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por **Asagi Dunkelheit** Miér Jun 01, 2011 4:07 am

Por una vez me sentí derrotado, el hecho de vagar por aquel lugar con este animo, con estas esperanzas rotas, había pasado poco tiempo, no podía seguir así, nadie podía ver al Conde Dunkelheit destrozado de esta manera, solo por una humana, y es que me costaba tanto creerlo.

Tracción, intriga, dolor, amor, desesperación, ingenuidad, absorción y muchas cosas más, a mis manos llego el misterio de aquella noticia, bien sabia cual sería tu final, y aunque mis enemigos agarraron aquello para poder derrocarme no pudieron, al menos sé que soy un maestro en la mentira, pero por dentro vencido, furioso, habían despertado la ira de un rey. Eso fue más que imperdonable.

- Te amo Asagi Dunkelheit… Te amo…

¡Maldigo tus palabras! Porque amor para ti fue traición y repudio, porque tú jamás amaste a nadie, solo la ambición, solo el poder, lo sobre natural, hace poco que rompí tu recuerdo, pero no me es posible siempre hubo algo que me hizo volver a tu lado, volver a escucharte a pesar de tu muerte… y si en algo me equivoco ahora es echándote la culpa a ti.

¡Aquí me tienes visitando tu tumba!... ¿Qué deseas de mi? ¿Por qué siempre me atraes a este lugar?, ¿Por qué me encadenas a algo que ya no deseo?... quisiera morir pronto entre tus manos… entre esas mentiras y ese engaño que llamaste ilusión.

por **Nara Della Rovere** Miér Jun 01, 2011 7:22 pm

Cada día llevaba puesta la misma mascara de sonrisa y tranquilidad. Cada día deportaba en un mundo inexistente. Solo una faceta para verse fuerte, para no mostrar su dolor, quizás se sentía demasiado responsable y jamás quiso verse débil. Solo allí era ella misma, solo allí podía llorar a la única persona que extrañaba.

Las lagrimas recorrían su rostro mientras se encontraba arrodillada frente a aquella tumba, solo el silencio acompañaba sus sollozos y amarguras. La oscura noche la envolvía y por momento deseaba que la llevase con ella a algún lugar lejano, donde el dolor y la tristeza perdieran sentido.

No supo el por que pero su vista se fijo en una sombra a lo lejos, en una tumba, sus pies la guiaron casi sin sentido, no podía entender que era lo que buscaba al acercarse a aquel hombre. No tenia sentido interrumpir su dolor, así que cuando llego bastante cerca decidió que era mejor retirarse en silencian, sus ojos aun estaban hinchados por el llanto y no tenia por que interrumpir el dolor de alguien.

por **Asagi Dunkelheit** Vie Jun 03, 2011 3:16 am

El olor de la sangre humana me saco de mis pensamientos, había alguien más ahí, solo dolor había en su alma, le vi ahí entre la penumbra de la noche, la oscuridad estaba haciéndose más profunda aun, ya los tristes momentos habían pasado. Las personas nos hacen llorar cuando se van, solo causan dolor y desilusión, pero ahora mi vida tendrá que ser sin ti, con el ligero dolor de un recuerdo.

- Buenas noches…

Me acerque aun más para poderle ver, la silueta me era espesa un, pero creo que se trataba de una mujer, interesante, ambos de esa manera ahí llorándole a quienes ya no están. Todo me resultaba débil en ese lugar, incluso mis fuerzas, pero encontrarme con alguien que parecía mantener ese mismo sentimiento era una gran esperanza.

Spoiler:

por **Nara Della Rovere** Vie Jun 03, 2011 10:52 am

Comenzó a caminar en silencio para alejarse de aquel hombre cuando sus palabras retumbaron es su cabeza "Buenas Noches" Al parecer había interrumpido su dolor. Se giro hacia el y dijo con voz suave -Disculpe, no he querido interrumpirle- Nara sabia muy bien lo melosto que podía ser cuando alguien interrumpía los momentos de meditación.

