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AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
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A toda marcha [Privado]
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A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 9:23 pm
Recuerdo del primer mensaje :
Angelo Pilato bostezaba mientras dejaba su maletín en el asiento trasero de su Mercedes. El encendió el carro y salio del estacionamiento. Quizás el debería ir a su casa y beber suficiente vino para desmayarse en el sofá.
Tres semanas antes, el había empujado a Carl Blakely, el fanático religioso que se autoproclamaba defensor de la heterosexualidad, en los escalones de la corte. Eso era lo que le molestaba, o el hecho de que también fue la ultima vez que vio a cierto Neandertal detective.
El empezó a oír ruidos, sentía que alguien lo seguía y recibía jodidas llamadas de teléfono en la mitad de la noche. ¿Quien? Nada tenia que ver con el detective. El trato de alejar sus pensamientos de Talboth Remy.
El detective de dos metros no era su tipo. Claro que Talboth era sexy como una jodida, con el negro y largo cabello hasta los hombros y el cuerpo de un dios cubierto de tatuajes, pero sus malditos pies tendrían que ser de al menos del trece. El pensar en esas grandes y negras botas de motociclista lo hacia estremecer. No, definitivamente no era su tipo.
Angelo atravesó la autopista en la hora difícil del trafico y llego a una tranquila calle. El saludo a los niños del vecindario mientras sacaba su maletín y se dirigía al buzón.
El noto que las flores alrededor del buzón necesitaban agua y refunfuño, El amaba sus flores, el pensar en ir a traer el agua para regarlas, lo dejo incluso mas cansado. Abrió la tapa del buzón, Angelo se sorprendió de ver que estaba lleno.
Confundido el saco el montón de correo. Se quedo sin respiración cuando vio lo que tenia en sus manos. Panfletos. Ahí tendría que haber por lo menos cincuenta de ellos, todos proclamando la maldición de la homosexualidad.
Angelo se sorprendió al ver las viles cosas producto del ministerio de Blakely. Joder.
Mientras entraba en su casa, recordó algo. Si uno de los lacayos de Blakely había dejado esos panfletos en su buzón, entonces ellos sabían quien era y donde vivía. El iba a tirar la vil literatura en el bote de basura pero se detuvo dejándolas en el mostrador.
El tomo el teléfono y llamo al 9-1-1. A pesar de lo que Trey le había aconsejado unos días antes, Angelo se rehusó en llamar a Talboth.
Después de explicar la situación a la persona que contestó, Angelo colgó y se quito su corbata. El entro a su recamara y cuidadosamente colgó su traje y corbata en el closet antes de dejar su camisa de vestir en la bolsa para la tintorería.
La señorita del teléfono le dijo que enviarían una unidad, pero sabía que como no era una emergencia. Eso podría tardar. El tendría tiempo para ducharse y ponerse sus normales jeans de diseñador y una camiseta.
Sus amigos disfrutaban burlándose de su guardarropa, pero a Angelo no le importaba el había crecido vistiendo ropa usada comprada por centavos en tiendas de segunda mano en su duro vecindario de Oakland. Ahora el tenía un buen trabajo, Angelo se podía permitir ser indulgente con las cosas que el nunca había tenido como hijo de un solo padre.
Abriendo su closet una vez más, Angelo vio su estante de zapatos, era bien sabido que el tenia afición por los tenis, no solamente en hombres calientes, también los compraba para él. El selecciono un par de casi nuevos Nike y se los puso anudándolos fuerte.
El entro en la cocina y selecciono una botella de Cabernet Sauvignon del estante de vinos. Después de descorchar la costosa botella, el sirvió un poco en una copa de cristal, la decanto y la dejo respirar mientras preparaba una ensalada.
A la mitad del corte de un tomate, el timbre de la puerta sonó. Angelo dejo el cuchillo y se seco las manos en una toalla antes de dirigirse a la sala y al pequeño vestíbulo.
El abrió la puerta esperando ver a un oficial uniformado y se encontró en su lugar al Detective Remy. Parecía que cada vez que se daba la vuelta últimamente, Talboth estaba en las escaleras de su casa. El tipo parecía ser su constante protector y eso estaba empezando a llevar a Angelo al borde. “¿Que estas haciendo aquí, Juan*?”
Tres semanas antes, el había empujado a Carl Blakely, el fanático religioso que se autoproclamaba defensor de la heterosexualidad, en los escalones de la corte. Eso era lo que le molestaba, o el hecho de que también fue la ultima vez que vio a cierto Neandertal detective.
El empezó a oír ruidos, sentía que alguien lo seguía y recibía jodidas llamadas de teléfono en la mitad de la noche. ¿Quien? Nada tenia que ver con el detective. El trato de alejar sus pensamientos de Talboth Remy.
El detective de dos metros no era su tipo. Claro que Talboth era sexy como una jodida, con el negro y largo cabello hasta los hombros y el cuerpo de un dios cubierto de tatuajes, pero sus malditos pies tendrían que ser de al menos del trece. El pensar en esas grandes y negras botas de motociclista lo hacia estremecer. No, definitivamente no era su tipo.
Angelo atravesó la autopista en la hora difícil del trafico y llego a una tranquila calle. El saludo a los niños del vecindario mientras sacaba su maletín y se dirigía al buzón.
El noto que las flores alrededor del buzón necesitaban agua y refunfuño, El amaba sus flores, el pensar en ir a traer el agua para regarlas, lo dejo incluso mas cansado. Abrió la tapa del buzón, Angelo se sorprendió de ver que estaba lleno.
Confundido el saco el montón de correo. Se quedo sin respiración cuando vio lo que tenia en sus manos. Panfletos. Ahí tendría que haber por lo menos cincuenta de ellos, todos proclamando la maldición de la homosexualidad.
Angelo se sorprendió al ver las viles cosas producto del ministerio de Blakely. Joder.
Mientras entraba en su casa, recordó algo. Si uno de los lacayos de Blakely había dejado esos panfletos en su buzón, entonces ellos sabían quien era y donde vivía. El iba a tirar la vil literatura en el bote de basura pero se detuvo dejándolas en el mostrador.
El tomo el teléfono y llamo al 9-1-1. A pesar de lo que Trey le había aconsejado unos días antes, Angelo se rehusó en llamar a Talboth.
Después de explicar la situación a la persona que contestó, Angelo colgó y se quito su corbata. El entro a su recamara y cuidadosamente colgó su traje y corbata en el closet antes de dejar su camisa de vestir en la bolsa para la tintorería.
La señorita del teléfono le dijo que enviarían una unidad, pero sabía que como no era una emergencia. Eso podría tardar. El tendría tiempo para ducharse y ponerse sus normales jeans de diseñador y una camiseta.
Sus amigos disfrutaban burlándose de su guardarropa, pero a Angelo no le importaba el había crecido vistiendo ropa usada comprada por centavos en tiendas de segunda mano en su duro vecindario de Oakland. Ahora el tenía un buen trabajo, Angelo se podía permitir ser indulgente con las cosas que el nunca había tenido como hijo de un solo padre.
Abriendo su closet una vez más, Angelo vio su estante de zapatos, era bien sabido que el tenia afición por los tenis, no solamente en hombres calientes, también los compraba para él. El selecciono un par de casi nuevos Nike y se los puso anudándolos fuerte.
El entro en la cocina y selecciono una botella de Cabernet Sauvignon del estante de vinos. Después de descorchar la costosa botella, el sirvió un poco en una copa de cristal, la decanto y la dejo respirar mientras preparaba una ensalada.
A la mitad del corte de un tomate, el timbre de la puerta sonó. Angelo dejo el cuchillo y se seco las manos en una toalla antes de dirigirse a la sala y al pequeño vestíbulo.
El abrió la puerta esperando ver a un oficial uniformado y se encontró en su lugar al Detective Remy. Parecía que cada vez que se daba la vuelta últimamente, Talboth estaba en las escaleras de su casa. El tipo parecía ser su constante protector y eso estaba empezando a llevar a Angelo al borde. “¿Que estas haciendo aquí, Juan*?”
- Spoiler:
- *Hace referencia a un nombre comun, por no decir fulano
Angelo Pilato- Humano Clase Alta
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Re: A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:07 pm
Una vez mas el pensamiento de dejar la ciudad estaba en primer lugar en su mente. El había pensado mudarse para encontrar trabajo de todas formas. La seguridad de Talboth ahora era su asunto, Angelo sabía que el no podía quedarse fuera mas tiempo.
Sentado en una de las sillas de la terraza, el saco su Blackberry y revisó una lista de contactos. El tenía un colega con el que había trabajado durante años que se había mudado a los Ángeles a una de las principales estaciones de radio del país. Ellos habían mantenido el contacto durante un par de años. A pesar de que el odiaba pedirle favores a los amigos, el no sabía que mas hacer.
El marco el número y espero a que Steve contestara.
“Oficina de Steve Parsons, una mujer contesto.
“Hi, soy Angelo Pilato. ¿Me preguntaba si podría hablar con Steve? Somos viejos amigos de sus días en San Francisco.”
“Un momento, Señor Pilato. Veré si el señor Parsons esta disponible.”
En momentos la voz de su viejo amigo se oyó al teléfono. “¡Angelo! ¿Como diablos estas?”
Angelo pensó en todas las cosas malas en su vida, pero también pensó en su recién relación con Talboth. “Tu sabes bien y mal.”
Angelo le dijo a Steve acerca de su disputa con Carl Blakely en los escalones de la corte y el subsiguiente acosamiento. El odiaba sabotear su oportunidad de trabajo, pero el conocía a Steve y lo descubriría de alguna manera.
“…de cualquier manera, ¿esperaba que tuvieras algo en ventas disponibles por allá?” Angelo término y sostuvo la respiración.
“Puede ser. Hay un tipo aquí que esta flojeando últimamente. Ya le di numerosas advertencias, pero el todavía no agarra el ritmo como a mi me gusta. No estoy seguro de si se quede o no, el va a trabajar hasta fin de mes que es cuando se obtienen las ventas finales, pero si el se va, tu serias el primer hombre al que llamaría.”
“Yo apreciaría eso, Steve.” El fin de mes esta once días. El no podía esperar tanto para irse a la costa. El mantener seguros a sus amigos y a Talboth, era primordial.
El le agradeció a su amigo y colgó. Angelo entro en la casa y encendió su laptop, y entro en la pagina de los departamentos de renta en el periódico de los Ángeles. A pesar de que le agradaba tener su propia casa, el no quería estar tratando con el mantenimiento si estaba planeando hacer el viaje al norte varias veces al mes. El entro en diferentes sitios buscando mas información encontró un par de condominios que parecían agradables.
Justo cuando la iba a apagarla, Angelo se sorprendió cuando un mensaje le llego. El nombre y el mensaje le hicieron quedarse sin aliento.
CB: ¿Estas ahí?
Sentado en una de las sillas de la terraza, el saco su Blackberry y revisó una lista de contactos. El tenía un colega con el que había trabajado durante años que se había mudado a los Ángeles a una de las principales estaciones de radio del país. Ellos habían mantenido el contacto durante un par de años. A pesar de que el odiaba pedirle favores a los amigos, el no sabía que mas hacer.
El marco el número y espero a que Steve contestara.
“Oficina de Steve Parsons, una mujer contesto.
“Hi, soy Angelo Pilato. ¿Me preguntaba si podría hablar con Steve? Somos viejos amigos de sus días en San Francisco.”
“Un momento, Señor Pilato. Veré si el señor Parsons esta disponible.”
En momentos la voz de su viejo amigo se oyó al teléfono. “¡Angelo! ¿Como diablos estas?”
Angelo pensó en todas las cosas malas en su vida, pero también pensó en su recién relación con Talboth. “Tu sabes bien y mal.”
Angelo le dijo a Steve acerca de su disputa con Carl Blakely en los escalones de la corte y el subsiguiente acosamiento. El odiaba sabotear su oportunidad de trabajo, pero el conocía a Steve y lo descubriría de alguna manera.
“…de cualquier manera, ¿esperaba que tuvieras algo en ventas disponibles por allá?” Angelo término y sostuvo la respiración.
“Puede ser. Hay un tipo aquí que esta flojeando últimamente. Ya le di numerosas advertencias, pero el todavía no agarra el ritmo como a mi me gusta. No estoy seguro de si se quede o no, el va a trabajar hasta fin de mes que es cuando se obtienen las ventas finales, pero si el se va, tu serias el primer hombre al que llamaría.”
“Yo apreciaría eso, Steve.” El fin de mes esta once días. El no podía esperar tanto para irse a la costa. El mantener seguros a sus amigos y a Talboth, era primordial.
El le agradeció a su amigo y colgó. Angelo entro en la casa y encendió su laptop, y entro en la pagina de los departamentos de renta en el periódico de los Ángeles. A pesar de que le agradaba tener su propia casa, el no quería estar tratando con el mantenimiento si estaba planeando hacer el viaje al norte varias veces al mes. El entro en diferentes sitios buscando mas información encontró un par de condominios que parecían agradables.
Justo cuando la iba a apagarla, Angelo se sorprendió cuando un mensaje le llego. El nombre y el mensaje le hicieron quedarse sin aliento.
CB: ¿Estas ahí?
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:08 pm
Angelo trago el nudo en su garganta. Su primer instinto fue cerrar la laptop y llamar a Talbot. Con su mano en la tapa de la pantalla, el se detuvo. Si el mensaje era realmente de Carl Blakely, Angelo sabía que si el tenia una oportunidad de tener una conversación real con ese hombre. Quizás el seria afortunado y obtendría algo que pudiera servirle a Talbot en su investigación.
