Éline Rimbaud

por **Éline Rimbaud** Sáb Dic 25, 2010 7:04 am

DATOS BÁSICOS

▲NOMBRE DEL PERSONAJE▲

Éline Rimbaud

▲EDAD▲

36 años aparentes {1805 - 1841 †}

▲ESPECIE▲

Fantasma

▲FACCIÓN A LA QUE PERTENECE▲

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▲TIPO, CLASE SOCIAL O CARGO▲

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▲ORIENTACIÓN SEXUAL▲

Heteroflexible

▲LUGAR DE ORIGEN▲

París, Francia

▲HABILIDADES/PODERES▲

→ Aparición/Invisibilidad
→ Ilusión
→ Teletransportación
→ Telequinesis
→ Permanencia
→ Corporeidad
→ Posesión

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

"Porque ni un océano puede llenar un cubo agujereado. Ésa es su caída y ésa su hermandad. Deseo. El agujero en el cubo: el golfo de ansias en las que el alma se vacía. Equivoca una nota, es el tributo que les ofrece"
(The Sandman presenta Lucifer. Carey, Hampton)

La mente de Éline es un torbellino, de muchos colores; oscuros, grisáceos y azulados. Es como una espiral infinita de autodestrucción. Confinada para siempre en una realidad más allá; ésa su condena. Ve donde otros ojos no llegan, escucha lo que otros oídos no perciben. Dotada de un sexto sentido que la hace diferenciar casi inmediatamente a los seres peculiares.
No intentes comprender su diálogo, porque es absurdo igual que el mundo que la rodea. No intentes ahondar en su psique, porque no tiene sentido: la mente de Éline es como un pozo sin fondo, una sinfonía mal entonada, una muñeca rota. Se desquebraja por momentos. Maraña de ira, pena y drama.

Pero no siempre fue así, antaño Éline era la joven más pura e ingenua de cuantas poblaban París. Angelical, sin maldad ninguna; Éline era blanca como la nieve. Entregada a sus votos, dotada de gracia divina. No había tentación ni pecado capaz de corromper alma tan dichosa. Y ahí fue donde el Diablo vio a su presa. Al Diablo, al que siempre le gusta jugar sucio, la idea de depravarla le provocaba placer, y convirtióse Éline en un teatro de tragedia por aquel de afilados colmillos. Y ahora, ¿qué es Éline? Locura en llamas

HISTORIA

"¿Matarme? Tus alas están rotas, ángel. Soy el fuego donde ardes. Te fallan las fuerzas, soy tu muerte"
(Lucifer: El lobo bajo el árbol. Carey)

Éline nació en París y nunca ha salido de la ciudad. Se crió en el seno de una familia de clase media-baja, siendo la menor de tres hermanos. Su madre era muy creyente y transmitió su amor por Dios a todos sus hijos, pero caló más aférrimamente en Éline. Ya desde muy niña supo que quería ser monja.
Al cumplir los 10 años, sus padres la llevaron al convento de las Hermanas de la Adoración en París.
Éline era la más joven de todas ellas y sin duda la más bonita, pero la muchacha sólo tenía ojos para Dios y para los pobres y enfermos que las monjas cuidaban en el convento. Decían de ella que era un ángel caído del cielo. No conocía la maldad y su corazón rebosaba bondad y pureza. Aprendió a leer y escribir en el convento, pues las monjas la enseñaron.
El día 11 de junio de 1796 entró en el convento una criatura hermosa. Éline nunca había visto una belleza semejante, ni en los cuadros de Boticcelli ni en los versos de Garcilaso.
-Buenas noches, hermana.
Éline inclinó la cabeza, sonriendo.
-Buenas noches, monsieur. ¿Qué le trae por aquí a estas horas de la noche?-Preguntó la inocente Éline sin que se le borrase la deslumbrante sonrisa de la cara.
-Vengo a buscar a sor Rimbaud.-Contestó el hombre, con una voz melodiosa y sensual.
-Soy yo, ¿qué se le ofrece?
El hombre no contestó de inmediato. Se acercó sigilosamente a la monja, tan rápido que Éline lo tuvo en cuestión de minutos frente a ella. Tan cerca que casi podía oler el vaho que desprendía de su boca; era un olor...Una mezcla de sangre y manzanilla.
-Te estaba buscando desde hace tiempo...Y por fín te he encontrado.
Éline jadeó. Nunca antes había tenido a un hombre tan cerca de ella y mucho menos a un hombre tan imponente e inquietante.
Éline tembló cuando notó como la fría mano del hombre le sujetaba la barbilla, como la fría mano de la bestia-que ya no era hombre-la tocaba y recorría su cuerpo. Éline tembló cuando la bestia estampó sus labios púrpuras y gélidos en su boca. Mientras sus manos trataban de desnudarla, allí frente al altar.

