugar para hospedarme y... espero que al menos lo pienses-dije encogiéndome de hombros. Quizás planteándolo de esta manera, dándole la oportunidad de ser ella la que se acercara no se sentía tan avasallada. Al menos esa era la impresión que yo tenia, que le había hecho una encerrona y encima la había seguido. Si, desde luego tenia que haberlo planteado de otra manera.-Ha sido un placer

por **Aylyn Kraemer** Mar Mayo 09, 2017 1:58 pm

La escuché hablar, no pude remediarlo. Por más que intentara alejar su voz de mi cerebro algo me lo impedía. Entendía lo que decía, hacía años que yo había sido igual: buscando algo, cualquier cosa, cualquier hilo que me atara a otro ser humano. Algo que me demostrara que no estaba sola en el mundo, algo que me acompañara en mi solitaria vida en las calles. Sin embargo, tras años buscando me di por vencida. Abandoné la búsqueda y, con ello, la esperanza de encontrar a alguien, un amigo, un familiar, cualquiera. Me refugié en la soledad y me dediqué a sobrevivir. Conocía a mucha gente, pero al final del día, estaba sola. Nadie se preocupaba por donde pasaría la noche.

Fui consciente de que, ante mí, en forma de una chica joven algo mayor que yo, se presentaba la oportunidad que durante tantos años había buscado, había perseguido. Sin embargo, la esperanza se había ido y aquella oportunidad llegaba extremadamente tarde. Podía decirle que sí. Que éramos hermanas y empezar una vida junto a ella. Pero eso se acabaría. Se acabaría como se había acabado con nuestra propia madre. Se acabaría en cuanto supiera que era gitana, que vivía en la calle y que no era nadie. – Yo ya estoy sola – Contesté con amargura. Aquella chica no sabía lo que había pasado en mi vida. Y no estaba dispuesta a perder más, y tener algo suponía poder perderlo.

Aun estaba confundida, no entendía lo que había pasado con los collares. Pero decidí ignorarlo, como había ignorado todo aquello que veía en la ciudad y no comprendía. Los ojos de aquella chica reflejaban esperanza, y no pude mirarlos más tiempo. Sentía que si lo hacía me contagiaría y no estaría dispuesta a dejarla ir, y en algún momento volvería a perder. La dejé ir, ignorando aparentemente sus últimas palabras. ¿Qué el collar me guiaría hasta ella? Maldito collar, y maldita mi madre.

por **January Isther** Mar Mayo 16, 2017 4:28 am

Me quede unos instantes observando como el color de su aura cambiaba ligeramente de color. Ojala aprendiese de una vez por todas lo que significaban cada uno de ellos, pero bueno, con un poco de tiempo suponía que lo iría consiguiendo. Al menos algunos los había conseguido aprender a base de verlos y conocer a las personas, otros... otros simplemente sabia lo que eran. Era como si los conociese de siempre y solo me hubiese faltado verlos, pero otros, simplemente eran enigmáticos.

Sonreí débilmente mirándola.- No tienes que seguir estandolo si no quieres.-le asegure en un débil susurro, para que unicamente me escuchase ella.- Solo piensatelo, estaré esperando.-dije a modo de despedida. Me gire y di un par de pasos en la dirección contraria y gire la cabeza nuevamente hacia ella, sonriendola.- Ha sido un placer conocerte-dije esta vez si que si, antes de mezclarme entre la gente, desapareciendo de su vista y yendo en busca de un lugar barato donde poder hospedarme.

La verdad es que después de acostumbrarme a vivir en un pequeño pueblo donde apenas llegábamos a una centena a venir a la gran ciudad era demasiado cambio para mi. Demasiada gente, demasiado ruido. Aunque si esto era lo que debía aguantar, estaba dispuesta a pagar el precio con tal de encontrar a por lo que había venido. Mi familia. O al menos... lo que quedaba de ella.

Seguí caminando hasta encontrar por fin un lugar donde hospedarme, barato, con el mobiliario justo y algo pequeña, pero limpia.

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