AP: Estoy aquí.
CB: ¿Donde es aquí?
AP: Donde tú no deberías saber. ¿Porque estas haciendo esto?
CB: Dios quiere que tú sepas que tu estilo de vida es una abominación. Yo simplemente soy el mensajero.
Angelo traro de mantener abajo su ira. Piensa. ¿Que podría necesitar Talbot?
AP: ¿Dios te dijo que trataras de matarme con un carro?
CB: Dios me dice muchas cosas.
Mierda. Carl Blakely es bueno en el juego.
AP: ¿Cuando dejaras de acosarme?
CB: Yo incluso no te he visto desde el día que me humillaste enfrente de los escalones de mi congregación.
AP: Eso no fue nada y tú lo sabes. Se que tienes personas vigilándome. Necesitas entender que el Detective Remy esta detrás de ti. El no te va a dejar que te salgas de esto.
CB: Estoy contando con eso.
Blakely se desconecto y Angelo se quedo viviendo la pantalla vacía.
“¿Que diablos quiso decir?” él se preguntó. El tomo una foto de la pantalla y se la envió en email a Talbot. Levanto el teléfono, y llamo al detective para avisarle lo que le enviaba.
“Hey, bebé,” Talbot contestó.
“He tenido una agradable conversación con Carl Blakely,” Angelo le informó a Talbot.
“¡Que! ¿El tuvo el valor de contactarte?”
“Si. Yo he tratado de que admitiera algo, pero me preocupa lo que el estuviera tramando. De cualquier manera le tome una fotografía a la pantalla y te la envié por correo. Pensé que quizás tu pudieras hacer algo con eso.”
Talbot estuvo en silencio un momentos. “No juegues con Blakely. Solo déjame hacer mi trabajo.”
Angelo se quito sus lentes y los dejo en la mesa de café. “Discúlpame por tratar de ayudar a que atrapes a ese bastardo. Yo vi la oportunidad y la tome.”
AP: Estoy aquí.
CB: ¿Donde es aquí?
AP: Donde tú no deberías saber. ¿Porque estas haciendo esto?
CB: Dios quiere que tú sepas que tu estilo de vida es una abominación. Yo simplemente soy el mensajero.
Angelo traro de mantener abajo su ira. Piensa. ¿Que podría necesitar Talbot?
AP: ¿Dios te dijo que trataras de matarme con un carro?
CB: Dios me dice muchas cosas.
Mierda. Carl Blakely es bueno en el juego.
AP: ¿Cuando dejaras de acosarme?
CB: Yo incluso no te he visto desde el día que me humillaste enfrente de los escalones de mi congregación.
AP: Eso no fue nada y tú lo sabes. Se que tienes personas vigilándome. Necesitas entender que el Detective Remy esta detrás de ti. El no te va a dejar que te salgas de esto.
CB: Estoy contando con eso.
Blakely se desconecto y Angelo se quedo viviendo la pantalla vacía.
“¿Que diablos quiso decir?” él se preguntó. El tomo una foto de la pantalla y se la envió en email a Talbot. Levanto el teléfono, y llamo al detective para avisarle lo que le enviaba.
“Hey, bebé,” Talbot contestó.
“He tenido una agradable conversación con Carl Blakely,” Angelo le informó a Talbot.
“¡Que! ¿El tuvo el valor de contactarte?”
“Si. Yo he tratado de que admitiera algo, pero me preocupa lo que el estuviera tramando. De cualquier manera le tome una fotografía a la pantalla y te la envié por correo. Pensé que quizás tu pudieras hacer algo con eso.”
Talbot estuvo en silencio un momentos. “No juegues con Blakely. Solo déjame hacer mi trabajo.”
Angelo se quito sus lentes y los dejo en la mesa de café. “Discúlpame por tratar de ayudar a que atrapes a ese bastardo. Yo vi la oportunidad y la tome.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:08 pm
Talboth suspiro. “No se lo que el trama, pero el tiene sus propios motivos para buscar la conversación contigo. Yo estoy siguiendo una pista no tendré oportunidad de revisar el correo hasta más tarde. Mientras tanto, será mejor que mantengas apagada la computadora.”
Angelo apretó los dientes. El sabía que Talboth solo estaba haciendo su trabajo, pero Angelo odiaba que le dijeran que hacer. “Yo todavía tengo algunas cosas que revisar pero una vez que termine la apagare.”
“Angelo,” Talboth gruño. En tono de advertencia.
“No mas Angelo. Soy un hombre adulto. Si Blakely intenta conectarse de nuevo, yo simplemente lo sacare de la pantalla.”
“Te llamo después,” Talboth dijo y colgó.
“¡Joder!” Angelo aventó el teléfono. A pesar de lo que le dijo a Talboth, él apago la laptop y se acostó en el sofá.
El debió de quedarse dormido porque lo siguiente que supo fue que lo despertaba el ruido de la puerta del frente al abrirse. “¿Quien anda ahí?”
“Soy yo,” Bobby grito. Su amigo rodeaba la esquina. “Mi viaje se canceló, así que decidí regresar a casa y hacerte compañía.”
“¿Talboth te llamó?” Angelo sabía que a Bobby no le agradaba regresar a casa a la mitad de la tarde.
“No. ¿Porque?”
Angelo movió la mano. “Nada.”
“Pensé que podríamos hacer algo en el carbón. ¿Tu y tu nuevo novio se quedaran a cenar?”
Angelo entrecerró los ojos. “Déjame adivinar. ¿Trey esta desparramando la noticia como un loco pregonero?”
Bobby se rio y se unió a Angelo en el sofá. “Quizás.” Bobby alcanzo el hombro de Angelo y lo apretó. “Estoy feliz por ti. Remy parece un tipo agradable.”
Angelo casi se traga su lengua. “No dejes que te oiga decir eso. El esta orgulloso de inspirar miedo.”
Angelo se acomodo en el sofá. El nunca había hablado con sus amigos de sus problemas, pero el realmente necesitaba hablar con alguien. “¿Que harías si tuvieras a alguien como Blakely detrás de ti?”
Bobby se encogió de hombros. “Probablemente lo mismo que has hecho. Dejaría que la policía se encargara de eso.”
Angelo asintió. “Que si tu sabes que alguien que quieres esta en real peligro por tu causa?”
Angelo apretó los dientes. El sabía que Talboth solo estaba haciendo su trabajo, pero Angelo odiaba que le dijeran que hacer. “Yo todavía tengo algunas cosas que revisar pero una vez que termine la apagare.”
“Angelo,” Talboth gruño. En tono de advertencia.
“No mas Angelo. Soy un hombre adulto. Si Blakely intenta conectarse de nuevo, yo simplemente lo sacare de la pantalla.”
“Te llamo después,” Talboth dijo y colgó.
“¡Joder!” Angelo aventó el teléfono. A pesar de lo que le dijo a Talboth, él apago la laptop y se acostó en el sofá.
El debió de quedarse dormido porque lo siguiente que supo fue que lo despertaba el ruido de la puerta del frente al abrirse. “¿Quien anda ahí?”
“Soy yo,” Bobby grito. Su amigo rodeaba la esquina. “Mi viaje se canceló, así que decidí regresar a casa y hacerte compañía.”
“¿Talboth te llamó?” Angelo sabía que a Bobby no le agradaba regresar a casa a la mitad de la tarde.
“No. ¿Porque?”
Angelo movió la mano. “Nada.”
“Pensé que podríamos hacer algo en el carbón. ¿Tu y tu nuevo novio se quedaran a cenar?”
Angelo entrecerró los ojos. “Déjame adivinar. ¿Trey esta desparramando la noticia como un loco pregonero?”
Bobby se rio y se unió a Angelo en el sofá. “Quizás.” Bobby alcanzo el hombro de Angelo y lo apretó. “Estoy feliz por ti. Remy parece un tipo agradable.”
Angelo casi se traga su lengua. “No dejes que te oiga decir eso. El esta orgulloso de inspirar miedo.”
Angelo se acomodo en el sofá. El nunca había hablado con sus amigos de sus problemas, pero el realmente necesitaba hablar con alguien. “¿Que harías si tuvieras a alguien como Blakely detrás de ti?”
Bobby se encogió de hombros. “Probablemente lo mismo que has hecho. Dejaría que la policía se encargara de eso.”
Angelo asintió. “Que si tu sabes que alguien que quieres esta en real peligro por tu causa?”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:09 pm
“¿Que es esa mierda de peligro? Lo ultimo que oí es que Blakely es mas un dolor en el culo que otra cosa.”
Angelo abrió la laptop. La pagina con el mensaje de Blakely todavía al centro. “Aquí un pequeño chat que tuve con mi amigo Carl. Claro eso fue después de que uno de sus hombres tratara de atropellarme en el jardín frente a mi casa.”
Bobby gruño y giro la laptop de cara a él. Angelo podía ver la ira burbujear en su amigo. Bobby no se enojaba a menudo, pero cuando lo hacia el era de tener cuidado.
Bobby cerró la laptop de golpe y se puso de pie. El paseo por el cuarto varias veces antes de entrar en la cocina. Angelo iba a ir detrás de él, cuando Bobby regreso al cuarto. Con dos cervezas en la mano.
El le dio una Corona a Angelo antes de darle un trago a la suya. “¿Le dijiste a Remy acerca de esto?”
Angelo asintió. “Yo tome una fotografía de la pantalla y se la envié a él.”
“¿Que dijo?”
“Nada. El probablemente no lo ha leído. El estaba tras una pista cuando lo llame y le dije que se la enviaba. No te preocupes, el ya me gruño por haber tenido la conversación con Blakely en primer lugar.”
“Como debería.”
Angelo notó que Bobby no se sentaba. En lugar de ver a su amigo pasear alrededor del cuarto otra vez, Angelo se puso de pie y señalo hacia la terraza. “¿Quieres salir a ver el océano conmigo?”
Bobby finalmente asintió y se dirigieron a la terraza, Angelo fue detrás de él. Ellos se sentaron en los dos sillones y Angelo continuo bebiendo su cerveza. Después de unos momentos de tranquilidad de ver las olas ir y venir, Angelo se limpio la garganta. “No me contestaste mi pregunta.”
Bobby abrió los ojos y se giro hacia Angelo. “¿Que pregunta?”
“¿Que harías si la gente que quieres esta en peligro solo por estar contigo?”
“No se que esta pasando en esa estrafalaria cabeza tuya, pero detenlo. Nosotros vamos a salir de esto juntos.” Bobby se froto la cara con su mano. “Nosotros nos estamos haciendo más últimamente.”
A Angelo le agrado. El siempre supo que sus amigos lo amaban a pesar de los despectivos comentarios. Pero la convicción de Bobby le llego a lo profundo de su corazón. “¿Si nosotros somos un grupo de amigos que esta creciendo, ¿no es así?”
“Estas en lo cierto.” Bobby tomo otro trago de cerveza. “Ahora que tu te cases, tendremos tiempo para ir detrás de Marco y Kent.”
Angelo resoplo. “No me voy a casar con nadie.”
Angelo abrió la laptop. La pagina con el mensaje de Blakely todavía al centro. “Aquí un pequeño chat que tuve con mi amigo Carl. Claro eso fue después de que uno de sus hombres tratara de atropellarme en el jardín frente a mi casa.”
Bobby gruño y giro la laptop de cara a él. Angelo podía ver la ira burbujear en su amigo. Bobby no se enojaba a menudo, pero cuando lo hacia el era de tener cuidado.
Bobby cerró la laptop de golpe y se puso de pie. El paseo por el cuarto varias veces antes de entrar en la cocina. Angelo iba a ir detrás de él, cuando Bobby regreso al cuarto. Con dos cervezas en la mano.
El le dio una Corona a Angelo antes de darle un trago a la suya. “¿Le dijiste a Remy acerca de esto?”
Angelo asintió. “Yo tome una fotografía de la pantalla y se la envié a él.”
“¿Que dijo?”
“Nada. El probablemente no lo ha leído. El estaba tras una pista cuando lo llame y le dije que se la enviaba. No te preocupes, el ya me gruño por haber tenido la conversación con Blakely en primer lugar.”
“Como debería.”
Angelo notó que Bobby no se sentaba. En lugar de ver a su amigo pasear alrededor del cuarto otra vez, Angelo se puso de pie y señalo hacia la terraza. “¿Quieres salir a ver el océano conmigo?”
Bobby finalmente asintió y se dirigieron a la terraza, Angelo fue detrás de él. Ellos se sentaron en los dos sillones y Angelo continuo bebiendo su cerveza. Después de unos momentos de tranquilidad de ver las olas ir y venir, Angelo se limpio la garganta. “No me contestaste mi pregunta.”
Bobby abrió los ojos y se giro hacia Angelo. “¿Que pregunta?”
“¿Que harías si la gente que quieres esta en peligro solo por estar contigo?”
“No se que esta pasando en esa estrafalaria cabeza tuya, pero detenlo. Nosotros vamos a salir de esto juntos.” Bobby se froto la cara con su mano. “Nosotros nos estamos haciendo más últimamente.”
A Angelo le agrado. El siempre supo que sus amigos lo amaban a pesar de los despectivos comentarios. Pero la convicción de Bobby le llego a lo profundo de su corazón. “¿Si nosotros somos un grupo de amigos que esta creciendo, ¿no es así?”