El hombre camino hasta ella, no supo bien por que pero sus pasos la guiaron a su encuentro, era un hombre que parecía tener ciertos rasgos orientales, el cabello oscuro y una mirada penetrante. La palidez de su piel le hizo dar un paso para atrás, sabía muy bien lo que podía significar eso.

Podía notar la tristeza en los ojos de aquel ser y aunque temiera volver a ser atacada, quiso hablarle, quiso conocer su historia, quiso hacer que sus ojos triste cambiaran un poco. No pronuncio palabra alguna pero miro directo a sus ojos, casi como si pudiera comprender el dolor que en ese momento el sentía.

Spoiler:

por **Asagi Dunkelheit** Sáb Jun 04, 2011 1:43 am

Dolor, eso era lo que nos unía, pero el mío era más como una burla para aquella persona que descansaba ya a cinco metros bajo tierra, siempre me iba a reír de aquella lapida si me causaba confusión no puedo negarlo, encontrarme con alguien a altas horas de la noche y luego con una “humana” se hizo cada vez más interesante, cuando se disculpo, pero ¿Interrumpirme de qué?

- Asagi Dunkelheit… Buenas noches, no me interrumpe, muy por el contrario me salva de una locura…

Bese el dorso de su mano y entregándole una rosa, pequeño regalo mío, parecía demasiada asustada con mi presencia, ¿Qué hice ahora?, vaya creo que conocía o al menos sabía lo que yo era.

- No tenga miedo de un simple humano como yo… Témale a los muertos… solo a ellos.

Sonreí con mucha gracia.

por **Nara Della Rovere** Dom Jun 05, 2011 2:37 pm

Aquel hombre se presento ante ella y Nara guardo silencio alo sentir sus suaves pero helados labios sobre la piel de su mano. Tomo la rosa he hizo una pequeña reverencia - Es un placer conocerlo señor Dunkelheit- Dijo con voz suave -Mi nombre es Nara Della Rovere-

Una sonrisa apareció en su rostro al escuchar sus palabras. Las palabras de un licántropo rondaron su cabeza al escuchar "Témale a los muertos… solo a ellos" Jamás volvería a ser engañada por uno de esos seres -Señor...- Dijo con voz tímida -Yo ya no podría temerle a los muertos- Su voz sonó con picardía.

Aquella pena que la había traído a ese lugar, se había ido por la alarma de tener a uno de esos seres frente a ella, no era la primera vez que los veía y si ese hombre la atacaba no seria la primera vez, sus ojos se movieron por el lugar, viendo sus posibilidades de huir.

Aquel hombre no parecía ser como los vampiros que había cruzado con anterioridad, pero sabía muy bien que ya no podía dejarse llevar por las apariencias. Sabia muy por experiencia propia que tampoco debía hacer notar su saber, no queria que aquel hombre la quisiese callar para siempre.

por **Asagi Dunkelheit** Jue Jun 16, 2011 12:48 am

Le mire con cierto interés podía oler el miedo, incluso unas imágenes dentro de su mente vinieron en recuerdos borrosos a la mía, parecía no ser una humana como cualquier otro, bueno esto se pondría demasiado interesante, debo de admitirlo, lo que podía ver atreves de ella me podía servir de mucho, pero quizá lo usaría para más adelante.

- Una persona valiente, admiro eso Madame, un nombre hermoso, realmente lo es, espero que puédanos charlar, si gusta, al fin y al cabo aquí estamos en medio de este cementerio, encontrándonos por un sentimiento banal.

Sonreí de manara amable y camine a su lado, con el fin de invitarle a caminar un poco, a charlar, a conocerla, quería ver más de sus recuerdo, sabía que estaba alerta pero conmigo no debería, no hacía nada si no se me provocaba la pregunta era ¿Cuándo podían provocarme?

por **Nara Della Rovere** Jue Jun 16, 2011 8:18 pm

Nara le dio una suave sonrisa al escuchar sobre su nombre y su valentía, pero para ella no era valentía, sino simple instinto de supervivencia. Pero de golpe las palabras de aquel hombre "espero que puédanos charlar, si gusta, al fin y al cabo aquí estamos en medio de este cementerio, encontrándonos por un sentimiento banal"

Lo miro con cierta duda ¿Acaso era otro truco de aquellos seres? Podía elegir quedarse y arriesgar su vida, pero aprender más de aquello seres que por alguna extraña razón llamaban tanto su atención o alejarse lo más que podía en ese momento.

