Encallar en el muelle de tus labios (Rayner Andrews) +18!

por **Yulianna Fiódorovna** Miér Mayo 11, 2011 9:06 am

Recuerdo del primer mensaje :

Yulianna lo llevó hasta su casa. Cierto es que estaba a las afueras, pero por suerte se había encontrado con un amigo y los había acercado. Así que allí estaban. En la humilde aunque gran mansión Osolin. Sería toda para ellos. Nunca solía llevar a nadie, era cómo su refugio... su guarida secreta. Un lugar dónde estar tranquilos.

Entraron tras cruzar el camino del jardín. La ama de llaves tenía el día libre, pero estaba el mayordomo y el servicio, aunque no les molestarían. Cómplice de la mirada de Rayner lo llevó hasta su lugar favorito: su habitación. Toda decorada en tonos rojos y dorados. Le encantaba. Y ahora era toda para ellos. Sólo de los dos. Yulianna, presa de la timidez, le ofreció una copa de vino, esperando que la aceptase, y después se le acercó besándole cálidamente.

-Estamos solos... el resto del mundo se me olvidó.-Y de nuevo le besó.

por **Yulianna Fiódorovna** Lun Mayo 23, 2011 4:24 pm

Rayner la ayuda a moverse. Gracias a sus manos, las cuales colocó sobre su cintura, ahora se mueve más rápido, hasta el punto de que él pareció perder la locura por instantes, hasta tal punto de tratarla de "tú", cosa que en realidad le encantaba.

Continuaron los movimientos, el agua saliendo de la bañera, las burbujas flotando entre ellos, Yulianna gimiendo, y él también, pero todo fue mucho mejor en el momento en el que él la besó con esa pasión que a la vez representaba ternura, con ese cariño, y acabó dentro de ella. Lo notó. Lo sintió. Y sufrió su segundo orgasmo, tan placentero, por haber sido la causante del primero de Rayner, y eso la inquietó. La hizo sentir bien. Sin poder evitar clavó sus uñas un par de segundos en la tibia piel de Rayner.

Cuando acabaron, ella permaneció allí, miró por un instante al techo, las burbujas caían. El agua comenzaba a estar fría. Ella se mojó el cuerpo, saliendo de él. Sin decir. Pero ya no sentía verguenza. Ya era mujer, gracias a él. Y quería volver a serlo, pero con él. Y la pregunta ahora era... ¿se quedaría él esa noche?, ¿Volvería a verlo? Y se entristeció.

Se colocó en el otro extremo de la bañera, mirando hacia un punto perdido, con sus manos sobre sus rodillas flexionadas. No sabía que pasaría ahora.

por Invitado Mar Mayo 24, 2011 2:28 pm

Me muevo hacia ella sin pensar mucho en que decirle. La abrazo suavemente, sintiendo su piel fresca con el agua que nos rodea. Le sonrío al juntar mi frente con la suya y la beso despacio. Siento algo de miedo en su corazón y creo que sería prudente revelar algo de mi.

-Quiero que veas algo-le digo alejándome un poco.

Pongo mi palma sobre el agua y las burbujas se comienzan a crear de nuevo. Bajo mi mano surgen varios y flotan hacia arriba como si fuera una cascada que sube. Pronto forman figuras en el techo y sin romperse comienza a rodear a Yulianna.
Pongo mi mano en su mejilla acariciándola suavemente.

-Soy un brujo, Yulianna-le digo sonriendo, mientras las burbujas flotan suavemente hasta regresar al agua y romperse una a una, rápidamente-Si aun asi me quieres yo...

por **Yulianna Fiódorovna** Mar Mayo 24, 2011 3:29 pm

Yulianna siente el dulce beso en su frente. Realmente le hacía sentir cosas inimaginables.
Se quedó quieta, paralizada. Bastó con ver la primera burbuja para abrir la boca y alucinar. ¿Magia?, ¿De eso se trataba? Ella, que nunca había tenido quien le contase secretos, quien la amparese, quien cuidase de sus tormentos, quien la hiciese sonreir, sentir, amar, vivir. Y ahora... sencillamente de la noche a la mañana se topaba con un ser mágico. Realmente lo era... ¿brujo? Era totalemente extraordinario.

Sonrió y miró al techo, a su alrededor. Estaba envuelta en burbujas. Feliz. Alegre. Con él.

-Gracias. -Dijo con sinceridad. -No te olvidaré nunca. Así te vayas hoy mismo. Has sido, eres y serás lo mejor que me ha pasado. -Emocionada, dejó escapar una lágrima que recorrió su mejilla y dió a parar al agua.

por Invitado Mar Mayo 24, 2011 3:36 pm

Me carcajeo un poco al escucharla. Me acerco y le acaricio su mejilla.

