Ojos colmados de pasado - Privado

por **Mi Young Wang** Miér Dic 27, 2023 6:07 pm

El otoño en París, era tan diferente al que viviera en su tierra natal, que aquella estación, la colmaba de tristeza. No podría entender el porqué su corazón dolía tanto, como si esas fechas le recordarán que había perdido algo muy importante para su vida. Solía quedarse en su privado y tomar alguno de los instrumentos típicos de su tierra y tocar por interminables horas. Aveces sus dedos terminaban sangrando, heridos por el continuo rose de las yemas en las cuerdas del instrumento. No solo tocaba alguna pieza musical, sino que además solía cantar, poniendo en cada interpretación, toda aquella emoción que desbordaba por sus poros, y que si intentaba mantenerla bajo control, haría que llorara por días enteros o que cayera enferma por semanas.

Todos aquellos sentimientos de tristeza y abandono, desaparecerían, con la primera nevada, tal como si el frío pudiera sanar sus heridas, o por lo menos adormecerlas, hasta el próximo otoño, en que su alma volvería a sangrar por una ausencia que aún, luego de tantos años, no podía entender de qué se trataba. Pensando en ello, se levantó del asiento en el que había permanecido desde el alba, y en el que había estado ejecutando su kayagum. Inspiró profundamente y comenzó a levantarse, ya que en aquella habitación, al estilo oriental, había estado ejecutando dicho instrumento, sentada en el suelo. Aquello le llevó a marearse y casi perder el equilibrio, cuando intentó dirigirse a la puerta. Se detuvo y apoyo su cuerpo en la pared, se acomodó estirando su espalda en la dura y fría superficie, llevó sus ojos al cielo raso, en donde habían sido pintados, usando la técnica del tromble, un falso techo tradicional coreano. Sonrió, pensando en aquella locura que había hecho, pero que le ayudaba a sentirse más cerca de su tierra y de lo que fuera que le faltara.

Se apresuró a dejar aquella habitación, dirigiendo sus pasos a su despacho, pronto llegaría el enviado del príncipe, del embajador y ella debía recibirlo como se merecía.