Su curiosidad siempre la llevaba a los límites, por lo menos sabia un punto débil de los vampiros. A su mente llego la imagen de aquel licántropo clavando una estaca en el pecho de un vampiro frente a ella y aquella lluvia de cenizas que la había dejado paralizada por unos segundados.

Volvió en si y lo miro con una suave sonrisa -Pues algo nos ha traído a este lugar y nos ha hecho encontrar así que supongo que podíamos conversar un poco- Comenzó a caminar lentamente al lado de aquel hombre que la hacia sentir insegura -Señor Dunkelheit no voy a preguntar ¿Que hace así? Pero me pregunto ¿Porque dice que es un sentimiento banal?- Claro que para ello y lo que la vida le había demostrado, aquellos seres no tenían muchos sentimientos, por lo menos con cualquiera que se hubiera cruzado.

por **Asagi Dunkelheit** Vie Jun 17, 2011 10:08 pm

El leer los pensamientos, la mente de alguien más, ver más allá, era hermoso, podía ver sus recuerdos, claro, no porque quisiera, de hacerlo las imágenes borrosas, se hubieran esclarecido, pero en esta ocasión, lo único que olía era miedo y pasado en ella, claro en una persona o en un ser como lo que soy no vale la pena confiar, otra banalidad, llevaba milenios muerto, ¿Qué podía esperar de una humana?, realmente mucho, por eso me gustaba conocer más y más gente.

- Bueno es que la muerte para alguien como yo, es una banalidad, y solo venia a “burlarme de ella”

Le mire leyendo y sintiendo cada vez más fuertes sus emociones sobre mí, el miedo es el enemigo de todo, incluso las veces que he tenido miedo han sido siendo humano, pero de eso hace muchísimo tiempo.

- Vamos, por favor, sé que es difícil, lo puedo ver, no, sentir, pero confié que no hare nada, no en contra de usted, una persona “indefensa” de algún modo ante un ser tan despreciable como yo… Sabe por años, pensé que ese miedo, ese temor, llegaba a herirme de cierto modo, porque yo no tengo la culpa de ser lo que soy, pero ahora he aprendido a vivir con el rechazo humano.

¿Cuántas veces fui rechazado y tratado mal cuando obre bien?, lo recuerdo aun, demasiadas, tantas veces que mi lado humano salía a flote ese que tenía miedo de ser herido, pero ahora ya no existe.

por **Nara Della Rovere** Sáb Jun 18, 2011 6:05 pm

Sus palabras eran claras, el ya había que Nara estaba en conocimiento de que tipo de ser podía llegar a ser. En voz sonaba cierta frialdad y dureza -Yo no diría que es banal- Dijo casi como si fuera para si misma -Si bien la muerte para algunos puedes ser algo sin sentido, el dolor de la muerte definitiva no lo es- Entonces lo miro a los ojos, tratando de buscar un sentimiento.

Luego entonces escucho sus palabras y cada sentimiento que se encontraba dentro de ella se convirtió en vergüenza ¿Quien era ella para juzgar? Solo Dios tenía ese poder. Agachó su vista y sintió la tristeza por lo que había hecho- Discúlpeme- Dijo en vos baja -Yo no soy nadie para juzgarlo-

Levanto su vista y dijo -Permítame remendar mi error- Tal vez era una locura, pero por alguna razón sentía que las palabras de aquel ser eran tan sinceras. Sonrió dulcemente y dijo -No es que no quiera confiar en usted, pero en el pasado ya me encontrado a otros como usted y solo han tratado de asesinarme- Tal vez había sido muy sincera pero queria explicar el por que de su miedo.

por **Asagi Dunkelheit** Sáb Jun 18, 2011 8:33 pm

- Y yo le diría que en el pasado me he encontrado a muchos como usted que también han ido detrás de mí, o juzgado, recuerdo muy bien, hace unos milenios, yo “trabajaba” en una misión, rescatar a un grupo de niños que unos Licántropos habían capturado. Muchos no confiaron en mí, pero aun así cumplí con la misión, trayendo a los niños sanos y salvos, sin tocarlos, sin marcarlos y en vez de recibir un “Gracias” me juzgaron y me echaron de aquel poblado, me trataron tan cruelmente, así que, no considero que sea un error, solo dejemos esto, solo conozcámonos esta noche.