“Estas en lo cierto.” Bobby tomo otro trago de cerveza. “Ahora que tu te cases, tendremos tiempo para ir detrás de Marco y Kent.”
Angelo resoplo. “No me voy a casar con nadie.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:09 pm
Bobby giro la cara hacia Angelo. “¿Pensé que te gustaba?”
“Me gusta mucho. Pero el no es mi tipo. Supongo que eso no durara.” Ahí, el lo dijo.
“Tienes razón en una cosa. Remy definitivamente no es el tipo con el que te he visto en el pasado. ¿Pero tu nunca te detuviste a preguntar porque esos novios no duraban?”
Solo cerca de un millón de veces. “Imagino que porque soy extraño.”
Bobby se inclino y le dio un puñetazo en el brazo a Angelo. “¡Ow!” Angelo gritó.
“Tu no eres extraño.” Bobby sonrió. “Esta bien, quizás tienes algunas excentricidades, pero eso te hace ser quien eres.”
“¿Si? Entonces ¿porque los chicos constantemente me hacen pasar momentos difíciles?” Angelo preguntó frotándose el brazo.
“Nosotros puntualizamos tus fallas. De otra manera te verías demasiado malditamente perfecto para estar con nosotros, Además, esa pequeña arruga en tu nariz cuando te enojas es linda como el infierno.”
Angelo se toco la nariz. “Yo no hago eso.”
Bobby se rio “Tu ciertamente lo haces. Pregúntale a Jules o a Remy.”
Angelo término su cerveza y se puso de pie. “¿Te molestaría si tomo otra?”
“No, pero solo si me traes otra,” Bobby contesto, pasándole su botella vacía a Angelo.
Angelo camino de regreso a la casa, sintiéndose mas ligero que en toda la tarde. Lo que su amigo dijo no le había hecho cambiar de parecer acerca de mudarse, pero al menos sabía que había gente que lo quería cuando regresara a casa los fines de semana.
* * * *
Para cuando Talboth regreso su disposición era menos que amistosa. Diablos, que nadie se le acerque a Talboth por nada. El pasó por el escritorio del sargento y gruño cuando se dirigía a su escritorio.
“¿Que encontraste?” Jake pregunto.
Talboth se dejo caer en la silla y dejo las llaves en el escritorio. De lo que oyó de sus informantes Rico estaba más involucrado de lo que temía. Por veinte dólares y un paquete de cigarros, Billy James le había ofrecido horrible información.
Talboth sentía su pecho como si lo hubieran aplastado como una lata. “Encontré un testigo que vio a Rico darle las llaves de la celda de Overton a un tipo con traje horas antes des asesinato.”
“¿Rico? ¿Tu sobrino?”
“Si.” Talboth se froto los ojos. “Hazme un favor, Jake, y sigue la pista de esta noticia cuando puedas”
“Me gusta mucho. Pero el no es mi tipo. Supongo que eso no durara.” Ahí, el lo dijo.
“Tienes razón en una cosa. Remy definitivamente no es el tipo con el que te he visto en el pasado. ¿Pero tu nunca te detuviste a preguntar porque esos novios no duraban?”
Solo cerca de un millón de veces. “Imagino que porque soy extraño.”
Bobby se inclino y le dio un puñetazo en el brazo a Angelo. “¡Ow!” Angelo gritó.
“Tu no eres extraño.” Bobby sonrió. “Esta bien, quizás tienes algunas excentricidades, pero eso te hace ser quien eres.”
“¿Si? Entonces ¿porque los chicos constantemente me hacen pasar momentos difíciles?” Angelo preguntó frotándose el brazo.
“Nosotros puntualizamos tus fallas. De otra manera te verías demasiado malditamente perfecto para estar con nosotros, Además, esa pequeña arruga en tu nariz cuando te enojas es linda como el infierno.”
Angelo se toco la nariz. “Yo no hago eso.”
Bobby se rio “Tu ciertamente lo haces. Pregúntale a Jules o a Remy.”
Angelo término su cerveza y se puso de pie. “¿Te molestaría si tomo otra?”
“No, pero solo si me traes otra,” Bobby contesto, pasándole su botella vacía a Angelo.
Angelo camino de regreso a la casa, sintiéndose mas ligero que en toda la tarde. Lo que su amigo dijo no le había hecho cambiar de parecer acerca de mudarse, pero al menos sabía que había gente que lo quería cuando regresara a casa los fines de semana.
* * * *
Para cuando Talboth regreso su disposición era menos que amistosa. Diablos, que nadie se le acerque a Talboth por nada. El pasó por el escritorio del sargento y gruño cuando se dirigía a su escritorio.
“¿Que encontraste?” Jake pregunto.
Talboth se dejo caer en la silla y dejo las llaves en el escritorio. De lo que oyó de sus informantes Rico estaba más involucrado de lo que temía. Por veinte dólares y un paquete de cigarros, Billy James le había ofrecido horrible información.
Talboth sentía su pecho como si lo hubieran aplastado como una lata. “Encontré un testigo que vio a Rico darle las llaves de la celda de Overton a un tipo con traje horas antes des asesinato.”
“¿Rico? ¿Tu sobrino?”
“Si.” Talboth se froto los ojos. “Hazme un favor, Jake, y sigue la pista de esta noticia cuando puedas”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:11 pm
Jake asintió. “Lo siento, compañero.”
Talbot se encogió de hombros, tratando de no hablar más sobre eso. El prendió la computadora, sabiendo lo que buscaba, el email de Angelo seria la cereza en el pastel de un día catastrófico.
El tamborileaba sus dedos en el escritorio, hasta que la maquina finalmente cobro vida. Talbot introdujo su password y acceso a su cuenta de correo. El leyó inmediatamente el mensaje de la conversación entre los dos hombres y suspiro.
“Jake, ven a ver esto y dime que piensas.”
Jake se puso de pie y se dirigió hacia él. El se inclino detrás de la silla de Talbot mientras leía sobre su hombro. “¿Quien es CB, o necesito preguntar?”
“No se. ¿Pero puede ser el infame Carl Blakely.”
“¿Y AP es Angelo?”
“Si.”
Mientras Jake leía el mensaje la fotografía en el fondo capto la atención de Talbot. Como Angelo había enviado una fotografía de su pantalla, eso también capturaba la imagen parcial de un condominio en renta en…Los Ángeles.
“Me tengo que ir,” Talbot dijo, empujando a Jake fuera de su camino. “Llámame si encuentras algo en el mensaje.”
Talbot tomo las llaves del escritorio y se dirigió a la puerta. “Ciérrala cuando termines?”
“¿Debería llamar ahora o esperar hasta que enciendas la motocicleta?” Jake preguntó.
“Bien, chico listo, supongo que mejor ahora.” Talbot sacó su teléfono de su bolsa y espero por el timbre.
“¿Que piensas?” Talbot pregunto, en camino al estacionamiento.
“Será mejor que cuides tu espalda. Y eso lo necesita ver el capitán.”
“Si, entiendo eso. ¿Tu piensas que es suficientemente incriminatorio para agarrar a Blakely?” Talbot había esperado toda la tarde que Blakely pudiera hacer algo que lo incriminara, y hablar con Angelo podría ser algo para usar contra él.
“No. Un buen abogado lo sacaría fácil de aquí. Esto incluso no llegaría a la oficina del fiscal.”
“Si, eso es lo que me imagine. ¿Encontraste algo sobre quien visita su oficina en el edificio?”
“No todavía. Yo nunca me di cuenta la cantidad de oficinas que están ocupando ese edificio, la mayoría abogados y agente de seguros, y un puñado de médicos.”
“¿Y claro ninguno de ellos quiere hablas acerca de quien llega a verlo?” Talbot adivino.
Talbot se encogió de hombros, tratando de no hablar más sobre eso. El prendió la computadora, sabiendo lo que buscaba, el email de Angelo seria la cereza en el pastel de un día catastrófico.
El tamborileaba sus dedos en el escritorio, hasta que la maquina finalmente cobro vida. Talbot introdujo su password y acceso a su cuenta de correo. El leyó inmediatamente el mensaje de la conversación entre los dos hombres y suspiro.
“Jake, ven a ver esto y dime que piensas.”
Jake se puso de pie y se dirigió hacia él. El se inclino detrás de la silla de Talbot mientras leía sobre su hombro. “¿Quien es CB, o necesito preguntar?”
“No se. ¿Pero puede ser el infame Carl Blakely.”
“¿Y AP es Angelo?”
“Si.”
Mientras Jake leía el mensaje la fotografía en el fondo capto la atención de Talbot. Como Angelo había enviado una fotografía de su pantalla, eso también capturaba la imagen parcial de un condominio en renta en…Los Ángeles.
“Me tengo que ir,” Talbot dijo, empujando a Jake fuera de su camino. “Llámame si encuentras algo en el mensaje.”
Talbot tomo las llaves del escritorio y se dirigió a la puerta. “Ciérrala cuando termines?”
“¿Debería llamar ahora o esperar hasta que enciendas la motocicleta?” Jake preguntó.
“Bien, chico listo, supongo que mejor ahora.” Talbot sacó su teléfono de su bolsa y espero por el timbre.
“¿Que piensas?” Talbot pregunto, en camino al estacionamiento.
“Será mejor que cuides tu espalda. Y eso lo necesita ver el capitán.”
“Si, entiendo eso. ¿Tu piensas que es suficientemente incriminatorio para agarrar a Blakely?” Talbot había esperado toda la tarde que Blakely pudiera hacer algo que lo incriminara, y hablar con Angelo podría ser algo para usar contra él.
“No. Un buen abogado lo sacaría fácil de aquí. Esto incluso no llegaría a la oficina del fiscal.”
“Si, eso es lo que me imagine. ¿Encontraste algo sobre quien visita su oficina en el edificio?”
“No todavía. Yo nunca me di cuenta la cantidad de oficinas que están ocupando ese edificio, la mayoría abogados y agente de seguros, y un puñado de médicos.”
“¿Y claro ninguno de ellos quiere hablas acerca de quien llega a verlo?” Talbot adivino.
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Re: A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:12 pm
“Así es.”
Talboth llego a su moto y tomo el casco. “Esta bien. Llámame si encuentras algo. Me dirijo a recoger a Angelo.”
“Será mejor que te lleves el sedan.”
Talboth sonrió. “Aw, no te preocupes.”
“Jodete. Yo solo no quiero tener que terminar con nadie nuevo en el caso.”
Sonriendo, Talboth termino la llamada y guardo el teléfono en la bolsa. Se coloco el casco, y subió a la Harley. Mientras salía del estacionamiento el email de Angelo regresaba a él, llenándolo de ira una vez más.
* * * *
“Hi,” Angelo saludo a Talboth.
“Necesito ver tu laptop.” Talboth tenia sus manos en los bolsillos el todavía no se decidía si empujar a Angelo a sus brazos o estrangularlo.
Angelo sonrió vacilante. “¿Sucede algo malo?”
“¿La laptop?” Talboth repitió.
Angelo se giro sin otra palabra y guió a Talboth a la sala. El apunto a la mesa de café. “¿Quieres una cerveza o algo?”
“No, gracias.” Talboth se sentó en el sofá y abrió la laptop. Tan pronto como la imagen apareció en la pantalla, el minimizo la conversación y señalo hacia los anuncios de condominios. El siguió viendo la historia de los archivos y reviso cada sitio visitado por Angelo durante el día.
Para cuando Angelo regreso al cuarto, dándole un trago a su cerveza, Talboth sentía que iba a arrojar la maquina a través del cuarto. “¿Puedes explicarme esto?”
Angelo vio la pantalla y se dejo caer en el sofá a lado de Talboth. “Llame a un viejo colega buscando trabajo. Estuve viendo opciones de vivienda.”
“¿En Los Ángeles?”
Angelo asintió. “Eso no me agrada. Pero no seré capaz de encontrar otro trabajo aquí. ¿Que se supone que debo hacer?”
“Cuando todo esto se aclare, tu puedes regresar a tu antiguo trabajo,” Talboth replico, agarrándose a un clavo ardiendo.
Angelo tomo la mano de Talboth y la apretó. “Yo siempre seguiré siendo gay. Eso no es algo que se vaya a aclarar.”
Talboth llego a su moto y tomo el casco. “Esta bien. Llámame si encuentras algo. Me dirijo a recoger a Angelo.”
“Será mejor que te lleves el sedan.”
Talboth sonrió. “Aw, no te preocupes.”
“Jodete. Yo solo no quiero tener que terminar con nadie nuevo en el caso.”
Sonriendo, Talboth termino la llamada y guardo el teléfono en la bolsa. Se coloco el casco, y subió a la Harley. Mientras salía del estacionamiento el email de Angelo regresaba a él, llenándolo de ira una vez más.
* * * *
“Hi,” Angelo saludo a Talboth.
“Necesito ver tu laptop.” Talboth tenia sus manos en los bolsillos el todavía no se decidía si empujar a Angelo a sus brazos o estrangularlo.
Angelo sonrió vacilante. “¿Sucede algo malo?”
“¿La laptop?” Talboth repitió.
Angelo se giro sin otra palabra y guió a Talboth a la sala. El apunto a la mesa de café. “¿Quieres una cerveza o algo?”
“No, gracias.” Talboth se sentó en el sofá y abrió la laptop. Tan pronto como la imagen apareció en la pantalla, el minimizo la conversación y señalo hacia los anuncios de condominios. El siguió viendo la historia de los archivos y reviso cada sitio visitado por Angelo durante el día.