-Eres una tontita, yo no me voy a ir nunca. ¿Por qué lo haría?-le digo viéndola fijamente- Claro que tendré que partir a mi casa la mañana siguiente pero no es como si me fuera por siempre, regresare siempre que tú quieras.Muevo las manos le muestro una tarjeta de color blanco, pequeña, apenas cabiendo en mi palma.

-Cuando quieras verme, escribe el lugar donde nos veremos en esta tarjeta, cuando yo vea la gemela, que tengo en mi poder, sabré inmediatamente y me dirigiré ahí a la hora que pongas-la beso suavemente-No te libraras de mi, yo siempre estare para ti

por **Yulianna Fiódorovna** Miér Mayo 25, 2011 8:24 am

Yulianna sonrió al escucharle. -Tu tontita... no vayas a equivocarte. -Dijo y después le abrazó con dulzura. -Puedes venir siempre que quieras. -Y entonces él solucionó el "problema", pues le entregó una tarjeta blanca, y aseguró que siempre podía llamarle, cuando ella desease. Conforme la tomó y salió del agua. Desnuda. Cogió una toalla y se cubrió medio cuerpo, luego se dirigió hacia su habitación, colocando en lugar seguro lo que le acababa de entregar.

-Rayner... ¿ y si usted quiere verme?, ¿También lo pondrá en la carta? -Preguntó intrigada.

Yulianna se quitó la toalla, y eligió un camisón que le llegaba por encima de las rodillas. Era rosa crudo, con encaje en la zona del pecho. Realmente bello, pues ella siempre había tenido ropa hermosa, pero ahora tenía para quien lucirla. Después que estuvo vestida se postró en la cama, la cual había sido el lecho de su amor hacía unos minutos y esperó. Inclinó una pierna, haciendo la postura más sensual, y miró la puerta del servicio, esperando ver a Ray. A ese hombre que la enloquecía.

por Invitado Jue Mayo 26, 2011 9:09 am

-Claro, cuando yo quiera verla, puedo usar la carta, pero será mejor que todo sea una sorpresa ¿No le parece?-le digo riéndome-pero preferiría que te acostumbraras a decirme Ray, Yulianna.

Se sale de la bañera sensualmente, como si pusiera en práctica todo lo que le debieron de decir sus amigas o que leyó en las novelas, es un trabajo que hace muy bien.
Al retirarse ella de la bañera me quedo solo unos momentos, veo las ultimas burbujas caer al aguas y romperse mudamente, haciendo un pequeño chapuzón sobre el agua.
Al salir, mojado y goteando por mi cuerpo, me topo con la idea de la pena de tomar una toalla que no me pertenece o por error tomar alguna que no debería de tomar.

-¿Quieres que te acompañe mojado como esto?-le digo en riéndome de mis propias palabras, parece como si ya tuviera días viviendo aquí-Aunque de seguro estarías feliz verme desnudo otra vez ¿No?-le sonriendo aunque se que no me mira.

por **Yulianna Fiódorovna** Jue Mayo 26, 2011 4:59 pm

Yulianna permanece esperándole. Aún está en la cama, con la sensual ropa que eligió para esa ocasión. Con ganas de verle, de sentirle, de ser suya de nueva.

-Claro que tengo ganas de verle de nuevo... y no con esa elegante ropa que traía. -Dice y sonríe. Aún esperando. Se levanta y va hacia el minibar que había en su habitación, donde había bebidas esenciales. Eligió champan. Sí. Por raro que pareciese, era una mujer a la que le encantaba esa bebida. Cada noche la tomaba, pero también cuando se sentía mal.

Sirvió dos copas y se acercó al baño, donde pudo ver su perfecto dorso.

-Aún espero... Rayner. -Pero no pudo esperar más. Llegó hasta su lado, le observó de arriba abajo y sonrió al ver que ya perdía la poca verguenza que le quedaba. -Te ves... -dijo mordiéndose el labio inferior. Y le acercó una copa, pero antes de dársela para que la tomase le tuvo que besar. Irresistiblemente buscó sus labios, su lengua, y se acercó a su cuerpo, humedeciendo su pijama. Pero no le importaba. Sólo pensaba en el apasionado beso que le estaba ofreciendo.

por Invitado Lun Mayo 30, 2011 9:20 am

Sólo se dejan sentir las sensaciones, con los ojos cerrados, no puedo masque sentir sus labios con los míos, nuestras lenguas entrelazándose, sintiéndose una a la otra. No quiero sostener su cuerpo aun, pues mojare su ropa que, por esta vez, prefiero verla vestida.