Sonreí con sinceridad, realmente lo hacía, tan cortésmente, caminado entre todo eso, que la muerte hace construir al hombre, pero finalmente, llegamos a aquella calle, viendo a la gente de parís, mirándole y escuchándole, realmente tenía miedo, el miedo para el cazador es lo más sabroso, lo mas delicioso, pero ¿podría contenerme?, supongamos que ya lo estoy haciendo, el hombre tiene su propio paraíso prohibido.

- Dios, Dios, otra banalidad peor que la muerte, pero respeto si cree en aquel “ser”, aunque para mi es cruel y falso irónico ya que no existe pero hablo de lo que no existe, entonces le doy existencia con mis palabras.

Sono idiota eso, pero me encantaba contradecir en gran parte lo que pensaban los demás con respeto claro estaba.

por **Nara Della Rovere** Dom Jun 19, 2011 5:25 pm

Escucho la pequeña historia de ese hombre y nuevamente se sintió avergonzada por saber que el se había sentido así, pero aun así no podía creer que los licántropos fueran de esa manera, después de todo ella siempre había conocido a los licántropos como sus salvadores.

Entonces escucho sus palabras y lo miro con desconfianza ¿Como sabia el que ella pensaba en Dios? No dijo nada, supuso que seria otro tipo de poder. Lentamente comenzaba a acostumbrarse a su presencia. Nara sonrió casi con ironía y un poco de satisfacción -Yo creo en Dios por que he comprobado su existencia en cada cosa-

Lo miro con tranquilidad, no esperaba que entendiera lo que decía, pero la única manera de demostrárselo, seria hacérselo vivir en persona -Yo no hablo de lo que dice la Biblia, hablo de su existencia cotidiana- Entonces sonrió con alegría, esperando a ver que decía aquel hombre.

por **Asagi Dunkelheit** Sáb Jul 09, 2011 4:33 pm

- Lo siento ahora el grosero he sido yo, no quiero deshacer sus creencia, está bien, sé que no necesariamente la biblia debe ser el recurso de todo aquello, uno debe creer cuando le llegue el momento, pero yo que lo sé no lo hago, creo que sigo siendo un ignorante de la fe.

Esta vez si me había pasado pero no soportaba aquello hablando de Dios, como si fuera lo único en este mundo y claro que no, hasta muchas veces se me decía que no existía o que lo hizo pero que muerto esta y sus creyentes en el olvido, bueno cada quien pesaba lo que quería más me guiaba por el “asunto comercial” para explotarse unos a otros, eso seguirá siendo por años.

- ¿Dónde quiere que le lleve? Hay demasiados lugares y esta noche quiero que usted decida.

Por lo menos lo caballeroso nadie me lo quitaba, cuando volví mi rostro a ella, con una expresión más serena, pero con esos ojos de cazador, hechizantes que poseía.

por **Nara Della Rovere** Mar Jul 12, 2011 11:50 am

Sonrió al escuchar sus palabras -No ha sido grosero- Dijo con tranquilidad -Me gusta saber sobre las creencias de las demás personas- Le era un tanto difícil olvidar en el hecho que se encontraba frente a un vampiro, que podía asesinarla en cualquier momento.

Aquel hombre pregunto donde queria ir y Nara lo miro con timidez -Pues que le parece caminar un poco- Después de todo no se veía con aquel hombre en algún lugar mas privado, aun no se sentía completamente segura a su lado, después de todo, cualquier vampiro que ella había conocido solo habían querido asesinarla.