Para cuando Angelo regreso al cuarto, dándole un trago a su cerveza, Talboth sentía que iba a arrojar la maquina a través del cuarto. “¿Puedes explicarme esto?”
Angelo vio la pantalla y se dejo caer en el sofá a lado de Talboth. “Llame a un viejo colega buscando trabajo. Estuve viendo opciones de vivienda.”
“¿En Los Ángeles?”
Angelo asintió. “Eso no me agrada. Pero no seré capaz de encontrar otro trabajo aquí. ¿Que se supone que debo hacer?”
“Cuando todo esto se aclare, tu puedes regresar a tu antiguo trabajo,” Talboth replico, agarrándose a un clavo ardiendo.
Angelo tomo la mano de Talboth y la apretó. “Yo siempre seguiré siendo gay. Eso no es algo que se vaya a aclarar.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:15 pm
“¿Tiene que haber algo aquí que puedas hacer?” Un nudo se le estaba formando rápidamente en el garganta a Talbot al pensar que podía perder lo que le había costado una vida encontrar.
Angelo se empujo con Talbot y lo beso. “¿Que harías si perdieras tu trabajo de policía aquí en San Francisco? ¿Te quedarías y buscarías un trabajo como agente de seguridad o te irías a otra ciudad si significaba hacer lo que amas?”
A pesar de que entendía lo que Angelo quería decir, eso todavía le dolía. El no podía culpar a su amante por pensar mas es su trabajo que en él. Diablos ellos solamente habían intimado en cuestión de días. Pero Talbot sabía que su relación comenzó el día que Angelo entro en la estación. El se había impresionado por la manera que el pequeño hombre se le había enfrentado. Talbot conocía hombres más grandes que no harían eso.
El acuno la parte de atrás de la cabeza de Angelo y lo beso de nuevo, empujando su lengua profundamente. Con todo lo que tenían, Talbot sabía que no era el momento de su vida para tomar decisiones, pero finalmente ellos tendrían que hacerlo. Una relación de larga distancia era algo que siempre se dijo que el nunca haría. ¿Eso fue hasta que estar con Angelo valiera la pena?
Angelo quebró el beso y se separo, viendo fijamente a los ojos a Talbot. “Yo me quedaría si pudiera. ¿Lo sabes, verdad?”
A pesar de que le faltaban un par de años para llegar a los cuarenta, Talbot reacciono como un pequeño niño herido. “Eso depende de lo que es más importante para ti.”
Angelo se separo y se puso de pie. “Eso no es justo.” El levanto la cerveza y se dirigía a la terraza pero se dio media vuelta. “Yo no pedí ser un blanco. Yo no pedí que se arruinara mi carrera en una noche.”
Talbot iba a comentar algo pero Angelo lo interrumpió.
“Me gustas.” Angelo sacudió la cabeza. “No. es mas que eso. Estoy enamorado de ti, pero eso no es suficiente para reordenar mi vida entera, al menos no todavía. Yo me he quebrado la espalda trabajando para llegar a donde estoy. Tú no sabes lo que significa tener una casa sin cucarachas que corren a esconderse cada vez que se prende una luz. Esto es importante.”
“No empieces con la rutina del pobre niño. Yo crecí en un vecindario similar al tuyo,” Talbot gruño. “Y una cosa que aprendí que parece que tu no, es que una gruesa capa de dinero significa una mierda si no tienes gente que te quiere contigo.”
Con sus manos hechas un puño a su lado, Talbot veía como el color parecía irse de la cara de Angelo. “Si. Bueno, yo aprendí que el dinero era algo real que tener al final del día. Tu inviertes, tu lo cuidas y si lo tratas correctamente el dinero no te abandona.”
Angelo calmadamente dejo su botella y camino hacia la puerta del frente. Talbot gruño su frustración al cuarto vacío. Al menos el pensaba que estaba vacío.
“¿Nosotros somos la única familia que el tiene, ¿Lo sabes?”
Talbot se dio la vuelta para ver a la cara a Bobby. “Yo leí su expediente, se que no conoció a su padre, y su madre murió cuando el apenas salía de la preparatoria.”
Angelo se empujo con Talbot y lo beso. “¿Que harías si perdieras tu trabajo de policía aquí en San Francisco? ¿Te quedarías y buscarías un trabajo como agente de seguridad o te irías a otra ciudad si significaba hacer lo que amas?”
A pesar de que entendía lo que Angelo quería decir, eso todavía le dolía. El no podía culpar a su amante por pensar mas es su trabajo que en él. Diablos ellos solamente habían intimado en cuestión de días. Pero Talbot sabía que su relación comenzó el día que Angelo entro en la estación. El se había impresionado por la manera que el pequeño hombre se le había enfrentado. Talbot conocía hombres más grandes que no harían eso.
El acuno la parte de atrás de la cabeza de Angelo y lo beso de nuevo, empujando su lengua profundamente. Con todo lo que tenían, Talbot sabía que no era el momento de su vida para tomar decisiones, pero finalmente ellos tendrían que hacerlo. Una relación de larga distancia era algo que siempre se dijo que el nunca haría. ¿Eso fue hasta que estar con Angelo valiera la pena?
Angelo quebró el beso y se separo, viendo fijamente a los ojos a Talbot. “Yo me quedaría si pudiera. ¿Lo sabes, verdad?”
A pesar de que le faltaban un par de años para llegar a los cuarenta, Talbot reacciono como un pequeño niño herido. “Eso depende de lo que es más importante para ti.”
Angelo se separo y se puso de pie. “Eso no es justo.” El levanto la cerveza y se dirigía a la terraza pero se dio media vuelta. “Yo no pedí ser un blanco. Yo no pedí que se arruinara mi carrera en una noche.”
Talbot iba a comentar algo pero Angelo lo interrumpió.
“Me gustas.” Angelo sacudió la cabeza. “No. es mas que eso. Estoy enamorado de ti, pero eso no es suficiente para reordenar mi vida entera, al menos no todavía. Yo me he quebrado la espalda trabajando para llegar a donde estoy. Tú no sabes lo que significa tener una casa sin cucarachas que corren a esconderse cada vez que se prende una luz. Esto es importante.”
“No empieces con la rutina del pobre niño. Yo crecí en un vecindario similar al tuyo,” Talbot gruño. “Y una cosa que aprendí que parece que tu no, es que una gruesa capa de dinero significa una mierda si no tienes gente que te quiere contigo.”
Con sus manos hechas un puño a su lado, Talbot veía como el color parecía irse de la cara de Angelo. “Si. Bueno, yo aprendí que el dinero era algo real que tener al final del día. Tu inviertes, tu lo cuidas y si lo tratas correctamente el dinero no te abandona.”
Angelo calmadamente dejo su botella y camino hacia la puerta del frente. Talbot gruño su frustración al cuarto vacío. Al menos el pensaba que estaba vacío.
“¿Nosotros somos la única familia que el tiene, ¿Lo sabes?”
Talbot se dio la vuelta para ver a la cara a Bobby. “Yo leí su expediente, se que no conoció a su padre, y su madre murió cuando el apenas salía de la preparatoria.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:18 pm
Bobby asintió lentamente. “¿Solo porque leíste esas palabras en la computadora crees que sabes todo de el?”
“Yo no dije eso.” Talboth fue a la ventana y abrió las cortinas. El podía ver a Angelo a la distancia, paseando alrededor del callejón.
“No estoy en desacuerdo de algunas cosas de las que dijiste, pero tu no estas tomando en cuenta quien es realmente Angelo.”
Talboth cruzo los brazos y enfrento a Bobby. “Entonces ilumíname.”
Bobby levanto sus manos, y señalo con la botella hacia la ventana. “Eso exactamente no puedo. Y no creo que nadie de nosotros pueda. Nosotros conocemos a Angelo desde hace años, pero nadie realmente conoce como es. El no deja a la gente entrar. El hecho de que hayas llegado tan lejos en tan poco tiempo dice mucho. Sin descontar que el dijo que estaba enamorado de ti. Eso es mucho mas de lo que se había permitido sentir por alguien.”
“¿Entonces que? ¿Se supone que lo deje irse a Los Ángeles?”
Bobby levanto la botella a su boca y se la termino. “No se, hombre. Quizás el necesita la sensación de seguridad que da el dinero. Quien sabe, quizás si el siente seguridad por alguna otra cosa el no lo sentiría tan importante.”
“No hemos estado juntos mucho tiempo. Dudo incluso que nuestra relación sea segura.” Talboth sabia que sus sentimientos por Angelo eran reales, pero el nunca había tenido un novio en serio. ¿Que si convencía a Angelo de quedarse y las cosas no funcionaban?
Bobby empezó a girarse hacia la cocina. “Suena a que tienes que tomarte las cosas un día a la vez hasta que sepas si el es o no el único.”
Cuando Bobby dejo el cuarto, Talboth regreso a la ventana. Su amante seguía paseando golpeando el aire. ¿Que esta haciendo?
Talboth puso la mano en la perilla cuando Bobby entro al cuarto. “Dale tiempo. ¿Porque no vienes a ayudarme con la cena?”
Talboth descanso su frente contra la puerta cerrada. Una gran parte de él quería correr a la calle y envolver a Angelo en sus brazos, pero el sabía que eso no resolvería los problemas, solo los posponía.
“Esta bien, pero para ser honesto no se una mierda de como asar a la parrilla.”
Con sus cejas juntas, Jules inclino la cabeza a un lado. “¿Que estas haciendo?”
“Yo no dije eso.” Talboth fue a la ventana y abrió las cortinas. El podía ver a Angelo a la distancia, paseando alrededor del callejón.
“No estoy en desacuerdo de algunas cosas de las que dijiste, pero tu no estas tomando en cuenta quien es realmente Angelo.”
Talboth cruzo los brazos y enfrento a Bobby. “Entonces ilumíname.”
Bobby levanto sus manos, y señalo con la botella hacia la ventana. “Eso exactamente no puedo. Y no creo que nadie de nosotros pueda. Nosotros conocemos a Angelo desde hace años, pero nadie realmente conoce como es. El no deja a la gente entrar. El hecho de que hayas llegado tan lejos en tan poco tiempo dice mucho. Sin descontar que el dijo que estaba enamorado de ti. Eso es mucho mas de lo que se había permitido sentir por alguien.”
“¿Entonces que? ¿Se supone que lo deje irse a Los Ángeles?”
Bobby levanto la botella a su boca y se la termino. “No se, hombre. Quizás el necesita la sensación de seguridad que da el dinero. Quien sabe, quizás si el siente seguridad por alguna otra cosa el no lo sentiría tan importante.”
“No hemos estado juntos mucho tiempo. Dudo incluso que nuestra relación sea segura.” Talboth sabia que sus sentimientos por Angelo eran reales, pero el nunca había tenido un novio en serio. ¿Que si convencía a Angelo de quedarse y las cosas no funcionaban?
Bobby empezó a girarse hacia la cocina. “Suena a que tienes que tomarte las cosas un día a la vez hasta que sepas si el es o no el único.”
Cuando Bobby dejo el cuarto, Talboth regreso a la ventana. Su amante seguía paseando golpeando el aire. ¿Que esta haciendo?
Talboth puso la mano en la perilla cuando Bobby entro al cuarto. “Dale tiempo. ¿Porque no vienes a ayudarme con la cena?”
Talboth descanso su frente contra la puerta cerrada. Una gran parte de él quería correr a la calle y envolver a Angelo en sus brazos, pero el sabía que eso no resolvería los problemas, solo los posponía.
“Esta bien, pero para ser honesto no se una mierda de como asar a la parrilla.”
:rageguy:
Angelo todavía estaba discutiendo consigo mismo cuando sintió que tocaban su hombro. Se dio la vuelta preparado para defenderse y se encontró cara a cara con Jules. Angelo bajo las manos. “Oh, hey.”Con sus cejas juntas, Jules inclino la cabeza a un lado. “¿Que estas haciendo?”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:20 pm
Le tomo a Angelo un momento antes de finalmente admitir su infantil conducta. “Discutiendo conmigo mismo.”
Jules asintió. “¿Y quien ganaba?”
Angelo se dio cuenta de lo absurdo del ejercicio. “Estoy desgarrándome entre quedarme aquí con la gente que amo y trabajar en algún lugar de comidas rápidas o mudarme a Los Ángeles y trabajar para otra estación de radio.”
Jules se jalo el lóbulo de la oreja evidentemente considerando la declaración de Angelo. “Te veías como si estuvieras discutiendo más que eso.”
Angelo negó. “No. Soy italiano. Nosotros siempre discutimos con nuestras manos más que con nuestras bocas.”
Jules se rió y empezó a caminar hacia la casa. El se detuvo y vio sobre el hombro. “¿Vienes?”
“En un minuto.” A pesar de la amistosa interrupción la disposición de Angelo estaba lejos de calmarse. ¿Como se atrevía Talbot a hacerlo sentir culpable? Con lo enojado que estaba con su amante, el estaba más enojado consigo mismo. El sabia que sonaba como un superficial hijo de perra, pero todas las cosas que tenia, el las había obtenido trabajando duro. Nadie le había dado una maldita cosa en su vida.
Angelo pateo el ornamentado jardín. El sabía que si regresaba al interior de la casa, el vería los profundos ojos café de Talbot y lo perdonaría. ¿Cual era el punto de estar enamorado, si le costaba todas sus cosas?
“¿Angelo?” Talbot llamo desde el frente del jardín de la casa de Bobby. “La cena esta lista.”