Éline forcejeó, quiso zafarse de aquel ser. De aquel demonio. Pero él era mucho más fuerte. La arrojó sobre uno de los bancos de madera y le quitó la ropa que le quitaba. Las lágrimas adornaban el dulce rostro de Éline mientras notaba como los afilados caninos del vampiro penetraban en su piel. Pero no lo suficiente como para matarla.
El vampiro siguió recorriéndola con su lengua endemoniada mientras Éline gritaba para que la soltase.

Las monjas escucharon los gritos angustiosos de Éline desde el otro lado del convento y llegaron justo en el momento en el que Éline iba a ser convertida. Lograron espantar al vampiro antes de que Éline fuera a beber su sangre.
Los meses siguientes a la violación, cuidaron a Éline para que se recuperase, pues había perdido mucha sangre pero, gracias a Dios, había conseguido salvarse. Pero aquella noche había dejado un gran trauma a la chica. Se había vuelto loca. Completamente loca.
Las monjas la enviaron a un sanatorio mental, pero, después de pasar múltiples tratamientos salvajes, Éline consiguió escapar y ahora vaga por las calles de París. Sin más compañía que su ruiseñor Maspero.

Te descosimos entre todos. Te deshilachamos en hilos de oro y plata. Te rompimos como se rompen los amaneceres. ¿Y qué podíamos hacer si el Omnipotente lo había orquestado todo desde el primer instante? Él. Él solo lo decidió por nosotros, cuando el Lobo te robó la luz, cuando te surmegió en la fuente de la vida.

Demasiado dolor en su mundo, incluso en el de su cabeza. ¿Cómo iba a soportar el inefable peso de cargar con el cadáver de su hijo? Palmas temblorosas que tomaron las garras del Lobo. Sangre con sangre. La de los dos, la de los tres. Las condujo hacia el vientre mutilado, pidiéndole a su guardián el último acto de gracia. Un indulto por su penosa vida. En los labios de la loca se formaban las palabras antaño impronunciables. La petición impensable; "¿Puedes acabar con mi angustia?"

DATOS EXTRA

-El Señor Maspero es el eterno compañero de Éline, un sustrato de su mente que representa la poca cordura que le queda, actuándo como guía y consejero de la pelirroja. Tras su muerte, Maspero murió para transofrmarse en el Dios Astado (un ciervo blanco con cornamenta de cristal, guardián del bosque junto con Éline).
-Las hermanas del convento no se preocuparon en hacerse cargo de ella ya que consideraban que Éline está manchada al haber sido violada por la peor de las criaturas; un vampiro.
-Tiene marcas por todo el cuerpo producto de sus autolesiones.
-Después de su violación, Éline adquirió una especie de instinto que le permite advertir la esencia de los seres sobrenaturales.
-Aún en su forma espectral conserva la cicatriz en su bajo vientre del aborto que Ciro le provocó.

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por Invitado Sáb Dic 25, 2010 12:28 pm

FICHA VALIDADA

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