-Parece que la pasión no se cansa de aparecer ¿Verdad? –le digo jugando, sin separarme mucho de sus labios.

Tomo mi copa con una mano y con la otra tomo la suya, no me queda otra opción que ir junto con ella a la cama, así desnudo como estoy.

-Disculpa que no haya traído mi pijama-le digo sonriendo-pero creo que prefieres que me acueste así.

Bebo un poco de la copa, y la beso, pasando el sabor de mis labios a los suyos, sintiendo frio por un momento para que luego la sensación sea superada por el calor que se siente entre los dos, capaz de derretir icebergs enteros. Ya seco, puedo darme el lujo de abrazar, sintiendo la ligera humedad que sus ropas aun conservan del primer abrazo.

por **Yulianna Fiódorovna** Lun Mayo 30, 2011 12:10 pm

La abraza por primera vez. Húmedo. Pero a ella no le importa. Está a su lado, bebe, la besa, lo siente, quiere más, otro beso; se lo da, y entonces le mira. Dulcemente acaricia su piel desnuda, como él, completamente desnudo a su lado, como a penas instantes antes en el agua. Y entonces le escucha. ¿No deja de aparecer? Quizás no, pero mejor así.

Ahora Yulianna estaba cómoda, con su segundo abrazo, tras su beso sabor champagne. Ese sabor le encantaba. Húmedo de nuevo. La apasionaba. Y en ese preciso momento fue ella quien bebió, saboreando la burbujeante espuma que su copa mostraba. Y no tenía sueño, pero era hora de dormir.

-No te preocupes... -dijo aún acariciando su piel. -Ninguno esperaba encontrarse hoy con el otro... -Dijo ella en voz baja. -Buenas noches. -Besó su frente y se le quedó mirando. Insaciable. Esos ojos azules le transmitían tanto... demasiado. Ese había sido un día largo, inesperado, especial, único, inolvidable. Un lazo se había creado entre ellos, un vínculo, una pequeña unión.

por Invitado Mar Mayo 31, 2011 3:49 pm

La sigo con la vista mientras me dirijo hacia la ropa que deje en el suelo, poniéndome solo la ropa interior, me dirijo hacia ella. Suspiro ahora que me siento mas seco. Sostengo su mano, la cargo despacio, asegurándome de sostenerla bien de espalda y piernas, hasta depositarla lentamente en la cama.

Me acuesto a su lado, acaricio su cabello con mi mano, descubriendo su mejilla, la cual acaricio con los labios despacio, sintiendo su sabor una vez mas, ahora perfumado, aun mas, con los aromas de su bañera. Le beso la mejilla con ternura y coloco mi mano sobre su costado, solo acariciándola, sin intensión de mas, sólo buscando estar con ella con tranquilidad, para que mañana pueda sonreír al verme a su lado. Para que cuando el sol se levante, la luz se refleje en entre su cabellera dorada.

-Buenas noches entonces-le digo mirándole, sonriéndole seductoramente-Mañana que te levantes lo primero que veras será a mi. Le digo acabando con besar su frente.

por **Yulianna Fiódorovna** Mar Mayo 31, 2011 7:51 pm

La llevó a la cama en brazos. Eso la hizo sonreír. Le había encantado ese acto de sencillez y dulzura a la vez.

Después acarició su dorso, con calma, sin prisa... intentando disfrutar de ella, de su compañía, y cómo el acababa de decir, mañana despertarían juntos. El sol aparecería y el cabello de Yulianna brillaría, como siempre hacía, pero mañana, pocas horas después, él también podría disfrutar de esa visión.

Ella, sin decir nada recibió sus tímidos y amados besos. Ese había sido un gran día, inolvidable. ¿Cómo se lo había imaginado? Quizás de otra manera, o con otra persona, pero había resultado mágico. Como él, como Rayner. Un ser perfecto, que ella adoraba, del cual se había encariñado. Sería el primer hombre que dormía con ella, el primero que llevaba a su casa, el primero que la amaba. Y eso lo hacía inolvidable. ¿Acabaría esto algún día? Eso ella no lo sabía, pero de ser así no le guardaría rencor, ni se arrepentiría, pues él lo había echo de una manera tierna. Como ella siempre había soñado.

Dejó de pensar. Se relajó. Buscó su pecho y amoldó su espalda a este. Luego cogió su mano llevándola hacia su torso.