Angelo movió la mano avisándole que le había oído. El realmente no estaba listo para entrar. Quizás el pudiera tomar un taxi y regresar a su casa.
“¿Estas bien?” Talbot pregunto, dirigiéndose hacia Angelo.
Angelo se encogió de hombros. ¿Que podía el decir? El estaba más confundido que nunca. Talbot se acerco y lo jalo a un abrazo. “Si yo consigo el trabajo, yo planeaba regresar aquí cada fin de semana,” el murmuro contra el cuello de Talbot.
Talbot suspiro y beso la cima de la cabeza de Angelo. “Quizás sea un egoísta, pero me gustaría llegar a casa y encontrarte ahí después de mi día de mierda.”
“Si. Yo disfrutaría eso también,” Angelo acepto.
“Escucha. Yo se que te estoy pidiendo más de lo puedes dar, pero yo nunca había encontrado a nadie que me gustara como tu, y nunca he conocido una relación a distancia que funcione.”
Angelo sabía exactamente lo que Talbot estaba diciendo, esa era una de las cosas que estaba discutiendo consigo mismo en la calle. Básicamente el sabia que se iba a trabajar en lo que amaba o se daba la oportunidad de algo real. Con un trabajo el dependería de si mismo, con el amor el dependería de alguien más. En este caso, Talbot.
Jules asintió. “¿Y quien ganaba?”
Angelo se dio cuenta de lo absurdo del ejercicio. “Estoy desgarrándome entre quedarme aquí con la gente que amo y trabajar en algún lugar de comidas rápidas o mudarme a Los Ángeles y trabajar para otra estación de radio.”
Jules se jalo el lóbulo de la oreja evidentemente considerando la declaración de Angelo. “Te veías como si estuvieras discutiendo más que eso.”
Angelo negó. “No. Soy italiano. Nosotros siempre discutimos con nuestras manos más que con nuestras bocas.”
Jules se rió y empezó a caminar hacia la casa. El se detuvo y vio sobre el hombro. “¿Vienes?”
“En un minuto.” A pesar de la amistosa interrupción la disposición de Angelo estaba lejos de calmarse. ¿Como se atrevía Talbot a hacerlo sentir culpable? Con lo enojado que estaba con su amante, el estaba más enojado consigo mismo. El sabia que sonaba como un superficial hijo de perra, pero todas las cosas que tenia, el las había obtenido trabajando duro. Nadie le había dado una maldita cosa en su vida.
Angelo pateo el ornamentado jardín. El sabía que si regresaba al interior de la casa, el vería los profundos ojos café de Talbot y lo perdonaría. ¿Cual era el punto de estar enamorado, si le costaba todas sus cosas?
“¿Angelo?” Talbot llamo desde el frente del jardín de la casa de Bobby. “La cena esta lista.”
Angelo movió la mano avisándole que le había oído. El realmente no estaba listo para entrar. Quizás el pudiera tomar un taxi y regresar a su casa.
“¿Estas bien?” Talbot pregunto, dirigiéndose hacia Angelo.
Angelo se encogió de hombros. ¿Que podía el decir? El estaba más confundido que nunca. Talbot se acerco y lo jalo a un abrazo. “Si yo consigo el trabajo, yo planeaba regresar aquí cada fin de semana,” el murmuro contra el cuello de Talbot.
Talbot suspiro y beso la cima de la cabeza de Angelo. “Quizás sea un egoísta, pero me gustaría llegar a casa y encontrarte ahí después de mi día de mierda.”
“Si. Yo disfrutaría eso también,” Angelo acepto.
“Escucha. Yo se que te estoy pidiendo más de lo puedes dar, pero yo nunca había encontrado a nadie que me gustara como tu, y nunca he conocido una relación a distancia que funcione.”
Angelo sabía exactamente lo que Talbot estaba diciendo, esa era una de las cosas que estaba discutiendo consigo mismo en la calle. Básicamente el sabia que se iba a trabajar en lo que amaba o se daba la oportunidad de algo real. Con un trabajo el dependería de si mismo, con el amor el dependería de alguien más. En este caso, Talbot.
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por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:23 pm
“Dejemos la discusión de Los Ángeles hasta que llamen del trabajo, no tiene sentido jugar al ‘que-si’ al menos hasta que tenga la maldita cosa en primer lugar.” El sintió que los brazos de Talboth lo apretaban. Angelo paso sus dedos por la dura sombra de las cinco de la tarde. “No supondremos hasta que estemos en los propios zapatos, ¿Verdad?”
* * * *
Durante la cena, Talboth no pudo separar la vista de Angelo. Cada sonrisa, cada gesto del caliente italiano parecían llenar a Talboth de lujuria por el hombre. Para cuando Angelo se acurrucaba contra su espalda en la Harley, El pene de Talboth estaba cerca de romper sus jeans.
El recordó la primera noche que montaron juntos. La imagen de Angelo inclinado en su Harley casi envía a Talboth al borde. El pensamiento de encontrar un lugar aislado para hacer el amor se hizo más grande.
“¿Te importaría si nos detenemos en el camino a mi casa?” Talboth preguntó sobre el ruido de la maquina.
Angelo se inclino y hablo en su oído. “Como siempre desde que salimos. Llévame a donde quieras.”
A unas cuadras de la casa de Bobby, Talboth se detuvo en una farmacia abierta las veinticuatro horas. Antes de que Angelo pudiera preguntar, Talboth le dijo al minuto. “Suplementos.”
Una gran sonrisa se formo en el hermoso rostro de Angelo. “Ooh, es por eso que quieres detenerte.”
Talboth asintió y vio hacia su duro pene. “Pensé mostrarte mi lado salvaje.”
Angelo se rio y froto sus manos. “Ve por esas cosas, Gran papi.”
Talboth se rio y entro en la tienda. Nunca hubiera esperado que Angelo lo llamara de esa forma. El tomo una caja de condones y reviso la selección de lubricantes. ¿Calientes? Hmmm, eso podría ser interesante.
El salio llevando una bolsa de papel, mientras Angelo todavía sonreía. “Traje una sorpresa ahí adentro.”
Una de las negras cejas de Angelo se elevo con curiosidad. “¿En serio?” Angelo se asomo a la bolsa. “Oh, yo vi esas cosas en la televisión. ¿Crees que funcione?”
Talboth se coloco su casco y subió a la motocicleta. “Hay solo una manera de averiguarlo.”
Mientras la Harley rugía fuera del estacionamiento, Talboth estaba tan enfocado en el duro eje presionándose contra su espalda, que el no había notado el carro que los seguía hasta que estuvo justo detrás de ellos. El le grito a Angelo tan alto como pudo. “Sostente, nos siguen.”
* * * *
Durante la cena, Talboth no pudo separar la vista de Angelo. Cada sonrisa, cada gesto del caliente italiano parecían llenar a Talboth de lujuria por el hombre. Para cuando Angelo se acurrucaba contra su espalda en la Harley, El pene de Talboth estaba cerca de romper sus jeans.
El recordó la primera noche que montaron juntos. La imagen de Angelo inclinado en su Harley casi envía a Talboth al borde. El pensamiento de encontrar un lugar aislado para hacer el amor se hizo más grande.
“¿Te importaría si nos detenemos en el camino a mi casa?” Talboth preguntó sobre el ruido de la maquina.
Angelo se inclino y hablo en su oído. “Como siempre desde que salimos. Llévame a donde quieras.”
A unas cuadras de la casa de Bobby, Talboth se detuvo en una farmacia abierta las veinticuatro horas. Antes de que Angelo pudiera preguntar, Talboth le dijo al minuto. “Suplementos.”
Una gran sonrisa se formo en el hermoso rostro de Angelo. “Ooh, es por eso que quieres detenerte.”
Talboth asintió y vio hacia su duro pene. “Pensé mostrarte mi lado salvaje.”
Angelo se rio y froto sus manos. “Ve por esas cosas, Gran papi.”
Talboth se rio y entro en la tienda. Nunca hubiera esperado que Angelo lo llamara de esa forma. El tomo una caja de condones y reviso la selección de lubricantes. ¿Calientes? Hmmm, eso podría ser interesante.
El salio llevando una bolsa de papel, mientras Angelo todavía sonreía. “Traje una sorpresa ahí adentro.”
Una de las negras cejas de Angelo se elevo con curiosidad. “¿En serio?” Angelo se asomo a la bolsa. “Oh, yo vi esas cosas en la televisión. ¿Crees que funcione?”
Talboth se coloco su casco y subió a la motocicleta. “Hay solo una manera de averiguarlo.”
Mientras la Harley rugía fuera del estacionamiento, Talboth estaba tan enfocado en el duro eje presionándose contra su espalda, que el no había notado el carro que los seguía hasta que estuvo justo detrás de ellos. El le grito a Angelo tan alto como pudo. “Sostente, nos siguen.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:24 pm
El sintió la mano de Angelo meterse en los apretados bolsillos de sus jeans y buscar el teléfono. En cualquier otra circunstancia eso podría ser divertido, pero Talbot sabía que el necesitaba manejar con cuidado. Con Angelo deteniéndose con una sola mano, el riesgo aumentaba.
La voz de Angelo apenas era audible debido al ruido de la Harley, pero Talbot estaba complacido de oír a su amante dar los detalles de su ubicación. El carro comenzó a acercarse, tocando la bocina cuando se acerco. ¿Que diablos esta Blakely tratando de probar?
En minutos, Talbot oyó el familiar sonido de las sirenas dirigirse a su camino. El tonto que los seguía debió oírlo también, porque el carro rápidamente dio vuelta en una esquina.
Por lo mucho que Talbot quería darse la vuelta y seguir al bastardo, el sabía que el no podía. El lentamente detuvo la motocicleta y se giro hacia Angelo que todavía sostenía el teléfono, “Dile al operador que ellos dieron vuelta”
Angelo asintió “Los policías lo están persiguiendo.”
Talbot extendió la mano hacia Angelo quien le paso el teléfono. “Soy el Detective Talbot Remy. ¿Pueden llamarme a este número cuando atrapen al idiota? Necesito hacerle unas preguntas sobre el caso en el que estoy trabajando.”
Talbot colgó el teléfono y lo guardo en su bolsa antes de bajar de la motocicleta. El se quito el casco y jalo a Angelo a sus brazos. El sabía que ese lugar publico no era para demostraciones publicas de afecto, solo que el estaba agradecido de que la situación no se hubiera salido de control, a el le importaba una mierda quien lo viera besar a su amante.
Mientras el sellaba sus labios con los de Angelo el le quitaba el casco a su amante. “¿Estas bien?”
Angelo asintió y levanto su mano. “Todavía temblando, pero bien. ¿Crees que lo atraparan?”
“Eso espero. Amare poner mis manos sobre él” El colgó el casco de Angelo en el manubrio de la motocicleta y paso sus dedos por el corto negro cabello del pequeño hombre. Dios, ellos fueron afortunados. Un mal movimiento y ambos podrían estar muertos. El no podía dejar de tocar a su amante, sus manos se movían del cabello de Angelo a su espalda y finalmente al apretado culo que Talbot amaba tanto.
En la mitad de estar haciéndolo como una pareja de adolescentes. El teléfono de Talbot sonó. El se alejo de los labios de Angelo y gruño. “No te muevas.”
“Remy,” él contesto.
“Ellos lo aprendieron, Detective. El esta esposado y dentro del carro.”
“Gracias.” Talbot colgó y llamo a Jake.
“¿Hola?”
La voz de Angelo apenas era audible debido al ruido de la Harley, pero Talbot estaba complacido de oír a su amante dar los detalles de su ubicación. El carro comenzó a acercarse, tocando la bocina cuando se acerco. ¿Que diablos esta Blakely tratando de probar?
En minutos, Talbot oyó el familiar sonido de las sirenas dirigirse a su camino. El tonto que los seguía debió oírlo también, porque el carro rápidamente dio vuelta en una esquina.
Por lo mucho que Talbot quería darse la vuelta y seguir al bastardo, el sabía que el no podía. El lentamente detuvo la motocicleta y se giro hacia Angelo que todavía sostenía el teléfono, “Dile al operador que ellos dieron vuelta”
Angelo asintió “Los policías lo están persiguiendo.”
Talbot extendió la mano hacia Angelo quien le paso el teléfono. “Soy el Detective Talbot Remy. ¿Pueden llamarme a este número cuando atrapen al idiota? Necesito hacerle unas preguntas sobre el caso en el que estoy trabajando.”
Talbot colgó el teléfono y lo guardo en su bolsa antes de bajar de la motocicleta. El se quito el casco y jalo a Angelo a sus brazos. El sabía que ese lugar publico no era para demostraciones publicas de afecto, solo que el estaba agradecido de que la situación no se hubiera salido de control, a el le importaba una mierda quien lo viera besar a su amante.
Mientras el sellaba sus labios con los de Angelo el le quitaba el casco a su amante. “¿Estas bien?”
Angelo asintió y levanto su mano. “Todavía temblando, pero bien. ¿Crees que lo atraparan?”
“Eso espero. Amare poner mis manos sobre él” El colgó el casco de Angelo en el manubrio de la motocicleta y paso sus dedos por el corto negro cabello del pequeño hombre. Dios, ellos fueron afortunados. Un mal movimiento y ambos podrían estar muertos. El no podía dejar de tocar a su amante, sus manos se movían del cabello de Angelo a su espalda y finalmente al apretado culo que Talbot amaba tanto.
En la mitad de estar haciéndolo como una pareja de adolescentes. El teléfono de Talbot sonó. El se alejo de los labios de Angelo y gruño. “No te muevas.”