Siguieron caminado y dijo -Disculpe mi falta de etiqueta, pero creo que he sido mal educada al desconfiar de usted, señor Dunkelheit- Lo miro y siguió hablando -Pero quiero que entienda que cada vez que me he cruzado con alguien de su raza, ha querido asesinarme- Entonces una pequeña sonrisa apareció en sus labios. Recordó la última vez cuando había estado en el teatro y había logrado salir ilesa de ese nido.

Tal vez había sido muy directa, pero queria que aquel hombre entendiera que no fue específicamente por el su miedo. No le gustaba saber que ella podría haber provocado algún mal sentimiento en el, sea de la raza que sea.

por **Asagi Dunkelheit** Vie Jul 15, 2011 5:45 pm

- Lo comprendo, muchas veces se pierde el control, cuando somos seres así y es que nos carcome, nos domina aquel lado oscuro, aquella bestia de sangre, que nos transforma en lo más aberrante y no le culpo….

Si contara a mi victimas lo único que diría es que varían, desde niños hasta adultos, claro también he de tener mis preferencias, lo cierto es que ese lado humano, que teme a todo no se le quita a nadie, supongo que es lo malo de vivir como un ser hibrido, pelear constantemente con los miedos.

- Por ahora tratemos de entablar, de llevar las cosas con tranquilidad, no de buenas a primeras se va a dejar fiar, eso lo entiendo, lo que pasa es que soy un hombre que no tiene cuidado de nada, soy un libertino al que le gustan los riesgos, por eso o suelo mostrarme confiable o intranquilo dependiendo de las situaciones.

Le dije en un tono pacifico, como siendo sincero de todo, esperaba que ese poquito llegara a mantener las cosas en orden, de especificar que no pasaría nada, que de eso yo me aseguraba.

- Vamos no se disculpe, ‘¿Qué le parece ir a la plaza principal de París?

Propuse en un tono más caballeroso.

por **Nara Della Rovere** Vie Jul 22, 2011 12:04 pm

Nara lo miro con tranquilidad al escuchar lo que decía, después de todo no queria volver a juzgarlo sin saber exactamente nada de el -¿Libertino?- después de todo Nara también era una mujer a la que le gustaba seguir sus instintos y no por eso se consideraba una libertina. Lo miro con una sonrisa y dijo -Disculpe mi atrevimiento, señor Dunkelheit, pero ¿A que le llama usted libertinaje?-

El propuso un lugar para ir y Nara sonrió, después de todo en aquella plaza siempre había gente y podía sentirse mas segura que en aquel cementerio -Me parece perfecto- Dijo con tranquilidad

Aquel ser comenzaba a parecerle interesante y después de ton un hombre con aquella experiencia, siempre podía ser extremadamente interesante. Así que no se permitiría perder una buena charla junto a la compañía de aquel vástago.

Spoiler:

por **Asagi Dunkelheit** Vie Jul 22, 2011 7:10 pm

Estaba caminando a su lado, admirando no solo la belleza angelical de un paisaje de verano, si no a mi compañera, con la cual entablaría seguramente tantos diálogos llenos de experiencia, preguntas y respuestas de ambos, lo único que podía prometerle era la confianza mutua, hambre no tenia, libertad mucha pero no disponía del todo ahora. – La libertad se torna de diferentes maneras, beber, tomar, ir a comprar un pedazo de placer en el burdel, derrochar riqueza como amor y fanfarronear – pensé un momento antes de continuar – soy de las personas que con tal de conocer a alguien me involucro más de lo que debería a eso le llamo libertad, también me gusta andar de aquí por allá “robando” sentimientos, me doy esa clase de juegos, siento que el mundo es mío y no yo de él – las calles se iban iluminando con más fuerza.

Yo era igual de nocturno que la embriagante oscuridad y no iba a permitir que eso se terminara, la oscuridad ataca el mundo y lo domina, domina la luz cuando esta no tiene fuerzas, así somos nosotros. – casi hemos llegado, espero que veamos algo verdaderamente bueno. – musite al doblar la esquina de aquella calle y encontrarnos con más gente de lo habitual.

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