-Buenas noches... querido... -Y Yulianna se quedó dormida. Con una sonrisa.

por Invitado Jue Jun 02, 2011 5:02 pm

Le sonrío y la miro. Su cansancio parece respirarse en el ambiente. Esta tan cansada que su respiración pronto se torna la de el sueño. Le acaricio el cabello viéndola dormir y me comienzo a acomodar a su lado.

-No creí acabar aquí-me susurro para mi mismo-Tan lejos de casa.

Doy un último bostezo antes de cerrar los ojos. Me quedo inundado con el aroma de ella y el de las sabanas, como si me cubrieran cual cobija y hagan que el frio ni siquiera ose en entrar a mi sistema, dejándome feliz, simplemente estando a su lado.

Sonriendo me quedo profundamente dormido

por **Yulianna Fiódorovna** Vie Jun 03, 2011 7:53 am

Yulianna durmió cálidamente toda la noche. Siempre dormía de un tirón, pero nunca con una sonrisa tan sincera cómo aquella.
Debido al frío, porque había dormido destapada toda la noche, se había abrazado a él. Sintiendo su calor, su aroma a jabones naturales, su frescura. Mirándole a media noche, iluminado por la luz de la luna. Y después durmió hasta la mañana, cuando los rayos del sol iluminaron a la pareja. Ella se despejó los ojos y le miró. Permanecía dormido. Respirando pausadamente, y ella tocó su pecho y le miró hasta que se despertó.

Pensó en todo lo que había pasado el día anterior, pero no dudaba, tampoco se arrepentía, pues había sido mejor de lo que jamás hubiese imaginado. Y recordó también que le había dado una tarjeta para que lo llamase cuando ella desease. Seguramente lo haría, pero tampoco sabía cómo actuar en estos casos. Era algo extraño, nunca había estado en esa situación, pero ya tendría tiempo de pensarlo.

Y entonces le siguió mirando.

por Invitado Vie Jun 03, 2011 12:14 pm

Abro los ojos lentamente y veo su cabello brillando con la luz de la mañana, su sonrisa casi del mismo tono iluminador.

-Buenos días- le digo sonriendo y me acerco a ella para darle un beso.

La abrazo por un momento sintiéndola contra mí unos segundo más. Que se de cuenta que sigo ahí. Le beso la coronilla suavemente y me levanto hasta sentarme en la cama. Me levanto y tomo del suelo mi ropa para acomodarla al lado de la cama y volverme a sentar, viéndola y acariciando su muslo.

-Quisiera hacerte algo de desayunar-le digo mirándola-no quiero que seas solamente tu la que me has atendido y seria de mi parte toda una grosería no comenzar por agradecerte desde hora temprana. Te mereces que yo te atienda a ti ¿No te parece?

Mientras espero su respuesta me acerco a ella y le beso una vez más. Besos delicados, suaves, que combinen con la mañana tan tranquila que está iniciando y ella pueda sentirse igual de relajada.

por **Yulianna Fiódorovna** Vie Jun 03, 2011 4:27 pm

Yulianna sonrió con calidez al ver cómo Ratner había amanecido. Era todo un caballero. Aceptó y sintió cada uno de sus besos y después sus suaves caricias en su muslo.

-Buenos días. -Dijo con la mirada iluminada.

¿Sabría cocinar? No era una cualidad que todos los hombres poseyeran, pero le gustaba la idea de esperar el desayuno en la cama. Así pues, se acomodó recostándose sobre la segunda almohada y le miró.

-Claro. Me encantaría. -Aceptó su petición y movió la cabeza hacia la puerta. -Baja al primer piso, allí estará mi mayordomo. Él te indicará. -Gracias. -Se acomodó y cerró los ojos, disfrutando del sol de esa primera mañana junto a Rayner.

por Invitado Vie Jun 03, 2011 4:51 pm

Me visto de buena gana, aunque algo de pena por el hecho de conocer a un mayordomo- ¿Qué pasa si me pregunta que hago aquí?-pienso nervioso. Lucho contra los nervios mientras me visto, remangando mi camisa dejando ver los tatuajes que llevo. Salgo sonriéndole y la mira última vez antes de cerrar la puerta tras de mí.

Bajo las escaleras hasta encontrarme con el mayordomo, el cual no hace mucho escándalo, aunque siento la desconfianza en sus emociones, mescladas con alivio.

-Buen día-le digo sonriendo-¿Sería tan amable de decirme donde esta la cocina?
-Claro, se encuentra en esa dirección-dice el amablemente apuntando hacia el lugar-¿Va a prepararse algo?
-No, es para la señorita Yulianna-le digo sonriendo mientras comienzo a caminar.