“Remy,” él contesto.
“Ellos lo aprendieron, Detective. El esta esposado y dentro del carro.”
“Gracias.” Talbot colgó y llamo a Jake.
“¿Hola?”
Remington Talbot Colton- Licántropo Clase Alta
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Re: A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:29 pm
“¿Hola?”
“Soy Talboth. Nuestro tipo del Monte Carlo blanco acaba de tratar de pasar sobre mí y Angelo. Los chicos de la patrulla lo atraparon y están hablando con él. Pensé que podrías estar ahí cuando interrogue al idiota.”
“Estaré ahí, tan pronto como lleve a mi cita a su casa. Tú me conoces Remy. Yo voy a tomar algo de jugo de vagina esta noche.”
Talboth giro los ojos, ante la descripción de su socio. “Eres un jodido cerdo, Jake.”
“Oink, oink.”
“Yo voy a llevar a Angelo de regreso a la casa de sus amigos. Estaré ahí tan pronto como pueda.” Talboth colgó y le dio su casco a Angelo. “¿Crees que estará bien que regreses a la casa de Bobby? Al menos hasta que regrese de la estación”
Angelo negó. “Solo déjame en tu casa. No quiero molestar a Bobby de nuevo.”
“Mi casa no es tan segura como la de Bobby.”
“No ves que es solo esto. No se siente como si estuviera en peligro. Blakely me recuerda a algunos de los idiotas de mi viejo vecindario, todo palabras y nada de hechos. El no ha intentado nada físico. Tácticas de miedo eso es todo, y yo estoy cansado de tener miedo.”
Talboth se coloco su propio casco, pensando en lo que decía Angelo. “Tienes razón.” Mierda. ¿Que significara eso? Antes de subir de regreso a la Harley, el le dio a Angelo otro profundo beso. “Me has dado una manera diferente de ver el caso.”
* * * *
Jake encontró a Talboth en su escritorio. “Al menos puedes darme una razón, no tenemos suficiente evidencia para detenerlo.”
Talboth asintió. “Espero que al menos ese sea el caso. Realmente solo quiero interrogarlo.”
Jake señalo hacia el pequeño cuarto. “El esta ahí. Le hable de ti, el no esta demasiado feliz de permanecer aquí.”
“Lo entiendo.” Jake le decía que estaba sobre hielo delgado. “¿Encontraste algo en el sistema?”
“No. El es un mecánico. Una infracción por exceso de velocidad hace tres años. Eso es todo.”
“¿El es miembro de la iglesia de Blakely?” Talboth preguntó.
“Ambos lo sabemos, pero no esta en los archivos, y el no lo admite.”
Talboth leyó el nombre en las hojas que le dio Jake. “Kyle Rousello. Hmmm, bueno déjame ver lo que el señor Rousello tiene que decir.”
“Soy Talboth. Nuestro tipo del Monte Carlo blanco acaba de tratar de pasar sobre mí y Angelo. Los chicos de la patrulla lo atraparon y están hablando con él. Pensé que podrías estar ahí cuando interrogue al idiota.”
“Estaré ahí, tan pronto como lleve a mi cita a su casa. Tú me conoces Remy. Yo voy a tomar algo de jugo de vagina esta noche.”
Talboth giro los ojos, ante la descripción de su socio. “Eres un jodido cerdo, Jake.”
“Oink, oink.”
“Yo voy a llevar a Angelo de regreso a la casa de sus amigos. Estaré ahí tan pronto como pueda.” Talboth colgó y le dio su casco a Angelo. “¿Crees que estará bien que regreses a la casa de Bobby? Al menos hasta que regrese de la estación”
Angelo negó. “Solo déjame en tu casa. No quiero molestar a Bobby de nuevo.”
“Mi casa no es tan segura como la de Bobby.”
“No ves que es solo esto. No se siente como si estuviera en peligro. Blakely me recuerda a algunos de los idiotas de mi viejo vecindario, todo palabras y nada de hechos. El no ha intentado nada físico. Tácticas de miedo eso es todo, y yo estoy cansado de tener miedo.”
Talboth se coloco su propio casco, pensando en lo que decía Angelo. “Tienes razón.” Mierda. ¿Que significara eso? Antes de subir de regreso a la Harley, el le dio a Angelo otro profundo beso. “Me has dado una manera diferente de ver el caso.”
* * * *
Jake encontró a Talboth en su escritorio. “Al menos puedes darme una razón, no tenemos suficiente evidencia para detenerlo.”
Talboth asintió. “Espero que al menos ese sea el caso. Realmente solo quiero interrogarlo.”
Jake señalo hacia el pequeño cuarto. “El esta ahí. Le hable de ti, el no esta demasiado feliz de permanecer aquí.”
“Lo entiendo.” Jake le decía que estaba sobre hielo delgado. “¿Encontraste algo en el sistema?”
“No. El es un mecánico. Una infracción por exceso de velocidad hace tres años. Eso es todo.”
“¿El es miembro de la iglesia de Blakely?” Talboth preguntó.
“Ambos lo sabemos, pero no esta en los archivos, y el no lo admite.”
Talboth leyó el nombre en las hojas que le dio Jake. “Kyle Rousello. Hmmm, bueno déjame ver lo que el señor Rousello tiene que decir.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:32 pm
Jake lo siguió al cuarto de interrogatorios. Talbot cerró la puerta y se giro para enfrentarse al hombre que trato de asustarlo dos veces ese día. “Antes de preguntar, déjame solo darte una pequeña información. Tú evidentemente no eres uno de los favoritos del Reverendo Blakely. Porque si lo fueras, Carl te hubiera informado que no tomaras el mismo carro para tus dos pequeñas aventuras.”
“Tu no sabes nada,” Kyle murmuro.
Talbot se inclino sobre la mesa, sus puños en la vieja mesa frente a Kyle. El iba a hablar, pero se detuvo y vio sobre su hombro. “¿Jake? ¿Quieres traerle a nuestro amigo un vaso con agua o algo?”
El le guiño el ojo a su socio, dejándole a Jake saber que era parte de todo eso del buen policía, mal policía que ellos habían jugado durante años. Jake asintió y dejo el cuarto. Talbot regreso su atención al hombre de los ojos saltones frente a él. “Ahora. ¿Como vamos a manejar esto? ¿Que esta intentando hacer Blakely haciendo todas estas acrobacias?”
“No se de que esta hablando.”
“Hmmm, quizás sea mejor hacerlo difícil.” Talbot se inclino lo suficiente para estar nariz con nariz con Kyle. “Porque si no me das algunas respuestas, yo voy a levantar tu culo y tu me llamaras dulce corazón.”
Kyle hizo una mueca de disgusto. “Quédate lejos de mi. ¡Marica!”
Talbot se encogió de hombros. “Lo siento, niño del coro, no puedo hacer eso. Lo que puedo hacer es visitar el taller de Ernie’s todos los días a la hora de comer. Y también estoy seguro de enviar a todos mis amigos ‘maricas’ para que coqueteen contigo, pero tú serás mi osito de miel especial. ¿Como cree que te ira con los tipos con los que trabajas? Puedo incluso convencerme de enviarte flores las tardes de nuestras citas.”
Enojado Kyle se separo de la mesa. “¡Déjenme salir de aquí!” el grito.
Talbot rápidamente se movió bloqueando la salida de Kyle. El sabia que Kyle como uno de los espías de Blakely sabría algo del plan del amo, solo que no había manera en el infierno que le permitiera salir sin darle algo. “¿Te gustaría pasar una noche en la cárcel? Apuesto que hay muchos tipos como yo. Eres un deseoso pequeño bocado que probar para ellos.”
“No puedes hacer eso.”
“Estas equivocado. Soy policía. Puedo hacer todo lo que quiera. Ahora, quiero saber ¿porque Blakely te envió a matar dos veces a Angelo Pilato?”
Kyle negaba. “N-No. Yo no trate de matar a nadie.”
“¿En serio? Tu manejabas el carro directo al hombre que estaba regando y trataste de lastimarlo?”
Kyle continúo negándolo. “Se suponía que yo solo le asustaría. Eso es todo lo que el Reverendo Blakely dijo que me asegurara que tu estuvieras cuando lo hiciera.”
“¿Porque?” Talbot necesitaba saber.
“Yo- yo no se.”
“Tu no sabes nada,” Kyle murmuro.
Talbot se inclino sobre la mesa, sus puños en la vieja mesa frente a Kyle. El iba a hablar, pero se detuvo y vio sobre su hombro. “¿Jake? ¿Quieres traerle a nuestro amigo un vaso con agua o algo?”
El le guiño el ojo a su socio, dejándole a Jake saber que era parte de todo eso del buen policía, mal policía que ellos habían jugado durante años. Jake asintió y dejo el cuarto. Talbot regreso su atención al hombre de los ojos saltones frente a él. “Ahora. ¿Como vamos a manejar esto? ¿Que esta intentando hacer Blakely haciendo todas estas acrobacias?”
“No se de que esta hablando.”
“Hmmm, quizás sea mejor hacerlo difícil.” Talbot se inclino lo suficiente para estar nariz con nariz con Kyle. “Porque si no me das algunas respuestas, yo voy a levantar tu culo y tu me llamaras dulce corazón.”
Kyle hizo una mueca de disgusto. “Quédate lejos de mi. ¡Marica!”
Talbot se encogió de hombros. “Lo siento, niño del coro, no puedo hacer eso. Lo que puedo hacer es visitar el taller de Ernie’s todos los días a la hora de comer. Y también estoy seguro de enviar a todos mis amigos ‘maricas’ para que coqueteen contigo, pero tú serás mi osito de miel especial. ¿Como cree que te ira con los tipos con los que trabajas? Puedo incluso convencerme de enviarte flores las tardes de nuestras citas.”
Enojado Kyle se separo de la mesa. “¡Déjenme salir de aquí!” el grito.
Talbot rápidamente se movió bloqueando la salida de Kyle. El sabia que Kyle como uno de los espías de Blakely sabría algo del plan del amo, solo que no había manera en el infierno que le permitiera salir sin darle algo. “¿Te gustaría pasar una noche en la cárcel? Apuesto que hay muchos tipos como yo. Eres un deseoso pequeño bocado que probar para ellos.”
“No puedes hacer eso.”
“Estas equivocado. Soy policía. Puedo hacer todo lo que quiera. Ahora, quiero saber ¿porque Blakely te envió a matar dos veces a Angelo Pilato?”
Kyle negaba. “N-No. Yo no trate de matar a nadie.”
“¿En serio? Tu manejabas el carro directo al hombre que estaba regando y trataste de lastimarlo?”
Kyle continúo negándolo. “Se suponía que yo solo le asustaría. Eso es todo lo que el Reverendo Blakely dijo que me asegurara que tu estuvieras cuando lo hiciera.”
“¿Porque?” Talbot necesitaba saber.
“Yo- yo no se.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:38 pm
Talboth podía ver el miedo en la cara de Kyle el sabía que ya no le iba a dar mas información. Talboth se puso de pie y señalo hacia la puerta. “Hazme el favor de quedarte un infierno lejos Blakely. Lo que tu elijas creer es tu asunto, pero cuando tu estas intentando empujar tus creencias en otros, con tus tácticas de miedo, bueno, osito de miel, entonces comienza a ser mi negocio.”
Kyle se escurrió alrededor de Talboth como si quisiera salir de una trampa. El salio por la puerta y se topo con Jake. El socio de Talboth estabilizo al tipo antes de dejarlo ir.
Después de que Kyle se fue, Jake entro al cuarto de interrogatorios. “¿Descubriste algo?”
Talboth asintió. “Eso creo. Angelo me dijo algo que me dejo pensando. Nosotros tenemos los panfletos, el graffiti, el dildo ensangrentado y las dos pequeñas acrobacias realizadas por Kyle. Ninguna de esas con intención de herir a Angelo. Creo que Blakely trata de hacernos enojar. Kyle dijo que Blakely le dijo que se asegurara de que yo estuviera alrededor cuando asustara a Angelo hoy.”
“¿Que ganaría con eso?”
Talboth levanto su cabello y se froto la nuca. “¿Que si Blakely espera que vaya detrás de él? Tú sabes, todo eso del novio protector, eso podría ser una buena noticia para los periódicos. Marica ataca a oficial de iglesia.”
“¿Porque querría Blakely sufrir un ataque para tener dos minutos en el noticiero de la tarde?”
“Eso es lo que necesitamos investigar. Hay que encontrar que hace en esa oficina de ese edificio. Eso tiene que ser la conexión.” Esa era la pregunta del millón de dólares. Talboth pensó acerca de la disputa de Angelo con Carl Blakely en los escalones de la corte. Blakely pesaba casi ciento cincuenta kilos. A pesar del hecho de que Angelo casi media un metro ochenta, no debería haber tumbado a Blakely tan fácilmente como lo hizo.
Talboth se dio cuenta que Jake era el único que había visto a Blakely en semanas. “¿Como se ve?”
“¿Quien? ¿Blakely?”
Talboth asintió.
Jake se froto su mandíbula. “No se, delgado, supongo. Imagine que había salido de una de esas granjas de dieta de la que todo el mundo dice que son buenas. ¿Porque? ¿Piensas que tiene relación?”
“Céntrate en los doctores en el edificio. Si tengo razón, Blakely es paciente de uno de ellos. Puede que no te confirmen que es paciente, pero sabremos de que especialidad. Creímos que se quedo en San Francisco para vigilar a Angelo, Pero creo que el esta por tratamiento medico y joder a Angelo es solo un beneficio extra.”
Kyle se escurrió alrededor de Talboth como si quisiera salir de una trampa. El salio por la puerta y se topo con Jake. El socio de Talboth estabilizo al tipo antes de dejarlo ir.
Después de que Kyle se fue, Jake entro al cuarto de interrogatorios. “¿Descubriste algo?”
Talboth asintió. “Eso creo. Angelo me dijo algo que me dejo pensando. Nosotros tenemos los panfletos, el graffiti, el dildo ensangrentado y las dos pequeñas acrobacias realizadas por Kyle. Ninguna de esas con intención de herir a Angelo. Creo que Blakely trata de hacernos enojar. Kyle dijo que Blakely le dijo que se asegurara de que yo estuviera alrededor cuando asustara a Angelo hoy.”
“¿Que ganaría con eso?”
Talboth levanto su cabello y se froto la nuca. “¿Que si Blakely espera que vaya detrás de él? Tú sabes, todo eso del novio protector, eso podría ser una buena noticia para los periódicos. Marica ataca a oficial de iglesia.”
“¿Porque querría Blakely sufrir un ataque para tener dos minutos en el noticiero de la tarde?”
“Eso es lo que necesitamos investigar. Hay que encontrar que hace en esa oficina de ese edificio. Eso tiene que ser la conexión.” Esa era la pregunta del millón de dólares. Talboth pensó acerca de la disputa de Angelo con Carl Blakely en los escalones de la corte. Blakely pesaba casi ciento cincuenta kilos. A pesar del hecho de que Angelo casi media un metro ochenta, no debería haber tumbado a Blakely tan fácilmente como lo hizo.
Talboth se dio cuenta que Jake era el único que había visto a Blakely en semanas. “¿Como se ve?”
“¿Quien? ¿Blakely?”
Talboth asintió.
Jake se froto su mandíbula. “No se, delgado, supongo. Imagine que había salido de una de esas granjas de dieta de la que todo el mundo dice que son buenas. ¿Porque? ¿Piensas que tiene relación?”
“Céntrate en los doctores en el edificio. Si tengo razón, Blakely es paciente de uno de ellos. Puede que no te confirmen que es paciente, pero sabremos de que especialidad. Creímos que se quedo en San Francisco para vigilar a Angelo, Pero creo que el esta por tratamiento medico y joder a Angelo es solo un beneficio extra.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:41 pm
“No era necesario.” Talbot beso el cuello de Angelo mientras su frías manos comenzaron a vagar por el pecho de Angelo.
“¿Encontraste algo con el tipo?” Angelo gimió cuando las manos de Talbot se movieron bajo las copas de sus bolas.
“¿Podemos hablar de eso después? Yo he mantenido mi pene caliente esperando probar el nuevo lubricante que compramos.”
Angelo sonrió y busco debajo de su almohada. El sacó un condón y la nueva botella de lubricante. “Voy un paso delante de ti.”
Talbot gruño juguetonamente mordiendo el cuello de Angelo mientras tomaba los suplementos. Sabiendo lo excitado que había estado Talbot en la tarde, Angelo se giro sobre su estomago. El se apoyo en sus rodillas en el colchón y levanto su culo al aire. “¿Como esto?”
Un alto gruñido lleno la pequeña habitación, cuando las manos de Talbot empezaron a frotar el culo de Angelo.
“Te ves tan bueno para comerte,” Talbot comentó un segundo antes de que su caliente lengua pasara por el agujero de Angelo.
Angelo automáticamente se arqueo al toque. Joder. Talbot sabía como hacerlo sentir bien. Con su cabeza todavía en la almohada, Angelo escondió la cara y grito cuando dos dedos entraron en su culo. Evidentemente su amante estaba mas impaciente que de costumbre.
El pequeño dolor fue momentáneo antes de que reinara el placer. “Puedo sentir eso.”
“Diablos, eso espero,” Talbot dijo con una risueña voz.
“No tus dedos, tonto, el gel caliente.”
Talbot continuo preparando el agujero de Angelo mientras lamía y raspaba la tierna piel del culo de Angelo con sus dientes. “Yo nunca había querido entrar desnudo en un culo más que en este momento.”
Angelo vio sobre su hombro. Eso no era cuestión de que el estuviera limpio o que Talbot estuviera mas que libre de la enfermedad y el virus. Esa era la única promesa que su mamá le pidió cuando salio del closet poco antes de su muerte. “Ni siquiera lo pienses.”
Una fuerte mano golpeo el trasero de Angelo. “No soy estupido quizás deberíamos hacernos la prueba.”
Angelo trago saliva. A pesar de el había reconocido sus sentimientos durante ese día, eso era lo mas cercano que Talbot se había abierto. “Si piensas que puedes ser fiel, entonces si.”
Talbot retiro sus dedos del culo de Angelo. Angelo cerro sus ojos fuertemente. Mierda. El sabía que el no debería haberlo dicho tan pronto las palabras salieron de su boca. “lo siento.”
Cuando Talbot no contestó, Angelo abrió sus ojos y se giro sobre su espalda. Talbot estaba sentado viendo a Angelo.
“¿Encontraste algo con el tipo?” Angelo gimió cuando las manos de Talbot se movieron bajo las copas de sus bolas.
“¿Podemos hablar de eso después? Yo he mantenido mi pene caliente esperando probar el nuevo lubricante que compramos.”
Angelo sonrió y busco debajo de su almohada. El sacó un condón y la nueva botella de lubricante. “Voy un paso delante de ti.”
Talbot gruño juguetonamente mordiendo el cuello de Angelo mientras tomaba los suplementos. Sabiendo lo excitado que había estado Talbot en la tarde, Angelo se giro sobre su estomago. El se apoyo en sus rodillas en el colchón y levanto su culo al aire. “¿Como esto?”
Un alto gruñido lleno la pequeña habitación, cuando las manos de Talbot empezaron a frotar el culo de Angelo.
“Te ves tan bueno para comerte,” Talbot comentó un segundo antes de que su caliente lengua pasara por el agujero de Angelo.
Angelo automáticamente se arqueo al toque. Joder. Talbot sabía como hacerlo sentir bien. Con su cabeza todavía en la almohada, Angelo escondió la cara y grito cuando dos dedos entraron en su culo. Evidentemente su amante estaba mas impaciente que de costumbre.
El pequeño dolor fue momentáneo antes de que reinara el placer. “Puedo sentir eso.”
“Diablos, eso espero,” Talbot dijo con una risueña voz.
“No tus dedos, tonto, el gel caliente.”
Talbot continuo preparando el agujero de Angelo mientras lamía y raspaba la tierna piel del culo de Angelo con sus dientes. “Yo nunca había querido entrar desnudo en un culo más que en este momento.”
Angelo vio sobre su hombro. Eso no era cuestión de que el estuviera limpio o que Talbot estuviera mas que libre de la enfermedad y el virus. Esa era la única promesa que su mamá le pidió cuando salio del closet poco antes de su muerte. “Ni siquiera lo pienses.”
Una fuerte mano golpeo el trasero de Angelo. “No soy estupido quizás deberíamos hacernos la prueba.”
Angelo trago saliva. A pesar de el había reconocido sus sentimientos durante ese día, eso era lo mas cercano que Talbot se había abierto. “Si piensas que puedes ser fiel, entonces si.”
Talbot retiro sus dedos del culo de Angelo. Angelo cerro sus ojos fuertemente. Mierda. El sabía que el no debería haberlo dicho tan pronto las palabras salieron de su boca. “lo siento.”
Cuando Talbot no contestó, Angelo abrió sus ojos y se giro sobre su espalda. Talbot estaba sentado viendo a Angelo.
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por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:44 pm
“No quería que te enojaras,” Angelo murmuro.
“No lo estoy,” Talboth contestó. “Supongo que todo esto me ha golpeado. Incluso cuando no me agrade que te mudes a Los Ángeles, yo no vacilaría en prometerte fidelidad.”
“¿Eso es lo que esta mal?”
“No. solo es algo nuevo.” Talboth paso sus manos arriba y abajo de la cara interna del muslo de Angelo. El sacudió la cabeza y suspiro. “Te amo. No quiero que te vayas, pero de todas formas te amo lo hagas o no.”
Angelo no estaba seguro que se suponía que podía decir a eso. ¿Porque el trabajo en Los Ángeles repentinamente era una maldición en lugar de una bendición? el se subió al regazo de Talboth, envolviendo sus brazos en el hombre que amaba, Angelo le dio un casto beso en los labios a Talboth. “Te amo, también.”
El deseo poder prometerle a Talboth que el se quedaría, pero Angelo sabía que el no podía decirlo todavía. Todo lo que el podía prometerle en ese momento era su corazón. El tomo el condón olvidado. Si el pudiera ser todo suave y pedirle a Talboth que le hiciera el amor, pero el sabia que su amante necesitaba algo un poco mas permanente. “Hazme tuyo. Jodeme tan duro que nunca quiera dejarte.”
Los oscuros ojos de Talboth vieron a Angelo fijamente por un momento, finalmente sonrió. “Acomódate y déjame poner mi marca en ese culo.”
Angelo se bajo del regazo de Talboth y se acomodo sobre sus manos y rodillas. El oyó el ruido de la envoltura del condón y el click de la tapa de lubricante mientras se preparaba para la jodida de su vida.
Después de aplicar rápidamente el lubricante en el agujero de Angelo una vez mas, Talboth se arrodillo y posiciono la corona de su pene en el estirado agujero de Angelo. Sin esperar, Angelo se empujo hacia atrás, empalándose a si mismo. El no se detuvo hasta estar totalmente dentro de la longitud de Talboth.
Un fuerte manotazo le golpeo en la nalga mientras Talboth gruño. Talboth froto la lastimada piel con la mano mientras se salía y volvía a entrar. “Voy a tatuar mi nombre en tu culo.”
Angelo negó. “No tatuajes.”
¡Un golpe repentino! sorprendió a Angelo pero Talboth incluso no rompió el impulso. “Yo los amo una vez que tengas uno me rogaras por más.”
Angelo pensó en los sexy tatuajes que decoraban la piel de Talboth. El sabia que el definitivamente no era el tipo de hombre que podía querer la tinta, pero el pensar en que el tuviera uno, realmente parecía encender a Talboth.
“No lo estoy,” Talboth contestó. “Supongo que todo esto me ha golpeado. Incluso cuando no me agrade que te mudes a Los Ángeles, yo no vacilaría en prometerte fidelidad.”
“¿Eso es lo que esta mal?”
“No. solo es algo nuevo.” Talboth paso sus manos arriba y abajo de la cara interna del muslo de Angelo. El sacudió la cabeza y suspiro. “Te amo. No quiero que te vayas, pero de todas formas te amo lo hagas o no.”
Angelo no estaba seguro que se suponía que podía decir a eso. ¿Porque el trabajo en Los Ángeles repentinamente era una maldición en lugar de una bendición? el se subió al regazo de Talboth, envolviendo sus brazos en el hombre que amaba, Angelo le dio un casto beso en los labios a Talboth. “Te amo, también.”
El deseo poder prometerle a Talboth que el se quedaría, pero Angelo sabía que el no podía decirlo todavía. Todo lo que el podía prometerle en ese momento era su corazón. El tomo el condón olvidado. Si el pudiera ser todo suave y pedirle a Talboth que le hiciera el amor, pero el sabia que su amante necesitaba algo un poco mas permanente. “Hazme tuyo. Jodeme tan duro que nunca quiera dejarte.”
Los oscuros ojos de Talboth vieron a Angelo fijamente por un momento, finalmente sonrió. “Acomódate y déjame poner mi marca en ese culo.”
Angelo se bajo del regazo de Talboth y se acomodo sobre sus manos y rodillas. El oyó el ruido de la envoltura del condón y el click de la tapa de lubricante mientras se preparaba para la jodida de su vida.
Después de aplicar rápidamente el lubricante en el agujero de Angelo una vez mas, Talboth se arrodillo y posiciono la corona de su pene en el estirado agujero de Angelo. Sin esperar, Angelo se empujo hacia atrás, empalándose a si mismo. El no se detuvo hasta estar totalmente dentro de la longitud de Talboth.
Un fuerte manotazo le golpeo en la nalga mientras Talboth gruño. Talboth froto la lastimada piel con la mano mientras se salía y volvía a entrar. “Voy a tatuar mi nombre en tu culo.”
Angelo negó. “No tatuajes.”
¡Un golpe repentino! sorprendió a Angelo pero Talboth incluso no rompió el impulso. “Yo los amo una vez que tengas uno me rogaras por más.”
Angelo pensó en los sexy tatuajes que decoraban la piel de Talboth. El sabia que el definitivamente no era el tipo de hombre que podía querer la tinta, pero el pensar en que el tuviera uno, realmente parecía encender a Talboth.
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por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:47 pm
Mientras Talbot aumentaba el impulso y la presión, la gran mano continuaba dando nalgadas en el trasero de Angelo. “Dios esto es lindo,” Talbot gruño.
El ardor y el constante frote sobre su culo hormigueaba. Angelo no podía decidir si le gustaba o no. Lo que el disfrutaba era aparentemente lo que le estaba dando Talbot. Quien sabe porque el se enamoro de un retorcido bastardo.
Angelo bajo la mano y envolvió su pene. Los impulsos de Talbot lo enviaban contra la cabecera. El se apoyo en su cabeza y uso su mano libre para colocar una almohada entre el y el respaldo sin que Talbot perdiera el ritmo.