Siento su mirada y su sonrisa a mi espalda. La desconfianza desaparece por una calma en sus emociones.
Comienzo a cocinar con total tranquilidad, estrellando un par de huevos y ,gracias a mi suerte de encontrarlos entre la enorme cocina, vertiendo un poco de frijoles y rodajas de tomate. Le agrego un jugo de naranja para acompañarlo y camino con la chórala en mano.
Cuando salgo de la cocina unos cuantos sirvientes, al lado del mayordomo, me miran con los ojos abiertos de felicidad, estoy seguro que están a dos segundos de aplaudirme.

Al llegar a la habitación, entro despacio y coloco la charola, hecha para desayunar en cama, al lado de Yulianna esperando que se acomode.

por **Yulianna Fiódorovna** Sáb Jun 04, 2011 5:03 am

Yulianna sentía risas. ¿Qué pasaría ahí abajo? Quizás había echo buenas migas con sus empleados, y empleadas... ¿se interesaría por alguna? Pero pese a esas leves preocupaciones, siguió disfrutando del sol, con una encantadora sonrisa y los ojos cerrados.

Minutos después escuchó las pisadas de alguien. Quizás sería su ama de llaves, que siempre iba a darle los buenos días, pero no. Era el olor de Rayner.

-¿Has encontrado los ingredientes o te han echado una mano? -Dijo dándose la vuelta. No era leche, ni tampoco bollería, sino que era un exquisito plato recién preparado que desprendía un aroma delicioso. Abrió los ojos maravillada, acercándose a la bandeja y también a él. Probó, sin darle tiempo a él ni a coger el tenedor. Quizás con un poco de ansia, pero eso no importaba. Entonces le miró con aprobación y le besó, tumbándolo a él y callendo ella encima suya. -Está buenísimo. -Y entonces rió.

por Invitado Mar Jun 07, 2011 10:46 am

Me rio disimuladamente al recordar mi recorrido embarazoso por su mansión.

-Ha sido…interesante conocer a tu servidumbre-le digo, aun conteniendo la risa-He hecho yo mismo el desayuno, creo que al final de todo el detalle tenía que ser mío ¿No?

La miro comer mientras acomodo mi saco, arrugado, sobre la mesa cerca de su cama. Me siento a su lado y comienzo a mover el dedo índice en círculos, una pequeña luz blanca sale de él y lo persigue, sin alcanzarlo, creando un círculo de luz tenue.

-Creo que estoy tomando muchas libertades-me digo a mi mismo y detengo el pequeño espectáculo de luz- La mañana es perfecta en este lugar, espero no arruinarla cuando me tenga que marchar-le digo con un aire de tristeza.

Me acerco a ella y le beso la frente para volverme a sentar a su lado, viendo como disfruta del desayuno.

por **Yulianna Fiódorovna** Mar Jun 07, 2011 11:04 am

Sonrió al ver como jugueteaba con un haz de luz. Era divertido, pero pronto paró y ella se imaginó que quizás era por verguenza. Pero era gracioso.

Le miró mientras seguía saboreando el plato de comida, aquel que nunca había probado.

-¿No comes?- Preguntó Yulianna con una sonrisa sintiendo su beso en la frente y viendo como él se acomodaba a su lado.

-Y mi servicio es el mejor que puedas imaginar... -Aseguró ella. -Es amable, trabajador y puedo confiar en cada uno de ellos. -Dijo orgullosa.

-Y dígame señor Rayner... ¿Cuándo volveremos a vernos? -Agregó con una sonrisa.

por Invitado Lun Jun 13, 2011 5:01 pm

-Cuando tu gustes estaré aquí-le digo sonriendo-Cuando salga por esa puerta, seguiré sintiendo tus besos y caricias ¿Cómo soportar estar alejado de ti tanto tiempo? Es in humano ¿No lo crees?
Comienzo a vestirme hasta quedar frente a ella. Me inclino y le beso la frente con ternura.

-Te sentiré caminando a mi lado, tomada de mi mano y tus dedos entrelazados con los míos, tu respiración contra mi oreja, tus pasos acompañando los míos y mi corazón latiendo al ritmo del tuyo. Aunque tuviera el remoto deseo de no tenerte en mi cabeza, seria demasiado difícil hacer que camines fuera de ella.

La beso furtivamente, casi como contarle un secreto de amor de labio a labio. Para que ambos nos quedemos con el deseo de un poco más, un segundo un instante más.

-Así que la respuesta verdadera es que me vera siempre. Puedes llamarme cuando guste y aquí estaré en un abrir y cerrar de ojos.

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