La nueva posición llevo el pene de Talbot a un ángulo diferente dentro de su culo, haciendo que Angelo gimiera. “Se siente bien,” él jadeo.
Uno de los pies de Talbot descanso detrás de el cuando su amante se inclinaba hacia otro ángulo.
“¡Voy a correrme!” Angelo advirtió.
A pesar de la almohada el seguía sintiendo el golpe contra la cabecera, duro. “¡Joder!”
La mano de Talbot inmediatamente froto la cima de la cabeza de Angelo. “lo siento, bebé.”
El simple gesto empujo a Angelo al borde. Su cuerpo se tenso cuando el primer chorro de su semilla hizo erupción de su pene, llegando a su pecho. Gracias a Dios Talbot lo estaba sosteniendo porque Angelo se sentía como gelatina después del intenso clímax.
El apenas estaba conciente cuando Talbot gruño y el cuerpo de su amante empesó a estremecerse momentos antes de que el pesado cuerpo cayera en su espalda. Angelo gimió y Talbot finalmente se rodó a un lado.
Paso un momento antes de que Angelo pudiera respirar lo suficientemente bien para hablar. “Considérame apropiadamente marcado.”
Talbot empezó a reírse, al final se convirtió en tos. Angelo se giro a un lado y paso su mano por el pecho de su amante. “Aw, ¿mi pequeño culo te agotó?”
Talbot incluso no abrió los ojos. El le gruño a Angelo alcanzando el sucio condón.
Teniendo lastima por el gran detective, Angelo hizo el trabajo de retirar el condón. El cuidadosamente salio de la cama y fue al pequeño cuarto de baño. “Voy a caminar gracioso por una semana,” él se quejo mientras tomaba una toalla húmeda.
Después de limpiarse a si mismo, el llevo la toalla a la recamara y limpio a su amante. Su culo todavía le ardía. El podía solo imaginar lo rojo que estaría. El no tuvo valor para verse en el espejo. “¿Entonces, tendré que acostumbrarme a esa cosa de las nalgadas?”
Uno de los oscuros ojos de Talbot se abrió. “Yo solo seguí ordenes. Tu fuiste quien dijo que te marcara.”
“Si, bueno hazme un favor y no lo tomes literalmente la siguiente vez.”
Talbot froto la lastimada piel del trasero de Angelo. “Pero mi mano pintada se ve tan bonita en tu culo.”
Angelo se inclino y mordió el pecho de Talbot, sus dientes se hundieron en la piel alrededor del pezón de su amante. “Y la marca de mis dientes se ve sexy en tu pecho.”
El ardor y el constante frote sobre su culo hormigueaba. Angelo no podía decidir si le gustaba o no. Lo que el disfrutaba era aparentemente lo que le estaba dando Talbot. Quien sabe porque el se enamoro de un retorcido bastardo.
Angelo bajo la mano y envolvió su pene. Los impulsos de Talbot lo enviaban contra la cabecera. El se apoyo en su cabeza y uso su mano libre para colocar una almohada entre el y el respaldo sin que Talbot perdiera el ritmo.
La nueva posición llevo el pene de Talbot a un ángulo diferente dentro de su culo, haciendo que Angelo gimiera. “Se siente bien,” él jadeo.
Uno de los pies de Talbot descanso detrás de el cuando su amante se inclinaba hacia otro ángulo.
“¡Voy a correrme!” Angelo advirtió.
A pesar de la almohada el seguía sintiendo el golpe contra la cabecera, duro. “¡Joder!”
La mano de Talbot inmediatamente froto la cima de la cabeza de Angelo. “lo siento, bebé.”
El simple gesto empujo a Angelo al borde. Su cuerpo se tenso cuando el primer chorro de su semilla hizo erupción de su pene, llegando a su pecho. Gracias a Dios Talbot lo estaba sosteniendo porque Angelo se sentía como gelatina después del intenso clímax.
El apenas estaba conciente cuando Talbot gruño y el cuerpo de su amante empesó a estremecerse momentos antes de que el pesado cuerpo cayera en su espalda. Angelo gimió y Talbot finalmente se rodó a un lado.
Paso un momento antes de que Angelo pudiera respirar lo suficientemente bien para hablar. “Considérame apropiadamente marcado.”
Talbot empezó a reírse, al final se convirtió en tos. Angelo se giro a un lado y paso su mano por el pecho de su amante. “Aw, ¿mi pequeño culo te agotó?”
Talbot incluso no abrió los ojos. El le gruño a Angelo alcanzando el sucio condón.
Teniendo lastima por el gran detective, Angelo hizo el trabajo de retirar el condón. El cuidadosamente salio de la cama y fue al pequeño cuarto de baño. “Voy a caminar gracioso por una semana,” él se quejo mientras tomaba una toalla húmeda.
Después de limpiarse a si mismo, el llevo la toalla a la recamara y limpio a su amante. Su culo todavía le ardía. El podía solo imaginar lo rojo que estaría. El no tuvo valor para verse en el espejo. “¿Entonces, tendré que acostumbrarme a esa cosa de las nalgadas?”
Uno de los oscuros ojos de Talbot se abrió. “Yo solo seguí ordenes. Tu fuiste quien dijo que te marcara.”
“Si, bueno hazme un favor y no lo tomes literalmente la siguiente vez.”
Talbot froto la lastimada piel del trasero de Angelo. “Pero mi mano pintada se ve tan bonita en tu culo.”
Angelo se inclino y mordió el pecho de Talbot, sus dientes se hundieron en la piel alrededor del pezón de su amante. “Y la marca de mis dientes se ve sexy en tu pecho.”
Remington Talbot Colton- Licántropo Clase Alta
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Re: A toda marcha [Privado]
por Angelo Pilato Lun Oct 01, 2012 11:51 pm
Talboth se encogió de hombros. “Yo dejare eso de tatuaje si tu dejas que mi mano marque tu trasero.”
“No es justo. Mis dientes son un infierno mas pequeños que tu mano.” Incluso aunque el lo dijera, Angelo podía fácilmente imaginar el pecho de Talboth permanentemente marcado por sus dientes. El sabia que estaban jugando, pero el se preguntaba si algún día ellos estarían listos para hacer algo bueno.
Una vez mas la mudanza a los Ángeles llegó a su mente. El apoyo su cabeza en el pecho de Talboth y lo abrazo.
“Hey, ¿Que esta mal?” Talboth pregunto, trenzando sus dedos en el cabello de Angelo.
“Todo esto es más,” él murmuro. El se dio cuenta de la verdad de su declaración por primera vez en su vida adulta, algo además del trabajo había llegado a la cima de sus prioridades.
Talboth se despertó con el zumbido del teléfono celular. El a ciegas lo tomo de la mesita de noche antes de que Angelo se despertara. “Remy,” el gruño.
“Enciende las noticias.”
“¿Rico?” Talboth pregunto abriendo los ojos.
“Si, ahora enciende las noticias.”
Talboth tomo el control remoto. El encendió la televisión en uno de los canales locales. Ahí en la pantalla estaba esposado Paúl Overton, el padre de William Overton, llevado a la estación de policía. “¿Que jodidos sucede, Rico?”
“Nosotros arrestamos a Paúl por conspiración para cometer asesinato. El le pago a uno de los guardias para dejar que Billy James Maxwell entrara a la celda de William y lo matara.”
Billy James fue el informante que le dijo que Rico le había dado la llave de la celda de Overton. Talboth repentinamente recordó algo que Rico había dicho. “¿Nosotros? dijiste nosotros arrestamos.”
“No es justo. Mis dientes son un infierno mas pequeños que tu mano.” Incluso aunque el lo dijera, Angelo podía fácilmente imaginar el pecho de Talboth permanentemente marcado por sus dientes. El sabia que estaban jugando, pero el se preguntaba si algún día ellos estarían listos para hacer algo bueno.
Una vez mas la mudanza a los Ángeles llegó a su mente. El apoyo su cabeza en el pecho de Talboth y lo abrazo.
“Hey, ¿Que esta mal?” Talboth pregunto, trenzando sus dedos en el cabello de Angelo.
“Todo esto es más,” él murmuro. El se dio cuenta de la verdad de su declaración por primera vez en su vida adulta, algo además del trabajo había llegado a la cima de sus prioridades.
“Enciende las noticias.”
“¿Rico?” Talboth pregunto abriendo los ojos.
“Si, ahora enciende las noticias.”
Talboth tomo el control remoto. El encendió la televisión en uno de los canales locales. Ahí en la pantalla estaba esposado Paúl Overton, el padre de William Overton, llevado a la estación de policía. “¿Que jodidos sucede, Rico?”
“Nosotros arrestamos a Paúl por conspiración para cometer asesinato. El le pago a uno de los guardias para dejar que Billy James Maxwell entrara a la celda de William y lo matara.”
Billy James fue el informante que le dijo que Rico le había dado la llave de la celda de Overton. Talboth repentinamente recordó algo que Rico había dicho. “¿Nosotros? dijiste nosotros arrestamos.”
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Re: A toda marcha [Privado]
por Remington Talbot Colton Lun Oct 01, 2012 11:55 pm
“Yo estoy trabajando con el FBI de California tratando de encontrar al guardia que habían sobornado y a Billy.”
“¿Que?” Talbot sintió a Angelo estirarse a lado de él y paso su mano por la cadera de su amante.
Rico suspiro. “Yo no soy el inepto que crees.”
“Yo nunca dije…”
“Como sea,” Rico lo interrumpió. “Solo quería que lo supieras.”
“¿Y Carl Blakely?” Talbot interrogo a su sobrino.
“El FBI creía que era buena idea que me infiltrara en el grupo de Blakely. Nosotros no teníamos idea de quien había pagado por asesinar a William. Resulto que fue su propio padre.”
Alivio invadió a Talbot. “Entonces ¿tu no estas de acuerdo con las enseñanzas de Blakely, Y las cosas que me dijiste?”
Después de un momento de silencio Rico hablo. “No creo en nada de esa mierda, pero creo que algo de lo que dije es verdad.”
Talbot se froto el pecho ante esas palabras. “¿Que parte?”
“Yo nunca seré un policía como tu, y lo se. Yo voy a dejar de compararme. Acepte un trabajo con el FBI. Seré transferido a las oficinas de San Diego tan pronto como Paúl Overton sea enjuiciado.”
El sintió la mano de Angelo en su espalda y lo vio sobre su hombro y le sonrió. Era mas que obvio que su sobrino abrigaba un gran resentimiento hacia él, pero el todavía no sabia si era porque el era un malditamente buen policía o porque era gay. Talbot tendría que aceptar el hecho de que nunca sabría la verdad.
“Felicitaciones, Rico. Debes estar orgulloso.”
“Lo estoy. Tengo una tonelada de reportes que llenar será mejor que te deje.”
“¡Espera! ¿Puedo hacerte una pregunta acerca de Blakely?”
“Puedes preguntar, pero yo realmente no fui capaz de acercarme lo suficiente al arrogante hijo de perra para descubrir algo.”
“¿Notaste signos de enfermedad? ¿Te pareció que estaba enfermo o algo últimamente?”
“Yo solo lo vi una vez en el tiempo que estuve por ahí. El se quedaba en su habitación la mayor parte del tiempo, solo le abría la puerta si llamaba Travis su mano derecha. ¿Porque?”
“¿Que?” Talbot sintió a Angelo estirarse a lado de él y paso su mano por la cadera de su amante.
Rico suspiro. “Yo no soy el inepto que crees.”
“Yo nunca dije…”
“Como sea,” Rico lo interrumpió. “Solo quería que lo supieras.”
“¿Y Carl Blakely?” Talbot interrogo a su sobrino.
“El FBI creía que era buena idea que me infiltrara en el grupo de Blakely. Nosotros no teníamos idea de quien había pagado por asesinar a William. Resulto que fue su propio padre.”
Alivio invadió a Talbot. “Entonces ¿tu no estas de acuerdo con las enseñanzas de Blakely, Y las cosas que me dijiste?”
Después de un momento de silencio Rico hablo. “No creo en nada de esa mierda, pero creo que algo de lo que dije es verdad.”
Talbot se froto el pecho ante esas palabras. “¿Que parte?”
“Yo nunca seré un policía como tu, y lo se. Yo voy a dejar de compararme. Acepte un trabajo con el FBI. Seré transferido a las oficinas de San Diego tan pronto como Paúl Overton sea enjuiciado.”
El sintió la mano de Angelo en su espalda y lo vio sobre su hombro y le sonrió. Era mas que obvio que su sobrino abrigaba un gran resentimiento hacia él, pero el todavía no sabia si era porque el era un malditamente buen policía o porque era gay. Talbot tendría que aceptar el hecho de que nunca sabría la verdad.
“Felicitaciones, Rico. Debes estar orgulloso.”
“Lo estoy. Tengo una tonelada de reportes que llenar será mejor que te deje.”
“¡Espera! ¿Puedo hacerte una pregunta acerca de Blakely?”
“Puedes preguntar, pero yo realmente no fui capaz de acercarme lo suficiente al arrogante hijo de perra para descubrir algo.”
“¿Notaste signos de enfermedad? ¿Te pareció que estaba enfermo o algo últimamente?”
“Yo solo lo vi una vez en el tiempo que estuve por ahí. El se quedaba en su habitación la mayor parte del tiempo, solo le abría la puerta si llamaba Travis su mano derecha. ¿Porque?”
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